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ANALES ..
MUSEO de HISTORIA NATURAL
de VALPARAISO
MINISTERIO DE EDUCACION
DIRECCION DE BIBLIOTECAS, ARCHIVOS Y MUSEOS
| An. Mus. Hist. Nat. | Vol. 10 | 1977 | Valparaíso | Chile |
MUSEO DE HISTORIA NATURAL - VALPARAISO
Director de Bibliotecas, Archivos y Museos y Director de la Biblioteca
Nacional:
Sr. Enrique Campos Menéndez
Conservador Museo de Historia Natural - Valparaíso:
Sr. Jorge Eduardo Brousse Soto
Comisión de Publicaciones:
Dr. Roberto Gajardo-Tobar
Jorge Eduardo Brousse Soto
Francisco Silva González
Francisco Sáiz Gutiérrez
Haroldo Toro Gutiérrez
Italo Serey Estay
Director de Anales:
Dr. Roberto Gajardo-Tobar
Coordinador:
Juan Carlos Ortiz Zapata
Secretaria:
Ana Avalos Valenzuela
Domicilio:
Avenida Valparaíso N* 155 - Casilla 925 - Teléfono 85217
Viña del Mar
(Chile)
ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
DE VALPARAISO
—Publicación anual del Museo de Historia Natural de
Valparaíso, bajo los auspicios de la Dirección Gene-
ral de Bibliotecas, Archivos y Museos, con la colabo-
ración de la Sociedad Cientifica, la Universidad de
Chile y la Universidad Católica de Valparaiso.
—De ordinario editará un número anual. Por excepción
publicará fascículos extraordinarios.
—La Dirección de Anales someterá los trabajos que se
presenten al juicio de la Comisión de Publicaciones.
Los que no encuadren con el espíritu de la publica-
ción serám devueltos a sus autores.
—Los originales deberán venir en la forma más con-
densada posible, escritos a máquina, en espacio me-
dio, cuidadosamente corregidos y siempre traer una
copia. La bibliografía, de acuerdo con el sistema in-
ternacionabs
—Los autores son absolutamente responsables de sus
opiniones.
ANALES
DEL
MUSEO DE HISTORIA NATURAL
VALPARAISO - CHILE
N* 10 —— 1977
páginas
PARMFNIO YAÑEZ ANDRADE
Francisco Silva y Héctor Etcheverry ..........ooooooooooooo..o. 9
LOS LIQUENES DE LAS ISLAS DE JUAN FERNANDEZ. 1: ESTUDIO
PRELIMINAR
Jorge Redón F. y Wanda Quilhot P. .............c.oo..ooooo.o.. 15
ESTADOS ONTOGFNETICOS DE LOS FILOMAS VEGETATIVOS EN
ACACIA CAVEN (Mol.) Hook. et Arn. (Mimosaceae)
Aldo Mesa. y “Patricio «Peñallillo 2.0 o aa Sais aca BOO 27
CLAVE ILUSTRADA PARA LA DETERMINACION DE CRUCIFFRAE DE
LA ZONA CENTRAL, BASADA EN LOS TRICOMAS FOLIARES
Germánide Nordentycit 31
LA VEGETACION BOSCOSA DE LA COSTA Y EL VALLE CENTRAL
DE LA PROVINCIA DE LLANQUIHUE (X Región)
Italo Serey. E; y Rodrigo Villaseñor ce. maso eran do 39
NUEVOS GENEROS Y ESPECIES DE COLLETINI SUDAMERICANOS
Haroldo Toro y Victor Cabezas a a 45
CALASTACUS ROSTRISERRATUS n. sp. (Crustacea, Decapoda, Macrura,
Axiidae)
Héctor: Andinde VyiBedro BáeziRa o e o de 65
LIOLAEMUS PICTUS TALCANENSIS nob. subsp. (SQUAMATA-IGUANTI-
DAE) NUEVO REPTIL PARA EL ARCHIPIELAGO DE CHILOE
Medardo Urbina B. y Oscar Zúñiga Us ..osoirosos sones anos 69
COLFCCIONES CHILENAS DE PECES
I CATALOGO DE LOS PECES MARINOS DE LA UNIVERSIDAD AUS-
TRAL DE CHILE
GermánPeqneño E o A A A NS 75
DISTRIBUCION ESPACIAL DE DOS ESPECIES COLONIZADORAS DEL
MATORRAL CHILENO
Julio Gutiérrez Cy Juan Armero Zn e a a OR 95
ESTUDIO MICROBIOLOGICO DE SUELOS DEL BOSQUE DEL PARQUE
NACIONAL “FRAY JORGE”
Victoriano Campos y Freddy Lund ................ ro 101
OBSERVACIONES SOBRE EL ZOOPLANCTON DE LAGOS CHILENOS
Luis R. Zúñiga y Patricio Domínguez T. ........oooooooooooomo.. 107
TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS LIMNETICOS DE LA LAGUNA EL
PLATEADO
Vilma Avendaño y Francisco Sáiz
páginas
ESTUDIOS ECOLOGICOS SOBRE ARTROPODOS CONCOMITANTES A
ACACIA CAVEN. I. TAXOCENOSIS DE INSECTOS ASOCIADOS
A LA INFLORESCENCIA
Francisco Sáiz, Enrique Vásquez y Hydee Molina .........«..«..... 135
ESTUDIOS ECOLOGICOS SOBRE ARTROPODOS CONCOMITANTES A
ACACIA CAVEI. 11. EVALUACION DE LA INFESTACION POR
PSEUDO PACHYMERINA SPINIPES (Er.)
Francisco Sáiz, Dunny Casanova, Vilma Avendaño y Enrique Vásquez 153
ASPECTOS ECOLOGICOS DE LOS ICHNEUMONIDOS DEL BOSQUE DE
QUINTERO
Viviane Jerez, Dolly Lanfranco y Belisalia Andrade ............- 161
AUTOECOLOGIA: DE LIOLAEMUS A (LACERTILIA,
IGUANIDAE)
Eduardo mk *ekuentesi Na a ec iaa Ob bedr 169
LA ALIMENTACION DE SPEOTYTO CUNICULARIA (AVES STRIGI-
PHORMES) EN LA. PROVINCIA DE COQUIMBO
Jaime E. Pefaur, Fabián Jaksic y José Yáñez .......o «<<... 179
SOBRE LA PARTICION DE RECURSOS POR LAS STRIGIFORMES DE
CHILE CENTRAL.
Fabián Jaksic, José Yáñez, ROSA Persico y Juan Carlos Torres .... 185
ESTUDIO SOBRE LA ESTRUCTURA GENETICA DE LA POBLACION
DE LA SERENA
H, Figueroa L., C. Campusano M. y B. Lazo L. ........oooo.....- 195
CITOTAXONOMIA Y COMPORTAMIENTO MEIOTICO EN ELASMODE-
RUS RABIOSUS (LIEBERMANN)
N, Lafuente 1., H.. Borja R. y M. Santos As .ciccoocecansis daa 201
CITOTAXONOMIA DE CUATRO ESPECIES DE DICHROPLUS
Nelly Lafuente Ly Rosa Guerra M. a 205
CITOGENETICA DEL GENERO DICHROPLUS (Sistema determinación del
sexo)
NellyBatuerte ado O ada UE 211
NOTAS CIENTIFICAS:
GERYON AFFINIS MILNE-EDWARDS Y BOUVIER 1894 FRENTE A LAS
COSTAS DE CHILE (Crustacea, Decapoda, Brachyura, Geryonidae)
Pedro Báez R. A a Ne RA 215
POSIBLES EFECTOS ANTIVIRALES DE LA INCORPORACION DE
CRUSTACEOS A LA DIETA DE ANIMALES DOMESTICOS
KetmantaRerceB rado A o o a a io 221
NUEVA LOCALIDAD PARA MARMOSA ELEGANS COQUIMBENSIS,
TATE 1931 (MAMMALIA MARSUPIALIA DIDELPHIDAE)
IA CATS O a A o A CCA 223
EFECTO DEL CALOR EN LA COLORACION DE LOS CARABIDAE DEL
GENERO CEROGLOSSUS
L. E. Peña G.
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Don PARMENIO YÁÑEZ ANDRADE
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Valparaíso, Chile 9
PARMENIO YAÑEZ ANDRADE
FRANCISCO SILVA y HECTOR ETCHEVERRY *
A poco tiempo de alejarse de las aulas universitarias porteñas, con
el objeto de dirigir y trabajar con un grupo de amigos, discípulos y colabo-
radores en la elaboración de una obra científica rn varios volúmenes
Fauna Excursionística de Chile, Conocer para Conservar, le sorprendió en
pleno trabajo de maduración de ellos un infarto cardíaco que cerró sue ojos
para simpre en su querida tierra de Linares.
Quienes lo conocimos, jamás podremos olvidar las sabias enseñanzas,
sus consejos atinados, la claridad y riqueza de sus pensamientos, la extra-
ordinaria y profunda versación de su formación universitaria; su ora-
toria brillante y sobresalientes condiciones de maestro, hicieron de sus
clases las delicias de quienes tuvieron la oportunidad de escucharle por
su bien documentada información y dominio de las materias.
Personalidad vigorosa, unida a una reciedumbre moral, fue siempre
afable y bondadoso, dispuesto a servir la causa de la cultura y de la
universidad, por el porvenir de su país, sentíase orgulloso de sus antepa-
sados y de la historia que hicieron de Chile una nación rectora un Sudamé-
rica, añoraba desde el fondo de su corazón esa altivez aborigen e hispá-
nica, no doblegada ante el influjo crecirnte de lo extranjero que todo
lo averalla e impide ver y analizar muestra nacionalidad.
Sizmpre se le escuchaba decir: “Debemos resolver nuestros proble-
mas con nuestros propios medios, con nuestra propia capacidad y ver de
manera clara e inteligente lo que nos pueda servir para ayudar al pro-
greso de Chile y al desarrollo de una cultura autóctona, libre de influen-
cias extrañas que confunden y desorientan a la juventud”.
Estos pensamientos se reflejaban siempre en su quehacer científico,
con valentía luchó por la cristalización de ellos, ejemplo patente de ésto
fue la Estación de Biología Marina, hoy Departamento de Oceanología.
También el Instituto de Biología, actual Departamento de Biología y en
gran medida el desarrollo de la Universidad de Chiij* en Valparaíso es
obra suya. :
Don Parmenio Yáñez había nacido en un pueblecito sureño llamado
Palmilla, ubicado en la provincia de Linares, el 28 de Julio de 1902. Reali-
zó 3us estudios primarios y secundarios en la escuela y liceo de Linares,
para ingresar posteriormente a la Escwela de Medicina de la Universidad
de Chile en Santiagv, donde recibió su título de médico-cirujano. Discípulo
y ayudante del brillante Prof. Juan Noé, en la Cátedra de Biología, supo
apreciar sus enseñanzas y gusto por los problemas generales de la Biolo-
* Departamento de Biología, Facultad de Matemáticas y Ciencias Naturales, Univer-
sidad de Chile, Valparaíso.
10 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
gía, distinguiéndose al punto de ganar la confianza plena de su maestro
quien lo inspiraba en el trabajo de las disciplinas biológicas.
En 1920 se desempeñaba comu ayudante de la Cátedra de Zoología
Médica de la Escuela de Medicina y como ayudante de la Cátedra de
Histología de la Escuela Dental de la Universidad de Chile en Santiago.
En 1928 se le nombró Jefe de Trabajos de Anatomía Comparada en
la Escuela de Medicina y Profesor Auxiliar de Biología en la Escuela
Dental de la Universidad de Chile de Santiago.
En 1930 se hace cargo, en calidad de Jefe, del Laboratorio de Micros-
copía de la Escuela de Medicina Veterinaria, y al año siguiente se le
nomina Profesor Ordinario de Biología de la Facultad de Medicina Ve-
terinaria de la Universidad de Chile en Santiago.
En 1931 tomaba el cargo de Profesor Ordinario de Biología de la
Facultad de Filosofía y Educación, y, posteriormente, asumirá como
Jefe del Departamento de Biología del Instituto Pedagógico de la Uni-
versidad de Chile de Santiago.
También sirve las labores de Profesor de Biología en la Escuela de
Química y Farmacia de la Universidad de Chile de Santiago.
En 1937 obtiene una beca Humboldt y se dirige a Alemania a .estu-
diar Biología Marina en la Estación de Helgoland. Al año siguiente tra-
baja en Limnología en la Estación de Plon, Holstein, del mismo país.
A su regreso de Alemania se dedica a buscar el apoyo y la ayuda
del gobierno y de particulares con el objeto de crear una Estación de
Biología Marina, la primera de América del Sur en su épuca, destinada
a la investigación científica del mar chileno.
Demás está decir los enormes sacrificios y desvelos que debió afron-
tar, pero en todo momento contó com el apoyo de diversas instituciones
locales y de su propia familia que lo estimularon para acometer con va-
lentía homérica, dicha labor. El Consejo Universitario de aquel entonces
le escucha con interés y visión, solicitando los recursos para que este pio-
nero del mar llevara adelante tan difícil y compleja misión y decide en-
comendarle la búsqueda, en la zona central, del lugar apropiado para su
obra, recayendo en la Provincia de Valparaíso el privilegio de ella. En
1941, en una pequeña caleta de pescadores, Montemar, se levantan los
cimientos de la futura Estación de Biología Marina que se inaugura el
283 de Julio de 1945, y el Dr. Yáñez es su primer Director, y permanece
en el cargo hasta 1960.
Durante sus casi veinte años de dirección se dedica con pasión y
entusiasmo a trabajar por el desarrollo de esta nueva institución, com-
pletando su organización y construcción hasta estructurar la mayor parte
de la obra gruesa, quedando pendiente sólo el acuario de exhibición al
público, que lamentablemente no se materializó.
Se preocupa simultáneamente de dotar a la Estación de une rica
biblioteca, su cerebro, capaz de suministrar la mayor información posible,
F. Silva y H. Etcheverry PARMENIO YAÑEZ ANDRADE JE
en dicho campo, y de un acuario de investigación. Auxilia a la biblioteca
de una eficaz herramienta de divulgación, la Revista de Biología Marina,
que aún se mantiene y goza de prestigio internacional.
Mientras tanto realiza una activa labor de divulgación participando
en Congresos, Symposium y Sociedades Científicas. Es así, como en 1949
en calidad de presidente organiza el Primer Congreso Latinvamericano de
Biología Marina, Oceanografía y Pesca, celebrado en Montemar con pleno
éxito, que sirvió de estímulo para el desarrollo de la Biología Marina en
Latinvamérica.
En 1955, invitado por la Fundación Ruckefeller, visita diversas esta-
ciones de Biología Marina de Estados Unidos y Canadá. Posteriormente
viaja a Santo Domingo como Delegado Oficial del Gubierno de Chile a la
Conferencia Panamericana de Riquezas Pesqueras.
En 1961, por invitación especial de la Academia de Ciencias de
Washington, asiste al Décimo Congreso Científico del Pacífico celebrado
en Honvlulú, Hawai.
Por su eficiente labor académica recibe distinciones de su Universi-
dad que le prestigian como miembro honorario de las siguientes facul-
tades: Filosofía y Educación, Medicina Veterinataria, Odontología y Miem-
bro Hunorario de la Sociedad de Medicina Veterinaria de Santiago y de
la Sociedad Científica de Valparaíso.
Por la colaboración prestada a la Expedición Biológica-Marina de la.
Universidad de Lund organizada por los Profesores Brattstrom y Dahl,
el Gobierno del Reino de Suecia le confirió el mayor honor hecho a un
científico chileno al honrarlo como Miembro de la Orden de la Estrella
Polar en el grado de Oficial.
Consciente que su obra es un patrimonio para la juventud, crea le
carrera de Biówgo Marino con el objeto de formar los futuros investiga-
dores de nuestras riquezas marinas. Recibe así, el amplio apoyo de la
Facultad de Filosofía y Educación de la Universidad de Chile de Santiago:
para titular jóvenez con vocación, en esta disciplina.
En el campo de la investigación publica mumerosos artículos como:
Biología Pedadógica, dedicada a los profesores, Biología Marina: objeto,
métodos, técnicas, importancia económica, etc.
Escribe sobre protozoos litoralasz, plancton, vertebrados marinos, pe-
ces chilenos de importancia económica y desarrollo de la Oceanología en
los países latinoamericanos.
En 1960, deja la Estación de Biología Marina y continúa como Pro-
fesor de Biología de la Escuela de Odontología de la Universidad de Chile
en Valparaíso y posteriormente como Profesor de Bivlogía del Instituto
Pedagógico de Valparaíso de la misma Universidad. Contribuye a planificar
la creación del Departamento de Ciencias de la Universidad de Chile,
junto con el Prof. Bruno Ginther, llegando a ser Director del Instituto de
Biología de este Departamento, y en 1968, Presidente del Comité Ejecutivo
12 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N*” 10, 1977
del Departamento de Ciencias. Le sorprende en este cargo la reforma uni-
versitaria y participa en la estructuración definitiva de la Universidad cr
Chile en Valparaíso. El Departamentv de Ciencias se transforma en Área
de Matemáticas y Ciencias Naturalos y luego en Facultad, incorporando,
a sugerencia suya, al Departamento de Geografía.
Su paso por el aquel entonces Departamento de Ciencias, fue fructífuro;
apoyado en el “clima” de investigación desarivllado por el Prof. Gúnther
y colaboradores supo organizar el Instituto de Biología, impulsando la
creación de los laboratorios dr botánica, zoología, paleontología, evolución
y ecología, que juntos a la biología celular y genética, dieron un gran im-
pulso al nacimiento de la Historia Natural con el apoyo de la joven carre-
ra de Pedagogía en Bivlogía y Ciencias, creada también por él, a petición
del director del Instituto Pedagógico de Valparaíso, Prof. Rodolfo Iturria-
ga, como asimismo logra la reapertura de la carrera de Biología Mari-
na por dos nuevos períodcs.
En 1970, continúa desempeñándose en la docencia de la ecología,
evolución, filosofía de la biología y anatomía comparada. Este mismo
año viaja a Europa con el objeto d' tomar contacto con profesores de
universidades francesas y alemanas en lo concerniente a la enseñanza
teórico-práctica de la ecología y anatomía comparada. Se dedica rn BEuro-
pa, además, a visitar laboratorios y a adquirir una abundante bibliografía
en relación a dichas disciplinas. En 1972 contribuye a la creación de la
carrera de Licenciatura en Biología y apoya firmementz nuestras activi-
dades del Programa de “Investigaciomas ecológicas en bosques nativos
de Chile”; colabora con los proyectca en parques nacionales y una vez
más, con sus ideas, en una publicación que encabeza un conjunto de tra-
bajos sobre el “Parque Nacional Vicente Pérez Rosales”, aparecida en
Anales del Museo de Historia Natural de Valparaíso, de 1974.
En Enero de 1977 participa en un curso de postgrado, organizado
por la Facultad de Arbz y Tecnología de la Universidad de Chile en Val-
paraíso con la colaboración de los Departamentos de Geografía y Biolo-
gía de la Facultad de Matemáticas y Ciencias Naturales de la Sede.
Durante el año 1976 y Marzo de 1977 realiza varias sesiones
de trabajo en torno a la publicación de una obra didáctica dirigida a los
profesores, alumnos de la enseñanza media, autodidactas y público que
gusta de la flora, fauna y bellezas naturales. Su retiro de la Universidad
fue con el propósito de dedicarse por entero a esta obra que consideraba
necesario escribir en keneficio de las generaciones jóvenes que deberán
valorar las riquezas naturales indispensables para el desarrollo futuro de
la nación.
El 10 de Abril del año en curso su obra quedó inconclusa a causa de
su deceso. La fecunda labor del profesor y maestro Parmenio Yáñez con-
tinuará en sus discípulos; queremos recordar textualmente, como un home-
naje, un valioso consejo que nos dejara:
F. Silva y H. Etcheverry PARMENIO YAÑEZ ANDRADE 13
“Los recursos vendrán de donde corresponda y por las vías adecua-
das, siempre que nuestros biólogos naturalistas sepan exponer, con clari-
dad y objetividad las necesidades que el país o la región tengan en lo que
respecta a investigación biológica, y siempre que sus ideas sobre lo que:
hay que hacer, y sobre cómo hacerlo, sean sólidas y definidas.
Los recursos no faltarán, si hay en los biólogos ideas claras, laborio-
sidad persistente y capacidad organizadora. Lo digo, porque la práctica.
me ha enseñado que es así”.
Creemos que su obra y sus enseñanzas perdurarán en el tiempo.
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Valparaíso, Chile 15
LOS LIQUENES DE LAS ISLAS DE JUAN FERNANDEZ
Il: ESTUDIO PRELIMINAR
JORGE REDON F. y WANDA QUILHOT P. *
ABSTRACT: A preliminary critical account is presented of the lichens of the:
Juan Fernández Islands. The genera Calicium, Erioderma, Opegrapha and Xanthoria
are recorded at the first time for this region. Two new combinations are presented.
INTRODUCCION
Desde la publicación de “Die Flechten der Juan Fernández-Inseln”,
la cual representa un amplio *studio sobre los líquenes de las islas de:
Juan Fernández (Zahlbruckner, 1924), ningún otro aporte de conjunto
ha sido realizado pcsteriormente para esta región sobre este grupo de
criptógamas. Ha transcurrido ya más dr medio siglo desde la aparición
de este trabajo, lapso en que se han efectuado importantes avances en
los diversos campos de la liquenología, por lo cual se requiere una ravisión
crítica del mismo, respecto a su nomenclatura y a la posición sistemática
de varias especies en él descritas.
El primer trabajo sobre los líquenes de Juan Fernández es el de
Montagne (1335) en el cual se señalan 49 especies que fueron colectadas
por Bertero. Posteriormente, este autor repitió estas especies y agregó:
otras (Gay, 1852). Por su parte, Taylor (1847) estudió algunas taxa que
más tarde fueron revisadas por Miiller-Arg. (1888). La Expedición del
Challenger 1rcogió una pequeña colección que fue elaborada por Crombie:
(1877). El trabajo de Johow (1896) constituye, en lo referente a los
líquenes, un intento de establecer un resumen sobiv lo anteriormente
publicado, agregando aleunas nuevas especies. No consiguió éxito en su
propósito, ya que creó una confusión innecesaria al introducir cambics
nomenclaturales basados en la aplicación de sistemas taxonómicos en
desuso para su época. El material de líquenes colectado por Skottsberg en
gu primera visita a las islas fue estudiado por Zahlbruckner (1917). En
su segundo viaje a esta región, Skottsberg y su esposa efectuaron una
completa colección liquénica que contiene valiosas indicaciones ecológicas
y que también fur elaborada por Zahlbruckner (1924).
Follmann (1961, 1962, 1964 y 1965) señala varias especies de líque-
nes para Juan Fernández, la3 cuales fueron recopiladas principalmente
de los trabajos de Zahlbruckner (1924) y Gay (1852). Se trata en este
caso ,de una revisión bibliográfica no crítica que mo aporta nada nuevo
al conocimiento preexistente sobre los líquenes de esta región.
En 1966 sr realizó la Expedición botánica chileno-norteamericana al
archipiélago de Juan Fernández, del cual tenemws conocimiento a través
* Laboratorio de Botánica, Departamento de Biología, Universidad de Chile, Valpa-
raíso.
16 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
de la publicación de Carlos Muñoz Pizarro (1969). En esa oportunidad,
Imshaug se encargó de efectuar el estudio y recolección de líquenes y hon-
gos, logrando una colección de 1624 números de líquenes. Hasta el mo-
mento, sin embargv, mo conocemos ninguna publicación sobre este ma-
terial, que suponemos debe encontrarse depositado en la Universidad de
Michigan, USA.
Algunas publicaciones que se refirren sólo indirectamente a los líque-
nes de Juan Fernández son las siguientes: Hue (1898, 1899, 1900, 1901,
1907, 1908, 1909-a, 1909-b, 1910, 1912); Nylander (1859-60 y 1863).
En 1975, los autores tuvieron la oportunidad de permanecer durante
un mes en la isla de Robinson Crusoe (Más a Tierra) y de realizar varias
excursiones liquenológicas (Figura 1), logrando efectuar uma importante
colección y numerosas observaciones ecológicas. Este material, más algu-
nos ejemplares colectados por Skottsberg y determinados por Zahlbruck-
ner, que se encuentran depositados en el Museo Nacional de Historia
Natural de Santiago, han servido de base para este estudio preliminar.
Mirador A, 1
de Selkirk q
0
Ba.
Tierra Blanca > Playa Larga
Ba.
del Padre
ISLA ROBINSON CRUSOE
N
ISLA STA. CLARA
Figura 1. Las líneas interrumpidas indican la trayectoria seguida durante el des-
arrollo de las excursiones. Los números corresponden a las respectivas estaciones
y señalan aproximadamente el área donde se efectuaron los muestreos por subesta-
ciones. Mayores detalles en el texto.
J. Redón y W. Quilhot .. LIQUENES. DE JUAN. FERNANDEZ “' 17
Algunas referencias ecológicas y fitogeográficas han'sido indicadas por"
uno de los autores, anteriormente (Redon,'1973, 1974 y 1976). 000000
Lcs objetivos del presente trabajo consisten en: exponet: los resulta--
dos de un primer estudio sobre la flora liquénica de las islas: de Juan:
Fernández, mediante la revisión crítica de algunas 'esprcies/y la 'descrip-.
ción de las características ecológicas más relevantes dé: las riismas, seña-
lando las relaciones fitogeográficas dr algunas de ellas.'Se trata del OS
aporte de una serie que deberá continuarse AS Lo Dd pisan
A AA E A q a dra
: kEsULtaDOS estada
A DAS BO E AO
1.—Sistemática
= 1 ys ; o O , ,
NT OA a asa e A IATA
Los líquenes que a continuación se indican, han sido" clasificados de:
acuerdo al sistema propuesto por Henssen ; y Al áhns Ñi 1974). En esta! oporta-
nidad se han considerado solamente úna parte de las' especies, pertenecieno
tes a nuestras colecciones que se encuentran depositadas 'en' el Herbario
de Líquenes, Laboratorio de Botánica, Departamento de Bivlógía, Univer-
sidad c.r> Chile, Valparaíso. Asimismo, ' se han: revisado crítitamente sólo
aleunas de las especies descritas por “Zahlbruckner” ' (1924). “Las especias
que constituyen nuevos hallazgos a esta! región! “se Est narcado con
un asterisco. si 00
Las excumivnes y las inspectivas estálciónes y olralalonel de' mués-
treo que se efectuaron durante nuestra Estadía” en la isla Robinson" 'Crtísoe
se indican en la Figura 1. Un cuadro cz quemático” de las 'mismals, 'eon sus
resiuctivas abreviaturas utilizadas en el texto) sé señala a continuación:
Para cada una de las especies 'señaladas, “sé” han” "considerado los
siguientes datos: número' de herbario; localidad ( estaciones! y' 'subestacios
nes, respectivamente), altura sobre el nivel del mar, sustrato, bibliogra-
fía y observaciones.
A pray
a no 4
Estación 1 = Bahía del Padre: +. sio ; e E dez
Subestación Es pared rocosa, exp; "SE, 2 3m.
y B. =>” sn -NW;:5 1 'm.
e C= ” MIYA RS SED - 20 m.
” O ,” ” ” SE, 30 m.
Estación 2 = Furtezuelo Cordón Punta ares
Subestación A “= ladera, exp. E, 320 m0 20 0
se Spra mooa NE y S7 850 m:, EfMUSEOE” O
Estación 3 = Quebrada corta de Villagra
Subrstación A bosquez campamento: Villagra, :160 m.
pe B= ” Qda. corta Villagra, 170 m.
4 CG = A : A A - 220 - 230 m. ad
” De =, a Lg , dy A ” - - 240, mio 0
”, E. —= ” >, s Ez y” 7 y 340 m. A! TO
” F —=
” 3 Ll ni ; 30m. EA
18 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
Estación 4 = Mirador de Selkirk o Portezuelo de Villagra
Subestación A = arbustos, 550 m.
de B = pared rocosa, exp. NE, 550m.
Estación 5 = Plazoleta del Yunque y El Camote
Subestación A = subida a la Plazvuleta, 90 - 140 m.
dd B = Plazoleta, 240 - 250 m.
ye C = El Camote, arbustos, 560 m.
Estación 6 = Puerto Francés |
árboles y suelo, Qda. Francés, 150 m.
árboles, Qda. Francés, 180 m.
árboles, ladera derecha, C? Hedionda, 350 m.
uebrada Pesca de los Viejos
árboles, 300 - 350 m.
e 450 m.
ordón Salsipuedes.
suelo, exp. SE, 280 m.
árboles, 380 m,.
ds 410 m.
suelo, ladera exp. E, 420 m.
árbules y arbustos, 520 m.
arbustos, 550 m.
ss 650 - 700 m.
Estación 9 = Valle Lord Amson
Subestación A = rocas y suelo, 30 m.
Estación 10 = El Pangal
Subestación A = árboles, 60 - 90 m.
Estación 11 = Quebrada Maderugo
Subestación A — árboles, arbustos, 120 - 200 m.
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Subestación
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Estación 8
Subestación
3,
MA AAN py
lamuBuuon»>llup>lay
a
Clase Ascomycetes
Subclase Ascomycetidae
Orden Caliciales
Familia Caliciaceae
Género CALICIUM
*Calicium sp.
Loc.: (04677) - Est, 7, Sub. B, 450 m., s/Drimys confertifolia.
Obs.: Primera cita de la familia y el género para esta región.
Género SPHAEROPHORUS
o OD (SW.) DC.
OC.: 6 - Est, 5, Sub. C, 560 m., s/Bleechnum cycadifolium.
ON - Ea h cua ae 350 m., s/árbol seco. á
- Est. 7, Sub. B, 450 m., s/Dri tifolta.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 324. a
Obs.: En general, los ejemplares son poco desarrollados.
J. Redón y W. Quilhot LIQUENES DE JUAN FERNANDEZ 19
Orden Lecanorales
Suborden Lecanorineae
Familia Collemataceae
Género LEPTOGIUM
Leptogium azureum (SW.) Mont.
Loc.: (04632) - Est. 4, Sub. A, 550 m., s/Ugni selkirkiz.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 335 como L. tremelloides var. azureum.
Leptogium phyllocarpum (Pers.) Mont.
Loc.: (04633) - Est. 4, Sub. A, 550 m., s/Ugni selkirkii.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 335.
Género LECANORA
Lecanora atra (Huds.) Ach.
Loc.: (04613) - Est. 1, Sub. A, 3 m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 379.
Género MYXODICTYON
Mywxodictyon chrysostictum (Tayl.) Mass.
Loc.: (04635) - Est. 3, Sub. F, 350 m., s/Nothomyrcia fernandeziana.
(04608) - Est. 5 Sub. B, 250 xm.,
(04643) - Est. 8, Sub. B, 380 m. Y és
(04655) - Est. 8, Sub. E, 520 m. E E
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 383; Martin y Child. (1872), p. 81.
Obs.: Especie muy abundante en la isla, no presente en Chile continen-
tal,, considerada hasta hace poco como pivbablemunte endémica
de Nueva Zelandia.
Familia Lecideaceae
Género LOPADIUM
Lopadium fuscoluteum (Dicks.) Mudd. var. austroamericana (Ras.) Lamb:
Loc.: (04671) - Est. 6, Sub. C, 350 m., s/musgos en Nothomyreia fer-
nandezianao.
(04679) - Est. 7, Sub. B, 450 m., s/Nothomyrcia fernandeziana.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 368, como L. leucoxanthum var. albi-
dius; M. Lamb (1958), p. 90.
Obs.: Esta especie se encuentra en la región de Llanquihue, sobre mus-
gos en corteza de mirtaceas, a una altura similar. La especie
típica ha sido ncontrada en Cerro Mirador, Punta Arenas, so-
bre tundra submontana.
GéneroRHIZOCARPON
Rhizocarpon geographicum (L.) DC.
Loc.: (04687) - Est. 9, Sub. A, 30 m., s/roca.
(04694) - Est. 9, Sub. A, 30 m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 368.
Familia Cladoniaceae
Género CLADIA
Cladía aggregata (SW.) ACH.
Loc.: (04637) - Est. 4, Sub. B, 550 m., s/suelo.
20 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
(04689) - Est. 5, Sub. C, 560 m., e/suelo.
(04661) - Est. 8, Sub. E, 520 m., s/suelo. |
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 371, como Cladonia aggregata.
Género CLADONIA
Cladonia pycnoclada (Pers.) Nyl.
Loc.: (04697) - Est. 8, Sub. E, 520 m., s/suelo.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 370; Ahti (1961).
Familia Pannariaceae
Género ERIODERMA
*Erioderma sp. ] JA
Loc.: (04631) - Est. 4, Sub. A, 550 m., s/Ugni selkirkii.
(04678) - Est. 7, Sub. B, 450 m., s/Drimys confertifolta.
(04659) - Est. 8, Sub. E, 520 m., s/Pernettya rigida.
(04664) - Est. 8, Sub. G, 700 m., s/Pernettya. rigida.
Bibl.: Galloway y Jorgensen (1975), p. 139.
Obs.: Una especie parecida ha sido descrita para Nueva Zelandia por
Galloway and Joreunsen (1975). Otra especie casi idéntica a la
insular ha sido encontrada en el sur de Chile (Pivv. de Llanqui-
hue). e todo caso se precisa de un mayor estudio del material
colectado.
Género PANNARIA
Pannaria rubiginosa (Thunb.) Del.
Doc.: (04600) - Est: 5, Sub. A, 80 m., s/roca.
(04602) - Est. 5, Sub. A, 140 m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 3383, como var. vulcanica.
Obs.: Espec abundante sobre rocas volcánicas. La variedad estable -
cida por Zahlbr. no nos parece justificada.
Género PARMELIELLA
Parmeliella nigrocincta (Mont.) Mill. Arg.
Loc.: (04683) - Est. 7, Sub. B, 450 m., s/Drimys confertifolia.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 336.
Parmeliella pycnophora (Nyl.) Sant. var. subdivisa (Zahlbr.) Sant.
Loc.: (04650) - Est. 8, Sub. D, 420 m., s/Ugni selkirkil.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 343, como Coccocarpia gayana var.
subdivisa; Santesson (1944).
Género PSOROMA
Psoroma angustisectum Zahlbr.
Loc.: (04663) - Est. 8, Sub. F, 550 m., s/Blechnum cycadifolium.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p, 342.
Obs.: Esta especie no se conoce de Chile continental.
Psoroma sphinctrinum (Mont.) Nyl.
Loc.: (04630) - Est. 3, Sub. F, 350 m., s/Drimys confertifolia.
(04675) - Est. 7, Sub. B, 450 m., s/ a de
(04651) - Est. 8, Sub. D, 420 m., s/ Si de
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 341.
J. Redón y W. Quilhot LIQUENES DE JUAN FERNANDEZ 21
Psoroma pholidotum (Munt.) Múll. Arg.
Loc.: (04626) - Est. 3, Sub. C, 220 m., s/Drimys confertifolia.
(04674) - Est. 7, Sub. B, 450 m. s/
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 340.
Suborden Peltigerineae
Familia Peltigeraceae
Género NEPHROMA
Nephroma antarcticum (Wulf.) Nyl.
Loc.: (04639) - Est. 4, Sub. B, 550 m., pared NE, s/roca.
(04669) - Est. 6, Sub. C, 350 m., s/Nothomyrcia fernandeziana
(04682) - Est. 7, Sub. B, 450 m., s/Drimys confertifolta.
(04658) - Est. 8, Sub. E, 520 m., s/suelo.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 355.
Nephroma cellulosum (SM.) Ach.
Loc.: (04022) - Est. 2, Sub. A, 320 m., s/suelo.
(04657) - Exc. 8, Est. E, 520 m., s/Pernettya rigida.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 355.
Familia Stictaceae
Género PSEUDOCYPHELLARIA
Pseudocyphellaria argyracea (Del.) Wain.
Loc.: (04622) - Exc. 2, Est. A, 320 m., s/suelo.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 345 como Sticta argyracea.
e curata (Ach.) Wein.
Loc.: (04625) - Est. 3, Sub. A, 160 m. , 8/Nothomyr cia fernandeziana
aloUS - Est. 5 Sub. B, 240 m., s/
(04676) - Est. 7, Sub. B, 450 m., s/ e de
(04647) - Est. 8, Sub. B, 380 m., s/ dd de
(04665) - Est. 8, Sub. E, 520 m., s/ d e
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 350, comv Sticta aurata.
Obs.: Especie de distribución tropical y subtropical. Abundante.
Pseudocyphellaria berteroana (Mont.) Redon comb. nov.
Bas. Sticta berteroana Mont. in Annal. Scienc. Nat., Bot., Ser. 2, vol.
IV, p. 90; 1835.
Loc.: (04610) - Est. 5, Sub. B, 240 m. , 8/Nothomyrcia fernandeziana
(04648) - Est. 8, Sub. B, 380 m., s/
Bibl.: LN (1924), p. 347; Huneck, Redon y Quilhot (1973),
DP. 5
Obs.: Especie no prerrnte en Chile continental.
a durvillei (Del.) Wain.
: (04636) - Est. 4, Sub. A, 550 m., s/suelt.
(0AGTO) - Est. 6, Sub. C, 350 m., s/Nothomyrcia fernandeziana
Bibl.: ES (1924), 1D: 302; como Sticta orygmaea var. dur-
villei.
Pseudocyphellaria flavicans (Hook. et Hayl.) Wain.
Loc.: (04627) - Est. 3, Sub. D, 240 m., s/Drimys confertifolia.
Bibl: Zahlbruckner (1924), p. 352, como Sticta orygmaea var. fla-
vicans.
22 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
*Pseudocyphellaria gilva (Ach.) Malme.
Loc.: (04641) - Est. 4, Sub. B, 550 m., s/roca.
(04605) - Est. 5, Sub. A, 140 m., s/roca.
(04696) - Est. 11, Sub. A, 120 m., s/suelo.
Pseudocyphellaria mougeotiana (Del.) Wain.
Loc.: (04699) - Est. 8, Sub. A, 280 m., s/suelo.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 349.
Suborden Teloschistineae
Familia Teloschistaceae
Género CALOPLACA
Caloplaca, selkirkii Zahlbr.
Loc.: (04618) - Est. 1, Sub. B, 5m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 395.
Caloplaca fernandeziana (Zahlbr.) Follm. et. Redon.
Loc.: (04616) - Est. 1, Sub. B, 5 m., s/roca.
(04621) - Est. 1, Sub. D, 30 m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 393, como Blastenia fernandeziana.
Género TELOSCHISTES
Teloschistes flavicans (Sw.) (Mill. Arg. forma flabra Wain.
Loc.: (04623) - Est. 2, Sub. B, 350 m., s/musgos.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 399; Follmann y Redon (1972), p. 449.
Obs.: Especie prezente en el Parque Nacional de Fray Jorge, Provin-
cia de Coquimbo.
Género XANTHORIA
*Xanthoria parietina (L.) Fries.
Loc.: (04615) - Est. 6, Sub. A, 150 m., s/huesos en el suelo.
Xanthoria elegans (Link) Th. Fr.
Loc.: (04620) - Est. 1, Sub. D, 30 m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 398, como Caloplaca elegans var.
australis.
Suborden Physciineae
Familia Physciaceae
Género BUELLIA
Buellia fernandeziana Zahlbr.
Loc.: (04617) - Est. 1, Sub. C, 5 m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 401.
Género HETERODERMIA
Heterodermia magellanica (Zahlbr.) Redon var. pectinata (Zahlbr.) Re-
A os co nov. ;
as. Anaptychia magellanica, Zahlbr. in Kgl. Sy. Vet. Akad. Handal
57 (6): 54. 1917; var. pectinata (Zahlbr. ' ai eos
e ENSUNuea 6: 66; 1962. 2) Kurokayya in; Noya
yn. Anaptychia. dactyliza (Nyl.) Zahlbr. forma ti 1
Nat. Hist. Juan Fernández, Easter Island, a de
J. Redón y W. Quilhot LIQUENES DE JUAN FERNANDEZ 23
. Anaptychia pectinata (Zahlbr.) Sant. in Ark. Bot. 31 A (7);
14; 1944 (04644) - Sst. 8, Sub. B, 380 m., s/Nothomyrcia fer-
nandeziana.
Loc.: (04660) - Est. 8, Sub. E, 520 m., s/ 4 4
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 403; Santesson (1944); Kurukawa
(1962), p. 66.
Suborden Pertursariineae
Familia Pertusariaceae
Género PERTUSARIA
Pertusaria hadrocarpa Zahlbr.
Loc.: (04603) - Est. 5, Sub. A, 140 m., s/ruca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 376.
Obs.: Especie no encontrada en Chile continental.
Orden Gyalectales
Familia Gyalectaceae
Género DIMERELLA
Dimerella lutea (Dicks.) Trev.
Loc.: (04629) - Est. 3, Sub. F, 350 m., s/Nothomyrcia fernandeziana
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 331, como Microphiale lutea.
Orden Ostropales
Suborden Ostropineae
Familia Thelotremataceae
Género OCELLULARIA
Ocellularia subdenticulata Zahlbr.
Loc.: (04662) - Est. 8, Sub. F, 550 m., s/Blechnum cycadifoltum.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 329.
Obs.: La cita de esta especie para Chile continental ha demostrado
ser errónea.
Género THELOTREMA
Thelotrema lepadinum Ach.
Loc.: (04628) - Est. 3, Sub. E, 340 m., s/Nothomyrcia fernandeziana
(04668) - Est. 6, Sub. B, 180 m., s/Drimys confertifolia.
(04653) - Est. 83, Sub. D, 420 m., s/Nothomyrcia fernandeziana.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 330.
Orden Sphaeriales
Familia Pyrenulaceae
Género PYRENULA
Pyrenula kunthi Fee.
Loc.: (4611) - Est. 5, Sub. B, 250 m., s/tronco caído.
(04692) - Est. 5, Sub. C, 560 m., s/Berberis sp.
Bibl.: Zahlbrucknrer (1924), p. 323.
Orden Verrucariales
Familia Verrucariaceae
Género VERRUCARIA
Verrucaria microspora Nyl.
Loc.: (04614) - Est. 1, Sub. A, 2 m., s/roca.
24 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N? 10, 1977
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 318; M. Lamb (1948).
Orden Arthoniales
Familia Arthoniaceae
Género ARTHONIA
Arthonia berberina Zahlbr.
Loc.: (04690) - Est. 5, Sub. C, 560 m., s/Berberis sp.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 325.
Obs.: Especie no encontrada en Chile continental.
Familia Opegraphaceae
Género OPEGRAPHA
*Opegrapha sp.
Loc.: (04634) - Est. 4, Sub. A, 550 m., s/fronda seca de helecho.
Obs.: Especie de ecología muy específica; al parecer no existe seme-
jante ecotipo en Chile continenal.
Familia Roccellaceae
Género DIRINA
Dirina limitata Nyl.
Loc.: (04619) - Est. 1, Sub. C, 5 m., s/roca.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 327.
Clas2 Basidiomycetes
Subclase Holobasidiomycetidae
Orden Aphyllophorales
Familia Corticiaceae
Género CORA
Cora pavonia (Sw.) Fries.
Loc.: (04638) - Est. 4, Sub. B, 550 m., s/roca.
(04661) - Est. 5, Sub. A, 140 m., s/roca.
(04686) - Est. 9, Sub. A, 30 m., s/suelo.
(04695) - Exc. 11, Sub. A, 200 m., s/suelo.
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 405.
Obs.: Especie abundante en lugares húmedos y sombríos.
ESPECIES DE POSICION SISTEMATICA INCIERTA:
de ii niveum Mont.
1c.: (04672) - Est. 7, Sub. A, 350 m., s/Drimys confertifolia
(04645) - Est. 8, Sub. B, 380 m., s/Drimus ifolia.
(04649) - Est. 8, Sub, O, 410 mm) 8) 0 LO
Bibl.: Zahlbruckner (1924), p. 329.
Polychidium polychidioides (Zahlbr.) Henss.
Loc.: (04698) - Est. 8, Sub. A, 280 m., s/surlo.
Bibl: Zahlbruckner (1924), p. 383, : FE
Henssen (1963), p. 108 como Lemmopsis polychidiodes;
AGRADECIMIENTOS: Agradecemos y quedamos re i
TOS: conocidos por 1 inte-
resada ayuda que recibimos de parte de las siguientes instituciones E TS
cuya colaboración no habríamos podido llevar a cabo nuestra tarea: Armada Nacio.
J. Redón y W. Quilhot LIQUENES DE JUAN FERNANDEZ 25
nal que nos permitió viajar en el buque “Orella”; autoridades de la isla, CONAF,
señor Alvis González C., quien actuó como guía en nuestras excursiones; señorita
Susana Vidal B., por su valiosa ayuda en los trabajos de terreno y de laboratorio;
señora Mélica Muñoz S. y señorita Elizabeth Barrera M., Jefe de la Sección Botánica
y Jefe del Laboratorio de Criptogamia, respectivamente, por permitir a uno de los
autores, estudiar algunos ejemplares de líquenes de la colección del Museo Nacional
de Historia Natural; a diversos habitantes de la isla que en diversas formas favore-
cieron nuestra labor en ese lugar.
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ESTADOS ONTOGENETICOS DE LOS FILOMAS VEGETATIVOS
EN ACACIA CAVEN (MOL.) HOOK. ET ARN.
(MIMOSACEAE)
ALDO MESA * y PATRICIO PEÑAILILLO *
ABSTRACT: The ontogeny of vegetative phyllome in Acacia caven (Mo).)
Hook. et Arn. (Mimosaceae) is described. The cotyledon petiolate and hypopeltate
features as well as the stipules proleptic development and the nomophylls (prophylls
and the definite leafs) “pinnatification” are presented and discussed.
INTRODUCCION
El presente trabajo es un aporte al conocimiento de la morfología
de las plántulas de Acacia caven (Mol.) Hook. et. Arn. que pone énfasis
en la descripción e interpretación de la secuencia ontogenética de los
filomas vegetativos.
La información disponible actualmentr en la literatura botánica so-
bre Ontogenia es escasa; faltan datos descriptivca confiables acerca de
los estados de desarrollo más jóvenes del cormo y de cada uno de sus
elementos estructurales. Lubbock (1892) y Troll (1939) se han preocu-
pado sólo de las especies “filódicas” (o de “hojas simples”) del género
Acacia y no así de las bipinnadas a las cuales pertenece Acacia caven
(Clasificación de Bentham en Troll, 1939). La morfología dr la semilla
fue estudiada por Boelcke (1946) y la anatomía de la flor, fruto y con-
diciones de la germinación por Hoffmann y Kummerow (1962).
MATERIAL Y METODO
Recolectamos frutos en individuos de Acacia caven, en la prov. de
Copiapó, 2 Km al Norte de la ciudad de Copiapó (27? 21” S - 70 21” W)
y en la prov. de Valparaíso, «alredadores de Quilpué (337 04” S - 71+ 28”
wW).
La germinación fue acexrada sometiendo las semillas al método de
Crocker y Barton (1957) modificado por Hoffmann y Kummerow (1962).
Luego se colocaron en placas de Petri con papel filtro húmedo, mante-
niendo las placas a 25? C en un baño termoregulado, durante dos días.
Finalmente se trasladaron a Propagadores Stewart donde permanecie-
ron en condiciones de luz y temperatura del laboratorio.
Se realizaron observaciones diarias y mediciones de las estructuras
a medida que aparecían. Se fotografiaron los estadcs ontogenéticos más
significativos en un Reprovit II Leitz con una cámara Leica M-3.
* Laboratorio de Botánica, Departamento de Biología, Universidad de Chile, Casilla
130-V, Valparaíso. j
28 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Los diferentes filomas son descritos organológicamente de acuerdo
al esquema de la clasificación arquitectónica de las hojas de Hickey (1973).
RESULTADOS
Cotiledones: en el embrión se presentan de color amarillo, carnosos,
planoconvexos. En la plántula son opuestos, verde opaco, de lámina ente-
ra, simétrica, oblonga ancha, de 12 mm de largo y 9 mm de ancho, base
lobada, ápice obtuso, margen entero, sin venación aparente; textura car-
mosa; peciolados, pecíolo de 2 a 2,5 mm de largo; hipopeltados, es decir,
el “pecíolo cotiledónico” se inserta sobre la cara aparentemente adaxial
del cotiledón.
Nomofilos:
a. Hojas primarias: Son dos y opuestas. Lámina unipinnada, 18 a
24 folíolos se sitúan en el raquis primario. Folíolo de lámina oblonga an-
gosta, mide 3 mm de largo y 1 mm de ancho, ápice obtuso con peciólulo
inflado.
Estípulas: En la base de cada hoja primaria se ubican dos estípulas
escamosas, unguiformes, translúcidas, de color amarillo verdoso. Ellas son
notables aún cuando la lámina de la hoja primaria no se ha desplegado
y los folíolos no han adoptado su posición definitiva, es decir, muestran
un tipo de desarrollo proléptico.
b. Hojas siguientes o normales: Bipinnadas con una pinnatificación
(división) múltiple gradual, originándose las pinnas de segundo orden
(segmentos 1, 2, 3, 4) en una sucesión acrópeta. En el desarrollo onto-
genético observamos hojas con 1 a 4 pares dr pinnas dispuestas en los
raquis secundarios. Base de las hojas con dos estípulas que se atenúan
gradualmente hacia el ápice y la punta toma color café, insinuando una
espina.
DISCUSION Y CONCLUSIONES
Los cotiledones de Acacia caven muestran bajo el punto de vista mor-
fológico ciertas peculiaridades; así por ejemplo, son peciolados e hipopel-
tados. La presencia de un pecíolo en los cutiledones es poco frecuente.
Según Troll (en Guédés 1972) los cotiledones peciolados parecen poseer
una lámina que corresponde perfectamente a la del nomofilo. Por otra
parte, el carácter hipopeltado no involucra una peltación verdadera, sino
una hipertrofia de la base de la lámina del cotiledón, comparable a aqué-
lla de la región inferior de la hoja de ciertos Sedum, hipertrofia ligada
a la acumulación de reservas (Troll, 1932).
Hemos considerado las estípulas como estructuras pertenecientes a
las hojas primarias y no como órganos independientes, pues en su des-
arrollo las observamos en la base de éstas. Nuestra conclusión entaría
corroborando lo afirmado por Guédés (1972). El desarrollo proléptico
de las estípulas parece estar en relación con la protección de las yemas
foliarez durante su crecimiento.
A. Mesa y P. Peñailillo FILOMAS VEGETATIVOS ACACIA CAVEN 29
Con respecto a los nomofilos debemos destacar el paso disde una
lámina unipinnada en las hojas primarias a una bipinnada gradual-
mente múltiple en las hojas siguientes o normales. Según Roth (1968)
en las hojas compuestas con ramificación múltiple las pinnas de segundo
y tercer orden se originan en sucesión acrópeta. El mismo tipo de desarro-
llo hemos visto en las hojas pinnadas de Acacia caven con una “pinnati-
ficación” de segundo vrden. Hemcsx hablado de una pinnatificación o divi-
sión de la hoja, más bien que de una ramificación, ya que de acuerdo a
Hagemann (1970) la hoja pinnada es una hoja y no un “sistema hojoso”,
como ocurre en la ramificación de la raíz y del vástago.
BIBLIOGRAFIA
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30 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No> 10, 1977
Lámina 1. Secuencia ontogenética de los filomas vegetativos de Acacia caven: 1
brión: radícula, cotiledones y hojas primarias; 2, plántula: cotiledones peciol d 2
hipopeltados y hojas primarias unipinnadas; 3, plántula: cotiledones Aci hol >
primarias y hojas siguientes. Fotos: 1, x 5.5; 2, x 4; 3, x 2,5. 220
Valparaíso, Chile 31
CLAVE ILUSTRADA PARA LA DETERMINACION DE CRUCIFERAE
DE LA ZONA CENTRAL, BASADA EN LOS TRICOMAS FOLIARES *
GERMAN DE NORDENFLYCHT **
ABSTRACT: This work shows a taxonomical and illustrated key of the Crucife-
rae's species found in the Central Chile, based on the morphological characters of
foliar trichomes.
INTRODUCCION
Los estudiosos de logs tricomas ham sabido, en general, apreciar a
éstos como un carácter taxonómico de importancia (Gay 1848, Reiche
1906, Johow 1945, Pizarro 1959), sin embargo, son pocos los autores que
han intentado usar este carácter como mecanismo único de identificación
en una clave taxonómica (Shaw 1973). La familia Cruciferae aparece
con una eevada camtidad de representantes en la Zona Central de Chile.
En ellos, la variabilidad en las formas de los tricomas foliares, así como
las características de su superficie y su constitución, nos han inducido a
confeccionar una clave taxonómica de especies basada únicamente en la
utilización du este carácter. Junto con ellas se presenta un informe
tabulado de la constitución, presencia o ausencia de estípite, células basa-
les del indumento y tipos de pelos.
Este intento significó una nueva clave para las Cruciferae de la Zona
Central y a la vez la entrega de antecedentes morfométricos de los tri-
comas pemsando en un nuevo aporte que sirva de ayuda a estudios pos-
terioros. y
MATERIALES Y METODOS
1.—Se trabajó con veintiuna (21) especies. De ellas tres no se en-
cuentran en la Zona Central, pero están incluidas por: el escaso conoci-
miento que de ella hay en nuestro medio (Mancoa hispida Ib. et La Port.).
el inusitado crecimiento espontáneo de una planta de jardinería (Zberis
amara L), y el habitus velutino-araneoso característico (Mathewsia ni-
vea (Phil.) O. E. Schulz).
2.—Se estudiaron diez (10) preparaciones por cada especie y el re-
sultado de las medidas se expresa como promedio. Para este efecto se
utilizó un microscopio Leitz Wetzlar con ocular micrométrico.
3.—Las muestras se obtuvieron de plantas en estado adulto y los
tricomas estudiados corresponden a aquellos presentes en las hojas de
cada especie.
e Trabajo parcialmente financiado por la Dirección de Investigaciones de la U.C.V.
e* Laboratorio de Fanerogamia U.C.V., Casilla 4059, Valparaíso, Chile, S. A.
32 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
4.—Se utilizó el método de diafanización de epidermis y tinción áci-
do tánico-cloruro férrico rn solución alcohólica.
5.—Todo el material con que se trabajó se encuentra herborizado en
el Herbario de la Universidad Católica de Valparaíso, Chile, S. A.
6.—Las mediciones de los tricomas sr expresan en valores promedio
y desviación stándard. La nomenclatura para los tipos de pelo sigue bási-
camente a Font Quer (1953).
ESPECIES ESTUDIADAS
Las especies estudiadas y su correspondiente lugar de colecta se
señalan a continuación:
1.—Brassica campestris L. Viña drl Mar-Estero Mar-
ga-Marga
2.—Cardamine cordata Barn. Los Andes-Riecillo
3.—Cardamine nasturtioides Bert. Los Andes-Maitenes
4.—Cardamine soehrensi Phil. Los Andes-Río Colorado
5.—Cardaria draba (L) Desvaux Quilvta
6.—Capsella bursa-pastoris (L) Medik Viña del Mar-Estero Mar-
ga-Marga
7.—Descurainia erodifolia (Phil. ex Schd.)
Brtl. Los Andes-Riecillo
8.—Draba gilliesi H. et Arn. Santiago-Potrero Grande
9.—Hexaptera pinnatifida Gill. et Hook Santiago-Lo Valdés
10.—Tberis amara L. Iquique-Mamiña
11.—Lobularia maritima (L) Desvaux Viña del Mar
12.—Mancoa hispida Ib. et La Port. Tarapacá-Socoroma
13.—Mathewsia foliosa H. et Arn. Viña del Mar-Las Salinas
14.—Mathewsia nivea (Phil.) O. E. Schulz. La Serena-Cuesta Pajonal
15.—Mnotthiola onnva (LY) R. Brown Valparaíso
16.—Mennonvillea linearis DC Valparaíso-Laguna Verde
17.—Nasturtium officinale R. Brown Viña del Mar-Concón
13.—Raphanus sativus L. Viña del Mar-Achupallas
19.—Rapistrum rugosum (L) All. Santiago-La Cisterna
20.—Schizopetalum gayanum Barn. Viña del Mar-Cuchoa
21.—Sisymbrium officinale (L) Scop. Viña del Mar-Estero Mar-
ga-Marga
CLAVE PARA LAS ESPECIES
1. Especies glabras en la superficie foliar .... Cardamine cordata
Cardamine nasturtioides
Cardamine soehrensi
Mennonvillea linearis
Nasturtium officinale
Raphanus sativus
Rapistrum rugosum
1”. Especies pubescentes en la superficie foliar.
2. Pelos unicelulares.
3. Prlos simples.
4. Pelos con superficie lisa. Sin tabi-
biques transversales. Figs. 10 y 15.
5. Pelos subsésiles con células
anexas en la base. Fig. 15 ........ Brassica campestris
G. de Nordenflycht INDUMENTO DE CRUCIFERAE 33
5. Pelos totalmenta sésiles sin
células anexas en la base,
Fig 100 AA AAA E Capsella bursa-pastoris
4. Pelos con superficie dentada (den-
ticulados) con tabiques transver-
A EE AS A Sisymbrium officinale
3'. Pelos compuestos.
6. Pelos con rayos.
7. Pelos ramosos definidos (estre-
lados, fasciculados o fascicula-
do-denticulados). Fig. 1, 2, 4, 6, 7.
8. Pelos con células anexas en la
base, sin estípite, Figs. 1 y 2. .. Capsella bursa-pastoris
8”. Pelos sin células anexas rn la
base, con estípite.
9. Pelos fasciculados con 2-3-
ALAVOS ELO ls A Draba gilliesit
9. Pelos fasciculado-denticu-
lados con 2-rayos. Fig. 4 .......... Mancoa hispida
7, Pelos ramosos no-definides. Fig.
3, 9 11,17
10. Pelos con tabiques trans-
versales, sin células anrzxas
en la base.
11. Pelos 2-rayos en los
ápices.. Figs. 9 y 17.
12. Pelos con los tabi-
ques muy marcados
y el estípite nutable.
ia O A Schizopetalum gayanum
12”. Pelos con los tabi-
ques poco marcados
y el estípite subsé-
SL EII E MAN Mathewsia foliosa
11”. Pelos multi-rayos (so-
bre cinco). Fig. 3 ...... Descourainia erodufolia
10”. Pelos sin tabiques transver-
sales con 5-6 células anexas
en la. base. «Pie? Tele. MA Matthiola annua
6'. Pelos sin raycz.
13. Prelos con superficie lisa. Fig. 5
13. Pelos con superficie dentada.
Figs. 8, 12, 13.
14. Pelos sin estípite.
15. Pelos denticulados sin
células anexas en la
bases Hielo Hexaptera pinnatifida
15. Pelos denticulados
con 3-6 células ane-
TN Iberis amara
xas en la base. Fig. 8 ........ Cardaria draba
14”. Pelvs con estípite corto . y
hasta subsésiles. Fig. 12 ..... Lobularia maritima
2. Pelos pluricelulares con vacuolas. Fig. 16 ...... Mathewsia nivea.
Especioa
CAPSELLA
BURSA-PASTORIS
BRASSICA
CAMPESTRIS
CARDARIA
DRABA
DESCOURAINIA
ERODIIFOLIA
DRABA
GILLIESIT
HEXAPTERA
PINNATIFIDA
IBERIS AMARA
LOBULARIA
MARITIMA
MANCOA
HISPIDA
MATHEWSIA
FOLIOSA
MATHEWSIA
NIVEA
MATTHIOLA
ANNUA
SCHIZOPETALUM
GAYANUM
SISYMBRIUM
OFFICINALE
Tipo de pelo
Superfic.
Estrellados
4-rayos
5-rayos lisa
Simple lisa
Denticulado dentada
Ramosos
multi-rayos
(más de 5) lisa
Fasciculado
2-rayos
3-rayos
4-rayos lisa
Denticulado dentada
laminar lisa
Navicular dentada
Fasciculado -
Denticulados
2-rayos dentada
Ramosos
2-rayos lisa
Ramoso lisa
Ramosos
multi-rayos
(más de 5) lisa
Ramosos
2-rayos lisa
Simple dentada
TCASB LAS Ns A
CARACTERISTICAS DE LOS TRICOMAS
Largo Desvia. Ancho Desv. ESTIPITE
promedie standard promedio standard Largo Áncho
4.22 1.10 0.047 0.00025 — —
4.10 0.28 4.02 0.03 — —
3.06 0.40 0.022 0.00030 — —
0.81 0.04 0.08 0.00263 0.032 0.080
2.73 0.28 0.025 0.00030 1.0 0.064
6.20 0.82 0.041 0.00065 — —
5.54 0.33 0.048 0.00034 — o
5.01 0.30 0.044 0.00054 — —
1.94 0,29 0.040 0.00073 3.20 0.80
0.42 0.01 0.017 0.00066 0.032 0.032
1,13 0.11 0.082 0.00271 ¿= sd
2.60 0.09 0.016 0.00035 0.80 0.016
0.49 0.07 0.030 0.00076 0.40 0.32
4.26 0.21 1.52 0.01 patos
Consti-
tución
unicelul.
unicelul,
unicelul.
unicelul.
unicelul.
unicelul.
unicelul.
unicelul.
unicelul,
unicelul.
pluricelalar
unicelul,
unicelul.
unicelul.
Células
anexas del
indumente
3-6
G. de Nordenflycht INDUMENTO DE CRUCIFERAE 35
DISCUSION Y CONCLUSIONES
El intento por aplicar en forma exclusiva el tricoma como caracterís-
tica morfológica en una clave taxonómica, se encuentra visiblemente limi-
tado por la presencia de especies glabras; sin embargo, es posible identi-
ficar las especies de surrerficie pilosa. Esta separación en base a la morfo-
logía de los tricomas foliares en aquellas especies que los presentan, cons-
tituye una ventaja significativa en algunos aspectos. Por tratarse de ws-
tructuras de forma constante no están afectadas por el almacenamiento,
además su pequeño tamaño y la constitución de su superficie, permitan
la determinación de especies disponiendo tan sólo de un trozo de hoja.
Esto podría tener importancia; por *jemplo, en el análisis de contenido
estomacal de especies herbívoras.
Por otra parte la existencia de dos tipos de tricomas en algunas
especies (v. gr. Capsella bursa-pastoris (L) Medik) no es una dificultad
para reconveerlos y separarlos; en el único caso estudiado son fácilmente
distinguibles y no se confunden con otros.
La clave presentada un este trabajo tiene un carácter netamente ten-
tativo y como tal debe ser tomada. Esto significa que a futuro pued: ser
corregida, ampliada o rectificada, variando en su ubicación las distintas
especies.
El ctudio preliminar ivalizado y la clave que proponemos nos ha
permitido considerar como una necesidad el incluir en otras investigacio-
nes futuras, todas las especies que se encuentran incorporadas a las Cru-
ciferar chilenas, y así poder tener una completa visión de conjunto que
permita enmarcar el real valor taxonómico que presentan los tricomas.
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ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Fig. 1. Capsella bursa-pastoris. Pelo estrellado. 5-rayos
Fig. 2. Capsella bursa-pastoris. Pelo estrellado. 4-rayos.
. Mancoa hispida. Pelo fasciculado-denticulado. Largo estípite.
2
Fig. 3. Descourainia arodiifolia. Pelo ramoso. Con estípite.
Fig. 4
5
Fig. 5. Iberis amara. Pelo laminar.
Fig. 6. Draba gilliesii. Pelo fasciculado. 3-rayos.
Fig. 7. Draba gilliesii. Pelo fasciculado. 4-rayos.
. Mathewsia foliosa. Pelo ramoso. Con estípite.
ota: El pelo continúa diviéndose en dos rayos; uno de los cuales es
visiblemente más largo que el otro.
6
7
Fig. 8. Cardaria draba. Pelo denticulado. Curvos.
Fig. 9
N
Fig. 10. Capsella bursa-pastoris. Pelo simple.
Fig. 11. Matthiola annua. Pelo ramoso.
Fig..12. Lobularia maritima. Pelo navicular.
Fig. 13. Hexaptera pinnatifida. Pelo denticulado. Sésil.
Fig. 14. Sissymbrium officinale. Tabicado.
Fig. 15. Brassica campestris. Subsésil.
Fig. 16. Mathewsia nivea. Pelo pluricelular con vacuolas.
Nota: La flecha indica que el pelo se continúa fuera del campo visual
en la misma forma ramificada.
Fig. 17. Schizopetalum gayanum. Pelo ramoso. Con estípite.
G. de Nordenflycht INDUMENTO DE CRUCIFERAE
Sr
a
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E A
PE
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N
Valparaíso, Chile 39
LA VEGETACION BOSCOSA DE LA COSTA Y EL VALLE CENTRAL
DE LA PROVINCIA DE LLANQUIHUE (X REGION) *
ITALO SEREY E. ** y RODRIGO VILLASEÑOR **
ABSTRACT: The vegetation of some discountinuos forest of the Coastal moun-
tains and Central Plain at Puerto Varas latitude, (41* 30* Lat. S.) is analized with
the phytosociological Braun-Blanquet System. Results are compared with the forest
Vegetation of Vicente Pérez Rosales National Park. Distributional and physiogno-
mical characteristic of associations are described and discussed.
INTRODUCCION
La vegetación boscosa rn nuestro país ha sido explotada intensamente
desde la Colonia, y en la actualidad existen extensas áreas donde hay
pocos bosques naturales.
En la zona sur de la Cordillera de la Costa y el Valle Longitudinal
sólo s=2 encuentran restos de las formaciones boscosas originales, para las
cuales se desconoce su composición florística y estructura.
En la vegetación de la Cordillera de lo Andes, los aspectos ya citados
son más conocidos (Oberdurfer, 1960; Schmithisen, 1965; Villagrán et
al., 1974).
Nuestro trabajo tien: por objeto conocer a la latitud de Puerto Varas
(412 20” aprox.), la estructura vertical y composición de las comunidades
boscosas que se encuentran en la Cordillera de la Costa y el Valle Lon-
gitudinal, para establecer les diferencias locales con las ya estudiadas y
su distribución regional, con el objeto de aportar información y mejorar
los sistemas ya propuestos.
METODO
Se realizó un transecto desde la Cordillera de la Costa hasta la Cor-
dillera dr los Andes, en dirección aproximada Oeste-Este.
Se hicieron 8 censos de vegetación boscosa, desde Punta Estaquilla,
en la Costa, hasta los faldeos del Volcán Osorno, entre los 150 y 600
m de altitud. Las superficies de las parcelas están comprendidas entre 300
y 400 m? y fueron hechas según el método de Braun-Blanquet (1964) y
Ellemberg (1956).
En el análisis se discuten las diferencias de cada ustrato de las aso-
ciaciones muestreadas, con la información existente.
* Proyecto de Investigaciones ecológicas en el Parque Nacional Vícente Pérez Ro-
sales, financiado por la Oficina Técnica de Desarrollo Científico y Creación Artís-
tica de la Universidad de Chile.
** Laboratorio de Ecología y Laboratorio de Botánica, Facultad de Metemáticas y
Ciencias Naturales, Universidad de Chile de Valparaíso, Casilla 130-V.
40 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
RESULTADO Y DISCUSION
En el área muestreada se pueden reconocer las siguientes unidades
vegetacionales: Temo-Myrceugentetum-txsuccae, que corresponde a la for-
mación de Bosque Ribereño; Nothofago-Perseetum y Dombeyo Eucryphie-
tum Pernettyetosum, ambas de la formación del Bosque Laurifolio Valdi-
viano; Pilgerodendronetum y Fitzroyetum, pertenecientes al Bosque Lau-
rifolio Nordpatagónico.
1. Temo Myrceugenietum exsuccae. Oberdorfer, 1960.
Esta asociación fue encontrada en la Cordillera de la Costa, en lade-
ras de exposición Oeste, en suelos de alta humedad a 150 m de altitud, y
en lugares llanos a 300 m de altitud, en suelos mal drenados. En el Parque
Nacional Vicente Pérez Rosales (P.N.V.P.R.) se encuentra también en
áreas pantanosas, pero en las proximidades de los rícse. La hojarasca
presenta una cobertura de un 60%, mientras que en el P.N.V.P.R. alcanza
hasta un 900%.
El estrato arbóreo alcanza en nuestras parcelas hasta 25 y 30 m, en
el P.N.V.P.R. sólo llega a 25 m. La especie dominante es Myrceugenia
exsuccae (Petra), y es la de mayor altura. Laurelia philippiana (Trepa),
Eucryphia cordifolia (Ulmo), Amomyrtus meli (Meli), Drimys winteri
(Canelo) son abundantzs y están acompañadas por Myrceugenia planipes
(Pitra), Weinmannia trichosperma (Tineo) y Pseudopanax laetevirens
(Sauco). En este estrato en el P.N.V.P.R. no se encuentra Tepa, Tineo y
Sauco.
El estrato arbustivo tiene alturas comprendidas entre 1 y 4 m y es
más alto y rico en especies que en el P.N.V.P.R., donde sólo tiene 1 m. La
cobertura es más alta y con valores de 30-40%, mientras que en el
P.N.V.P.R. alcanza sólo 59. Aquí las especies más importantes son: Rha-
phithamnus spinosus (Espino blanco), Myrceugenella apiculata (Arra-
yán), Chusquea quila (Quila), y el helecho Lophosoria quadripinnata (Pal-
mita).
Entre las hierbas del estrato inferior se encuentran: Uncinia phleoi-
des y los helechos Blechnum blechnoides e Hipolepis rugosula.
Las lianas Cissus striata y Boquila trifoliata están ausentes, pero se
encuentran dos especies epífitas, comunes de la aociación Lapagerio-Aex-
toxriconetum, como son Fascicularia bicolor y Elitropus chilensis. Ambas
especies no indicadas como componentes de la asociación en Oberdorfer
(1960) ni por Villagrán et al. (1974).
Los resultadcs de estos censos muestran la existencia de diferencias
en la estructura vertical, cobertura y composición de especies en relación
con lo registrado para el P.N.V.P.R, La localidad de Estaquilla, constituye
la distribución más austral de la asociación en la Cordillera de la Costa.
2. Nothofago-Perseetum Oberdorfer y Schmithisen, 1960.
Esta asociación se encontró en el Valle Central, en la ribera sur del
Lago Llanquihue en suelos de alta humedad, bien drenados, en un lugar
I, Serey y R. Villaseñor VEGETACION BOSCOSA DE LLANQUIHUE 41
llano y con un tapiz de hojarasca que alcanza al 100% de la suprerfiice.
El estrato arbóreo está constituido por árboles de Persea lingue
(Lingue), Nothofagus dombeyi (Coigiie), Amomyrtus luma (Luma) y
Gevuina avellana (Avellano), que llegan a tener hasta 25 m de alto,
como especies dominantes, acompañados de Amomyrtus meli (Meli), Lo-
matía ferruginea (Fuingue), Crinodendron hookerianum (Patagua) y
Myrceugenia exsucca. Este estrato presenta coberturas comprendidas en-
entre 60 y 70%. Los valores de altura y cobertura son menores que log
observados por Oberdorfer (1960).
El estrato arbustivo está formado por las especies Chusquea quila,
Muyrceugenella apiculata, Rhaphithamnus spinosus y renovales de las es-
pecies arbóreas, alcanza una altura de 2-3 m y tiene una cokertura de
60%. En las observaciones de Oberdorfer no se indican valores de cober-
tura y altura para este estrato ni para «el siguiente. El estrato herbáceo
tiene una altura de 10-20 cm y está compuesto por helechca de las espe-
cies Blechnum auriculatum y Dryopteris spectabilis, y plántulas de los res-
tratos superiores. Los epífitos y lianas son abundantes y por su colorido
dan una fisionomía particular al bosque. Entre los primeros se encuen-
tran Sarmienta repens, Hymenophyllum pectinatum e H. caudiculatunm;
entre las lianas están Mitraria coccinea. y Luzuriaga radicans.
En la descripción de la asociación hecha por Oberdorfer (1960) se
indica como especie dominante al roble (Nothofagus obliqua) acompaña-
do dr laurel (Laurelia sempervirens); en este censo se observó como do-
minantes al Lingue, al Coigile, a la Luma y al Avellano, faltando en su
composición el Roble y el Laurel, este último se observó en las proximida-
des del censo. Estas diferancias de composición y estructura pueden expli-
carse por la alteración antrópica que presenta este bosque. .
Esta asociación no ha sido mencionada para el área del P.N.V.P.R.
La localidad donde se realizó +1 censo corresponde al límite sur de su dis-
tribución.
3. Dombeyo-Eucryphietum Pernettyetosum Oberdorfer (1960).
Esta asociación fue encontrada en los faldecs de exposición sur del
Volcán Osorno y en la ribera sur del Lago Llanquihue en Ensenada. La
composición florística y la estructura de estos bosques corresponden a la
descrita por Villagrán et al. (1974).
4. Fitzroyetum Oberdorfer (1960).
Esta asociación se encontró en la cordillera de la Costa, en lomas
suaves, con suelos pantanosos, con evidencias claras de alteración antró-
pica, con poca hojarasca.
El estrato arbóreo está constituido por Podocarpus nubigenus (Ma-
ñío), Nothofagus dombeyi, Drimys winteri y Fitzroya supressoides (Aler-
ce), la altura está entre los 15 y 20 m, mientras que en P.N.V.P.R. entre
35-45 m, con cobrrturas de 80% en tanto que en el P.N.V.P.R. sólo alcan-
zan entre 30-559; las especies acompañantes son Eucryphia cordifola,
Amomyrtus meli. Además se presentan Gevuina avellana, Caldcluvia pani-
42 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
culata, Crinodendron hookerianum y Nothofugus nitida, que no se encuen-
tran en el P.N.V.P.R.
El estrato arbustivo formado por individuos jóvenes de las especies
arbóreas y Tepualia stipularis, Ugni molinae, Myrceugenia parviflora, Per-
nettya furiens y Chusquea quila, tiene una cobertura de un 70% y una
AVR
IN
ES
> al
ql
ME
O Temo-Myrceugenietum exsuccae
A Fitzroyetum
O Pilgerodendronetum [_]Nueva Psallgna
Figura 1. Distribución de las asociaciones en el área del Bosque Laurifolio
Valdiviano.
l. Serey y R. Villaseñor VEGETACION BOSCOSA DE LLANQUIHUE 43
altura entre 3-5 m, a diferencia del P.N.V.P.R. donde varía entre 0,5 y 6
m. El estrato herbáceo con Nertera depressa y Blechnum magellanica, con
una cobertura de hasta 50%; y gran cantidad de musgos (80% de cober-
tura).
Los epífitos son Luzuriaga radicans, Fascicularia bicolor, ausentes en
el P.N.V.P.R., y Nitraria coccinea, Capsidium valdivanum, Astherantera,
ovata. Hymenophyllum cruentum e H. pectinatum.
Esta asociación no era conocida para la localidad de Estaquilla, en la
Cordillera de la Costa. Fig. 1.
5. Pilgerodendronetum Oberdorfer (1960).
En el área estudiada esta asociación se encontró en el Valle Central,
en lugares llanos d:2 suelos pantanosos, con abundancia de musgos y escasa
hojarasca.
El estrato arbóreo alcanza una altura de 20 m y está constituido por
árboles de Podocarpus nubigenus, Drimys winteri, Gevuina avellana, No-
thofagus dombeyi, N. nitida, Eucryphia cordifolia, Caldcluvia paniculata,
Amomyrtus luma. Este estrato alcanza una cobertura enti?2 60 y 70%. En
el P.N.V.P.R. no se encuentran Caldcluvia paniculata, Nothofagus nitida.
Los arbustos están representados por Rhaphithamnus spinosus, Te-
pualia stipularis, Embothrium coccineum, Myrteola barneoudii, Chusquea
quila y renovables de las especies arbóreas y alcanzan una cobertura de
hasta un 609%.
El estrato herbáceo está formado por gran número de hierbas y con
un 40% de cobertura. Entre las especies más abundantes están Blechnism
chilense y B. penna-marina, Hedeocharis sy. y otres Ciperáceas. Además,
se encuentran Samola latifolium, Nertera depressa y Centaurion chilensis.
Entre las lianas están Hydrdangea integerrima, ausente =n el P.N.V.-
P.R., y entre las epífitas Luzuriaga radicans y Mitraria coccinea.
Esta asociación, alterada por acción antrópica presenta algunas dife-
rencias importantes respecto a la asociación descrita por Oberdorfer en
relación a la composición que presenta en el P.N.V.P.R. Posee varias espe-
cies de otras asociaciones y falta Pilgerodendron uvifera; no obstante, la
lista florística corresponde al Pilgerodendronetum.
En la distribución de la asociación mo habían sido mencionadas las
localidades cercanas a Puerto Montt (Fig. 1).
Debido a las similitudes en la composición y la variabilidad de las
asociaciones dentro de su rango de distribución geográfica, sería conve-
niente realizar un análisis de correspondencias para aclarar las relaciones
que existen entre las asociaciones de la clase Wintero-Nothofagetea.
CONCLUSIONES
1. Las asociaciones Temo-Myrceugeniectum exsccae, Dombeyo-Eucry-
phieutm Pernettyetosum, Fiteroyetum y Pilgerodendronetum presentan di-
ferencias en altura, composición de especies y abundancia, para los diver-
sos estratos, con respecto a las vbservadas para el área del P.N.V.P.R.
44 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
2. Se amplía la distribución de las Asociaciones Temo-Myrceugenietum
exsuccae y Fiteroyetum para la Cordillera de la Costa de Llanquihue. Se
indican nuevas localidades para la asociación Pilgerodendronetum.
BIBLIOGRAFIA
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boscosa del Parque Nacional Vicente Pérez Rosales”. Anñ Mus. Hist. Nat.
de Valparaíso 7: 125-154.
Valparaíso, Chile 45
NUEVOS GENEROS Y ESPECIES DE COLLETINI
SUDAMERICANOS
Primera parte
HAROLDO TORO y VICTOR CABEZAS *
ABSTRACT: Two new genera of Colletini are described and figured in this
paper: Hemicotelles, new genus, with two species, H. ruizii (Herbst, 1923) of the
semiarid region of Chile and H. magallanes n. sp. of the rainy area of Chile and
Argentina. Mourecotelles, new genus, including M. spinolae (Crawford € Titus 1904);
M. enodis (Vachal 1909); M. mixta n. sp., M. chillan n. sp., M. moldenkei n. sp. and
M. puelche n. sp. from Chile and, M. triciliatus n. sp. from Argentina. A key for
the genera and species is given.
En la tribu Col'.¿ini se pueden diferenciar en el extremo sur de
América por lo menos dos grupos de abejas que presentan características
propias, claramente distintas de Colletes, que nos han inducido a sepa-
rarlas en géneros diferentes.
La posición sistemática de algunas de las especies de los nuevos
géneros se pirsentaba dudcsa y ya había sido discutida anteriormente;
Toro (1973) reconoce a Lonchopria ruizii Herbst 1923 como Colletínae
separándola del género Leioproctus, donde había sido ubicada por Miche-
ner (1965).
La visita de uno de los autores (Toro) a aleunos Museos y Univer-
sidades norteamericanas, nc3 ha permitido reunir abundante material de
estos grupos y reconocer la existencia de dos nuevos géneros: Hemicotelles
n. gen. con dos especias: H. ruizii (Herbst 1923) de la zona semiárida de
Chile y una especie dr la zona lluviosa chileno-argentina que se describe
en este trabajo. Mourecotelles n. gen, que incluye M. spinolae (Crawford
$ Titus 1904), M. enodis (Vachal 1909) y nuevas especies aquí descritas
que se distribuyen entre el sur del Perú y Bolivia hasta el extremo sur de
Chile y Argentina.
La mayor parte del material estudiado se encuentra en la colección
de uno de los autores (Toro), el material de paratipos será distribuidos en
diferentes colecciones de acuerdo a lo que se indica en la descripción de
cada especie.
Agradecemos a las siguientes personas por habernos permitido estudiar
el material de las colecciones a su cargo: Dr. J. Rozen del American Mu-
seum of Natural History; Dr. Eickwort de la Univ. de Cornell; Dr. J. Moure
* Laboratorio de Zoología Universidad Católica de Valparaíso, Chile.
Este trabajo ha sido financiado, por International Biological Program a través
del Dr. Moldenke, American Museum of Natural History y Dirección General de
Investigaciones Científicas de la Universidad Católica de Valparaíso.
Presentado al Tercer Congreso Latinoamericano de Entomología, Buenos Aires 1975
46 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
da la Univ. de Paraná; Dr. Michener de la Univ. de Kansas; Dr. Molden-
ke de la Univ. de California; Srta. Fresia Rojas del Museo Nacional de
Historia Natural de Chile; Dr. Artigas de la Univ. de Concepción; Dr.
Viana del Museo Nacional de Buenos Aires. Sr. J. Solervicvans de la Univ.
de Chile de Valparaíso; Dr. Hurd del Smithsonian Museum.
En forma muy especial al Dr. Michener por sus valiosas sugerencias
y al Dr. Moldenktr por toda la ayuda prestada.
Los tipos de Friese fueron examinados graciaz a la gentileza del
Dr. Koenigsmann del Zoologishes Museum Berlín D. D. R., que los envió
para nuestro estudio; 2] material de Vachal de C. plantaris fue conocido
gracias a la gentileza de Mme. Kelner-Pillault del Museo de París.
Agradecemcs también al señor E. Peralta, por la confección de los
dibujos que acompañan al texto.
Tribu Colletin:
Clave de Géneros:
1.—S£rgunda recurrente mo incurvada; propodeo sin surco basal, o
cuando está presente apenas marcado y débilmente estriado .... 2
—Segunda recurrente incurvada; propodeo con surco basal bien
marcado y Testriado a a o ii Gen Colletes.
2.—Propodro con surco basal apenas marcado; en machos mandíbulas
con ápice del diente externo no incurvado; hembras con diente in-
terno formando ángulo de 15* con el externo ....Gen Hemicotelles.
—Propodro sin surco basal; en machos mandíbula con diente exter-
mo incurvado; hembras con diente interno en ángulo casi recto ...
A a A. AREA Gen. Mourecotelles.
HEMICOTELLES n. gen.
Tipo: Lonchopria ruizii Herbst 1923
El género incluye sólo dos especies de tamaño mrvdiano que muestran
relaciones estrechas con Colletes en su aspecto general y estructura de la
gvenitalia de los machos.
Se las puede diferenciar con facilidad de Colletes por presentar la
segunda vena recurrente no incurvada, el surco basal del triángulo pro-
podeal poco diferenciado y sin estrías longitudinales; hembras con garras
no bifurcadas.
Clípeo suavemente convexo, de lados levemente divergentes por abajo
de la impresión tentorial. Distancia drsde el sector transversal de la sutura
epistomal hasta el alvéolo antenal algo mayor qu: la mitad de la distan-
cia hasta la impresión tentorial. Primer segmento del flagelo más de dos
veces el largo del pedicelo, en hembras aproximadamente dos o más veces
el largo del segundo. Labro elipsoidal, más de dos veces más ancho que
largo, con margen distal escotado. En machos, mandíbulas algo más de
dos veces más largas que su ancho medido en la parte media, en hembras
casi cuatro veces más largas; diente interno algo menor que la mitad del
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 47
del largo externo. Triángulo propodeal con surco transversal ancho poco
marcado, casi sin estrías. Primera célula submarginal aproximadamente
tres o más de tres veces más larga que su ancho mayor; segunda vena
recurrente no recurvada. In hembras garras no bifurcadas y placa pigi-
dial radimentaria. Gonocoxitos con.surco dorsal en su tercio distal, gonos-
tili laminares sin expansión interna basal; volsellas con cuspis y digitus
subiguales en longitud.
Distribución: Chile y Argentina.
Especies incluidas:
Hemicotelles ruiz (Herbst, 1923)
Hemicotelles magallanes n Sp.
“Género Hemicotelles: Clave para especies.
Li=MAchOs ri A A A AS Z
— Hembras vanas sl E a A RI 3
2.—Primer segmento del ase menor que el vete clípeo con
puntos alargados; pilosidad del tórax anaranjada ......... H. ruizit
—Primer segmento del flagelo aproximadamente igual que el se-
eundo; clípeo con puntos redendeados; pilosidad del tórax blan-
COJBUCIO ECU go O A H. magallanes
3.—Labro con surco medio bien marcado en tubérculo central; pilo-
sidad del tórax rojo anaranjado .......... A E > E
—Labro con surco medio no marzado en tubérculo central; pilosi-
sidad del tórax planeó Sucio «to e H. magallanes
- HEMICOTELLES RUIZIT
(Figuras 1-5)
Lonchopria ruizii Herbst, 1923 Rev. Chi. Hist. Nat. 27: 75 Ruiz, 1945
Rev. Chil. Flist. Nat. 47: 229. Toro, 1973 Am. Mus. Hist. Nat..
Valp30. 7: 145.
Leioproctus vruizii Michener, 1985 Bul. Am. Mus. Nat. His. 130: 41.
Macho: Longitud total aproximada 12 mm. Ancho de cabeza 3.8
mm. Largo ala anterior 7.9 mm. di
Coloración: Negra con ápice de mandíbulas caoba rojizo; antenas
merrón casi negro; tégulas y tarsitcs distales caoba amarillento; vena-
ción alar marrón salvo la Sc. negra; alas hialinas. Polisidad: Genas con
pilcsidad casi blanca; frente y tórax con pelos amarillo anaranjado y algu-
nos negros en las paraoculares, genas y vértice; alas con abundante pilo-
sidad entim las venas. Primer tergo metasómico con pilosidad larga blan-
co amarillenta, más corta en el sesundo y tercero, con algunos pelos ne-
gros entremezcladcx3 princinalmente en el tercero; una banda «> peles
blancos cortos en el mergen distal de tergos 1 a 3; tergos distales con"
pilosidad negra, estornos con pilesidad clara, más obscura caudalmente,
larga en el primero y una línea de pelos blancos dintales en esternos 2ad4.
Puntucción: Clípeo con puntos más bien fruesos, algo alargados con in-
tervalos menores que sus diámetros, salvo en áreas laterales que es liso;
48 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
área malar con puntuación pequeña, alargada y espaciada. Tórax con
puntuación bin marcada medianamente densa, más espaciada en disco
del escudo, parte media anterior de escutelv y área hipoepimeral. Puntos
densos y finos en metasoma. Estructuras: Cabeza más ancha que larga
(9.9 : 7.9) ancho del ojo (en vista latural) casi la mitad de su largo y
poco menos que el largo malar. (2.2 : 4.6 : 2.5). Línea frontal carinifor-
me con ápice elevado. Primer segmento del flagelo menor que el segundo
(1.0 : 1.8). Labro hinchado al centro, borde distal emarginado mesal-
mente. Pronoto con bordr dorsal no cariniforme y ángulos laterales re-
dondeados. Propodeo con amplio surco basal sin estrías Ingitudinales.
Patas sin modificaciones; basitarsos posteriores aproximadamente tres
veces más largos que anchos (3.2 : 1.0). Cápsula genital y esternos aso-
ciados como en figura.
Hembra: Longitud total aproximada 13.5 mm. Ancho de cabeza
4.5 mm. Largo ala anterior 10.0 mm. Coloración: Como en el macho. Pilo-
sidad: Como «en el macho, pero escopa femoral con pelos claros. Puntua-
ción: Como en el macho, pero en el clíneo puntos más alargados y estrías
distales; las áreas laterales lisas muy restringidas. Estructuras: Como en
el macho, pero: Cabeza más ancha que larga (11 : 8.2). Ancho del ojo
(en vista lateral) menor que la mitad del largo y poco mayor que el
largo malar (2.6 : 5.4 : 2.2). Clípeo con un surco medio entre dos suaves
protuberancias basales. Largo del primer segmento del flagelo más de dos
veces su ancho menor y casi dcs veces el largo del segundo (1.3 : 0,45 :
0.7). Labro protuberante al centro con un corto surco medio, borde distal
fuertemente emarginado al centro. Foveas faciales más de dos veces más
largas que anchas (1.9 : 0.8). Propodeo con un amplio surco basal, poco
marcado en otros ejemplares. Basitarsos posteriores poco más dre dos
veces más largos que anchos (3.7 : 1.6); garras con uñas simples. Me-
tasoma con placa pigidial rudimentaria.
Material estudiado: 1 macho, Coquimbo, Las Breas, 29-X-1957 (Wa-
genknecht col.). 1 macho, Coquimbo, Vicuña, IX-1968 (De la Hoz, col.).
1 hembra, Coquimbo, Incahuasi, 1X-1968 (Muntenegro, col.).
HEMICOTELLES MAGALLANES n. sp.
(Figuras 6-10)
Hemaicotelles magallanes se aproxima a H. ruizii; difiere por la pilo-
sidad blanquecina; en machos puntuación del clípeo no alargada. Primer
segmento del flagelo poco mayor que el segundo. En hembras primer seg-
mento del flagelo antenal más de tres veces más largo que su ancho
menor.
Macho: Longitud total aproximada 12 mm. Ancho de cabeza 3.5
mm. Largo ala anterior 7.8 mm.
Coloración: Negra con los dos tercios distales de las mandíbulas, clípeo
y labro marrón rojizo. Venación marrón, salvo. Sc. negra. Alas hialinas.
Antenas marrón casi negro. Pilosidad: Cabeza y tórax con pelos blanco
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 49
sucio, con algunos de ápice negro vecino a las órbitas. Patas con pelos
blanco amarillento y marrón claro distalmente. Primer a tercer tergo:
metasómico con pelos blancos, largos; segundo y bercero con pelos cortos
y algunos largos entremezclados en el segundo; débil banda blanca en
el margen distal. Cuarto con pilosidad marrón clara. Pelos marrón casi
negros en quinto y sexto. Esternos con pilosidad blanco amarillento, muy
cortos un el sexto, entremezclados con pelos marrón. Puntuación: Clípeo
hacia la línea media con puntos de regular tamaño, con espacios algo me-
nos que sus diámetros, áreas laterales casi lisas, Area malar con puntos
escasos alargados. Resto de la cabeza con puntuación pequeña y densa,
poco marcada en área ocelorbital. Tórax con puntuación bien marcada,
relativamente densa en el escudo, muy densa en postescutelo y pleuras.
Metasoma con puntuación fina y densa. Estructuras: Cabeza más ancha
que larga (8.7 : 7.1). Ancho del ojo casi igual a la mitad de su largo
y aproximadamente tan ancho como el largo malar (2.0 : 3.9 : 2.0). Línea
frontal cariniforme con ápice elevado. Primer segmento del flagelo leve-
mente menor que ul segundo (0.8 : 0.9). Labro con tubérculo medio con
una suave depresión central, borde distal escotado en la línea media.
Borde dorsal del pronoto levemente cariniforme y ángulos laterales re-
dondeados. Triángulo propodeal con amplio surco basal liso y leve carina
media. Patas sin mdificaciones. Tibias posteriores poco más de cuatro
veces más largas que anchas (5.5 : 1.8). Basitarso posteriores poco más
de tres veces más largos que anchos (3.0 : 0.9). Cápsula genital y ester-
nos asociados como en figura.
Hembra: Longitud total aproximada 14 mm. Ancho de cabeza
4.1 mm. Largo ala anterior 9.9 mm.
Coloración: Semejante al macho, pero con una mancha negra en la
base de los dientes; últimos cuatro artículos drl1 flagelo marrón amari-
llento. Pilosidad: Como en el macho, aunque más densa y con bandas blan-
cas bien definidas en margen distal de esternos metasómicos 1-3, muy
débil en +1 cuarto. Escopa blanco amarillento. Pidntuación: Como en el
macho, pero: el clípeo con puntos densos y algunos alargados, dejando
pequeñas áreas laterales lisas. Area malar con puntuación más densa.
Estructuras: Cabeza más ancha que larga (10.4 : 7.9). Ancho del ojo
cani la mitad del largo y poco mayor que el largo malar (2.4 : 5.0 : 2.0).
Clípeo con surco medio entre dos suaves protuberancias basales. Labro
protuberante al centro con un débil surco medio, margen distal emargi-
nado. Foveas faciales muy bien marcadas y más de dos veces más largas
que anchas (1.8 : 0.8). Primer segmento del flagelo dos veces el largo
del segundo (1.3 : 0.6). Triángulo propodeal con surco basal amplio,
línea media no marcada. Basitarso pcsterioras poco más de dos veces
más largos que anchos (3.8 : 1.6). Garras con uñas simples. Metasoma
sin modificaciones.
Holotipo: Macho, Argentina, Santa Cruz, Los Antiguos, 20-X1-1966
(Irwin-Schlinger, col.). Allotipo: Chile, Aisén, Chile Chico, 21-XI-1966
(Irwin-Schlinger, col.). En colección Toro. Paratipo: 1 Macho, Argentina,
50 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Santa Cruz, Los Antigues, 20-XI-1966 (Irwin-Schlinger, col.). En colec-
ción California Academy of Sciences.
MOURECOTELLES ny. gen.
Tipo: Mourecotelles mixta n. sp.
Abejas de tamaño mediano, próximas a Colletes y a Hemicotelles, de
las primeras se difeivncian con facilidad por el clípeo aplanado, la se-
gunda vena recurrente recta y el triángulo propodeal sin surco basal. De
Hemicotelles se separan por la forma de las mandíbulas, triángulo pro-
podeal sin surco y en las hembras las garras bifurcadas.
Clípeo más bien aplanado suavemente convexo, de lados sub-paralelos
por abajo de la impresión tentorial. Distancia desde el sector transversal
de la sutura epistomal hasta el alvéolo antenal algo mayor que la mitad
de la distancia hasta la impresión tentorial. En hembras primer segmento
del flagelo aproximadamente dos o más veces el largo del segundo. Labro
cuadrangular, aproximadamente dos veces más largo que ancho, con
borde distal casi recto. En machos mandíbulas aproximadamente dos ve-
ces más largas que anchas (medido en la parte media), en hembras poco
más de dos veces; diente interno sobrepasa la mitad del largo del externo,
truncado en las hembras. Triángulo propodeal sin surco basal transversal.
Primera célula submarginal poco más de dcs veces más larga que su
ancho mayor; segunda vena recurrente no recurvada. En hembras garras
bifurcadas y placa pigidial totalmente ausente. Gonocoxitos sin surco dor-
sal en su tercio distal; gonostili separados dorsalmente del ápice del gono-
coxito por un fuerte surco y continuados basalmente en un fuerte pro-
ceso interno. Vosellas con cuspis apreciablemente más reducido que el
digitus.
Distribución: Cono sur de Sudamérica (Bolivia, Chile, Argentina).
Especies incluidas: M. mixta n. sp., M. chillan n. sp., M. moldenkei
n sp., M. triciliatus n. sp. M. puelche n. sp., M. boliviensis m. sp., M. spi-
nolae (Crawford d: Titus), M. enodis (Vachal 1909).
Género Mourecotelles: Clave para especies
E Machos ie lea ces oi es Era e do TR ri 2
—Hembraste ma 40 a or e
2.—Primera célula cubmarginal munos de dos veces el largo de la
tercera; segundo tergo metasómico con pelos semejantes al pri-
A A O O e 3
—Primera célula submarginal aproximadamente dos o más veces
el largo de la tercera; segundo tergo metasómico con pelos cortos 4
3.—Largo malar aproximadamente tres cuartos del largo del ojo; an-
cho del ojo poco menos de la mitad de su largo ....... M. spinolae
—Largo malar menos de tres cuartos del largo del ojo; ancho del
ojo sobrepasa la mitad de su largo ................ M. boliviensis
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 51
4.—Clípeo microestriado sólo en margen distal ................ 5
—Clípeo micrcestriado en su mayor parte o débilmente marcado
eí-la mea meli a La a NS 6
5.—Ancho del ojo menor que el largo malar; labro hinchado con dé-
biles estrías longitudinales; puntuación próxima a sutura escuto
escutelar con intervalc3 menores que sus diámetros .. M. moldenket
—Ancho dr]l ojo aproximadamente igual al largo malar; labro con
fuertes estrías longitudinales; puntuación próxima a la sutura
escuto escutelar con intervalos mayores que sus diámetros M. enodis
6.—Con bandas blancas bien definidas en margen distal de primero
a tercer tergo metasómico y poco menos marcada en cuarto y
QUIBLO REO ER IA IAEA M. triciliatus
—Con banda blanca poco definida y ausente en margen distal de
105. Fter os MEtasomMicos or mM
7.—Bandas blancas poco definidas en margen distal dr tergos me-
tasómicos primero a cuarto; labro con surco medio poco mar-
cado A E IA AN A SAA M. mixta
—Bandas blancas ausentes; labro con lóbulo central o fuertes sur-
cos longitudinales: AO a A 8
8.—Clípeo microestriado en su mayor parte; labro con fuertes sur-
cosvlongitudinales” ia o a M. puelche
—Clípeo microestriado en la línea media; labro con lóbulo pro-
minente en la línea media ...........o .oooooooo ooo... M. chillan
9.—Ancho del ojo mayor que largo malar ......... ........... 11
—Ancho del ojo aproximadamente igual al largo malar ........ 10
10.—Bandas blancas bien definidas de primero a cuarto tergo me-
tasómico; ancho del ojo mayor que la mitad de su largo M. boliviensis
Bandas blancas poco definidas de primero a tercer tergo meta-
sómico; ancho del ojo igual a la mitad del largo ...... M. moldenkei
11.—Ancho malar medido «en la base de la mandíbula sobrepasa los
tres cuartos -dezsu lareo ia. dba cla te M. chillan
—Ancho malar medido en la base de la mandíbula aproximada-
mente. tres+cúuartos. de ¡su largo ma e a 12
12.—Con bandas blancas bien definidas en margen distal de prime-
ro a tercer bergo metasómico; ancho del ojo mayor que la mitad
AT a as ada M. triciliatus
—Con bandas blancas muy poco definidas en margen distal de
tergos metasómicos; ancho del ojo menor que la mitad de su
E pa aa A asa o ... M. mixta
52 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
MOURECOTELLES MIXTA n. sp.
(Figuras 11-15)
Macho: Longitud total aproximada 8 mm. Ancho de cabeza 3.1
mm. Largo ala anterior 6.1 mm.
Coloración: Negra con mandíbulas caoba hacia el ápice; flagelo an-
tenal y patas marrón. Alas ligeramente ahumadas con venación casi ne-
era. Pilosidad: En general amarillo sucio, más blanco en metasoma, algu-
nos pelos con eje negro en cabeza y tórax. Arras paraoculares y vértice
con algunos pelos megros. Primer tergo metasómico con pelos largcs, cor-
tos y finos en el resto. Obscuros en los últimos; una débil banda angosta
no bien definida en tergos 1-IV, mejor definidas en esterncs 1I-V. Puntua-
ción: Clípeo con finas estrías longitudinales excepto en márgenes latera-
les, puntuación escasa. Area malar con puntos alargados; resto de la
cabeza con puntuación densa y birn marcada. Tórax con intervalca ma-
yores que los puntos, salvo escutelo con puntuación densa. Propoden liso.
Metasoma con puntos pequeños e intervalos semejantes a sus diámetros.
Estructuras: Cabeza más ancha que larga (7.8 : 6.1). Clípeo recto en
vista lateral. Ancho del ojo aproximadamente la mitad de su largo y tan
ancho como el largo malar (2.1 : 4.1 : 2.0). Línea frontal bajo el ocelo
en carina débil, en un surco apreciablemente más largo que el diámetro
del ocelo medio, cariniforme distalmente con ápice prominente en protu-
krerancia interalveolar. Labro convexo con surco medio apenas marcado;
margen distal recto. Primer segmento del flagelo mayor que el segundo
(0.9 : 0.7). Borde del pronoto carinado lateralmente con ángulos redon-
deados. Prestigma ligeramente más corto que el pterostigma (0.8 : 0.9),
Tibias posteriores cuatro veces más largas que anchas (4.2 : 1.0). Basi-
tarsos posteriores sin modificaciones y más de tres veces más largos que
anchcs (2.4 : 0.7). Cápsula genital y esternos asociados como un figura.
Hembra: Longitud total aproximada 10 mm. Ancho de cabeza
3.6 mm. Largo ala anterior 6.5 mm.
Coloración: Semejante al macho. Pilosidad: En general blanco sucio;
pelos de cabeza y tórax en su mayor parte con raquis negro, algunos
pelos negros en paraoculares. Patas distalmente con pelos más amari-
llentos; alas pilosas. Primer turgo metesómico con pilosidad clara, larga,
semejante al metanoto; corta en el resto, blanquecina en 2%, 3? y parte
del 4%, megra en los distales; *sternos con pilosidad clara. Puntuación: Se-
mejante al macho, pero algo más densa en el tórax. Estructuras: Cabeza
más ancha que larga (8.9 : 6.6). Clípeo recto en vista lateral. Ancho del
ojo menor que la mitad de su largo y más ancho que el largo malar
(2.2 : 48 : 1.6). Línea frontal bajo el ocelo en débil carina, en una
corta depresión bajo el ocelo medio; ápice prominente en protuberancia
interalveolar. Labro hinchado basalmrnte con cresta media longitudinal
y un pequeño surco a cada lado; borde distal convexo. Primer segmento
del flagelo casi dos veces el largo del segundo (1.3 : 0.7). Borde del
pronoto ligeramente carinado lateralmente con ángulos redondeados. Pres-
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 53
tigma ligeramente más corto que el ptrerostigma (0.8 ? 0.9). Tibias
posterivrea menos de cuatro veces más largas que anchas (4.9 : 1.3). Ba-
sitarsos posteriores menos de tres vecas más largos que anchos (2.8 : 1.0).
Holotipo macho y Allotipo, Chile, Valparaíso, Colliguay, 183-X-1964
(Chiappa cul.) en colección Toro. Paratipos 40 machos y 9 hembras, Val-
paraízo, diversas localidades y fechas entre Septiembre a Enrvro; 34 ma-
chos y 19 hembras, Coquimbo, diversas localidades y fechas entre Agosto
a Noviembre. Los paratipos serán depositados um: Universidad Católica
de Valparaíso; Museo Nacional de Historia Natural, Chile. Universidad
de Kansas; American Museum of Natural History; Universidad de Califor-
nia, USA; Universidad do Paraná, Brasil.
Esta especie ha sido duterminada como Colletes ciliatus Friese 19083 o
C. biciliatus Cock en la mayor parte de las colecciones que existen en Nor-
te y Sudamérica. El examen del material de Frirsse, deruvsitado en Berlín,
demostró una errónea asociación de sexos en los ejemplares que fueron
originalmentr descritos. En el presente t:abajo se designa a la hembra de
Friese como tipo de C. ciliatus atendiendo a que está descrita primero y en
extenso, mientras que el macho só» se descritr por comparación. El macho
de Friese pertenece a la especie M. mixta, que aquí s dscrib.
El nombre de C. biciliatus fue propuesto por Cockerell (1918) como
nombre nuevo al reconocer que C. ciliatus estaba preocupado por Patton
en 1879. Aparentemente desconociendo el trabajo de Cockerell, Sbezphen
(1953) propone el nombre de Colletes polynidus.
MOURECOTELLES CHILLAN n. sp.
(Figuras 16-20)
Mourcotlbes chillan: próxima a M. mixta, de la cual difiere por el
lóbulo central del labro muy prominente; clípeo estriado en margen distal;
las hembras por el largo malar casi tan largo como el ancho de la base
de la mandíbula.
Macho: Longitud total aproximada 9 mm. Ancho de cabeza 3.5
mm. Largo ala anterior 6.6 mm.
Coloración: Cakreza y tórax negro, pero: ápice de mandíbulas, una
mancha en cara interna de la tibia y garras marrón rojiz>; gran parte
del clípeo y patas marrón casi negro; Alas ligeramente ahumadas. Ve-
nas marrón. Mrtasoma marrón casi megro. Pilosidad: En general blanco
amarillento, pero: más claros ventralmente, con abundantes pelos marrón
vecin'a a las órbitas y en vértice, algunos de ápice marrón en el escudo.
Primer tergo metasómico con pelos largos; de segundo a sexto con pelos
marrón casi negros cortos, excepto el segundo con algunos pelos claros y
algunos más largos de cuarto a “exto. Puntuación: Clípeo estriado hacia
el margen distal, con puntos pequeños alargados, poco más gruesos y
densos hacia la sutura epistomal. Area malar con puntos alargados, den-
sa en la parte media, extremo distal con finas estrías y escasos puntos.
54 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Resto de la cabeza con puntos densos y más gruesos. Tórax con puntos de
tamaño regular y espacios iguales o poco menores que ellos; poco más
ena en esculelo y pleuras. Triángulo propodeal liso. Metasoma: puntua-
ción fina, bien marcada y espacios iguales a poco mayores que ellos en
los tergos; puntos poco más grandes en los esternos. Estructuras: Cabeza
más ancha que larga (8.7 : 7.0). Clípeo protukrerante en la zona basal y
parte laterales levemente deprimidas. Ancho del ojo poco más de la mitad
de su largwy y aproximadamente igual que el largo malar (2.4 : 4.4 : 2.8).
Línea frontal rn depresióón bajo el ocelo medio, ápice prominente en pro-
tuberancia interalveolar, proyectándose hacia delante en estrías. Labro
con lóbulo prominente en la línea media, con tres surcos subparalelos a
ambos lados que crterminan igual número de lóbulcs; borde distal emar-
ginado. Primer segmento del flagelo poco mayor que el segundo (1.0 :
0.7). Borde del pronoto carinado lateralmente, ángulos redondeados. Pres-
tigma poco menor que pterostigma (0.7 : 0.8). Tibias posteriores menos
de cuatro veces más largas que anchas (4.9 : 1.3). Basitarso posteriores
sin modificaciones y menos de tres veces más largos que anchos (2.5 :
0.9). Cápsula genital y esternos asociados como en figura.
Hembra: Longitud total aproximada 11 mm. Ancho de cabeza
3.9 mm. Largo ala anterior 7.4 mm.
Coloración: En general marrón casi negro, pero zona mesal del clípeo,
labro, área malar y patas primer par marrón rojizo, con una mancha
clara en cara interna de la tibia; zona ventral del flagelo marrón; alas
ligeramente ahumadas. Tórax negro. Pilosidad: Como en el macho, pero
algunos pelos marrón en genas y área malar. Puntuación: Clípeo estriado,
más grueza hacia el margen distal; puntos alargados, muy gruesos hacia
la sutura epistomal. Area malar con puntos pequeños y espacios mayores
que ellcs, más alargados ventralmente, extremo distal sin puntos; resto
de la catrza densamente punteada, con puntos más o menos gruesos. Tó-
rax como en el macho, pero puntos más grandes. Metasoma semejante al
macho, pozo más densa en los esternos. Estructuras: Cabeza más ancha
que larga (10.0 : 7.3). Clípeo cenvexo en vista lateral y partes laterales
deprimidas. Impresión tentorial muy profunda y alargada. Línea frontal
en depresión alargada por bajo el ocelo medio con ápice no prominente en
protuturancia interalveolar. Labro con fuerte cresta en la línea media y
dos lóbulos laterales separados por amplio surco. Primer segmento del
flagelo poco más de dos veces el largo del segundo (1.3 : 0.6). Borde del
pronoto carinado, ángulos laterales redondeados. Prestigma menor que
pterostigma (0.8 : 1.0). Tibias posteriores más de cuatro veces más lar-
gas que anchas (5.2 : 1.2). Basitarsos posteriorcos con depresión en su
cara externa, insinuando un surco hacia el extremo proximal poGS menos
de tres veces más largo que ancho (3.4 : 1.2).
Holotipo: macho, Chile, Ñuble, Las Trancas, 27-1-1967 eunate
wing, col.). Allotipo: Chile, Ñuble, Las Cabras, 16-XI-1967 (Schlinger,
col.), en colección Toro. Paratipos: 1 macho, Osorno, Puyehur, 21-1-1965
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 55
(Wachenecht, col.), 2 hembras Ñuble, Las Trancas, 1-1967 (Peña-Stange-
Irwing, col.), en colección Universidad Católica de Valparaíso, Chile y
California Academy of Sciences.
MOURECOTELLES MOLDENKEI n. sp.
(Figuras 21-25)
Próxima a M. chillan, el macho difiere por el ancho del ojo menor
que el largo malar; clípeo sin depresión en la línea media; hembras con
pilosidad blanquecina en 2* y 3er. tergo metasómico; largo malar mucho
mayor que el ancho de la bas de la mandíbula.
Macho: Longitud total aproximada 8 mm. Ancho de cabeza 3.2
mm. largo ala anterior 6.1 mm.
Coloración: En general negra, salvo: faz ventral del flagelo antenal
marrón. Apice de mandíbulas, una mancha en cara anterior de tibias.
primer par, tarsitos y garras marrón rojizo. Venación alar caoba, excep-
to Sc. negra; alas hialinas. Pilosidad: En general blanco amarillento, más
clara ventralmente; algunos pelos obscuros en paraoculares y vértice. Ter-
gos metasómicos: 1* con pelcw blancos largos, segundo a cuarto con pilo-
sidad blanca, corta y algunos largos entremezclados; quinto a séptimo con
pelos obscuros, cortos y largos entremezclados; pilosidad clara en los es-
ternos; segmentos primero a quinto con débil línea de pelos blancos
marginales, mejor marcada en los esternos. Puntuación: Clípeo con pun-
tos pequeños bien marcados en la línea mudia, con áreas laterales casi
lisas y tegumento brillante, débiles estrías hacia el margen distal. Area
malar con puntos pequeños medianamente densc3; resto de la cabeza den-
samente punteada. Tórax con puntos de regular tamaño, con espacios
iguales o poco mayores que ellos, levemento más densos en pleuras; muy
densos y puco más grandes n escutelo. Metasoma con puntuación fina y
densa. Estructuras: Cabeza más ancha que larga (0.8 : 6.4). Clípeo casi
recto un vista lateral. Ancho del ojo poco más de la mitad de su largo y
menor que el largo malar (1.9 : 3.9 : 2.3). Línea frontal en una depre-
sión alargada bajo el ocelo medio con ápice prominente en protuberancia
interalveolar, proyvctándose en débil cstría hacia el clípeo. Labro hin-
chado, con débiles cxtrías leneitudinales; margen distal levemente emar-
ginado. Primer scgmento del flagelo mayor que el :rgundo (1.0 : 0.7).
Borde del pronoto levemente carinado con ángulos laterales redondeados.
Prestigma lirgramente más largo que pterostigma (0.9 : 0.8). Tibias pos-
teriores poco más de cuatro veces más largas que anchas (4.2 : 1.0). Ba-
sitarsos posteriores sin modificaciones y poco más de dos veces más lar-
go que ancho (2.3 : 0.8). Cársula genital y esternos asociados como en
figura.
Hembra: Longitud total aproximada 9 mm. Ancho de cabeza 3.5
mm. Largo ala anterior 6.2 mm.
Coloración: Negra en general, salvo ápice de mandíbulas, una man-
cha en faz interna de tibias anteriores y garras marrón rojizo; patas y
venas marrón casi negra; zona ventral del flagelo y margen distal de
56 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N+ 10, 1977
tergos marrón. Pilosidad: En general amarillo sucio; entremezclados con
pelos marrón abundantes en paraoculares, vértice y escudo; escasos y
largos en genas. Tergos metasómicos con pelos claros de primero a ter-
cero; marrón casi negro de cuarto a sexto con largos e*ntremezclados.
Débil banda blanca de primero a tercero; esternos con pelcs blanco ama-
rillentos más o menos densos. Puntuación: Clípeo finamente estriado, *x-
cepto áreas laterales casi lisas; estrías poco más gruesas hacia margen
distal; puntos más bien pequeños y densos «n el área proximal, levemente
alargados y medianamente denscs en la zona media. Resto de la puntua-
ción como en el macho, aunque pooc más densa en el *scudo. Estructuras:
Cabeza más ancha que larga (8.7 : 6.8). Clípeo suavemente convexo en
vista lateral. Ancho del ojo poco menor que la mitad dr su largo y seme-
jante al largo malar (2.2 : 4.6 : 2.2). Línea frontal en depresión ovalada
bajo el ocelo medio ¡ápice no prominente en protuberancia interalvrolar.
Labro convexo con cresta bien marcada en la línea media. Primer seg-
mento del flagelo poco más de de: veces más largo que el segundo (1.2 :
0.5). Borde del pronoto levemenie cariniforme con ángulos laterales re-
dondeados. Prestigma levemente mayor que pterostigma (0.8 : 0.7). Ti-
bias posteriores poco menos de cuatro veces más largas que anchas (4.7 :
1.2). Basitarscs posteriores menos de tres veces más largo que anchos
(2.9 : 1.1) garras con uña interna muy corta.
Holotipo: Macho y Allotipo Chile, Aisén, Chile Chico, 22-X1-1966
(Schlinger-Irwin, col); en colección Toro. Paratipo 2 machos con misma
localidad, fecha y colector; 1 hembra, Chile, Magallanes, Brazo Norte,
1-1972 (Cerda, col.). En colección Univrersidad Católica de Valparaíso,
Chile, y California Academy of Sciences.
MOURECOTELLES TRICILIATUS n. sp.
(Figuras 26-30)
M. triciliatus, próxima a M. moldenkei, difiere por las bandas blan-
cas bien definidas en el margen distal de primer a tercer tergo meta-
sómico, las hembras por presentar el primer segmento del flagelo aproxi-
madamentr igual a los dos siguientes juntos.
Macho: Longitud total aproximada 9 mm. Ancho de cabeza 3.1
mm. Largo ala anterior 6.3 mm.
Coloración: En general negra con: ápice de mandíbulas y garras ma-
rrón rojizo; faz ventral del flagelo, venas y una mancha en base de tibia
1 marrón; alas ligeramente ahumadas con pelos en las celdillas; patas
marrón casi negro, más claros los tarsos. Pilosidad: Blanco sucio en su
mayor parte con pelos marrón vecino a las órbitas. Metasoma con ban-
das blanca angosta en margen distal de primero a quinto tergo; muy bien
marcada en segmentos 1 - 3; segundo tergo con pelos blancos cortos y
resto de los segmentos con pelos marrón en su mayor parte y algunos lar-
gos entremezcladoz. Esternos con pilosidad blanca formando banda de
segundo a quinto. Puntuación: Clípeo con estrías leves, poco más gruesas
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 57
hacia el margen distal, con algunos puntos pequeños poco densos y gran-
des ralos. Area malar con puntcs alargados y tegumento finamente es-
triado, resto de la cabeza densamente punteada. Tórax con puntos peque-
ños y espacios poco mayores que ellos, más densos en margen distal de
escutelo; poco más grandes en pleuras. Metasoma: tergos con puntos
finos bien marcados y espacios iguales o poco menores que los puntos;
poco más grirsos en los esternos. Estructuras: Cabeza más ancha que
larga (7.9 : 6.8). Clípeo protuberante en zona basal con partes laterales
levemente deprimidas. Ancho del ojo aproximadamente la mitad de su
largo y tan ancho como el largo malar (2.1 : 4.1 : 2.0). Línea frontal
bajo el ocelo en un surco bastante largo, distalmente en suave carina con
ápice prominente en protuberancia interalveolar. Labro con fuerte tu-
bérculo en la línea media y débiles surcos subparalelos determinando
suaves lóbulc; margen distal cóncavo. Primer segmento del flagelo ma-
yor que el segundo (1.0 : 0.7). Borde del pronoto carinado lateralmente
con ángulos redondeados. Pivstigma levemente mayor que el pterostigma
(0.8 : 0.7). Tibias posteriores aproximadamente cuatro veces más largas
que anchas (4.1 : 1.0). Basitarscz posteriores sin modificaciones y casi
tres veces más largos que anchos (2.3 : 0.8). Cápsula genital y esternos
asociados como en fig.
Hembra: Longitud total aproximada 9 mm. Ancho de cabeza 3.6
mm. Largo ala anterior 6.6 mm.
Coloración: como en el macho. Pilosidad: Cabeza y tórax en general
amarillo sucio más clara ventralm=nte; con pelcs marrón entremezclados
en paraoculares, vértice, dorso del tórax, por delante del área hipoepime-
ral y fémures anteriores. Blanco sucio en metasoma con banda blanca
muy bien marcada en tergos 1 - 3 y débil línea en 4 y 5; esterncs con pilo-
sidad clara tendiendo a formar bandas distales. Puntuación: Clípeo estria-
do longitudinalmente, puntcx alargados y escasos dejando pequeña área
brillante hacia parte lateral y sutura epistomal. Alva malar con puntos
alargados; resto de la puntuación ccmo en el macho aunque más densa.
1
Estructuras: Cabeza más ancha que larga (9.0 : 6.8). Clípeo 2vemente
protuberant: en zona basal y partes laterales deprimidas. Ancho del ojo
poco más de la mitad de su largo y mayor que el largo malar (2.5 : 4.8:
1.7). Línea frontal en suave depresión por bajo el ocelo con ápice promi-
nente en protuberancia interalvtrolar. Labro hinchado en la base con am-
plio tubérculo en la línea media; borde distal suavemente emarginado.
Primer segmento del flagelo casi dos v:»ces el largo del segundo (1.2 :
0.6). Borde del prenoto suavemente carinado, lateralmente con ángulos
redondeados. Prestigma ligeramentz más largo que pterostigma (0.9 :
0.8). Tibias posteriorc poco menos de cuatro veces más largas que an-
chas (4.6 : 1.2). Basitarsos posteriores sin modificaciones y poco menos
de tres veces más largos que anchos.
Holotipo macho y Allotipo; Argentina, Catamarca, Aconquija, 30-XI-
1972 (Neff, col.) en colección Toro.
58 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
MOURECOTELLES PUELCHE n. ep.
(Figuras 31-35)
Próxima a M. moldenkei, difiere por la estriación del clípeo y surco
medio del labro bien marcado.
Macho: Longitud total aproximada 9 mm. Ancho de cabeza 3.4
mm. Largo ala anterior 6.7 mm.
Coloración: Cabeza y tórax negro. Apice de mandíbula y garras ma-
rrón rojizo. Patas, tergos y esternos metasómicos marrón casi negro. Ve-
nas marrón. Alas hialinas. Pilosidad: En general amarillo sucio, con pelcs
marrón entremezclados en la cara, vértice y dorso drl tórax. Tergos meta-
sómicos, salvo el primero, con pilosidad muy corta marrón, algunos largos
entremezclados de cuarto a sexto; una débil banda blanca en margen
distal de segundo y tercer esterno. Puntuación: Clípeo finamente estriado
longitudinalmente y con escasos puntos ligeramente alargados en la zona
proximal. Area malar con puntos levemente alargados y espacios mayores
que ellos; zona distal débilmente estriada; resto de la cabeza densamente
punteada, con pequeña área lisa por fuera de lcs ocelos laterales. Tórax
con puntos bien marcados y con espacios iguales o poco mayores que
ellos, más densos en escutrlo. Metasoma: tergos con puntos finos y espa-
cios poco mayores que sus diámetros, poco más grueso en los ester-
nos. Estructuras: Cabeza más ancha que larga (8.5 : 6.8). Clípeo recto
en vista lateral. Ancho del ojo poco mwnor que la mitad de su largo y
levemente menor que el largo malar (2.2 : 4.2 : 2.3). Línea frontal en
suave depresión alargada bajo el ocelo con ápice prominente en protu-
berancia interalveolar. Labro convexo con fuertes surcos longitudinales.
Primer segmento del flagelo mayor qui el segundo (1.0 : 0.8). Angulos
laterales del pronoto redondeados y borde cariniforme. Prestigma más
corto que el pterostigma (0.7 : 0.8). Tibias posteriores más dt cuatro
veces más largas que anchas (5.0 : 1.2). Basitarsos posteriores sin modi-
ficaciones y aproximadamente tres veces más largos que anchos (2.7 :
0.9). Cápsula genital y rsternos asociados como en fig.
Holotipo Macho, Chile, Ñuble, Las Trancas, XII-1966 (Peña, col.),
en colección Toro. Paratipo 1 macho misma localidad, fecha y colector, en
Universidad de Kansas, U.S.A.
MOURECOTELLES BOLIVIENSIS n. sp.
(Figuras 36-40)
Próxima a M. chillan; macho difiere por clípeo estriado longitudinal-
mente y las hembras por largo malar mucho más ancho que el ancho
de la base de la mandíbula. :
Macho: Longitud total aproximada 10 mm. Ancho de cabeza 3.4
mm. Largo ala anterior 6.8 mm.
Coloración: En general negra, con: ápice de mandíbulas, pequeñas
áreas en el clípeo y garras marrón rojizo; zona ventral del flagelo, venas,
margen distal de tergos y esternos metasómicos marrón; patas (excepto
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 59
tarsitos) marrón casi negro; tarsitos caoba. Alas ligeramente ahumadas.
Pilosidad: En general blanco amarillento, más clara en la zona ventral,
con algunos pelos marrón largos en paraoculares vecino a la órbita, genas
y vértico. Pelos blanco sucio en lc segmentos proximales de las patas y
un cepillo amarillo en la bas fémur segundo par. Tarsos con pelos marrón
anaranjado. Metasoma ccn pelos blanco amarillento largos en tergos
1 y 2, cortos en el resto entremezclados con pelos marrón; banda blanca
bien definida en margen distal du primero a cuarto tergo y de segundo
a cuarto externo; quinto tergo y distales sólo con pelos obscuros; pelos
más largos en los esternos. Puntuación: Clípeo finamente estriado con
puntos alargados y poco densos. Area malar con puntos alargados más
densos en la parte media, extremo distal finamente estriado. Resto de la
cabeza con puntos más o menos gruesos y densos. Tórax con puntos de
tamaño regular y con u=spacios iguales o poco mayores en el escudo; más.
gruesos y densos en pleuras y escutelo, menos densos en postecutelo.
Triángulo propodeal con algunos puntca muy poco marcado en la línea
media, próximos a la sutura postescutelo propocral. Metasoma: tergos
con puntuación mediana con intervalos algo mayores que sus diámetros,
más densa hacia el margen distal; poco más grandes en los esternos.
Estructuras: Cabeza más ancha que larga (8.5 : 7.0). Clípeo levemente
convexo con partes laterodistales casi planas. Ancho del ojo poco menos
de la mitad de su largo y menor que el largo malar (2.2 : 4.2 : 2.6).
Línea frontal bajo el ocelo medio rn débil carina en depresión alargada;
ápice prominente en protuberancia interalveolar. Labro convexo con débil
cresta longitudinal en la línea media y finamente ustriado; margen distal
casi recto. Primer segmento del flagelo mayor que el segundo (1.1 : 0.7).
Borde del pronoto cariniforme, ángulo latrrales acuminados. Prestigma
poco más largo que pterostigma (0.8 : 0.7). Tibias posteriores más de
cuatro veces más largas que anchas (4.8 : 1.1). Basitarsos posteriores sin
modificaciones y más de dos veces más largos que anchos (2.1 : 0.9).
Cápsula grvnital esternos asociados como en figura.
Hembra: Longitud total aproximada 9 mm. Ancho de cabeza 3.5
mm. Largo ala anterior 6.7 mm.
Coloración: Como en el macho. Pilosidad: En general blanco sucio,
con pelos marrón entremezclados en las paraoculares, frente y vértice,
escasos vn genas, más abundantes en el dorso del tórax. Banda blanca
bien definida en el margen distal de tergos metasómicos 1 - 4; muy débil
en el 5%; pelcs largos en los esternos formando bandas en el margen
distal de segundo a quinto. Puntuación: Clípeo finamente estriado, con al-
gunos puntos alargados; área malar con puntos alargados, más o menos
gruesos en tegumento estriado, resto de la cabeza densamente punteada
más fina hacia el vértice. Tórax como en el macho. Mretasoma: tergos
con puntos bien marcados y densos, más finos que en el macho, poco
más gruesos en los esternos. Estructuras: Cabeza más ancha que larga
(8.9 : 7.0). Clípeo convexo en vista lateral con partes laterales algo depri-
midas. Ancho del ojo aproximadamente igual a la mitad de su largo y
60 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
aproximadamente igual al largo malar 2.3 : 4.5 : 2.3). Línea frontal en
débil carina en pequeño surco bajo el ocelo medio, con ápice no promi-
nente en protuberancia interalveolar. Labro con gran tubérculo, en la
base de la línea media y dos más pequeños a cada lado separados: por un
surco con puntos grandes alargados; borde distal levemente convexo. Pri-
mer segmento del flagrlo poco más de dcs veces el largo del segundo (1.8 :
0.6). Borde del pronoto carinado lateralmente con ángulos redondeados.
Prestigma ligeramente más largo que pterostigma (0.8 : 0.7). Tibias
posteriorras poco menos de cuatro veces más largas que anchas )4.7 : 1.2).
Basitarsos posteriores más de dos veces más largos que anchos (2.6 : 1.1).
Holotipo macho y Allotipo, Bolivia, Camargo 3-1-1956 (no indica co-
lector); un paratipo macho, Argentina, Tres Cruces 1-1956 (M. Arnau,
col.). Todos en colección University of Kansas U.S.A. Un paratipo hem-
bra, Bolivia, Camargo 3-1-1956 (no indica colector) y un macho Argenti-
na, Tres Cruces 1-1956 (M. Arnau, col.) en colección Toro.
MOURECOTELLES SPINOLAE
Diphaglossa spinolae Crawford € Titus, 1904, Canadian Entom.
36 : 48-51.
Macho: Longitud total aproximada 10 mm. Ancho de cabeza 3.4
mm. Largo ala anterior 7 mm. :
Coloración: En general marrón casi negro, salvo ápice de mandíbu-
las y garras marrón rojizo; faz ventral del flagelo antenal, tarsos y ester-
nos metasómicos marrón claro. Pilosidad: En genrral amarillo sucio, con
algunos pelos marrón vecino a las órbitas y vértice; primero y segundo
tergo metasómico con pelos largos blanco amarillento, cortos en el resto,
con. algunos largos entremezclados; con banda blanco amarriliento bien
definida de primero a quinto terro metasómico y de primero a quinto
esterno, formando débil mechón central en el sexto. Puntuación: Clípeo
con finas estrías longitudinales y puntos escasos entre ellas y en el
margen distal. Area malar con escasos puntes finamente estriada; resto
de la cabeza densamente punteada; poco más fina entre los ocelos. Tórax
con puntos pequeños e intervalos mayores que sus diámutros; más grue-
sos y densos en escutelo y postescutelo; triángulo propodeal casi liso. Me-
tasoma con puntos pequeños e intervalos semejantes a sus diámetro,
menos densos en los esternús. Estructuras: Cabeza más ancha que larga
(8.5 : 7.3). Clípeo recto en vista lateral. Ancho del ojo menos de la mi-
tad dr su largo y mucho menor que el largo malar (1.9 : 4.1 : 3.0). Línea
frontal en débil surco por bajo el ocelo medio, cariniforme distalmente,
con ápice prominente en protuberancia interalveolar. Labro convexo con
cresta prominente «+ nla línea media; margen distal cóncavo al centro. Pri-
mer segmento del flagelo mayor que el segundo (1.3 : 0.8). Borde del
dos. Prestigma semejante en largo al pterostiema (0.8 : 0.8). Tibias
pronoto suavemente carinado lateralmente y ángulos laterales redondea-
H. Toro y V. Cabezas COLLETINI SUDAMERICANOS 61:
posteriores más de cuatro veces más largas que anchas (5.2 : 1.1). Ba-
sitarsos posterioi2s sin modificaciones y poco más de dos veces más
largo que anchos (2.4 : 1.0). Estructuras genitales no okuervadas.
Material estudiado: 1 macho, La Paz, Bolivia, XI-1898.
El único ejemplar examinado, perteneciente al Smithscnian Museum,
carecía de genitalia.
MOURECOTELLES ENODIS
(Figuras 94- 96)
Colletes Odia Vachal, 1909: Be PEntom 23- 50.
Macho: Longitud aproximada is mm. Ancho, de cabeza 3 mm.
Largo de ala anterior 6.8 mm. i
Coloración: Negra con ápice de mandíbulas y garras caoba; faz ven-
tral del flagelo (excepto ¿primer segmento) y patas marrón, 'con «una
mancha más clara en cara anterior de tibia primer par. Pilosidad: Cabe-
za y tórax con pelcs marrón, más obscuros hacia el ápice A algunos ama-
rillo sucio en la cara; blanco amarillento en las patas. Metasoma con pilo-
sidad muy corta, salvo en primer tergo, de color blanco amarillento, más
obscuro en los dos últimos tergos; bandas blancas poco; visibles en ter-
go3 I-1V. Puntuación: Clípeo con estrías longitudinales hacia el margen
distal; línea media con puntos pequeños, dejando áreas laterales casi lisas.
Resto de la cabeza con puntuación muy densa, dejando: pequeña (área casi
lisa por fuera de los ocelos laterales. Tórax con intervalos mayorez que
los puntos; más gruesa y densa hacia parte posterior del escutelo. Propo-
deo casi liso. Metasoma con, puntos: pequeñcs y espacios menorés 0 sofe-
jantes a sus diámetros. Estructuras: Cabeza más ancha que larga (7.6 :
6.2)... Clípeo, recto en vista, lateral. Ancho, del er A a. la, mitad de su
largo y tan ancho como: el largo :malar (1.9: 1.9). Línea frontal
bajo el ocelo medio en carina débil en un surco más E go que el diáme-
tro del océlo medio; débilmente cariniforme'distalmente-con «ápice promi-
nente en protuberancia interalveolar. Labro hinchado con crenta media
bin marcada y un par de lóbulos laterales separados por débiles surcos;
margen distal casi recto. Primer segmento del flagelo poco menos de dos
veces el largo drl segundo (1.0 : 0.6). Borde y ángulos del pronoto re-
dondeados. Prestigma ligeramente menor que pterostigma (0.7 : 0.8).
Tibias posteriores poco menos de cuatro veces más largas que anchas
(42 : 1.0). Basitarsos posteriores sin modificaciones y poco mencx3 de
tres veces más largos que anchos (2.1 : 0.8). Cápsula genital y esternos
asociadcx3 como en figura.
Material estudiado: 1 macho, Argentina, Mendoza, Diciembre. El
ejemplar pertenece a la Colección Vachal y está actualmente depcsitado
en el Museo de París con etiqueta de Holotipo.
62 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Hemicotelles ruizii: macho, 1 cápsula genital; 2 séptimo esterno; 3 octavo esterno;
4 labro; 5 mandíbula.
Hemicotelles magallanes: macho, 6 cápsula genital; 7 séptimo esterno; 8 octavo ester-
no; 9 labro; 10 mandíbula.
Mourecotelles mixta: macho, 11 cápsula genital; 12 séptimo esterno; 13 octavo ester-
no; 14 labro; 15 mandíbula.
Mourecotelles chillan: Macho, 16 cápsula genital; 17 séptimo esterno; 18 octavo ester-
no; 19 labro; 20 mandíbula.
Mourecotelles moldenkeiz macho, 21 cápsula genital; 22 séptimo esterno; 23 octavo
esterno; 24 labro; 25 mandíbula.
Mourecotelles triciliatus: macho, 26 cápsula genital; 27 séptimo esterno; 28 octavo
esterno; 29 labro; 30 mandíbula.
Mourecotelles puelche: macho, 31 cápsula genital; 32 séptimo esterno; 33 octavo ester-
no; 24 labro; 35 mandíbula.
Mourecotelles boliviensis: macho, 36 cápsula genital; 37 séptimo esterno; 38 octavo es-
terno; 39 labro; 40 mandíbula.
Mourecotelles enodis: macho, 94 cápsula genital; 95 séptimo esterno; 96 octavo
esterno.
COLLETINI SUDAMERICANOS
H. Toro y V. Cabezas
64 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
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VACHAL, J. 1909. Especes Nouvelles ou litigieuses d'Apidae. Rev. D'Entomologie
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Valparaíso, Chile 65
CALASTACUS ROSTRISERRATUS n. sp.
(Crustacea, Decapoda, Macrura, Axiidae)
HECTOR ANDRADE V. y PEDRO BAEZ R. *
ABSTRACT: A new species of Calastacus, C. rostriserratus is described. This
is the first record of genus Calastacus and family Axiidae from Chile.
Schmitt (1921) señala los caracteres diagnósticos de la familia Axii-
dae Huxley 1879. De esta familia, Chirichigno (1970) cita para Perú
dos especies del género Axius y Del Solar (1972) agrega Iconaxius cris-
tagalli Faxon y Calastacus stylirostris Faxon.
DESCRIPCION DEL HOLOTIPO (Hembra)
Longitud total (incluyendo rostro) 63.7 mm; Longitud cefalotoráxica
24.5 mm; Color: caparazón verde oliva claro; superficie dorsal del pleon
y quelípodo derecho del primer par de pereiópodos de color salmón, que-
lípodo izquierdo salmón pálido.
Caparazón lateralmente comprimido. Rostro de tamaño mediano, de
base ancha, aserrado y dirigido hacia adelante. Línea media anterior del
cefalotórax con dos espinas gruesas; bordes laterales del rostro con 6 espi-
nas, sin considerar la rostral. Línea media dorsal del caparazón convexa;
porción anterior de región gástrica (Fig. 1B) con una carena dorsal y
media; a ambos lados de esta carena hay dos filas longitudinales de espi-
nas; la interna del lado izquierdo con cuatro y com seis la del lado dere-
cho, ambas uxternas con seis. Región gástrica delimitada por un surco
muy notorio (Fig. 14) que se extiende hacia adelante y hacia abajo a
ambos lados del cefalotórax. Regiones cardíaca y branquial lisas.
Pleon liso. Primer segmento pequeño con pleuras rudim:wntarias, los
restantes similares entre sí, con pleuras anchas y redondeadas. Telson
rectangular (Fig. 1D); bordes laterales con cuatro espinas; borde poste-
rior redondeado y setoso, vértices distales con una espina móvil a cada
lado, con un surco longitudinal medio que termina en una espina y a
ambos lados del surco hay tres espinas dispuestas en línra oblicua diri-
gida hacia los vértices posteriores. Urópodos externos con dos carenas lon-
gitudinales y un pliegue denticulado oblicuo que aisla la región distal
exberna; urópodos internos con una carena espinosa (con cuatro espinas
el izquierdo y cinco el derecho).
Ojos rudimentarios, subglobosos, sin coloración y con córnea no
facetada. Anténulas con pedúnculo de tres segmentos, disminuyendo de
tamaño del primero al tercero. Antena con una espina en borde distal
* Departamento de Oceanología, Universidad de Chile, Casilla 13-D, Viña del Mar.
66 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
inferior y otra en borde distal externo del segundo segmento, entre am-
bas otra espina larga, delgada y articulada; cuarto segmento corto con
un flagelo largo.
Primer y segundo par de pereiópodos quelados, quelípodos del pri-
mer par grandes, el izquierdo más desarrollado, isquipodito con una
e
q?
Figura 1. Calastacus rostriserratus n sp. A: Vista lateral izqui ¡
. Sp. Á: uierda; B: R
anterior del cefalotórax; C: Quelípodo derecho ; D: Telson pa Ed AT e
H. Andrade V. y P. Báez R. CALASTACUS ROSTRISERRATUS n. sp. 67
espina en margen superior y cinco en el inferior; meropodito comprimido
lateralmente, con aproximadamunte siete espinas en borde superior y die-
cisiete en el inferior, una espina pequeña en región media del margen distal
externo, un punto de articulación con carporudito; carpopodito triangu-
lar, borde superior de región distal con espinas y borde distal externo
denticulado en región de articulación con propodito; quela comprimida
lateralmente con borc superior agudo, provisto de espinas, e inferior
aserrado, dedos prehensiles, puntas que se cruzan encorvadas y márgenes
internos ligeramente denticulados. Quuelípodo derecho (Fig. 1C) con de-
dos no prehensiles y márgenes internos ligeramente denticulados. Quelí-
podes del segundo par iguales; isquiopodito con dos espinas en borde infe-
rior; meropodito con setas largas sobre su borde inferior; dedos de la
quela setosos. Pereiópodos restantes con dactilopoditos setosos.
Pleópodes con un segmento basal del cual se originan dos ramas mul-
tiarticuladas y setosas; rama externa provista de un estilambris largo y
delgado.
Holotipo: Hembra, frente a Pichidangui (32* 08*S, 71* 50'"W) a 15
millas de la costa, profundidad 320 - 400 m, 30-V-1977, Alejandro Gon-
zález leg. Paratipos: cinco hembras con los mismos datos del Holotipo.
Holvtipo y un Paratipo en rl Museo Nacional de Historia Natural
de Santiag, cuatro paratipos en el Museo Comparativo del Departamento
de Oceanología de la Universidad de Chile, Valparaíso.
AGRADECIMIENTOS: Al señor Alejandro González, quien proporcionó el ma-
terial estudiado.
REFERENCIAS
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Inst. del Mar del Perú. Informe N* 35. 95 págs.
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del Perú. Informe N* 38. 21 págs.
SCHMITT, W. 1921. The marine Decapod Crustacea of California. University of
California Publications in Zoology. 23: 1 - 470, Pl. 1 - 50, 165 figs.
Valparaíso, Chile 69
LIOLAEMUS PICTUS TALCANENSIS nov. subsp. (SQUAMATA-
IGUANIDAE) NUEVO REPTIL PARA EL ARCHIPIELAGO
DE CHILOZ
MEDARDO URBINA B. y OSCAR ZUÑIGA U. *
ABSTRACT: In this work a new sub-species: Liolaemus pictus talcanensis is
described, It was collected on Isla Talcán (42* 45” S - 73% 00” W), Grupo de Islas
Desertores, Chiloé, and a comparison on this subspecies with another living around
the zona: Liolaemus pictus pictus Dumeril y Bibron, Liolaemus pictus major Boulen-
ger y Liolaemus pictus chiloensis Miller y Hellmich, is done.
INTRODUCCION
Tres subespecies de lagartijas han sido descritas para el área de
Chiloé insular: Liolaemus cyanogastier brattstroemi Donoso 1961, Liolae-
mus pictus chiloénsis Miller y Helmich 1939 y Liolaemus pictus major.
Boulenger 1885, todas las cuales son endémicas. En la región continental
vecina se encuentra Liolaemus pictus pictus Dumeril y Bibron, cuya dis-
tribución geográfica se extiende desd Concepción hasta poco más al sur
de Puerto Montt (Dunoso, 1966) sin que su presencia haya sido citada
en alguna isla del Sur de Chile.
En Febrero de 1972 uno de los autores Ge este trabajo colectó en
Isla Talcán (Chiloé) tres ejemplares de un reptil que ha sido mencionado
por sus características similares a las de L. pictus major Boulenger (Ur-
bina, 1973), sin embargo este autor mo aseguró su identidad por falta
de ejemplares. En Marzo de 1973 fueron obtenidcs de la misma localidad
otros nueve ejemplares les que junto a los anteriores han prurmitido hacer
esta comunicación.
En la presente contribución se le describe como una nueva subespe-
cie: Liolaemus pictus talcanensis endémico de la isla. Talcán (Chiloé).
Los ejemplares han sido capturados en el extremo norte del sector
llamado Tendedor, que es, la porción intermedia de la isla, llana y la
única desprovista de bosque, en un ambiente de troncos y namas eecas
que se extiende en medialuna siguiendo la playa del Estero Norte de la
mencionada isla. La vegetación es aquí escasa, con predominio de las
siguientes especies: Pernettya mucronata (“chaura”); Ugnimolmnae (“mur-
ta”); Berberis darwini (“calafate”) y Berberis buxifolia, (“michai”).
Etimología: Esta nueva subespecie se ha denominado talcanenss,
por haberse encontrado restringida a la Isla Talcán (Chiloé).
* Investigadores Museo de Concepción, Casilla 1054, Concepción.
70 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
LIOLAEMUS PICTUS TALCANENSIS nov. subsp.
Fig. 1
Holotipo: hembra grávida, colectada por M. Urbina el 6 de Marzo
de 1973, en el extremo Norte del sector Tendedor de la Isla Talcán (42*
45' S - 732 00 W) Chiloé. R. 12540 M. Zool. I1.C.B. “O.W.G.” Universidad
de Concepción.
Paratipos: 1 macho adulto colectado en la misma localidad del holo-
tipo R. 1002 Museo de Concepción, 6 Marzo 1973, M. Urbina; 2 especíme-
nes colectados en la misma localidad del holotipo: un macho adulto R.
1003 Museo de Concepción y un juvenil R. 1004 Museo de Concepción, 7
Marzo 1973, M. Urbina; un especimen hembra adulta R. 1005 Museo Na-
cional de Historia Natural, Talcán, 7 Marzo 1973, M. Urbina; un espe-
cimen macho adulto, colectado en Talcán R. 1006, Museo de la Universidad
de Chile, Valparaíso, 7 Marzo 1973, M. Urbina; un ejemplar macho adul-
to, colectado en Talcán R. 1007 Museo Regional de Castro, 16 Febrero
1972, M. Urbina; dos especímenes, una hembra adulta R. 1254 y un juve-
nil R. 12542, colectados en la misma localidad del holotipo, 16 Febrero
Fig. 1: Liolaemus pictus talcanensis. a) holotipo, hembra; 2) paratipo, macho.
M. Urbina y O. Zúñiga LIOLAEMUS PICTUS TALCANENSIS 71
1972, M. Urbina, depositados en el Museo de Zoología 1.C.B. “O.W.G.”
Universidad de Concepción, y tres ejemplares machos, sexualmente ma-
duros R. 1010, R. 1011 y R. 1012 colectad:s en Talcán, 7 Marzo 1973, M.
Urbina, depositados en el British Museum.
Diagnosis: Lagartija de tamaño mediamo, algo mayor que la forma
típica, color general café oscuro, con flancos melánicos y no interrumpi-
dos por barritas transversales claras. Banda occipital café homogénea,
acompañada de pequeñas manchitas triangulares negras. Sin línea verte-
bral oscura. Bandas supraoculares claras, nítidas hasta el inicio de la
cola e ininterrumpidas por los diseños oscuros de la banda occipital ni
de los flancos, 70-74 escamas en medio del cuerpo.
Descripción de holotipo (Fig. la): Forma algo mayor y robusta que
la nominal, cola 1,4 veces la longitud huúcico-ano. Extremidad posterior
extendida hacia adrlante alcanza al hombro. Cuello grueso, fuertemente
plegado, pliegue cervical abierto y en V por detrás del oído, pliegue
antehumeral acentuado y pliegue lateral moderado terminando discreta-
mente en la banda supnzocular correspondiente a nivel de las extremida-
des posteriora3. Abertura auditiva ovalada con dos escamas gruesas que .
sobresalen del borde anterior. Escamas temporales algo mayores que las
dorsales, convexas, de bordes redondeados, con superficie lisa lag inferio-
res y levemente carenadas las superiores. Escamas granulosas presentes
entre el oído y el hombro, región axilar y borde posterior del muslo. 74
escamas en la parte media del cuerpo. Escamas dorsales imbricadas, trian-
gulares, quilladas con una punta muy discreta. Escamas ventrales imbri-
cadas, lisas redondeadas algo mayores que las dorsales. Escamas de los
flancos inmediatamente por encima de la línea lateral pierden la quilla y
-devienen casi gramulares. Extremidades anteriores con escamas levemente
quilladas en porción ulnar y lisas en humeral. Posteriores, carenadas en
el muslo y pierna. Escamas de la región dorsal de la cola fuertemente
quilladas. En el ápice se estrechan y se vuelven casi mucronadas, pudiendo
presentar uma quilla secundaria a veces con punta. En la región inferior
de la cola, a partir del 1/10 anterior, devienen lanceoladas y quilladas.
Escudos cefálicos irregulares y provistos de poros. Un acigus fron-
tal irregular, sepanado de interparietales por 3 escudos de contornos irre-
gulares. Interparietal pentagonal, prolongado posteriormente, Parietales
irregulares algo mayores que interparietal. Frontal precedido de dos es-
cudetes de tamaño algo mayor o igual a aquél, situados a ambas lados
de la línea media. Placa nasal lateral, orificio nasal en la mitad posterior.
Tres supranasales pequeños sobre cara nasal. Rostral tres veces más
amcho que alto. 6 supralabiales. 5 infralabiales. Tres suboculares grandes
y cinco superciliares. Dos escudetes sobre el rostral. 2 internasales. Una
hilera de escudebes pequeños entre supralabialia y subocular. Mental semi-
circular, dos postmentales grandes, cuadrangulares, unidos en la línea
media. Por detrás dos hileras transversales de escudetes,
72 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Dimensiones (expresadas en mm): Longitud cabeza 16,2; ancho cabe-
za 10,3; alto cabeza 10.0; longitud hocico-ano 75.0; longitud cola 111,0;
extremidad antrrior 28.0; extremidad posterior 35.0; pie 17.0.
Color: Grneralmente café oscuro, con dos bandas supraoculares blan-
cas muy intensas en la mitad amterior del cuerpo declinando en la mitad
posterior hasta desaparecer fusionándosre al color circundante en la base
de la cola. Tales bandas están escoltadas por pequeñas manchitas trian-
gulares, que pertenecen a los flancos y a la banda occipital, las cuales
se insinúan a ellas no interrumpiéndolas. Banda occipital de tonalidad
más clara que la de los flancos provista de pequeñas manchitas triangu-
lares negras que nunca alcanzan la línea media vertebral. Sin línea ver-
tebral oscura. Flancos melánicos, con grandes manchas csecuras oveidos
que 3e fusionan en'sus bordes. Sin barritas transversales claras que las
interrumpan. Línea lateral clana, inconspicua, interrumpida por la pro-
yección de las manchas de los flancos. Banda clara temporal muy eviden-
te. Región ventral gris azulada, provista de numerosas manchas meláni-
cas pequeñas que se acentúan hacia los flancos y la región gular.
Descripción E
del paratipo macho (R. 1002) (Fig. 1b): Cabeza y cuello robustos.
Seis supralabiales y cinco infralabiales. Una gran escama amarilla sobre-
sale desde el extremo inferior del borde anterior de la akertura auditiva.
Bandas occipital y supraoculares similares a las del tipo. Flanccs provis-
tos de manchas melánicas fusionadas, con tonos claros que se insinúan
cusde las bandas supraoculares, pero sin separar a las manchas de los
flancos. Bandas supraoculares nítidas y anchas en todo) su trayecto, no
interrumpida por los diseños negros que las escoltan. Región.ventral blan-
ca con tonos azulados hacia los flancos, amarillos a nivel de las extremi-
dades posteriores y café melánicos +n la región gular. Las tonalidades
claras del vientre se proyectan hacia la región ventral de la cola. Cinta
temporal blanca muy notable. Tres poros anales. Extremidades postrrio-
res extendidas hacia adelante sobrepasan el hombro y alcanzan la región
rotroauditiva. Otros caracteres semejantes a-.las del holotipo hembra.
Dimensiones (expresadas en mm) : Longitud cabeza 15,5; ancho ca-
beza 13,8; Alto cabeza 9,6; longitud hocico-ano 66,9; longitud cola 100,2;
extremidad anterior 24,0; extremidad posterior 39,0; pie 19,9.
Variaciones: Los juveniles presenta una banda occipital color canela
homogé:.2a, provista de pequeñas manchitas oscuras y puntiformes en
los bordrs. Las bandas supraoculares son anthas, blancas y nítidas decli-
nando su tonalidad en el ferciv posterior del tronco y desapareciendo en
el inicio de la cola. Flancos color testáceo, más oscuros que la banda occi-
pital, con tres hileras de pequeñas manchitas megras, una escoltando a
la banda supraocular correspondiente, otra escoltando a la línea lateral
y la tercera entre ambas desde la axila a la ingle. Cinta temporal amarilla
M. Urbina y O. Zúñiga LIOLAEMUS PICTUS TALCANENSIS 73
notable, que se prolonga por pliegues cervicales y línea lateral. Vientre
claro con tonos amarillos y salmonados. Manchitas mrvlánicas hacia los
flancos y en región gular. Región mental celeste. 72 escamas en la mitad
del cuerpo. Los jóvenes adultca presentan tintes celestes intensos en ex-
tremo anterior de bandas supraoculares que a veces se prulongan hacia
los flancos sin llegar a formar barritas transversales claras.
Biología: Esta lagartija tizne un régimen omnívorv: en el contenido
estomacal se ha encontrado entre otros: insectos, arácnidos y semillas de
gramíneas. Dentro de los insectos predominan los dípteros y coleópteros,
siguen en frecuencia los arácnidos, larvas y ninfas diversas, colémbolos y
algunos granos. No se ha encontrado en estos estómagos flores ni frutos
de algún vegrtal.
DISCUSION
Liolaemus pictus talcanensis n. ssp. está relacionado con las siguien-
tes subespecies: Liolaemus pictus pictus Dumeril y Bibron que se encuen-
tra restringida a la zona continental del Sur de Chile entre Concepción y
poco más al Sur de Puerto Montt (Donoso, 1966); Liolaemus pictus chi-
loensis Miiller y Helmich, limitada en su extensión a la Isla Grande de
Chiloé y algunas islas vecinas, y con Liolaemus pictus major Boulenger,
de la cual se conservan sólo algunos ejemplares en el British Museum,
que fueron colectados en algunas islas de Archipiélago de Chiloé.
Para la comparación entre estas subespecies se ha dispuesto de 36
ejemplares de L. pictus pictus colectados en el Parque Nacional “Vicente
Pérez Resales”; cinco ejemplares de Liolaemus pictus chiloensis de San
Pedro, Chiloé; 10 ejemplares de Liolaemus cyanogaster brattstroemi, co-
lectados en Chanquín, Chiloé, y fotografías de syntipos de L. pictus major.
L. pictus talcanensis n. ssp. difiere de L. pictus pictus en que: 1. po-
see dos bandas supravculares claras, anchas y nítidas, hasta el nacimiento
de la cola, escoltada por pequeñas manchitas triangulares o puntiformes
que nunca la interrumpen, mientras la forma pictus pictus posee bandas
supraoculares que se pierden en el tercio posterior del tronco y son in-
terrumpidas por los diseños negros de los flancos y de la banda occipital.
2. La banda occipital es de tonalidad más clara que lcs flancos y posee
manchas triangulares o puntiformes pequeñas, rechazadas hacia los bor-
des que nunca forman una banda vertebral negra, mientras la forma
victus posee banda occipital de igual tonalidad que los flancos y las man-
chas negras triangulares tienden a fusionarse en el centro para insinuar
una banda vertebral oscura. 3. Los flancos son melánicos de mayor in-
tensidad que la nada occipital y nunca se ven interrumpidas por barritas
claras que se desprenden de las bandas supraoculares, como sucede fre-
cuentemente en la forma pictus.
L. pictus talcanensis n. ssp. se diferercia de L. pictus chiloensis fun-
damentalmente en: 1. el número de escamas de la parte media del cuerpo,
74 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
elevada en la primera (70 - 74) y reducida en la segunda (54 - 62).
2. La forma talcanensis es de tonalidad café vscura, mientras la forma
chiloensis tiene predominio de colores verdes, azules, amarillos de gran
intensidad. 3. El patern dorsal de la forma chiloensis ofrece manchas
triangularas grandes que se disponen formando un zig-zag exagerado.
Finalmente la forma talcanensis se diferencia de la forma major em:
1. el número de escamas en la parte media del cuerpo, de 66 a 70 para
major y de 70 a 74 para talcanensis. 2. La forma major es notablemente
más grande que la talcanensis. 3. El diseño dorsal de major se limita a
ligeras manchas claras en la línea media vertebral, desapareciendo las
bandas supraoculares que son tan características en las formas talcanensis
y chiloensis.
AGRADECIMIENTOS: Expresamos nuestros agradecimientos al Prof. Juan Car-
logs Ortiz, Depto. de Biología, Universidad de Chile, Valparaíso, por haber facilitado
algunos ejemplares de Liolaemus pictus pictus, colectados en el Parque Nacional
“Vicente Pérez Rosales”, Al Dr. A. F. Stimson del British Museum por enviarnos
las fotografías del syntipo de Liolaemus pictus major y por la revisión de tres ejem-
plares de esta nueva subespecie. Al Dr. Jorge N. Artigas y al Sr. Tomás Cekalovic K.
del Instituto Central de Biología, U. C., por la revisión del manuscrito.
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(minteografiado). , ué. 8: 11-19
Valparaíso, Chile 75
COLECCIONES CHILENAS DE PECES
I CATALOGO DE LOS PECES MARINOS DE LA UNIVERSIDAD
AUSTRAL DE CHILE *
GERMAN PEQUEÑO R. **
ABSTRACT: A systematic catalog of the marine fishes in the collections of the
Universidad Austral de Chile is introduced. A total number of 1589 specimens group-
ed in 111 species and 60 familias are listed with account of catalog number, locality,
number of specimens, total length and date of collection.
INTRODUCCION
La ictiología constituyeuna de las ciencias básicas a la que Chile
adscribe entre las de sus mayores intereses. Hoy por hoy el mar consti-
true un elemento que nadie desconoce en relación con la imprescindible
vida que allí se desarivlla. En algunos países de alto adelanto las leyes
que protegen los recursos marinos del vendaval humano destructor que han
llegado a conquistar la simpatía, la razón y el respeto, en ese orden, de
sus propios pueblos. :
Hoy también existe un mayor consenso en cuanto a la necesidad de
que el uso de los recursos del mar sea programado de acuerdo con los
dictados dl conocimiento científico que, aunque a veces lento en su avan-
ce, ha probado ser el mejor sistema. a
El progreso de las ciencizw pesqueras así como el de otras ciencias
cuyo material de trabajo sn los peces, requiere de conocimientos de base
para poder llevarse a cabo. La ictiología representa en este caso un factor
insustituible. El conocimiento previo de los ¡ces con que se va a trabajar
debe 3er en cuanto a la sistemática, tax»ncmía, habitat y otros datos de
terreno. Sin tales antecedentes una iniciativa pued: resultar un perjuicio.
Confundir una especie con otra y luego entregar todos los datos sobre sus
costumbres, relaciones, etc., puede significar una seria distorsión para
los aque planifican con esos conocimientos. Igualmente delicado es el uso
y equivalencia de nombres vulgares y científicos. Todos «sabemos ot»
“sardina” en un lugar puede corresponder a una especie diferente, de otro
lugar.
Una forma de solucionar estos problemas es que las autoridades que
programan «n el desarrollo, uso racional, protección y otrcs aspectos de
las pesquerías, se asesoren por buenos ictiólogos. Pero una condición sine
quanon para que estos científicos puedan cumplir adecuadamente con su
cometido es que ya «ra que estén en universidades, museos estatales u
otros centros de investigación, cuenten con los presupuestos y elementos
* Resultados parciales del Proyecto S-77-37 de la Universidad Austral de Chile.
*k* Instituto de Zoología, Universidad Austral de Chile, Casilla 567, Valdivia, Chile.
76 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
necesarios para un trabajo que es complejo. La tramquilidad personal,
que en gran medida está vinculada al nivel de consideración en que le
corresponda desempeñarse, no depende del científico exclusivamente, sino
también de aquellos que muy a menudo recurren a él para buscar solución
a los dilemas del fenómeno vital.
OBJETIVOS Y ANTECEDENTES
La zona costera de Valdivia y en general el litonal chileno cercano
a los 40*8, constituye un interesante problema para los biólogus marinos
y oceanógrafos en general, en virtud de que es una zona da transición
climática-oceanográfica. En parte del año presenta síntomas propios de
sectores subtropicales y en parte se asemeja a litorales subantárticos.
Esto genera dudas acerca del tipo de fauna, bentónica o pelágica, que habi-
ta dicho litoral. Los peces constituyen un erupo de relevancia zoológica
y biogrográfica y, lamentablemente, no han sido estudiados como los de
otras áreas de Chile por las que pasaron grandes expediciones.
Los objetivos fundamentales de este catálogo sistemático son tres:
primeramente, reunir los datos elementales acerca de la colección de peces
marinos (PM) del Instituto de Zoología de la Universidad Austral de
Chile (IZUA). Esta colección ha sido ordenada recientemente por el
autor, luego de cuatro años dr labor y reúne a un número importante
de las especies litorales de la zona señalada, además de ser rica en peces
de los canales de Chiloé. Muchos de estcs peces ya han sidw estudiados y
los resultados pertinentes publicados en su ocasión. (Pequeño, 1975, 1976
y 1977; Navarro y Pequeño, in litteris). En segundo lugar se pretende
contribuir al conocimiento ictiofaunístico de Chile al aportar datos de
«terreno fundamentales de cada especimen. En tercer lugar, dar a conocer
la existencia cr tal colección incluvendo los dates de ubicación de los
peces en ella de modo que pueda ser un elemento de utilidad y consulta
para otros científicos.-
Los catálogos regicnales de prces chilenos son muy pocos y han sido
superadcs en su urdenación con los nuevos conocimientos. Justamente
uno de los más antiguos, prácticamente una lista sistemática (Gotschlich,
1913) corresponde a la zona de Valdivia y Llanquihue. Otro trabajo simi-
¡lar se efectuó en la zona de Concepción y Arauco (Oliver, 1943). No co-
nocem>os otros trabajos de este tipo, pues lcx3 restantes han sido generales
para el mar chileno (Molina, 1782; Guichenot, 1848; Reed, 1897; Delfín,
1900; Quijada, 1913; Fowler, 1944; Mann, 1954; De Burn, 1959; Baha-
monde y Pequeño, 1975).
La colección consta de 1589 ejemplares pertenecientes a 111 especies
aproximadamente, agrupadas en 60 familias. Siete. de estas especies ron
extranjeras, pero el resto son todas chilenas, ya sea del sector antártico
o de las islas oceánicas, y representan aproximadamente al 17% de la
ictiofauna chilena conocida según Bahamonde y Pequeño (op. cit.).
La ordenación que se presenta está basada en un listado general
G. Pequeño CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE aa
de lus peces chilenos de aparición reciente (Bahamoncr y Pequeño, op.
cit.). Se han considerado las familias, les especies que las representan,
el número que ocupan las especies en la colección de peces marinos (PM),
la localidad de captura, el número de ejemplares conservados, la longi-
tud total del ejemplar o el nango entre el mayor y el menor cuando son
más, vxpresado en cm., la fecha en que ze capturarcn y observaciones
de carácter general.
Localidad N*? de Longi- Fecha
ejem- tud
Familias y especies IZUA plares total
PM cm
CLASE MYXINI |
Orden Petromyzoniformes
Petromyzonidae
tri tralis Gray 1851 28 Mehuín 1 50.6 03.-VII -1961
Geotría austral: O : 10 O
98 Jistero Collico,
Valdivia 1 59.6 25-XI -1964
109 Mehuín 2 43.2 02-V -1966
111 Mehuín 1 40.4 02-V -1966
43.6
367 Corral 1 60.4 15-X -1974
381 Río Tornaga-
leones 1 60.4 21-1 -1975
523 Chan-Chan 1 40.5 06-VI -1977
pt Abott, 1860) 204 Crow Branch- 1 11.0 21-IV -1912
Lampetra aspyptera (dota Trib, Patuxent,
R. Prince Geor-
ges Co. Laurel.
etra japonica (von Bartens, N.W.T. Dist. 1 16.2 25-VIII-1966
os) ES S 203 of Mackenzie
Great Slave
Lake, South si-
de of Vale Is.
Bridge.
Petromyzon marinus Linneo 1758 205 Michigan, Ma- 1 15.0 19-VII 1956
nistique River,
Schoderaft Co.,
Sec. 13, T41N,
R16W.
Ichthyomyzon bdellium (Jordan Pennsylvania 1 22.1 21-V -1965
1885) 206 Warren Co.,
Brokenstraw
Creek.
A
ordaciidae
¡ ici 1 30b Mehuín 1 26.6 06-VII -1961
A A 34 Mehuín 1 295 06-VII-1961
64 Mehuín 2 1 08-XH -1961
95 Mehuín 1 185 22-VI -1964
388 Isla Maiqui-
llahue 1 25.5 08-1 -1975
526 Mehuín, Barra 1 20.3 13-VII -1977
Río Lingue
Myxinidae
j ¡ j 380 Bahía Pargua
Myxine glutinosa (Linneo, 1758) Chiloé 4 4 30-1 -1960
78
Familias y especies
Myxine sp. >
Polistrotrema polytrema (Girard,
1854)
CLASE ELASMOBRANCHII
Hexanchiformes
Hexanchidae
Hexanchus griseus (Bonnaterre,
1788)
Notorhynchus cepedianus (Rerón,
1807)
Scylliorhinidae
Schroederichthys chilensis (Gui-
chenot 1848)
Lamniformes
Triakidae
Galeorhinus zyopterus Jordan y
Gilbert, 1883
Mustelus mento Cope 1877
Squaliformes
Squalidae
Centroscyllium granulosum (Gun-
ther, 1880)
Squalus fernandinus Molina 1782
Localidad
IZUA
PM
330
30a
61
443
453
Estero Pillán,
Chiloé
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Isla Maiqui-
llahue
Mehuín-Maiqui-
llahue
Piedra Blanca,
Valdivia
Punta Maiqui-
llahue
Mehuín
Corral
Mehuín
Río Valdivia
Niebla, Val-
divia
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Curiñanco,
Valdivia
Isla Maiqui-
Mahue
Fte. a Chan-
Chan
Cuadra Pta.
Bonifacio
Corral
Corral
Corral
Corral,
Amargos
Queule
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Cuadra Curi-
ñanco
N* de
ejem-
plares
n Pa pre
1
Rh pa parra. AA
DRA gprs
4
ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
Longi-
tud
total
cm
16.2
27.0
20.7
66.2
71.0
59.0a
21.3
No 10, 1977
Fecha '
23-11 -1972
06-VII,-1961
13-XII -1961
16-VII1-1975
14-VI -1976
26-VII -1976
10-VIL -1976
21-VIT -1974
29-111 -1977
121 -19261
06-VII -1961
10-XI -1969
05-TII -1972
29-111 -1974
091 -1975
091 -1975
09-1 -1975
11-V -1975
08-1 -1975
-1972
-1976
HI
03-VI
15VIIL-1961
10-XI -1965
14-1 -1969
25-VTMI-1961
28-VIIT-1961
18-XI -1975
03-1X
17-11
-1975
-1975
11-V -1975
G. Pequeño
Familias y especies
Squalus cf. fernandinus
Squalus sp.
Squalus sp.
Rajiformes
Rajidae .
Psammobatis lima (Poeppig, 1835)
Psammobatis scobina (Philippi,
1857)
Psammobatis sp.
Raja chilensis Guichenot 1848
Raja sp.
Gurgesiellidae
Gurgesiella furvescens De
Buen 1959
Myliobatidae de y:
Myliobatis chilensis Philippi 1892
Myliobatis peruvianus Garman 1913
Torpediniformes
Torpedinidae
Discopyge tschudi Heckel, 1845
IZUA
PM
48
jillones 2
CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE
Localidad N? de Longi-
ejem- tud
plares total
em
Ba. Maiquilla-
hue 24.4
24.0
“Maiquillahue 1 64.2
Maiquillahue 1 25.5
Mehuín 1 8.6
Bahía Sn. Juan,
Valdivia 1 19.5
Isla Maiqui-
Mlahue 1 64.1
ZJuriñanco 1 53.5
Jon-Con 1 51.2
3ahía Mansa 2 27.6
35.0
Con-Con 1 39.4
Laguna Verde 1 41.9
Fte. a Curi-
ñanco 1 38.0
Mehuín 1 8.7
Fte. a Corral 1 2.5
Con-Con 1 29.7
Cuadra de
Corral 2 18.7
Ancud 1 55.2
Fte. Pta. Boni-
facio 1 80.3
Con-Con 1 59.6
Curiñanco 1 970.0
Corral 1 1.700.0
Curiñanco 1 446.0
Costa de Val-
divia 17.9
Laguna Verde 2 38.7
8.0
Maiquillahue 1 51.6
Los Molinos 1 42.7
Cuadra Curi-
ñanco 1 47.6
Cuadra Curi-
ñanco 1 31.5
Mehuín 2 44.5
35.5
Maiquillahue 1 40.1
Corral 11 15.2
Chan-Chan 1
Fte. a Corral 1 32.0
Pta. Cuartel Me-
18.6
79
Fecha
28-IX
10-X
18-X
-1976
-1976
-1976
02-V
17-VI
08-1.- -1975
27-XIT -1975
24-VI -1972
28-IX -1976
-1966
-1971
11-VIT -1972
31-VIII-1972
27-V -1966
01-VITI-1975
15-1. -1974
27-VI -1972
30-XIT -1976
18-VII1-1975
23-IX -1976
11-VII -1972
02-VI
30-VI
-1976
-1976
1966
12-VII »1972
08-1 -1975
18-1 -1975
09-V -1975
11-4 -1975
30-XI -1975
30-XIGT -1976
06-VIT -1977
10-IX -1977
-V -1975
80 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
Localidad N* de Longi-
ejem- Se
Familias y especios bas A
CLASE HOLOCEPHALI
( E
Callorhynchidae
Callorhynchus callorhynchus 8 euros A 43.0
(Linneo, 1758) dea ESA ; 15
: 65 Corral 1 40.5
69 Mehuín 1 61.7
75 Mehuín 1 16.7
140 Fte. Costa
Valdivia Ñ 39.3
435 Curiñanco 1 37.5
447 Mehuín 2 41.3
60.5
Callorhynchus sp. ' 426 Puerto Nuevo 1 52,3
CLASE TELEOSTOMI
Anguilliformes
Muraenidae
G thorax panamensis
e Stsiazahnes 1876) 479 Hanga Roa,
I. de Pascua 1 37.8
Notacanthiformes
Notacanthidae '
Notacanthus sexpinnis Ri- ,
chardson, 1846 462 Valparaíso 1 32.0
Clupeiformes
Clupeidae E
Clupea (Strangomera) bentincki 6 Corral-
Norman 1936 Amargos 3. 12.8
12.5
78 Bahía Corral 1 14.6
79 Corral 6 13.7
12.1
89 Corral 48 14.1
] 10.5
241 .sla Maiqui-
Mahue 2 14.7
P 14.0
336 ¿uintupeu 1 8.7
Sardinops sagax música (Girard,
- 1854) 423 Corral 1 4.3
Ethmidium maculatim maculatum 144 Río Lingue 1 28.0
(Valenciennes, 1847) 145 Corral 1 29.4
389 Maiquillahue 1 35.2
396 Corral 5 26.4
24.0
525 Chan-Chan 1 30.0
527 Cuadra Maiqui-
llahue 12 24.0a
) 14.0
528 Cuadra Mai-
quillahue 11 19.0a
14.0
532 Corral 24 20.0a
14.
536 Amargos- ñ
Corral 19 18. Na
N* 10, 1977
Fecha
10-XII -1960
08-X1I -1961
28-XIT -1961
30-XII -1961
18-1 -1962
20-XI
11-V
03-1X
20-IT
-1968
-1975
-1975
-1975
vVII-1976
1972
16-XI
16-1
03-II
10-XI
-1960
-1962
-1962
-1962
18-X
25.111
14-1
11-1V
16-1V
081. -1975
10-IV -1976
06-VII -1977
20-VI
-1974
-1972
-1975
-1969
-1969
-1977
20-VI -1977
24-VI11-1977
07-IX -1977
G. Pequeño CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE 81
Localidad N* de Longi- Fecha
ejem- tud
PM Plares total
Familias y especies IZUA cm
Ethmidium sp. 402 Mehuín 1 28.1 22-XII -1975
Engraulidae
Engraulis ringens (Jenyns, 1842) 72 Bahía Corral 6 15.8 16-1 -1962
11.2
133 Antofagasta 12 e 10-X -1968
A E E
142 Lago Budi 25 11.3 31-I1II -1969
9.2
143 Lago Budi 113 11.1 31.01 -1969
9.7
242 Isla Maiqui-
-Mahue 1 12.6 18-X -1974
Salmoniformes
Galaxiidae
Galaxias maculatus (Jenyns, 1842) 215 Mehuín 11 6.9 22-IV -1974
6.7
230 Río Lingue 6.9 06-VI -1974
463 Quellón Viejo 5 6.5 25-IV -1975
Gonostomatidae JO
Maurolicus muelleri o 1789) 154 —Linao 1 5.6 18-VII1-1972
355 Pto. Bonito,
Chiloé 36 3.82 24-VII -1971
A: 5.2
Idiacanthidae q
Idiacanthus sp. > - 96 Corral 1 212 10-XI -1965
Cypriniformes
Cyprinidae
Tinca tinca (Linneo: 1758) 58 Corral 1 16.6 20-XI -1961
Trichomycteridae EA pr A
Pygidium areolatum (Cuvier y 209 Quetalmahue 1 7.1 Ll. -1972
Valenciennes, 1846) :
.Batrachoidiformes
Batrachoididae
Aplios porosus (Valenciennes, 1837) 2: Boyecura 17.7 16-111 -1959
2
Corral 1 22.9 14-1 -1961
20- Isla Mancera 1 25.5 12-11 -1961
JE Y : 33b Mehuín 1 18.5 06-VII -1961
ps! . ej : - 68 Mehuín 1 19.8 30-XIT -1961
82 Corral 1 18.9 18-VI -1962
-304' Mehuín 1 24.8 22-111 -1963
146 Corral 2 19.1 16-IV -1969
152 Costa Valdivia 2 14.1 XI -1968
AE 14.0
aa + 244 .S. Juan Corral 2 27.6 -XI -1968
pd es AA 27.5
-246 ¿Si Juan, Corral 3 29.0 -XI -1968
Ne TEE 20.1 -XI_ -1968
403 3. Juan, Corral 23 27.2 30-XI1-1975
cr o EPA A 20.7
82 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Localidad N' de Longi- Fecha
ejem- — tud
Familias y especies a plares De
418 Dichato 3 24.3 30-XI -1967
20.7
428 Río Valdivia 1 17.5 24-11 -1975
533 Curiñanco 1 17.2 05-IX -1977
Gobiesociformes
Gobiesocidae
i 2 158 Maiquillahue 1 12.4 11-X -1970
a UR AO O a 8.3 23-X -1970
164 Río Linque 1 6.8 02-11 -1973
191 —Chinquihue 1 8.1 30-VIIT-1973
3 Mehuín 1 5.6 26-IV -1960
54 Mehuín 1 9.8 08-XI -1961
126 Mehuín 2 Sd 27-VI -1967
8.
127 Mehuín 1 6.1 08-XI -1967
259 Linao 14 5 15-IX -1965
6.
263 Linao 9 7.6 30-XIT -1970
32
324 Faro Los Patos,
Palmas 1 6.3 22-111 -1972
845 Apiao 7 era 14-VII -1972
.5
342 —Linao 2 8.4 25-IV -1972
3864 —Linao 9 de 18-VIMT-1970
869 Los Molles 1 3.0 29-1 -1971
376 Los Molles 3 Ac 31-1 -1971
877 Los Molles 1 6.9 311 -1971
379 Isla Maiqui-
llahue 2 14.4 07-11 -1973
5.5
Sicyases sanguineus Muller y
Troschel, 1843 5 Chan-Chan 2 9.0 02-V -1960
7.6
9 —Mehuín 2 a 30-XII -1960
14.
22 Mehuín 1 7.2 03-11I -1961
27 Río Cruces 1 1.7 30-V -1961
42 Mehuín 1 5.7 27-VII -1961
50 Mehuín 1 84 27-IX -1961
53 Mehuín 1 4.9 08-XI -1961
55 Mehuín 1 13.0 08-XI -1961
63 Mehuín 1 7.1 09-XIT -1961
85 Mehuín 1 10.9 02-VIT -1962
88 Mehuín 8 11.4 -XI -1962
2.1
131 Mehuín 6 e 12-I -1968
.8
135 Mehuín 3 32.1 02-VIT -1968
18.1
136 Mehuín 01-VIIT-1968
huevos y embriones de la misma especie.
137 Mehuín 09-IX -1968
huevos y embriones.
138 Mehuín 2 e 30-X -1968
32.
167 Mehuín 2 E 03-11 -1978
2.
G. Pequeño CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE 33
Localidad N* de 'Longi- Fecha
ejem- tud
Familias y especies IZUA plares total
PM cm
168 —Mehuín 1 3.2 05-11 -1973
171 Isla Maiqui-
llahue 1 15.7 07-11 -1973
300 Quetalmahue 1 14.6 -I -1972
368 Los Molles 2 32.0 281 -1971
26.6
378 Los Molles 1 9.0 31-1 -1971
431 Mehuín 1 12.0 26-11 -1975
Gadiformes
Eretmophoridae
Salilota autralis (Giúnther, 1878) 67 —Mehuín
1 35.0 30-XII -1961
277 —Quintupeu 1 42.0 23-VIT -1971
347 Quintupeu 1 34.0 15-VII -1972
348 —Quintupeu 1 31.5 15-VII -1972
385 Isla Maiqui-
llahue 1 61.0 08-1 -1975
486 Bahía Mansa 1 48.0 28-IX -1976
Merlucciidae
] i i (Guichenot, 1848) 29 —Queule 1 59.5 28-VI -1961
A, 43 Queule 1 7.4 28-VII -1961
Ophidiidac blacodes (Schneid
t es (Schneider,
reta 5 66 Corral 1 36.2 28-XII-1961
362 Linao 1 20.2 18-VIIT-1970
278 Pto. Bonito 1 37.2 24-VII -1971
Zoarcidae
Austrolycus depressiceps Regan,
1913 294 Linao 2 20 6, OL-XI 1971
16.
358 Quemchi 2 E -II -1969
pa /
856 Chacao 1 8.5 31-1. -1960
Macrouridae
Coelorhynchus caribbaeus (Goode y y
459 Caribbean
pen 238950 ) Atlantic 3 24.1
19.3
iae Gilbert
dla patin á 455 Constitución 2 570
Atheriniformes.
Scomberesocidae
o a 130 Mehuín 1 421 J -1988
a sp. (larvas) 395 Bahía Pargua 3 1.8 24-1 -1960
_Atherinidae ; eloh
edo 1833) copesia AU 24 Mehuín 9 110 OLIV -1961
70 Puerto Claro 1 8.3. 04-1 -1962
de 271 Río Lingue 1 7.2 06-VI -1974
84
Familias y especies
Gasterosteiformes
Leptonotus blainvillianus (Eydoux
y Gervais, 1837)
ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
Syngnathidae
Scorpaeniformes
Scorpaenidae
IZUA
PM
256
279
280
281
282
283
285
290
308
310
327
10
103
114
134
272
316
519
Helicolenus lengerichi Norman, 1937 483
Sebastes oculatus Cuvier, 1833
37
38
236
329
335
340
351
399
209
108
500
501
Localidad
N* de
ejem-
plares
Bahía Pargua bs
Estero Pillán
Estero Pillán
Estero Pillán
Estero Pillán
Estero Pillán
Estero Pillán
Cahuelmó
Quemchi
na pr Parar
Isla Huemules 3
Estero Pillán
Corral,
Amargos
Río Lingue
Mehuín
Mehuin
San Pedro,
Chiloé
Laguna Nal-
cayec
Río Maullín
Cuadra de Pu-
catrihue
Mehuín
Mehuín
Corral
Estero Pillán
Quintupeu
Linao
Quintupén
Corral, Morro
Gonzalo
Corral
Mehuín
Morro Gon-
zalo
Morro Gon-
zalo
2
4
1
1
1
7
17
1
4
0 HH y
Longi-
tud
total
cm
1.9
29.8
14.3
16.8
14.7
larvas
14.3
12.5
23.5
24.5
N”? 10, 1977
Fecha
241 -1960
19-VIIT-1971
19-VITMI-1971
19-VIII-1971
19-VIII-1971
19-VIIT-1971
19-VIII-1971
22-VITM-1971
08-111 -1972
11-111 -1972
23-111 -1972
09-1 -1961
14-1. -1966
02-V -1966
18-VI -1968
23-VW -1971
15-111 -1972
12-1X -1976
28-1X -1976
06-VIT -1961
06-VIT -1961
26-VIII-1974
25-111 -1972
25-111 -1972
25-IV_ -1972
15-VIIM1-1972
26-XI -1975
22-1 -1974
02-V -1966
17-XII -1976
17-XII -1976
G. Pequeño
Familias y especies IZUA
PM
Congiopodidae
Congiopodus peruvianus (Cuvier,
1829) 99
261
307
333
Normanichthyidae
Normanichthys crockeri Clark, 1937 511
Agonidae
Agonopsis chiloensis (Jenyns, 1842) 162
192
265
341
354
Perciformes
Serranidae
Paralabrax humeralis (Valenciennes,
1828) 464
Polyprion yañezi De Buen, 1959 531
Branchiostegidae
Prolatilus jugularis (Valencien-
nes, 1833) 15
18
237
326
332
349
350
482
Carangidae
Trachurus murphyi Nichols, 1920 547
Bramidae
Lepidotus australis (Valenciennes) 542
Pomadasyidae
Isacia conceptionis (Cuvier, 1830) 384
Localidad
Fte. Costa
Valdivia
Ralún
Quintupeu
Quintupeu
Mehuín
N* de
ejem-
plares
E
Fte. a Mehuín 1
Chinquihue
Linao
Linao
Challahué
Bajo Molle,
Iquique
Pto. Montt
hacia Estero
Reloncaví
Corral
Niebla
Corral
Estero Pillán
Quintupeu
Quintupeu
Quintupeu
Bahía Mansa
Frente a
Corral
Frente a
Corral
Isla Maiqui-
hue
1
1
5
3
1
1
1
1
4
4
3
2
5
1
CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE
Longi-
tud
total
cm
4.7
49.0
25.7
85
Fecha
-1966
-1971
-1972
-1972
24-1V
25-11
25-111
23-X -1974
24-XI -1971
30-VII1-1973
30-XII -1970
25-IV -1972
25-V -1973
20-X1 -1975
18-VII -1975
14-1 -1961
27-11 -1961
26-VIII-1974
23-111 -1972
15-111 -1972
15-VII -1972
15-VII -1972
28.1X -1976
08-X -1977
10-IX -1977
08-1 -1975
86 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
Localidad N?* de Longi- Fecha
ejem- tud
Familias y especies IZUA plares total
PM cm
469 — Iquique 2 25.7 14-XIT -1975
22.3
Sciaenidae
Micropogon manni Moreno 1970 141 Lago Budi 2 a 30-111 -1969
Sciaena gilberti (Abbott, 1899) 12 Corral 1 20.1 10-1 -1961
Ovnlegnathidae
Oplegnathus insignis (Kner, 1867) 465 Huaiquique 1 15.0 10-X -1975
Pomacentridae
Nexilosus latifrons (Tschudi, 1844) 467 Husiquique Es 23.5 12-XII -1975
Aplodactylidae
Aplodactylus punctatus Valencien-
nes, 1831 497 — Mehuín 1 52.0 10-XII -1976
Cheilodactylidae
Cheilodactylus variegatus, Valen-
ciennes, 1833 468 —Huaiquique 2 28.5 14-X1H1 -1975
25.0
Mugilidae
Mugil cephalus Linneo 1758 157
San Juan,
Valdivia 9 23.0 29-1X -1970
, 17.2
Labridae
Graus nigra Philippi, 1887 473 ne 27.0 23-1 -1976
Labrichthys fuentesi Regan, 19183 480 UA oa, -
1. de Pascua 3 E -VIM-1976
12.
Mugiloididae
Mugiloides chilensis (Molina, 1782) 286 Estero Pillán 1 31.5 19-VII1-1971
381 Quintupeu 1 287 25-11 -1972
361 Marimeli 2 39.1 25-IV -1970
29.5
Bovichthyidae
Bovichthys chilensis Regan, 1913 20 — Mehuín 3 25.5 03-III -1961
21 Mehuín 3 10.3 03-I1I -1961
8.0
3l Mehuín 1 33.6 06-VIT -1961
33a Mehuín 27 12.5 06-VII -1961
7.2
36 Mehuín 1 81.7 06-VII -1961
56 Mehuín 1 11.0 08-XI -1961
59 — Amargos 1 25.2 20-XI -1961
77 Niebla 1 27H 27-1 -1962
84 —Mehuín di 8.1 22-VI -1962
90 Mehuín 2 14.8 15-XI -1962
8.4
G. Pequeño
Familias :-
Notothenniidae
especies
CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE
IZUA
PM
124
132
148
243
360
492
Eleginops maclovinus 7
(Valenciennes, 1830) 17
Localidad N? de
ejem-
plares
Mehuín 1
Mehuín 3
Mehuín 1
Mehuín 1
Marimeli 1
Maiquillahue 1
Mehuín 1
Corral,
AÁmargos 1
Desemb. Río
Lingue
Río Calle-
Calle 1
Río Valdivia 1
Amargos 1
Mehuín 1
Puerto Claro 2
Corral 25
Pto. Claro 60
Pto. Claro 42
Queule 1
Mehuín 1
Río Valdivia 1
Corral,
Amargos 15
Corral,
Amargos 15
Mehuín 1
Mehuín,
Caleta 2
Corral,
Amargos 1
Mehuín
Río Lingue 23
Quellón Viejo 1
Estero Pillán 1
Isla Huemules 14
Estero Pillán 1
Linao
Quellón Viejo
Quellón Viejo
Quellón Viejo
Quellón Viejo
C. de Corral 9
Rh. pp DD pp
Longi-
tud
total
cm
nou a
Pago
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SWHRHw»Now RIA JIOno ae huir Si araorrvoOoTMAa IZ
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dh.
87
Fecha
15-1
18-1
-1967
-1968
-1970
-1974
-1970
-1976
01-II
29-X
25-1V
21-X
18-XI
24-1
14-1V
-1960
-1961
-1961
02-V -1961
20-VII -1961
22-1X -1961
10-VIII-1961
04-1 --1962
25-1 -1962
20-VI -1963
20-VI -1963
11-1. -1966
02-V -1966
13-VII1-1966
28-XIT -1966
15-1
22-1V
27-IV
-1967
-1974
-1974
19-111 -1974
22-1V -1974
06-VI -1974
30-XII -1974
19-VIII-1971
11-11 -1972
23-111 -1972
25-IV -1972
26-11-1975
25-1V -1975
25-IV -1975
27-IV -1975
30-X11-1976
88 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
Familias y especies
Notothenia cf, brevicauda
Lonnberg, 1905
Notothenia coriiceps neglecta
Notothenia cornucola Richard-
son 1845
Notothenia longipes Steindach-
ner, 1876
Notothenia microlepidota Hutton,
1876
Notothenia rossi
Notothenia sima Richardson, 1845
Notothenia tessellata Richard-
son, 184
IZUA
PM
530
323
249
218
258
339
343
344
359
365
315
317
320
322
325
211
248
390
391
392
di
250
291
314
260
271
274
276
309
313
Localidad 2 de
ejem-
plares
Río Torna-
galeones 2
Canal Refugio 8
Isla Rey Jorge,
Antártida 1
Huelmo, Llan-
quihue
Linao
Linao
Linao
Apiao 1
Quemchi
Linao 1
A EN y E y]
Canal Nalcayec 1
Caleta Lobatos 7
Caleta Lobatos 6
Pta. Muñoz, Pa-
so Sibbald 1
Estero Pillán 1
Mehuín 7
"Mehuín 10
Caleta Sn. Car-
los, Corral 1
Caleta Sn. Car-
los, Corral 1
Caleta Sn. Car-
los, Corral 1
Mehuín 1
Mehuín, Río
Lingue 4
Isla Rey Jorge,
Antártica 2
Compu 2
Canal Nalcayec 1
Linao 9
San Pedro 1
Linao 1
Linao 2
Melinca 1
Canal Nalcayec 3
Longi-
tu
total
cm
p
pu
y
po]
SS EE
p
hh Gioja Wayhkkrwnozxrox/
A
NA
[me]
A A
AA:
coaJdwtoaRHn 30
N* 10,
1977
Fecha
02-11
21-I1I
18-1
05-V
15-IX
25-IV
25-IV
-1976
-1972
-1973
-1974
-1965
-1972
-1972
14-V111-1972
-IT
-1969
18-VIII-1970
15-I1I
16-I1I
16-111
20-TII
22-M1I
17-111
-1972
-1972
-1972
-1972
-1972
-1974
31-XII -1974
09-III
15-111
-1975
-1975
-1975
-1975
-1975
-1973
-1971
-1972
-1965
-1971
-1971
-1971
-1972
-1972
G. Pequeño CATALOGO PECLS, U. AUSTRAL, CHILE 89
Localidad N*? de Longi- Fecha
e A ejem- tud
Familias y especies IZUA plares total
PM cm
318 Caleta Lobato 6 19.5a 16-111 -1972
15.3
319 Caleta Lobato 7 17.5a 16-III -1972
11.0
337 Linao 26 12.4a 25-IV -1972
6.4
z 353 Linao 1 18:2 S y
Notothenia wiltoni Regan, 1913 48 Puerto Claro 1 12.4 Ad
81 Puerto Claro 2 17.9 09-V -1962
17.5
275 Linao 2 10.9 28-VI -1971
7.2
Notothenia cf. wiltoni Regan, 1913 245 San Juan,
' Corral 1 15.8 20-XI -1974
Notothenia Sp. 125 Corral 1 4.2 31-111 -1967
Blenniidae
Hypsoblennius sordidus (Bennett, E
1828) 122 Mehuín 1 9.6 15-1 -1967
193 Chinquihue 2 6.7 30-VIIML-1973
6.2
269 — Talcán 1 3.0. 22V -1971
302 Faro Ralún 1 6.2 14-11 -1972
496 Pelluco Sur 1 10.9 06-XIL -1976
521 Mehuín 1 10.2 20-VI -1977
Scartichthys gigas Steindachner 471 Playa Blanca,
472 Iquique 1 23.0 10-1 -1976
Huaiquique
2 lquque. 10 246 28. 1978
Huaiquique
Jquique 1 24.0 20-V -1976
Scartichthys rubro-punctatus Va-
lenciennes, 1836 251 Caleta
Leandro 3 ed 18-XII -1974
3.
375 Los Molles 3 16.5 81-1 -1971
Scartichthys viridis (Valencien- 11.0
nes, 1836) 177 Mehuín 3 EE 01-VII -1973
466 Huaiquique,
aiqds 1 26.0 12-XII -1975
Tuptereildse . (Smith
ripterygion cunninghami mith,
898 149 —Mehuín 1 5.2 01-11 -1970
180 Mehuín 3 5.0
3.6
264 —Linao 1 4.9
477 Chan-Chan a Eo 22-X -1976
498 Mehuín 1 4.9 14-XI -1976
Tripterygion tripteronotus 458 —Banjuls-sur-
mer 3 7.0a
Mediterranean
coast 4.1
Clinidae
Auchenionchus microcirrhis Valen- : 1 E -1971
ciennes 374 Los Molles 2 A 31-1
90 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
Localidad N” de Longi- Fecha
ejem- tud
Familias y especies IZUA plares total
PM cm
Auchenionchus variolosus (Valen-
"ciennes, 1836). 35 Mehuín 1 26.1 06-VII -1961
60 Caleta Amargos,
Corral 1 30.4 20-XI -1961
86 Mehuín 1 9.9 10-IX -1962
115 Mehuín 1 34.3 02-V -1966
30.3
159 Maiquillahue 1 14.4 11-X -1970
165 Río Lingue,
Mehuín 2 11.5 02-11 -1973
11.4
201 Mehuín 5. 10.1 22-XI -1973
373 Los Molles 1 13.4 31-1 -1971
398 Mehuín 1 25.2 26-X -1975
425 Puerto Nuevo 1 33.3 20-11 -1975
470 Garganta del
Diablo,
Iquique 1 29.9 31-XI5T -1975
Celliclinus geniguttatus (Valencien-
nes, 1836) 23 Mehuín 2 10.1 21-111 -1961
9.7 Í
47 Mehuín 2 16.2 08-IX -1961
10.9
87 Mehuín 4 EE -XI -1962
Y
93 Mehuín 1 11.2 28-1V -1964
118 Mehuín 1 17.4 29-VII -1966
119 —Mehuín 1 25.6 15-VIM-1966
128 Mehuín 1 9.7 14-XII -1967
155 San Carlos,
Corral 1 9.0 25-VITI-1970
169 Maiquillahue 2 e 07-VII -1973
173 Mehuín 4 9.9 01-VI -1973
6.3
176 —Mehuín 1 6.9 01-VII -1973
198 Mehuín 1 11.9 22-XI -1973
202 — Mehnín 1 9.3 22-XI -1973
213 —Niehla 1 9.3 23-I1I -1974
221 —Huelmo,
Huaiquique 1 9.4 05-V -1974
227 Mehuín 2 6.4 11-V -1974
6.1
233 Mehuín 1 6.0 16-VI -1974
239 Amargos, Peña
de Corral 1 11.1 17-IX -1974
252 Caleta Leandro,
Concep. 1 3.2 18-XII -1974
254 Caleta Leandro,
_Concep. 1 3.2 18-XTIT -1974
266 —Linao 1 10.8 30-XIT -1970
267 Talcán 4 9.6 22-V -1971
5.3
293 Compu 10 1237 31-X -1971
6.0
295 Linao 1 10.1 01-XI -1971
301 Quetalmahue 1 7.3 061 -1972
272 Los Molles 4 13.0 31-1. -1971
8.9
383 Mehuín 5 9.1 03-1. -1975
4,4
G. Pequeño
Familias y especies
Gibbonsia metzi
CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE
IZUA
PM
491
Myxodes cristatus Valenciennes,
1836
Myxodes viridis Valenciennes, 1836 52
Localidad
N* de
ejem-
plares
Mehuín 10
Mehuín
T.S.A.
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
San Carlos,
Corral
Mehuín
Río Lingue,
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Huelmo, Huai-
quique
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Corral
Maiquillahue
Chacahue
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Mehuín
Chinquihue
Mehuín
Mehuín
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Longi-
tud
total
cm
15.9
10.4
pp
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Sinrovitiohoxvburvunhoniaaco ii PRioNvioNanaae aliom tobas Ohtlí hohomt No
5
91
Fecha
22-VI -1976
10-VIII-1976
26-IV
27-1X -1961
08-XI -1961
02-VIT -1962
23-111 -1966
02-V -1966
25-VII1-1970
01-11 -1970
-1960
02-11 -1973
14-VII -1973
17-VII -1973
20-IX -1973"
05-V -1974
11-V -1974
26-II- -1975
31-VIII-1976
15-X
27-11
-1961
-1962
28-IV -1964
02-V -1966
29-VII -1966
15-1 -1967
15-XI -1967
01-11 -1970
25-VIII-1970
07-11 -1973
25-V :-1973
18-VI -1973
01-VII -1973
17-VIT -1973
17-VII -1973
14-VII -1973
26-VII -1973
01-VITI-1973
01-VIII-1973
01-VIII-1973
30-VIII-1973
20-IX -1973
04-X -1973
Longi-
tud
total
cm
pa
A ha pa
h DA
RD PPIOPANNPICOPRO ONMZINADO
vo aora DoDiA SORA too
SIRO
MOHO OR
92 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
Localidad N* de
ejem-
Familias y especies IZUA plares
PM
199 —Mehuín 1
200 — Mehuín 1
210 Mehuín 1
223 Mehuín 1
225 —Mehuín 4
226 Mehuín 15)
229 Río Lingue,
Mehuin 2
235 Mehuín 9
240 Mehuín 4
253 Caleta Leandro 1
366 —Linao 2
371 Los Molles 6
516 —Mehuín 14
518 Río Maullín 1
520 Mehuín, Cerro
Quemado 1
Myxodes sp. 270 San Pedro 1
Gobiidae
Ophiogobius jenynsi Hoese 113 Tsla de Chiloé 1
268 —Talcán 1
273 San Pedro 3
292 * 3
370 Los Molles 1
419 Cerro Verde 3
Gempylidae
Thyrsites atun (Euphrasen, 1791) 444 Frente a
Mehuín 3
Scombridae
Gasterochisma melampus Richard-
son 1845 185 Maiquillahue 1
Sarda sarda chiliensis (Cuvier 1831) 232
Scomber japonicus peruanus (Jordan
y Hubbs, 1925)
506
Centrolophidae
Seriolella porosa Guichenot, 1848 238
433
Seriolella violacea Guichenot, 1848 11
Stromateidae
Stromateus stellatus Cuvier, 1829 284
Mehuín 1
Cuadra Los
Molinos 1
Curiñanco 5
Corral 1
Corral 3
Amargos
Corral 5
Estero Pillán 1
N” 10, 1977
Fecha
-1973
-1973
-1974
-1974
-1974
-1974
14-VII
21-XI
17-111
11-V
11-V
11-V
06-VI
16-VI -1974
27-XI -1974
18-XII -1974
18-VII1-1970
311 -1971
09-VIII-1976
12-1X -1976
20-VI
23-V
-1974
-1977
-1971
1966
-1971
-1971
-1971
12-V
23-V
31-X
29-1
02-VI
-1971
-1969
07-VI -1975
26-VIT -1973
11-VI -1974
-1977
-1977
-1974
-1975
-1961
19-VIII-1971
G. Pequeño CATALOGO PECES, U. AUSTRAL, CHILE 93
Localidad N* de Longi- Fecha
A : ejem- tud
Familias y especies IZUA plares total
PM Cm
289 Palena 1 21.2 20-VII1-1971
538 Frente a
. Corral 1 13.0 10-IX -1977
Bothidae
Paralichthys microps (Gunther,
1881) 73 Frente a Car-
bonero 1 14.4 171 -1962
110 Mehuín 1 14.2 02-V -1966
262 —Cochamó 1 24.3 19-XII -1970
287 Estero Pillán 2 25.6 19-V111-1971
18.4
303 —Quintupeu 1 28.8 25-11 -1972
304 — Quintupeu 1 30.7 25-1I -1972
305 Quintupeu 1 31.2 25-11 -1972
306 —Quintupeu 1 30.2 25-11 -1972
334 Quintupeu 1 28.9 25-11 -1972
436 Curiñanco 1 25.0 11-V -1975
541 Frente a
Corral 1 39.5 10-IX -1977
25.5
Pleuronectidae
Hippoglossina marcrops, Steindach-
ner, 1876 1 Boyecura 1 14.4 15-111 -1959
74 Bahía de
Corral 1 16.7 121 -1962
139 Costa de
Valdivia 1 16.0 20-XI -1968
B34 Curiñanco 1 2.8 05-IX -1977
535 Curiñanco 6 27.7a 05-IX -1977
537 Frente a
Corral 1 15.0 10-IX -1977
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Valparaíso, Chile 95
DISTRIBUCION ESPACIAL DE DOS ESPECIES COLONIZADORAS
DEL MATORRAL CHILENO
JULIO GUTIERREZ C. * y JUAN ARMESTO Z. **
ABSTRACT: The spatial pattern of Gutierrezia paniculata D. C. is analized in
three different stages of colonization of disturbed areas. A change in the pattern
related to the age of the populations in found. This change could be the result of
intraspecific competition. Population density of G. paniculata decreases in a mixed
stand with Muehlenbeckia hastulata (J. Sm.) Stand et Macbr., suggesting competi-
tive displacement. Insect predation could be influencing the spatial pattern of M.
hastulata.
INTRODUCCION
Las especies vegetales en la naturaleza presentan una distribución
espacial que está determinada por sus interacciones con el medio am-
biente y por sus relaciones intra e interespecíficas (Hutchinson 1953).
Han sido definidas tres formas como los individuos de una población
pueden estar distribuidcs en un área determinada: al azar, agrupados o
regularmente espaciados. Se ha demostrado que si las plantas están ubi-
cadas al azar en un área, al disponer sobre ella una red de cuadrados, el
número de individuos por cuadrados se puede ajustar a una distribución
de Poisson (Mac Arthur y Connell 1966, Whittaker 1970, Kershaw 1973).
Distribuciones agrupadas han sido comúnmente encontradas en hier-
bas, donde pequeños cambios en algún factor ambiental afectan fuerte-
mente la distribución de las plantas (Kershaw 1958a, 1959, Hall 1971).
La reproducción vegetativa y la caída de las semillas muy cerca de las
plantas parentales también pueden originar agrupaciones (Kershaw
1963). :
Por otro lado, en vegetación arbustiva, varios investigadores han
encontrado que la distribución cambia de acuerdo al estado de desarrollo
de la población (Kershaw 1958b, Greig-Smith y Chadwick 1965, Ander-
son 1971). Las plantas presentan una distribución agrupada en poblacio-
nes juveniles, mientras que en fases maduras alcanzan disposiciones a)
azar.
En este trabajo analizaremos el tipo de distribución que presentan
poblaciones de Gutierrezia paniculata D. C. en diferentes estados de des-
arrollo, y cuando coexiste con Muehlenbeckia hastulata (J. Sm.) Stand et
Macbr.
* Laboratorio de Ecología, Instituto de Ciencias Biológicas, Universidad Católica
de Chile, Santiago. : : P A
** Laboratorio de Botánica, Instituto de Ciencias Biológicas, Universidad Católica
de Chile, Santiago.
96 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N? 10, 1977
MATERIAL Y METODOS
El muestreo se practicó en Febrero de 1976 en tres parcelas ubica-
das al interior del Fundo Manantiales (Prov. de Aconcagua, 32-38” lat. S
y 71:18 long. 0), a 10 km del pueblo de Catapilco. Las parcelas se en-
cuentran en áreas que fueron anteriormente destinadas a cultivo, y que
actualmentz están abandonadas. Las únicas especies arbustivas que se
desarrollaban en ellas son las que se mencionan a continuación.
Parcela 1: Población juvenil de G. paniculata, constituida por plan-
tas de alturas menores de 0,50 m. La parcela está ubicada en una ladera
de exposición Norte, con pendiente de 25* y a 320 m s.n.m. Area mues-
treada: 100 m2.
Parcela 2: Población madura de G. paniculata constituida por plan-
tas de más de 1 m de alto. La parcela se encuentra ubicada 20 m más
abajo que la parcela 1, en la misma ladera. Area muestreada: 100 m2,
Parcela 3: Poblaciones maduras de G. paniculata y M. hastulata. Es-
ta parcela está ubicada en una ladera de exposición NO (340*), con pen-
diente de 15* y a 360 m s.n.m. Area muestreada: 400 m2.
Las parcelas 1 y 2 se subdividieron mediante cordeles en 100 cua-
drados de 1 x 1 m y la parcela 3 en 100 cuadrados de 2 x 2 m. En cada
parcela se contó el número de individuos por cuadrado, el que se comparó
con el número esperado de acuerdo a la distribución de Poisson.
RESULTADOS
La distribución espacial de los individuos de la población juvenil de
-G. paniculata no se ajusta a una distribución de Poisson (Tabla 1). La
razón varianza/promedio, para la misma población indica que las plantas
se encuentran agrupadas (t = 3,51, P<0,05).
TABLA 1
Distribución de las plantas en una población juvenil de G. paniculata
(densidad: 1,46 individuos por m2).
N? de individuos
por cuadrado 0 1 2 a) >4
Valor esperado 23,22 38391 2475 1205 5,99
Valor observado 339 26 19 13 9
X? = 8,89 (P<0,05)
En la población madura la densidad de plantas disminuye notoria-
mente en relación a la población juvenil, y la distribución es al azar
(Tabla 2). Estos resultados muestran que hay un cambio en el patrón de
distribución de esta especie colonizadora con la edad de la población.
TABLA 2
Distribución de las plantas en la población de G. paniculata en estado
maduro (densidad: 0,55 individuos por m2).
J. Gutiérrez y J. Armesto DISTRIBUCION ESPACIAL. .. 97
N* de individuos
por cuadrady 0 1 Sa
Valor esperado 57,69 31,73 10,33
Valor observado 60 27 13
X? = 1,49 (P no significativa)
En la parcela 3, donde coexiste G. paniculata y M. hastulata, la dis-
tribución de la primera especie es similar a la que tiene en la parcela 2
(Tabla 3). Sin rmbargo, la densidad poblacional de G. paniculata decre-
ce marcadamente con respecto a laz parcelas 1 y 2. Por otro lado, M. has-
tulata presenta una distribución al azar en la parcela 3 (Tabla 4), con una
densidad de plantas tres veces mayor que la de G. paniculata.
TABLA 3
Distribución de G. paniculata (dansidad: 0,90 individuos por m2),
coexistiendo con M. hastulata.
N?* de individuos
por cuadrado 0 1 SE
Valor esperado 69,17 25,12 5,06
Valor okservado 68 29 3
X? —= 1,48 (P no significativa)
TABLA 4
Distribución de plantas de M. hastulata en la parcela 3 (densidad de
individuos: 0,25 por m2).
N* de individuos
por cuadrado 0 1 2 Su:
Valor esperado 36,79 36,78 18,39 7,97
Valor observado 42 28 22 8
X? —=— 3,55 (P no significativa)
DISCUSION
Los resultados muestran que la distribución de G. paniculata en la
colonización de sitics alterados cambia según la fase de desarrollo en que
se encuentran las plantas. Considerando que las srmillas de G. paniculata
son dispersadas por el viento (Johow 1945), podríamos esperar que éstas
se distribuyeran al azar en un área descubierta (Skellman 1951). Sin
embargo, leves irregularidades en la topografía del habitat generarán
condiciones microclimáticas que afectarán las oportunidades de germina-
ción de las semillas, que son de reducido tamaño (1-2 mm). En conse-
cuencia, en aquellos sectores donde los microhabitats jean más favora-
bles (p. ej. surcos en el suelo que retienen humedad) se producirán agru-
98 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N? 10, 1977
paciones de plántulas. Este mecanismo produciría la distribución agru-
pada en la población juvenil de G. paniculata.
El cambio en la distribución de G. paniculata en estado maduro (Par-
cela 2), y la fuerte disminución en su densidad con respecto a la pobla-
ción juvenil (Parcela 1), podría ser el resultado de la competencia intra-
específica (Grcig-Smith y Chadwick 1965, Harper 1967).
En relación a M. hastulata podríamos esperar que la distribución de
plantas fuese agrupada, ya que sus semillas son relativamentz pesadas y
caen a corta distancia de las plantas parentales. Sin embargo, encontra-
mos una distribución al azar.
Janzen (1970) ha sugerido que la predación por herbívoros, impe-
diría la agrupación de plántulas en torno a las plantas parentales. Fuen-
tes y L2 Boulenge (en preparación) han observado que M. hastulata es
fuertemente predada por larvas de Lepidópteros (Lasiocampidae, Macrom-
phalia sp.). Además encontraron que la densidad de larvas por arbusto
estaba positivamente correlacionado con la densidad de M. hastulata. Por
lo tanto, la predación podría ser el mecanismo que provoca el espacia-
miento observado en poblacionez de M. hastulata.
Por otro lado, ka marcada disminución de la densidad de G. paniculata
en la parcela 3, con respecto a las parcelas 1 y 2, sugiere un posible efec-
to competitivo de las plantas de M. hastulata sobre G. paniculata que po-
dría ser investigado. Con frecuencia observamos que individucs de G.
paniculata eran casi totalmente cubiertos por las ramas y hojas de plan-
tas vecinas de M. hastulata. Además las plantas de esta última especie
forman masas compactas que ocupan una gran superficie, disminuyendo
el espacio disponible para el crecimiento de plántulas de G. paniculata.
Se observó también que las raíces de M. hastulata penetran a mayor pro-
fundidad que las de G. paniculata. Las ventajas competitivas de M. hastu-
lata sobre G. paniculata serían el resultado de la posesión de una semilla
con mayor cantidad de endosperma alimenticio, característica que la favo-
rece en las primeras etapas del desarrollo. Este tipo de semilla permite a
las plántulas un veloz crecimiento de ramas y hojas, consiguiendo apro-
vechar en forma rápida y eficiente la luz solar (Black 1958). Por otro
lado, las raíces podrán alcanzar los estratos húmedos del suelo antes que
otras plantas de semillas más pequeña, en sitios donde el agua no es
superficial (Stebbins 1968). Basados en estos argumentos, pensamos que
la colonización de los sitios alterados en el área estudiada sería iniciada
por G. paniculata, que presenta un amplio rango de dispersión de semillas.
Si M. hastulata arriba en segundo lugar podría desplazar competitiva-
mente a G. paniculata.
AGRADECIMIENTOS: Expresamos nuestro reconocimiento a las siguientes per-
sonas, por sus comentarios sobre versiones preliminares de este trabajo: Prof. Claudio
Donoso, Dr. Eduardo Fuentes, Prof. Rodolfo Gajardo, Sr. Fabián Jaksic y Dr. Eric.
Le Boulenge. Agradecemos a Francisco Lizana su colaboración en la labor de terreno. -
J. Gutiérrez y J. Armesto DISTRIBUCION ESPACIAL... 99
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ad MS RO
Valparaíso, Chile +20 E AY PEY A ERASE 101
ESTUDIO MICROBIOLOGICO DE SUELOS DEL BOSQUE
DEL PARQUE NACIONAL “FRAY JORGE”
VICTORIANO CAMPOS y FREDDY LUND en.
ABSTRACT: A soil microbiological study was carried out at National Park
Fray Jorge. The total microflora and its participation on Carbon and Nitrogen cycles
were determined.
El Parque Nacional Fray Jorge, situado en la Cordillera de la. Costa,
en la provincia de Coquimbo, en la latitud aproximada de 307 34” sur y
71* 11” longitud oeste, presenta características ecológicas de gran interés
científico, que han motivado numerosos trabajos sobre su geografía, cli-
matología, flora, faúna y ecología. Una recopilación bibliográfica de ellos
puede encontrarse en Sáiz (1971).
Con el presente trabajo sobre la Microbiología del suelo del bosque
del Parque Nacional Fray Jorge, iniciamos algunos estudios de base, deter-
minando los grandes grupos de microorganismo presentes, y su partici-
pación en los ciclcs del Carbono y del Nitrógeno. Estos resultados pueden
ser de utilidad para realizar estudios comparativos de suelos y un com-
p'zmento para investigaciones ecológicas de la flora y microfauna.
MATERIALES Y METODOS
Muestras del suelo.— Las muestras fueron colectadas asépticamente
en envases de plástico, en el mes de Enero de 1977, de una profundidad
de 5 a 15 cms.
Medios de cultivo.— Los medios de cultivo utilizadcs para los recuen-
tos de hongos, actinomicetos, algas y en los diferentes grupos funcionales
se realizaron de acuerdo a Pochon y Tardieux (1967).
Técnicas. — El contenido de agua de las muestras de tierra fue de-
terminada por desecación en estufa hasta peso constante.
El pH fue determinado en un pH-metro en forma directa, adicionan-
do a las muestras H?0 a pH neutro.
La determinación del número de microorganismos se realizó por re-
cuento en placa, y por recuento en tubo (3 tubos por dilución) estable-
ciendo el número más probable de gérmenes de acuerdo a la tabla de
Mec Crady.
Los cultivos fueron incubados en estufa a 28* C, excepto los de algas
que fueron mantenidcs a t* ambiente y luz artificial, con una fuente
luminosa de 1300 lux/em?.
* Trabajo parcialmente financiado por la Dirección de Investigación Científica de
la Universidad Católica de Valparaíso. Pa
** Instituto de Ciencias Básicas, Universidad Católica de Valparaíso, Casilla 4059,
Valparaíso.
102 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
RESULTADOS
Características físico-químicas de las muestras de tierra.
Contenido de agua 13,9% pH 4,6%
CUADRO Nr 1
Recuento de la Microflora
N+ Microorganismos/gr tierra
Hongos 6 x 105
Actinomicetos 4 x 103
Algas 25.
Microflora total 3 x 107
CUADRO Nr 2
Recuento de microorganismos que fijan N2 en forma aerobia.
Dilución de la muestra
días 101 102 103 10-4 10.5 10-6
7 111 000 000 000 000 000
15 111 . 000 000 000 000 000
Resultado = 95 microorganismos/gr.
CUADRO Nr 3
Recuento de microorganismos que fijan N2 en forma anaerobia.
Dilución de la muestra
días 10-1 102 10-3 10-4 10-5 10-6 10-? 10-8
7 000 000 000 000 000 000 000 000
15 111 000 000 000 000 000 000 000
Resultado = 25 microorganismos/gr.
CUADRO Nr 4
Recuento de microorganismos amonificantes.
Dilución de la muestra
días 10-1 102 103 10-4 10-5 10-6 10-7 108
1 110 000 000 000 000 000 000 000
2 111 110 000 000 000 000 000 000
3 111 111 000 000 000 000 000 000
4 111 111 110 000 000 000 000 000
5 111 111 111 100 000 000 000 000
7 111 111 111 110 000 000 000 000
9 111 111 111 110 000 000 000 000
12 111 111 111 110 000 000 000 000
15 111 111 111 111 111 100 000 000
Resultado = 4,5 Xx 105 microorganismos/gr.
1 = creciimento. 0 = ausencia de crecimiento.
V. Campos y F. Lund MICROBIOLOGIA DE SUELOS ++ -+- 103
CUADRO N* 5 úl.
Recuento de microorganismos productores de fermentos nítricos.
Dilución de la muestra
días 10-1 10-2 103 104 +. 10 10-6
20 000 000 000 000 000 000
Resultado = No hay crecimiento.
' CUADRO N* 6
Recuento dre microorganismos productores de fermentos nitrosos.
Dilución Gr la muestra
días 10-1 10-2 10-3 10-4 10-5 10-6
20 000 000 000 ' 000 000 000
Resultado = no hay crecimiento.
CUADRO Nr 7
Recuento de microorganismos desnitrificantes.
'"Dilución dr la muestra
días 10-1 102 10-3 10-4 10-5 10-6 10-7 10-8
1 000 000 000 000 000 000 000 000
2 É 000. . . 000 000 000 000 000 000 000
3 - 000 000 000 000 000 000 009 000
4 100 000 000 000 000 000 000 000
5 t-..- 100 000 000 000 000 000 000 000
dl 110 000 000 000 000 000 000 000
9 111 111 000 000 000 000 000 000
12 111 111 000 000 000 000 000 000
15
111 111 100 000 000 000 000 . 000
Resultado = 450 microorganismos/gr.
- CUADRO Nr 8 >
Recuento de microorganismos amilolíticos. e
Dilución de la muestra . :
días 10-1 102 10-3 10-* 10-5 10-s 10-7 10-8
000 000 000 000 000 000 000 000
000 000 000 000 000 000 000 000
2
3 000 000 000 000 000 000 000 000
4 000 000 000 000 000 000 000 000
5 000 000 000 000 000 000 000 000
7 100 000 000 000 000 000 000 000
9 100 100 000 000 000 000 000 000
12 100 100 000 000 000 000 000 000
15 111 110 110 000 000 000 000 C00
Resultado = 200 microorganismos/gr.
CUADRO N* 9
Recuento de microorganismos celulolíticos aerobios.
Dilución de la muestra
días 10-1 10-2 103 10-4 10-5 1(-6
111 111 110 100 000 000
5 .
Resultado = 1500 microorganismos/gr.
104 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
CUADRO Nr 10 .
Recuento de microorganismos celulolíticos anaerobios.
Dilución de la muestra |
días 10.1 102 103 10-4 105 10-6
15 111 000 000 000 000 000
Resultado = 25 microorganismos/gr.
DISCUSION
De acuerdo a los resultados del Cuadro N* 1 se puede apreciar que
existe una mayor proporción de hongos y actinomices, no correspondiendo
a las proporciones generales señaladas por Hattori (1973); esto estaría
acorde con las características del suelo de pH ácido y poca humedad.
Las actividades fisiológicas en condiciones anaerobias indican una
escasa actividad celulolítica y de fijación de nitrógeno, (cuadros 3 y 10),
lo que puede estar influenciado por la aireación del suelo y el hecho que
la población predominante sean hongos meutabólicamente aerobios es-
trictos.
amonificantes (. )
amilolíticos (=-===-)
desnitrificantes (=-=-===]
de dilución media
indice
Días
Figura N* 1. Curvas de actividad de los microorganismos amonificantes, amilolíticos
y desnitrificantes.
V. Campos y F. Lund MICROBIOLOGIA DE SUELOS 105
Por vtra parte, en condiciones aeróbicas hay una gran actividad
celulolítica y de amonificación (cuadros N* 9 y 4 y gráfico 1), siendo
esta última muy sigmificativa, pero no se manifiesta fijación del nitró-
geno molecular ni amilolisis (cuadros 2 y 8). Al no existir actividad nitri-
ficante se explicaría así la escasa desnitrificación la que también es afec-
tada por el contenido de agua en el suelo (cuadros 5, 6 y 7 gráfico N* 1).
BIBLIOGRAFIA
HATTORI, T., 1973. Microbial life in the soil. Marcel Dekker, Inc., New York.
POCHON, J. y P. TARDIEUX, 1962. Techniques d'analyse en Microbiologie du sol.
Editions de la Tourelle. París.
SAIZ, F., 1971. Notas Ecológicas sobre Estafilinidos (Coleoptera) del Parque Na-
cional Fray Jorge. Chile. Bol. Mus. Nac. Hist. Nat, Chile. 32: 67-97.
Valparaíso, Chile : 107
OBSERVACIONES SOBRE EL ZOOPLANCTON DE LAGOS
CHILENOS * **
LUIS R. ZUÑIGA y PATRICIO DOMINGUEZ T. ***
ABSTRACT: A comparative study among 15 chilean lakes (one in the central
region and the others in the nord patagonian region), based on the present know-
ledge of the freshwater zooplankton, have been made. The results hint lake clusters
by faunistic similarity. Moreover, differences of the community schemas among
them are detected.
INTRODUCCION
Los conocimientos acerca de la fauna zooplanctónica dulceacuícola
chilena son escasca y la información disponible, fundamentalmente de
carácter taxonómico, se encuentra dispersa en la literatura.
En base a dicha información y a aquella acopiada por los autores
en los últimos años, el presente trabajo intenta establecer +1 grado de
similaridad faunística que existe dentro de un grupo de lagos nordpata-
eónicos y de éstos con la laguna El Plateado, situada en la zona central
de Chile.
MATERIALES Y METODOS
1.—Datos faunísticos del conjunto del zooplancton.
Para los quince lagos considerados (Tabla 1) se utilizaron los datos
disponibles de rotíferos, cladóceros y copépodos por ser éstos los grupos
fundamentales de zooplancton. Los dates cualitativos corresponden al
período de estratificación térmica y provienen fundamentalmente de
Loffler (1955, 1961) y Thomasson (1953, 1955, 1963, 1964) y de Brehm
(1935, 1937, 1951, 1958), Campos et al. (1974), Daday (1902), Domín-
euez (1971, 1973), Kiefer (1959), Pezzani-Hernández (1970), Vavra
(1900) y Zúñiga (1975).
Los datos cuantitativos de los lagos Villarrica, Pellaifa, Ranco y
Todos lez Santos fueron tomados de Loffler (1961) y corresponden a los
mesas de Noviembre, Diciembre y Febrero de 1953-54, para el primero, y
Diciembre o Enero para el resto. La información para laguna El Pla-
teado proviene de Avendaño y Sáiz (1977 ) y Domínguez y Zúñiga (1976)
y, para efectos comparativos, sólo se utilizó aquella de los meses de No-
= Trabajo presentado a las Primeras Jornadas Nacionales de Acuacultura, Univer-
sidad de Concepción, Concepción, Enero 1977.
** Trabajo financiado parcialmente por la División de Investigaciones de la Vi-
cerrectoría Académica de la Universidad Católica de Valparaíso.
*** Laboratorio de Ecología, Departamento de Biología, Universidad Católica de
Valparaíso, Casilla 4059.
108 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N? 10, 1977
viembre, Diciembre y Febrero (1972-73). Todos estos registros corres-
ponden a la época de estratificación térmica dr los lagws (Loffler, 1960;
Domínguez et al., 1976). Los datos de copépodos de El Plateado son iné-
ditos hasta la fecha. Para cladóceros se consideraron los siguientes nuúm-
bres para las especies qwe se indican:
Eubosmina hagmanni por Bosmina hagmanni según Deevey y Deevey
(1971) y Diaphanosoma chilensis por Diaphanosoma excisum chilensis
p( Pagjgi, comunicación epistolar).
2.— Indices utilizados.
—COonstancia espacial (Bodenhrimer, 1955).
—Sd: Afinidad taxonómica de Dice (Carbonnel, 1973).
—Sw: Afinidad biocenótica de Winer (Cancela Da Fonseca ,1966).
—Ro: Sobreposición de Horn (1966).
—H": Diversidad específica de Shannon (Pielou, 1969).
—J: Uniformidad específica de Pielou (1969).
La elección del índice de Dice se debe a que acentúa las similaridades,
lo que debe considerarse en la interpretación de los dendrogramas. Estos
fueron construidos aplicando el “weighed pair-group method” (Sokal y
Sneath, 1963). :
Para el cálculo del promedio de individuos por litro para la columna
de agua de cada lago se utilizó la siguiente fórmula, modificada de
Avaria (1975):
1 n—l
EN EN Y (DIEZ y
2pn i=1 1 141 1+1 i
donde pi = profundidad a que se tomó la muestra i (i=1, 2, 3, .. .n)
ni = densidad de orgamismos por litro a la profundidad pi.
pn = Profundidad máxima, correspondiente a la muestra n.
RESULTADOS Y DISCUSION
1.—Análisis de los lagos en función de datos cualitativos de la fauna
zooplantónica.
En conjunto los 15 lagos reúnen un total de 105 especies (Tabla 1),
de las cuales un 719% corresponde a Rotifera, un 20% Cladocera y un
9% a Copepoda. Valorada la constancia espacial de las especies (Tabla
1) se establecen las siguientes categorías:
L. Zúñiga y P. Domínguez FAUNA ZOOPLANCTONICA 109
a) Espucies de distribución amplia: Presentes en más del 50% de
lcs lagos y que corresponden a: Conochilus iWnicornis, Filinia longiseta,
Keratella cochlearis, Lepadella patella, Polyarthra vulgaris, Eubosmina
hagmannt, Boeckella gracilipes, Diaptomus diabolicus y Mesocyclops lon-
gisetus.
b) Especies de distribución intermedia: Presentes entre el 25% y
el 50% de los lagos y son: Filinia terminalis, Pompholix sulcata, Synchae-
ta pectinata, Synchaeta sp., Trichocerca sp., Alona pulchella, Ceriodaph-
nia dubia, Chydorus piger, Daphnia ambigua, Diaphanosoma chilensis,
Scapholeberis spinifera y Tropocyclops prasinus.
c) Especies de distribución restringida: Prezentes en menos del 25%
de los lagos y corresponden al 80% del total de especies.
Como complemento a la información anterivr se puede agregar que
las espreies de distribución amplia constituyen el grupo más común del
zooplancton limnético chileno. Las cuatro especies de rotíferos (Conochi-
lus unicornis, Filinia longiseta, Keratella cochlearis y Polyerthra vulga-
ris) se han detectado desde la zona central de Chi (Avendaño y Sálz,
1977) hasta los lagrs nordpatagónicos. Eubosmina hagmanni y Boeclella
gracilipes alcanzan hasta el lago Chungará en el latiplano ariqueño (Do-
míneguez 1973 y datos inéditos, respectivamentrz). Diaptomus diabolicus
se distribuye por los lagos y embalses del llano central y costa hasta
Coquimko (Zúñiga, 1975). Mesocyclops longisetus a su vez, está amplia-
mente distribuido hasta el norte de Chile (datos inéditos) y altiplano pe-
ruano (Harding, 1955). Este grupo de especies parece guardar estrecha
relación con el régimen monomíctico templado de los lagos aquí conside-
rados. De las especies de distribución intermedia, Alona pulchella se ha
detectado en el altiplano chiteno (Domínguez, 19783). También en esta
zona se detecta Daphnia pulex y Chydorus sphaericus (especies de dis-
tribución restringida).
2.—Amálisis de algunos lagos en función de datos cuantitativos del z00-
plancton.
Aspectos sobre la estructura comunitaria de algunos lagos pueden
inferirse de los datos cuantitativos disponibles (Tabla 2). Estos datos
registran información de los muses de Diciembre o Enero para al menos
uno de los lagos de cada grupo definido anteriormente, excepto Riñihue-
Panguipulli.
110 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
ROTIFERA
Asplanchna sieboldi
(Leydig)
Brachionus calyciflorus
Pallas
B. quadridentata
erman
Collotherta libera
(Zacharias)
C. mutabilis
Hudson
C. pelagica
(Rousselet)
Colurella obtusa
(Gosse)
C. uncinata
(O. F. Miiller)
Conochiloides natans
Seligo :
Conochiloides sp. (1)
Conochilus unicornis
Rousselet
Euchlanis dilatata
Ehremberg
E. incisa Carlin
Euchlanis sp (2)
Filinia limnetica
Zacharias
F. longiseta (Ehremberg)
F. terminalis (Plate)
Gastropus minor
(Rousselet)
G. stylifer Imhof
Hexarthra fennica
(Levine)
Keratella cochlearis
(Gosse)
gracilenta (Ahlstrom)
thomassoni Hauer
tropica (Apstein)
valdiviensis (4)
. valga (Ehremberg)
Lacinularia sp. (3)
Lecane bulla ((Gosse)
L. flexilis (Gosse)
L. luna Miller
L. lunaris (Ehremberg)
L. stichae Harring
Lepadella ovalis (Miiller)
L. patella (Miiller)
ARA
VILLARRICA
HHHOSAHOOOOOAHOAR A pa pH oorf HH 500 o —h O 000009
PICHILAFQUEN
HUILIPILUN
QUILLEHUE
Soo0o0o0orRoo0oooor O RO PARO PAA PP. .50 po?» o 0000sco
TABLA 1
Listado de especies por lago y porcentaje de constancia espacial.
HOSSoSoSoooohHoocorHt O 00 OPOoO 000 PL 00 O SO O —h ao oo
HOSoOoSooooocooocor O 00 -HO0OOoO O00oO PP 00 O O. a. > 2D pm FP
CALAFQUEN
PELLAIFA
RANCO
HOSOoOSorRooorPRoOoo-A?f O 00 OPoOo 000 Al 00 O O. S.. 2... 0.00
HOSOo0o0oooOoRROoOP O 00 -HHO O000oO ? 00 O —=H O O OOoCosSoS
Sooooooooocoocoor O. 000 1000 1000 (Pp 00 O O DO VO O. ono
PUYEHUE
Sco0oo02000000000 . .0oO 000 1000 HA 00 O O O 3. O O O Y
RUPANCO
BONITA
OSOooSoooo0oo0ooOocorP O 00 1000 000 MA” 00 O! O O O OD O O O
Soooooooocororl 0 00 OMHO 000 -—- 00 O O 1. O O —>5n. O O
LLANQUIHUE
—HhOOSAHHOOOoOOOoOOrR O PO 000 OOmhHh -h 00 O -h O O 00000
TODOS LOS SANTOS
EL PLATEADO
RINIHUE
O0ooo0o0oocoooocooocooocoor mM HO OPRO HOO Mm 00 O O OO O O O O O
200000000 rRoOo0oOAR O 00 OPO 000 ? HO O O O. O OOO So
N* 10, 1977
HOSOoOooorRoococor O 000 Onho 95000 Mm OP O O O O O O O O
PANGUIPULLI
490000000 c0ooo0oP 0 00 9000 0300 A 09 SS 1. O SS SD O SA
espacial (9%)
co
ES Constancia
[o]
6.66
L. Zúñiga y P. Domínguez
L. quinquecostata Lucks
L. cristata Rousselet
L. tritpera Ehremberg
Lepadella sp (2)
Lophocaris naja Wulfert
L. oxysternon (Gosse)
Macrochaetus serica
Thorpe
M. subquadratus Perty
Monostyla bulla Gosse
M. closterocerca
Sechmarda
M. crenata Ehremberg
M. crypta (4)
M. lunaris Ehremberg
M. pyriformis Daday
Notholca caudata (Carlin)
N. haueri (Thomasson)
N. labis Gosse
N. limnetica Levander
Notholca sp (3)
Philodina sp (2)
Platyas quadricornis
(Ehremberg)
Polyarthra dolicoptera
Idelson
P. vulgaris Carlin
Pompholix sulcata
Fudson
Sync+aeta lakowitziana
Lucks
S. longipes Gosse
S. pectinata Ehremberg
Synchaeta sp (2)
Trichocerca birrostris
(Minkiewicz)
dixon-nutalli (4)
. inermis (Linder)
. longiseta (Schrank)
. porcellus (Gosse)
pusilla (Jennigs)
ruttneri Donner
similis (Wierzejski)
. stylata (Gosse)
. tenulor (Gosse)
weberi (Jennings)
Trichocerca sp (2)
CLADOCERA
Alona affinis (Leydig)
A. poppei Richard
A. pulchella King
A. quadrangularis
(O. F. Miiller)
Alonella excisa (Fischer)
dd
RHAAHOHOSoomHHHa ORHo Pp ho o ooorkrtococoo ooo oorHhos VILLARRICA
FAUNA ZOOPLANCTONICA
SoOoo0oAaRnhRooooo -RHOo0”A Rh Ha mh HOO0oHOO0HAOOO HPO Oo0oooho PICHILAFQUEN
oo non
oscoococococos oco0o0oo o Po. o ocoocooocoeocoo oc ococos HUILIPILUN
oo oso
ococososocooo ooo o 00 o *Hooorrkoooor ooo Hooooo QUILLEHUE
co osos
ooocssoccoooo Hhrhoo o +.ho o ooooroscocos ovo oocoooos CALATFQUEN
co osos
cocoososcoosoo Posa o ro o oooooorrmooo roer osoooor PELLAITA
oo AMHOoHAn
RANCO
oooocososooocos osos o . o. co oo9os990000050052 ooo oooooo PUYEHUE
Sooo0o0oO0oO0o0O0O0O0OO 00000 |]. 100 €” OOO0O0O0O0O0O000000 150.0%.0. OOOO
oo oso
Op 9009
oocococococo rocoso o ooo osooononoooscoso ovco ooocos RUPANCO
co oso
Hocoookocoocooso oocooo ?r- oo o ossocoocoocoos oovcoo ornooos BONITA
co ooo
-RHRHoomHoshmhooo HhHhoso o Pro o rococoorrrH oco osooos LLANQUIEHUE
So AmnoHA
Rhoscossoooooso enoso ». Ho o hocooocoooooos oo oosooss TODOS LOS SANTOS
hOo MHOOS
EL PLATEADO
OSoooooo0o0ooooOo 10000 SO PO O OOO0o0O0oO0oO0oO0oO0o0Oo 000 OOOO
oo oso
osooccocesesess oronh ?- ho o orrHfilomkhooocoo hos oscooos RIÑIHUE
oo ooo
ococoocsococoso omork - 2Hho o oorkloktlooooo oovcoo oaooces PANGUIPULLI
oo ooo
111
Constancia
espacial (9)
SPP DPAPAP
[So Eo] O 0 0012
m 0 occ 00d Sr
15%)
112 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
Camptocercus rectirostris
Schoedler
Ceriodaphnia dubia
Richard
Chydorus sphaericus
O. F. Miller)
Ch. piger Sars
Daphnia ambigua
Scourfield
D. pulex De Geer
Diaphanosoma chilensis
(Daday)
Eubosmina hagmanni
(Daday)
Ilyocryptus spinifer
Herrick
Leydigia leydigi Schoedler
Moina micrura Kurz
Pleuroxus aduncus
(Jurine)
Scapholeberis mucronata
(O. F. Miller)
S. spinifera (Nicolet)
Simosa exspinosa (Koch)
Streblocerus serricaudata
(Fischer)
COPEPODA
Boeckella gracilipes
(Daday)
Diaptomus diabolicus
"(Brehm)
Eucyclops serrulatus
(Fischer)
Macrocyclops albidus
(Jurine)
Metacyclops mendocinus
Wierzejski
Mesocyclops longisetus
(Kiefer)
Microcyclops allius
(Kiefer)
M. anceps Richard
Paracyclops fimbriatus
(Thompson)
Ilyocryptus spinifegr
Kiefer) :
1 = presencia.
VILLARRICA
PROA oO O oo mp6 24 sp
PICHILAFQUEN
HUILIPILUN
QUILLEHUE
o O-P-lO Pp. o000o0 Ah O 300 AA pap
¡SA E A A A A
[e] 200 OS 15000 P O OO 00 O O
S.A SI IO SERA
0000 SL 100 LVL OL 00 00 MH O
[a]
0
0
1
0
0
0
0
0
0
1
0
o SPpPO OS 0000 PP +h— OH Om Oo
1! O O 00 PO O O mM pp
CALAFQUEN
PELLAIFA
RANCO
PUYEHUE
RUPAN
OARHH Ah 000 ?ah ph or po o o
CORO O 000 ?ñh Rh RO Po o o
ja MS SS TA IS A RA
o
[=]
==]
P.O Pp pao > ¿qáq2>CÉO>)C2oX_5
o. corococ<cosbpsp
0
ausencia.
Rh A. Pp... > dl pa
=
Al
BONITA
[a] A O A A A SO OS
SOS SA NO PA SS O QQ) O A
o 000 O DOOR pH? O OH Oo O o
hh. O OO PR O O O O. O
LLANQUIHUE
R O0o0Oo MH OH HO 00 PA O A
O —hL.RoO Pp». ppp ap
TODOS LOS SANTOS
EL PLATEADO
RINTHUE
Ra 000 O 00 PO 00 PO O) A
A O OO. HA O O O O 2
[==] 000 SS POO PP. OH 00 mo
AH o Oo Ah O a O Aa
HHO O ' ooo SA AS E O
N>? 10, 1977
o
O 000 PO 0. bno
PANGUIPULLI
So OQOPRO O 000 O O 900 00 O
OS Oo coco O 2. LO O 0 O
Constancia
espacial (9%)
¿Las nominaciones “sp” corresponden a las especies señaladas sólo por un autor,
según
(2) THOMASSON, 1963.
E CAMPOS et al., 1974.
4) THOMASSON, 1963 (citadas sin autor).
(1) AVENDAÑO y SAIZ, 1977.
L. Zúñiga y P. Domínguez FAUNA ZOOPLANCTONICA 113
La diferencia faunística que se ubsrrva entre los lagos (Tabla 1)
lleva a preguntarse por el grado de similaridad existente entre ellos.
Los resultados, derivados de la aplicación del índice Sd (Fig. 1), mues-
RINIHUE
TODOS LOS SANTOS
RANCO
RUPANCO
PUYEHUE
EL PLATEADO
CALAFQUEN
PELLAIFA
BONITA
HUILIPILUN
PANGUIPULLI
LLANQUIHUE
PICHILAFQUEN
VILLARRICA
QUILLEHUE
10
0.5
E
00
Figura 1. Dendrograma de afinidad taxonómica (Sd) entre lagos.
tran valores débiles de asociación entre lagos, reflejo del gran número
de especies de distribución restringida (809% dul total de especies) y baja
proporción de las especies de distribución amplia. Sin embargo, se esbuza
la formación de tres grupos de lagos:
A.—Ranco, Puyehur, Rupanco, El Plateado, Pellaifa y Calafquén, que
a su vez se divide en dos subgrupos:
A”: Ranco, Puyehue, Rupanco y El Plateado.
A”: Pellaifa y Calafquén.
B.—Riñihue y Panguipulli.
C.—Llanquihue, Todos los Santos, Villarrica y Pichilafquén.
En líneas generales, los grupcs señalados corresponden a un sentido
de localización geográfica, que se ve alterado por la inclusión de El
Plateado en el subgrupo A? y la unión de lagos de ubicación más extrema
en el grupo C. La caracterización faunística en base a las especies más
114 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL Ne 10, 1977
representativas (sobre el 75% de presencia en cada grupo) se da en la
siguiente Tabla:
1 = Presencia. O = Ausencia.
especie/grupo de lago A” A” B C
Conochilus unicornis 1 1
Euchlanis dilatata
Filinia longiseta 1
Gastropus stilifer
Keratella cochlearis 1 1 1 1
K. valdiviensis
Lepadella patella
Notholca caudata
N. labis
N. limnetica
AR a pap
Philodina sp.
Polywarthra vulgaris 1
Pompholix sulcata,
Synchaeta lakowitziana
po pop fp
S. pectinata
Synchaeta sp. 1
Trichocerca sp.
Alona affinis
A. pulchella
Camptocercus rectirostris
A
Chydorus piger
Daphnia ambigua
Diaphanosoma chilensis
Eubosmina hagmanni 1
Scapholeberis spinifera
Boeckella gracilipes 1
Diaptomus diabolicus 1
NN
pal
Mesacyclops longisetus 1
L. Zúñiga y P. Domínguez FAUNA ZOOPLANCTONICA 115
TABLA 2
Densidad promedio de las especies para la columna de agua :n cada lago
(individuos/100 1) en los meses de Diciembre-Enero.
especies Vill. Ranco T. Stos. Pell. Plat.
Keratella cochlearis 15 163 2150
K. gracilenta 25
K. thomassoni 19
K. valga 50
Filinia limnetica 47
F. longiseta 36 2342 2175
Conochilus unicornis 7178 278025
Pedalia fennica 17
Synchacta pectinata 95
Pompholix sulcata 38
Trichocerca ruttneri 47
Polyarthra vulgaris 15
Diaphanosoma chilensis 19 1242 117 2475
Ceriodaphnia dubia 1916 100
Eubosmina hagmanni 891 30 128 2327 3150
Daphnia ambigua 93 1050
Scapholeberis spinifera 4
Boeckella gracilipes 44 60 78 644
Diaptomus diabolicus 77 235 6800
Mesocyclops longisetus 147 111 108 300
Tropocyclops prasinus 185 1000
Total 3206 1590 465 6807 297900
Los patrones de afinidad que se dan entre estos lagos (Fig. 2) mues-
tran una tendencia a agruparse los lagos pre-cordilleranos (Pellaifa y
Todos los Santos) por similitud de esquemas de dominancia (Sw) Y de
organización (Ro), pese a que faunísticamente aparecen segregados (Figs.
1 y 2). Estos lagos presentan los valores más altos de H y J (Tabla 3)
reflejo de un nivel más alto de organización comunitaria.
vill. Ranco T. Stos. Pell. Plat.
A .62 1.24 2.37 2.32 0.53
y 0:51 0.41 0.92 0.73 0.15
116 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
| á
05
Sd Sw
0
PELLAIFA
EL PLATEADO
RANCO
TODOS LOS SANTOS
VILLARRICA
PELLAIFA
TODOS LOS SANTOS
VILLARRICA
RANCO
EL PLATEADO
PELLAIFA
TODOS LOS SANTOS
VILLARRICA
EL PLATEADO
RANCO
Figura 2. Dendrogramas de afinidad taxonómica (Sd), biocenótica (Sw)
y sobreposición (Ro) entre lagos.
VILL. NOV.
VILL. FEB.
VILL. NOV.
VILL.FEB
VILL. FEB.
VILL. NOV
PL.NOV.
PL. DIC
PL. FEB.
VILL. DIC.
PL. DIC,
PL. NOV.
VILL. DIC,
PL.FEB.
PL.NOV.
PL.DIC:
VILL. DIC.
PL. FEB.
1.0
==
==
a
Sd Sw
-
Ro
Figura 3. Dendrogramas de afinidad taxonómica (Sd), biocenótica (Sw)
y sobreposición (Ro) entre Villarrica y El Plateado.
L. Zúñiga y P. Domínguez FAUNA ZOOPLANCTONICA 117
La comparación de Villarrica y El Plateado (Tabla 4), lagos de régi-
men térmico similar (Loffler, 1960 y Domínguez et al., 1976), a través
de una secuencia temporal (Noviembre, Diciembre y Frbrero) muestra
claras diferencias de composición faunística (Sd) y baja similaridad
de los esquemas de dominancia (Sw) y de organización (Ro) entre estos
lagos (Fig. 3). La causal de esta diferenciación puede radicar en la ma-
yor dependencia climática del régimen limnético de El Plateado, así como
en un estado de eutrofía más alto de éste (datos inéditos), resultado de la
influencia de las características de su cuenca, sin embargo, a pesar de
estas diferencias, Villarrica presenta, durante estos meses, un modelo
sucesional temporal similar a El Plateado.
Es notable que tanto para Villarrica como para El Plateado los valo-
res de HP” y J (Tabla 5) muestran una caída en el mes de Diciembre,
ligada al establecimiento defimitivo de la estratificación térmica en este
mes, proceso que se viene gestando desde Octubre (Loffler, 1960; Domín-
guez et al., 1976). Este hecho constituye una fuerte liimtante para la
comunidad existente (Domínguez y Zúñiga, 1976), la que posteriormente
se recupera en Febrero, alcanzando H' y J valores semejantes a los de
Noviembre.
TABLA 4
Densidad promedio de las especies para la columna de agua de los lagos
Villarrica y El Plateado (individuos/100 litros) durante los meses
de Noviembre, Diciembre y Febrero.
VILLARRICA EL PLATEADO
especies Nov. Dic. Feb. Nov. Dic. Feb.
Keratella cochlearis 858 600 2150 2700
K. gracilenta 25 25 9125
K. thomassoni 858 19
K. valga : 208 TO 75 50
A Se
e poc ia 100 2775 20750
Conochilus unicornis 1489 175 975 278025
Pedalia fennica 1643 138
Synchaeta pectinata 23 66
Pompholix sulcata 550 38
Trichocerca ruttneri 47 a
T. birrostris
Polyarthra vulgaris 163 2350
Diaphanozonta chilensis 261 19 713 525 2475
Ceriodaphnia dubia 1393 1916 528 125 100
Eubosmina hagmanni 31 891 175 50 Sa
Daphnia ambigua 1000 10
Boeckella gracilipes 1221 44 8500
Diaptomus diabolicus 2100 200
Mesocyclops longisetus 43 50 1000 Sn
Trococyclops prasinus 185 300
Total 7715 3206 3764 B625 297900 35775
118 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
TABLA 5
Diversidad y uniformidad específica mensual para Villarrica y El Plateado
: en los meses de Noviembre, Diciembre y Febrero.
VILLARRICA EL PLATEADO
Nov. Dic. Feb. Nov. - Dic. Feb.
H' 2.83 1.62 2.69 2.54 0.53 1.63
J 0.82 0.51 0.78 0.73 0.15 0.70
CONCLUSIONES
Los conocimientos actuales sobre el zooplancton dulceacuícola chileno
muestran una fauna variable entre los 15 lagos estudiados, con un alto
porcentaje (80%) de especies de “distribución restringida” y sólo 9
especies de “distribución amplia”. Esto se manifiesta en un bajo nivel
de asociación entre lagos, pese a lo cual se esbozan cuatro agrupaciones
que, en general, tienen un sentido geográfico.
Los datos cuantitativos sólo permiten esbozar la unión de los lagos
precordilleranos (Pellaifa y Todos los Santos) e inferir una clara dife-
rencia en la composición de los esquemas de organización comunitaria
entre los lagos nordpatagóniccz y aquellos de la zona central, represen-
tados por Villarrica y El Plateado, respectivamente. Pese a ello, y por
influencia dr] régimen limnético, se observan esquemas de sucesión tem-
poral similares.
AGRADECIMIENTOS: Los autores agradecen a los integrantes del Laboratorio
de Ecología, en especial al Prof. Francisco Sáiz, la revisión crítica del manuscrito.
Asimismo al Profesor Dunny Casanova (Area de la Salud, Universidad de Chile de
Valparaíso) la discusión de la fórmula del promedio.
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Valparaíso, Chile 121
TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS LIMNETICOS DE LA LAGUNA
EL PLATEADO
VILMA AVENDAÑO y FRANCISCO SAIZ *
ABSTRACT: The limnetic taxocenosis of Rotifera of the lagoon El Plateado
is studied through an annual cycle, both, spatial and temporally.
A spatial unity hintig a taxocenosis stratification is concluded. This unity is
derived from the vertical distribution of the density of the numerical dominant
species and the presence at differents deeps of some rare species.
Temporally, three thermic and biotic periods are detected during a year.
A first approach to a thermic classification of the species studies is intented.
INTRODUCCION
El Plateado, laguna costera ubicada al sur de la provincia de Val-
paraíso a una altura de 340 m s.n.m., poseedora, además, de una de las
más altas relacicnes “área superficial-profundidad” de las de la Zona
Central de Chile, está siendo estudiada por el Laboratorio de Ecología
de la Universidad Católica de Valparaíso.
El presente trabajo tiene por finalidad analizar algunas caracterís-
ticas estructurales de la taxocenosis de rotíferos de la laguna y sus mo-
dificaciones temporales a través de un ciclo anual. La trascendencia del
erupo deriva de su importancia numérica (aproximadamente el 75% de
los individuos de los grupos zoolimnéticos fundamentales recolectados:
Cladocera, Copepoda y Rotifera) y de su rol de consumidores primarios,
pudiendo ser analizados como reflejo de las características del fitoplanc-
ton.
MATERIAL Y METODO
Para el estudio del ciclo anual se efectuaron recolecciones periódicas
mediante un muestreador tipo Schindler de 24 lts, a las profundidades
de O (superficie), 4 y 8 metros.
Las recolecciones se hicieron con una frecuencia aproximada a los
15 días durante el lapso comprendido entre Enero de 1972 y Abril de
1973.
El material biológico (rotíferos) fue fijado en terreno según el mé-
todo de Edmonson (1971), el que tiene la cualidad de impedir la contrac-
ción post mortem, facilitando así la identificación taxonómica.
* Laboratorio de Ecología de la Universidad Católica de Valparaíso, Casilla 4059,
Valparaíso, Chile. 2%
Trabajo parcialmente financiado por la Dirección de Investigación de la Universi-
dad Católica de Valparaíso.
122 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
La cuantificación se hizo de acuerdo a las ideas del mismo autor,
diluyéndose el concentrado de las muestras en 50 cc del mismo fijador y
contabilizándose 5 alícuotas de 5 cc.
Para la valoración e interpretación de la información base se consi-
deraron los siguientes parámetros, medidos a través de los instrumentos
indicados:
Constancia = 0% (Bod+nheimer 1955)
Dominancia = % (Bodenheimer 1955)
Afinidad = Taxonómica: índice de Jaccard (Sj) y Biocenótica:
índice de Winer (Sw) (Sáiz y Avendaño 1976).
Diversidad =— índice de Shannon (H) (Lloyd, Zar y Karr 1968)
Uniformidad= índice de Pielou (J) (Pielou 1969).
Coetaneidad = Porcentaje de coincidencias espaciales de posibilidades
temporales para dos o más unidades en comparación;
o, relación entre situaciones comunes raspecto al total de posibilidades
considerando los parámetros espacio y tiempo para la comparación de dos
o más unidades.
La confección de los dendrogramas de afinidad se hizo de acuerdo
al “weighted pair-group method” (Sokal y Sneath 1963).
RESULTADOS Y DISCUSION
1.—Espectro taxonómico.
El amálisis taxonómico del material colectado permitió el reconoci-
miento de las especies expuestas en el siguiente esquema sistemático:
Clase Monogononta:
' Familia Brachionidae: A - Keratella gracilenta (Harring); B - Keratella co-
chlearis (Hudson y Gosse); C - Keratella valga (Ehrenberg); D - Platyas patulus
(Miller).
Familia Testudinellidae: E - Filinia longiseta (Ehrenberg); F - Testudinella
patina (Hermann).
Familia Hexarthridae: G - Hexarthra sp.
Familia Lecanidae: H - Lecane sp.
Familia Synchaetidae: 1 - Polyarthra sp.
Familia Conochilidae: J - Conochilus unicornis (Rousselet); K - Conochiloi-
des sp.
Clase Bdello:idea:
L - Gen. sp.
11.—Aspectos estructurales globales.
La concordancia témporo-espacial de ciertas características de los
elementos de una taxocenosis indicaría la ausencia de estratificación o de
zonación, pudiendo presentar, sin embargo, una secuencia temporal, gra-
dual o brusca, de subunidades taxocenóticas diferentes,
Analizada con este criterio, es decir, desde el punto de vista de la
coincidencia de las condiciones “presente-ausente”; “presente” y “ausen-
te”, la totalidad de la información obtenida, ya sea en el conjunto de las
profundidades to de éstas tomadas de dos en dos, constatamos valores de
V. Avendaño y F. Sáiz TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS 123
tal magnitud que no dejan dudas sobre la unidad del conjunto (Cuadro 1);
unidad dada fundamentalmente por la alta “coincidencia de ausencias”
de las especies (66,56% para el conjunto de profundidades), lo que junto
a los «altos valores de “coincidencia de presencias”, indica que algunas
especiós presentan una estacionalidad definida.
Por otra parte, estos mismos altos valoroz de “coincidencia de pre--
sencias” insinúan una mayor asociación entre las profundidades de 4 y
8 m (Cuadro 1).
CUADRO 1
Coincicrncia de “presencia-avsencia”, “presencia” y “ausencia” de especies:
entre las profundidades estudiadas, tomadas en conjunto y por duplas (%)
Profundidades Ausencia-Presencia Presencia Ausencia
0-4-8 90,74 13,39 88,47
0-4 91,04 78,30 92,76
0-8 91,92 80,19 93,56
4-8 94,14 86,79 96,46
Resumiendo, hemos concluido la idea de unidad general de la taxo-
cenosis de rotíferos y, se ha sugerido, que algunas especies presentarían
estacionalidad y que hay una mayor asociación entre las profundidades
de 4 y 8 m.
Un análisis más detallado en base a la variable “coincidencia de pre-
exncia” debe clarificar más lo expuesto.
La constancia temporal, símbolo de estacionalidad o de permanencia
esporádica, considerada comparativamente con la coetaneidad específica
entre las profundidades y con las densidadrs específicas relativas globales
de cada una de ellas (Fig. 1), nos permite establecer algunas diferencias
entre las especies en cuanto a su participación en la estructuración de la
unidad de la taxocenosis. Así, del análisis conjunto de las tres profundi-
dades (Fig. la) podemos diferenciar tres grupos:
A - “Grupo definitorio de unidad espacial y temporal”. Formado por las
especies K. gracilenta, K. cochlearis y F. longiseta. Este grupo nos reafir-
ma la idea de unidad de la taxocenosis, por presentar no sólo una alta
coetaneidad, sino también, porque ella va asociada a una alta permanencia
temporal y por concentrar en conjunto el 67,1% del total de los indivi-
duos conectados.
B - “Grupo definitorio de unidad espacial y de parcialidad temporal. —
Formado por las especies K. valga, Polyarthra sp. y C. unicornis.
Este grupo nos reafirma la idea de unidad de la taxocenosis por
presentar una alta coetaneidad, aunque dándose. ella en un corto perío-
do de tiempo y con una incidencia numérica que alcanza el 31,79 del total
de los individuos colectados.
C.- “Grupo definitorio de estratificación espacial y de parcialidad tem-
poral”.— Formado por las especies restantes, las que no solamente pre-
sentan una baja o nula coetaneidad sino también su presencia temporal es
124 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
COE MU
0 “60 100 Om 4m 8m
CONSTANCIA
=
Figura 1.— Relación Coetaneidad-Constancia (a, b, c, d) y densidades relativas por
profundidad y especie (e). Correspondencia de siglas y nombres científicos ver
espectro taxonómico.
V. Avendaño y F. Sáiz TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS 125
reducida y su importancia numérica es baja (1,2% del total de los indi-
viduos colectados).
Analizado este esquema general con el mismo criterio, pero a nivel
de duplas de profundidades (Fig. 1b, ec, d) constatamos que las especies
del grupo A no pueden considerarse como definitorias de estratificación
por presencia (alta coetaneidad), aunque las tres concentran más indi-
viduos hacia 4m, siendo F. longiseta la que manifiesta menos preferen-
dum por dicha profundidad (Fig. 1e).
El grupo B mantiene el esquema general, pero con menor rigurcsi-
dad que el grupo anterior, ya que la coetaneidad entre duplas de pro-
fundidades para algunas especies se distribuye en un rango bastante ma-
yor. Polyarthra sp. es indiferente a las profundidades por presencia, aun-
que tiende a ser más abundante en superficie; K. valga al contrario aso-
cia fuertemente a las profundidades d+ 0 y 4m, aunque su expresión
cuantitativa no presenta diferencias muy marcadas; por último, C. uni-
cornis es cuantitativamente preferente de la profundidad de 4m, tendirn-
do a asociar por presencia simultánea las dos profundidades mayores
(Fig. 1 b, c, d, e).
Finalmente, el grupo C, por presentar bajos valores de coetaneidad
(Fig. 1b, c, d) es el que muestra las mayores variaciones respecto al
esquema general y, por lo tanto, es el máx definitorio de una posible
estratificación. La participación de las especies que forman parte de él
definen el siguiente esquema:
Asociación de
Especies : Profundidad preferencial profundidades
P. patulus 8m (exclusiva)
Lecane sp. 8m (exclusiva)
T. patina 4 m 4 - 8m
Hexarthra sp. 4 - 8m 4 - 8m
Conochiloides sp. 4 - 8m 4 - 8m
Bdelloidea 4 - 8m 4 - 8m
En conclusión, la taxocenozis de rotíferos de la Laguna El Plateado,
puede considerarse como una unidad espacial, en la que se manifiesta
cierta estratificación, dada por: presencia exclusiva de algunas especies
raras en una o dos profundidades, preferendos relativcs de especies poco
abundantes y de presencia temporal parcial, y, por concentración de los
individuos de las especies dominantzs numéricas y de alta constancia tem-
poral en la profundidad de 4m (el 60,2% de la densidad total se con-
centra a 4m, distribuyéndose el porcentaje restante en forma similar
entre las otras dos prufundidades).
El uso de índices integradores, utilizados en forma generalizante,
también nos informa sobre la idea de unidad de la taxocenosis. En los
Cuadros 2 y 3 podemos visualizar una alta similitud taxonómica tanto
general como por recolecciones (Sj) entre las profundidades, una diver-
sidad específica promedio (H) similar y una umiformidad promedio (J)
126 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N? 10, 1977
casi igual en las tres profundidades. Igual conclusión obtenemos con la
utilización del índice biocenótico de Winer (S'w) al consicrrar como va-
lores de importancia específica a la constancia temporal de las especies.
Por su parte Sw, medido en base a la importancia numérica dr las espe-
cies (tanto general como por recolección) nos reafirma la existencia
de cierta estratificación al unir a mayores valores las profundidades
extremas (valores numéricos similares), aislando así a la profundidad
de 4m, quien concentra más del 50% de les individuos colectados.
CUADRO. 2
Afinidades taxonómica (Sj) y biocenótica (Sw y S'w) generales entre
las profundidades y promedios de los valores de diversidad (H) y uni-
formidad (y) para cada profundidad. Para la expresión S'w ver texto.
5
il
Profundidad Sj Sw Sw
0-4m 0,82 0,99 0,71 — —
0-8m 0,75 0,99 0,96 —
4-8 m 0,91 0,99 0,77 — —
0 m — — o 1,10 0,67
4 m — — — 1,04 0,58
g8m — — > 1,16 0,63
TIII.—Aspectos fenológicos.
En el análisis anterior se ha detectado la presencia de grupos de
especies con presencia temporal parcial (grupos B y C), ante lo cual cabe
- preguntarse si ello está regido por algún modelo fenológico o es producto
del azar. Este enfoque, complementado con la distribución de sus densi-
dades, más las de las especies de alta constancia temporal (grupo A) nos
permitirá definir si desde el punto de vista temporal la taxocenosis pre-
senta un desarrollo uniforme o con etapas fenológicas definidas.
El agrupamiento de las muestras temporales del conjunto dr las
profundidades estudiadas, en función de la similitud taxonómica (Sj)
(Fig. 2a), nos define la existencia de dos períodos dentro del ciclo anual
con estructura específica diferente. El primero abarcaría los meses de
Febrero a Agosto, correspundiendo al segundo el lapso entre Septiembre
y Enero, inclusives. Esta fractura se debe fundamentalmente a la presen-
cia de C. unicornis y K. valga en el segundo período (ausentes en el pri-
mero), y, a la ausencia de especies propias del primero, como: P. patulus,
Lecane sp., Hexarthra sp. y Conochiloides sp.
Este esquema de agrupamiento también segrega las heat as corres-
pondientes al ciclo anual siguiente, especialmente por la presencia de
especies no detectadas en el ciclo de 1972 (Polyarthra sp. y Bdelloidea sp.) ,
dando inicio a un nuevo ciclo levemente diferente del anterior por su
constitución taxonómica.
V. Avendaño y F. Sáiz TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS 127
950,27, 6,25 24 19 23 % 16 18 17 1 7
10 52.879 0121024 615 2021 22 7 Y rt MEAN
05
TOTAL
0.0
5s6ñ 6, 3?,8,23,298,,2,2,7! 6
o Aa 229 a o 05 1009142125708
05
Ou
50 b
1.0 493,7, 61? a 99572 2997 50379 22 79% 272,75,
] A
Do
5,10, 8 22 24 2 18,17, 19, 20
Lo 31937927454 5797572 15 %0'”1 19,551,923 1281510 2%
B5
8u
0.0 Sy >
Figura 2.— Afinidades bicenótica (Sw) y taxonómica (Sj) temporal global (a) y
por profundidades (b, c, d).
128 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
CUADRO 3
Afinidad taxonómica (Sj) y biocenótica (Sw) entre profundidades por
recolección.
Recolección Si Sw
0-4 0-8 4-8 0-4 0-8 4-8
1 26-I* 0,43 0.50 0.83 0.46 0,49 0.99
2 9-II 1.00 OD DO 0.90 0.96 0.98
3 1-III 0.50 0.50 1.00 0.90 0.35 0.99
4 16-I11 1.00 1.00 . 1.00 0.87 0.96 0.69
5 29-I11 1.00 1.00 1.00 0.86 0.82 0.99:
6 14-IV 1.00 1.00 1.00 0.76 0.89 0.57
7 28-IV 0.75 0.75. 1.00 0.92 0.98 0.96
g8 12-V 1.00 0.75 1.00 0.73 0.91 0.83 *
9 24-V 0.75 1.00 0.75 0.97 0.91 0.82
10 26-VI 1.00 1.00 1.00- 0.87 0.87 0.98
11 — 5-VII 0.00 0.00 1.00 0.00 0.00 1.00
12 21-VII 0.67 0.67 1.00 0.89 0.87 0.99
13 —4-VIMT. 1.00 0.67 0.67 0.89 0.78 0.95 +
14 30-VIII 0.67 0.67 1.00 0.58 0.86 0.92
15 13-IX 0.80 1.00 0.80 0.76 0.72 0.98
16. 27-IX 0.60 0.50 0.83 0.99 0.98 0.98
17 2-XI 0.80 1.00 0.80 0.32 0.82 0.76
18 14-XI 0.80 0.60 0.80 0.97 0.97 0.99
19 —1-XII 1.00 1.00 1.00 0.07 0.06 0.99
20 13-XII 0.80 0.60 0.75 0.99 0.99 0.99
21 3-I** 0.75 0.75 0.60 0.81 0.76 0.98
22 19-1 0.83 1.00 0.83 0.96 0.97 0.99
23 81-1 0.80 1.00 . 0.80 0.99 0.99 0.99
24 14-II 1.00 1.00 1.00 0.97 0.99 0.99
25 7-IIMI 0.80 0.80 1.00 0.93 0.83 0.96
25 28-III 1.00 1.00 1,00 - 0.87 0.95 0.97 -
27 27-IV 1.00 0.50 0.50 0.99 0:72 0.85
A eS:
Dicho planteamiento se ve modificado al considerar la participación
numérica de las especies (ponderación del grado de propirdad de las con-
diciones ecológicas en que se encuentra la especie), insinuando la rxisten-
cia de un período intermedio correspondiente a los mesrs de Julio y
Agosto (Sw, Fig. 2a). Justifican tal pesición, además de la información
entregada por el dendrograma anteriormente analizado, la ausencia dr
las especies mencionadas como características de los períodos inicial-
mente definidos, permaneciendo solamente las especies temporalmente
constantes.
Las bajas densidades relativas de esas mismas especies, comparadas
con su expresión en otras épocas del año, así como con las del total de los
otros prriodos, reafirman dicho esquema (Fig. 3a, b).
En conclusión, a este nivel del análisis, podemos decir que la taxo-
cenosis de rotíferos de la laguna El Plateado presenta un ciclo fenológico
anual en el cual se detectan los siguientes tres períodos:
V. Avendaño y F. Sáiz TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS 129
Periodo I.— Entre los meses de Febrero y Junio, inclusives. Caracte-
rizado por la presencia y alta densidad de las especirs del grupo A y por
la presencia ocasional de P. patulus, Lecane sp., T. patina, Hexarthra sp.
y Conochiloides sp. (Fig. 3a). A ellas debe agregarse Polyarthra sp., ya
que aparece en el mismo período del ciclo siguiente. En general es el pe-
ríodo de mayor diversidad específica y de menor heterogeneidad en la
distribución de los individuos en las especies, índice, ambos, de una ma-
yor compiujidad taxocenótica. Este esquema es válido tanto globalmente
como por profundidades (Cuadro 4). La densidad global promedio es de
80.562,40 individuos. Térmicamente (Fig. 3c), se define por sus altas
temperaturas, las que declinan gradualmente con el tiempo, bendiendo
a la homotermia.
Período II.— Correspondiente a los meses de Julio y Agosto. Se ca-
racteriza por la presencia exclusiva y en baja densidad de las especies
del grupo A (Fig. 3a), lo que la transforma en la fase taxocenótica menos
A ZA
Ef 7 '
in A E
Figura 3. Densidad relativa por períodos y especie (a); curvas de ia La
profundidad ( = Om;----=4mM; .... = 8m) (b) y fenología de a abun-
dancia relativa total (c). Correspondencia de siglas y nombres científicos, ver
espectro taxonómico.
130 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
diversa y con mediana heterogeneidad relativa, siendo ésto válido para
todas las profundidades (Cuadro 4). Densidad global promedio: 3.414,25
individuos. Térmicamente (Fig. 3c) puede considerarse como de bajo ni-
vel térmico y de homotermia generalizada.
Periodo III.— Entre los meses de Septiembre y Enero, inclusives. Ca-
racterizado por la presencia con densidades intermedias de las especies
del grupo A (Fig. 3a), y por la presencia constante de las siguientes
especies propias: C. unicornis y K. valga, siendo la primera determinante
de alta densidad global promedio (211.168,57 individuos). La taxocenosis
en este lapso de tiempo es menos compleja globalmente que en el período
I, característica derivada de la profundidad interm'vdia, ya que, a 0 y 8
m es igualmente compleja que en aquél. Esta condición diferencial se debe
a la presencia redundante de C. unicornis (Fig. 3a), lo que se traduce en
una alta heterogeneidad relativa para el período. Térmicamente (Fig. 3c)
es un período con valores crecientes, los qui tienden a estructurar un
perfil térmico estratificado.
CUADRO 4
Densidad, Diversidad y Uniformidad medias por períodos,
globales y por profundidad.
Densidad Diversidad Uniformidad
I II TIT 1 1 mM 1 II III
Global 80562,40 3414,25 211168,57 1,31 60,94 0,98 0,73 0,59 0,43
0 m 14882,40 541,00 14260,28 1,17 0,81 1,12 0,76 0,70 0,56
4 m 34423,60 1936,50 169208,00 1,18 0,84 0,87 0,69 0,59 0,42
8 m 30973,70 936,75 27712,14 1,21 0,68 1,15 0,70 0,54 0,53
Comparado el anterior esquema fenológico con los correspondientes
a cada profundidad, vemos que taxonómica y biocenóticamente se man-
tienen, salvo quizás la tendencia a perderse el período 11 en superficie.
IV.—Aspectos faunísticos.
A.—Estacionalidad.
Si hacemos un análisis desde este ángulo, basándonos en la perma-
nencia temporal de las esprcies, podemos hablar de: especies anuales,
estacionales y de aparición esporádica (Figs. 1 y 3a).
1.—Especies anuales: corresponden a las especies del grupo A, siendo las
más importantes numéricamente junto a C. unicornis (estacional).
Presentan un patrón de distribución muy similar entre sí, con mayo-
res concentraciones en la profundidad media.
2.—Especies estacionales: se distinguen las siguientes subcategorías:
a) Distribución vernal. K. valga y C. unicornis. Se encuentran en el
período III, con lo que comprometen parte del período estival, con-
centrándose C. unicornis en la profundidad media, a la vez que
V. Avendaño y F. Sáiz TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS 131
K. valga no presenta preferencias aparentes por ninguna profun-
didad.
b) Distribución estival: la única especie que presenta este tipo de
distribución es Polyarthra sp., quien participa del período 1 del
ciclo 1973.
3.—Especies de aparición esporádica: engloba a las especies del grupo
C presentes -n el período 1. Ellas tienen patrones de distribución ver-
tical propios (Fig. 1e).
B.—Preferdndum Térmico.
Con el fin de lograr una primera aproximación respecto al grado de
termofilia de las especies r*studiadas, hemcs valorado los rangos totales
de temperatura en que cada una de ellas ha sido recolectada.
Precedentemente, hemos demostrado que en la profundidad media se
desarrolla preferentemente la taxocenosis de rotíferos, por lo que, para
determinar el “rango preferencial” de temperatura nos basaremos exclu-
sivamente en los datos de tal profundidad. Consideraremos como “rango
preferencial” aquellos valores que engloben más del 85% dr los individuos.
Las altas concentraciones de individuos en las profundidades supe-
rior e inferior a temprraturas diferentes del “rango preferencial” deter-
minado, tiene su explicación en los desbordes de densidades desde la pro-
fundidad media al darse en ésta les explesiones demográficas.
El Cuadro 5 muestra las tempeaturas máximas, mínimas y los “ran-
gos preferenciales” medidos en El Plateado para cada especie.
CUADRO 5
Rangos térmicos específicca detectados en la laguna El Plateado.
Especies Rango total *C Rango preferencial *C
K. gracilenta 9,0 — 22,0 16,5 — 19,0
K. crochlearis 9,0 — 22,5 16,5 — 19,0
F. longiseta 9,0 — 22,5 16,5 — 19,0
Polyarthra sp. 10,5 — 22,0 16,5 — 19,0
C. unicornis 9,5 — 22,5 10,5 — 14,0
K. valga 10,5 — 21,5 10,5 — 14,0
Conochiloides sp. 10,5 — 22,0 10,5 — 11,5
Bdelloidea sp. 11,0 — 18,5 11,0 — 11,5
T. patina 13,5 — 15,0 13,5 — 15,0
P. patulus 10,5 — 11,0 10,5 — 11,0
De él podemos deducir que la mayoría de las especies son capacesz de
sobrevivir dentro del rango total de temperaturas encontrado en la
laguna, manifestando rangos preferenciales característicos, los que según
el nivel térmico en que se ubiquen determinan los siguientes grupos de
especies:
al Nivel térmico preferencial alto (16,5 — 19,0 *C). Compuesto por las
especies del grupo A y Polyarthra sp., configurando el grupo eminen- -
temente termófilo de la laguna. |
132 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
b) Nivel térmico preferencial bajo (10,5 — 15,0 *C):
b') De rango amplio (10,5 — 15,0 *C). Compuesto por C. unicornis,
K. valga y T. patina.
b”) De rango estrecho (10,5 — 11,5 *C). Compuesto por las especies
io5tantes del grupo C.
CONCLUSIONES
1.—La taxocenosis de rotíferos de la laguna El Plateado está estructurada
como una unidad espacial, con una ligera tendencia a la estratifica-
ción dada por: presencia exclusiva de algunas especies raras en una
o dos profundidades, preferendos relativos de especies pocw abun-
dantes y de presencia temporal parcial y, por concentración de lcs
individuos de las especies dominantes numéricas y de alta cons-
tancia temporal en la profundidad de 4 m.
2.—Las especies componentes de la taxocenosis de rotífercs se pueden
agrupar en las siguientes categorías:
I.—Criterio de coetaneidad y constancia temporal.
a) Grupo A, definitorio de unidad espacial y temporal. Está inte-
erado por K. gracilenta, K. cochlearis y F. longiseta.
b) Grupo B, definitorio de unidad espacial y de parcialidad tem-
poral. Está formado por: K. valga, Polyarthra sp. y C. unicor-
MÁS...
c) Grupo C, definitorio de estratificación espacial y de parciali-
dad temporal. Está formado por las especies restantes.
II.—Criterio de estacionalidad.
a) Anuales, correspenden rn su totalidad a las especies del grupo
A anteriormente mencionado.
b) Estacionales: b') Distribución vernal, formado por K. valga
y C. unicornis, las que comprometen parte del período estival.
b”) Distribución estival, la única especie con este tipo de
distribución es Polyarthra sp.
b””) De aparición esporádica, formado por las especies res-
tantes.
TII.—Criterio de preferendum térmico.
a) Nivel térmico preferencial alto (16,5 - 19,0 *C), formado por
las especies del grupo A y Polyarthra sp.
b) Nivel térmico preferencial bajo (10,5 - 15,0 *C):
b”) De rango amplio (10,5 - 15,0 *C), formado por C. unicor-
nis, K. valga y T. patina.
b”) De rango estrecho (10,5 - 11,5 *C), formado por las espe-
cies restantes.
3.—La profundidad de 4 m queda evidenciada como ecológicamente más
apta para el desarrollo numérico de la taxocenosis de rotíferos.
V. Avendaño y F. Sáiz TAXOCENOSIS DE ROTIFEROS 133
4.—Funológicamente se distinguen los siguientes tres períodos:
Período I. Entre los meses de Febrero y Junio, inclusives.
Periodo Il. Correspondiente a lc3 meses de Julio y Agosto.
Periodo III. Entre los meses de Septiembre y Eneiw, inclusivr.
5.—£Se establece como longitud del ciclo de la taxocenosis el lapso de un
año. Las características de la fasz inicial del segundo ciclo muestrea-
do (1973) confirma, a la vrz que entrega nuevos elementos, el patrón
general.
BIBLIOGRAFIA
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DE BEAUCHAMP, P. 1965. Classe des Rotiferes. En Traité de Zoologie, ed. P. Gras-
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SOKAL, R. y R. SNEATH. 1963. Principles of numerical taxonomy. Freeman and Co.
A RE
E be it Pe
Valparaíso, Chile 135
ESTUDIOS ECOLOGICOS SOBRE ARTROPODOS CONCOMITANTES
A ACACIA CAVEN.— 1. TAXOCENOSIS DE INSECTOS
ASOCIADOS A LA INFLORESCENCIA (*)
FRANCISCO SAIZ, ENRIQUE VASQUEZ y HYDEE MOLINA **
ABSTRACT: The insect fauna associated to the inflorescense of Acacia caven
under steppe like conditions and mixed with other native elements of ia
hardwoods, is studied through the following Orders: Coleoptera, Diptera, Hymenop-
tera, Homoptera, Heteroptera, Psocoptera and Neuroptera.
The following conclusions were reached:
a) Nuclei of species directly associated to the inflorescense of the “espino”,
(Acacia caven) are inexistent.
' b) There exists a more diverse, more uniform (considering the specific distri-
bution of individua) and more stable complexity of the taxocenosis in the vegetation-
mixture situation.
The latter is considered as the closest pre-existing vegetational situation of
Acacia caven. :
INTRODUCCION
El grupo de Ecología Terrestre de la Universidad Católica dre Valpa-
raíso tiene como línea fundamental de investigación, en la actualidad, el
estudio de las comunidades de artrópodos dr las zonas de clima mediterrá-
neo del país. Están en desarrollo una serie de trabajos sobre la entomo-
fauna relacionada con el e:pino o con las formaciones vegrtacionales a
que pertenece.
La elección de tal especie vegntal para una línea de investigación
sobre sinecología de artrópodos se basa, entre otras, en las siguientes
razones: . :
1) £.- especie caracterizante de la región de clima mediterráneo.
2) Su calidad de autóctcen:. que le confiere la potencialidad de ser
buen elemento reforestador.
3) Sus características biológicas.
4) Su importancia económica, tanto por las excentes característi-
cas tecnológicas como caloríficas y artísticas de su madera.
5) La fácil observación de su fenología, la que permite un buen
estudio comparado con la de los artrópodos concomitantes. :
6) La posibilidad de usar sus frutos como complemento alimentario
en ganado.
* Investigación cofinanciada por CONAF-Viña del Mar.
** Laboratorio de Ecología de la Universidad Católica de Valparaíso, Casilla 4059,
Valparaíso, Chile.
Trabajo parcialmente financiado por la Dirección de Investigación de la Univer-
sidad Católica de Valparaíso.
136 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
La presente nota se circunscribe al estudio de algunos órdenes de:
insectos *n cuanto partícipes de la comumidad artropodológica asociada a
la inflorescencia del espino, estudiados durante todo el período de flora-
ción. Ellos son: Coleoptera, Diptera, Hymenoptera, Homoptera, Heterop-
ara, Psocoptera y Neuroptera.
Los objetivos específicos son:
1) Determinar y caracterizar la taxocenosis de los órdenes mencio-
nados, concomitantes a la inflorescencia del espino.
2) Analizar la estabilidad taxonómica y biocenótica de la taxocznosis
en función del tiempo y de la fenología de la floración de Acacia caven.
3) Caracterizar posibles grupos de especies que puedan considrrarse
propias de la inflorescencia, ya sea polinizadores, fitófagos, predadores,
etc.
MATERIAL Y METODO
A.—Antecedentes distribucionales del espino.
El área de distribución del espino en Chile se extiende aproximada-
mente desde Copiapó hasta Concepción (27* 21* S - 36* 50* S), habitando
principalmente el valle central y los faldeos de las dos cordilleras (Foll-
mann y Matte 1963).
Las variadas condiciones climáticas en que se encuentra en la actua-
lidad se reflejan en los diagramas ombrotérmicos de la Fig. la, compro-
bándose, además, las siguientes medias anuales: 29,4 mm para Copiapó,
336,2 para Santiago y 1308,2 para Concepción (Hajek y Di Castri 1975).
Fitogeográficamente forma, en la actualidad y en la mayoría de los
casos, las estepas de Acacia caven o Espinales (Follmann y Matte 1963,
Schmithuesen et al. 1956).
En forma natural se considera como integrante de la formación
Lithraeon (Schmithuesen 1956).
Un primer nivel de degradación aparece en aquellos lugares donde
el bosque ha sido parcialmente destruido, formando un bosque secun-
dario constituido por una mezcla de árboles y de arbustos: Acacia caven,
Schinus polygamus, Colletia spinosa, Proustia pungens, Trevoa trinervis,
Adesmia arborea, etc., y de vez en cuando Puya sp. y Trichocereus chilen-
sis (Hueck 1959).
Un último nivel de degradación lo constituyen los rodales puros de
espino (Schmithuesen 1956).
Las asociaciones características de epífitas lo relacionan a la forma-
ción Lithraton (Follmann y Matte 1963).
Lcs antecedentes anteriores, climáticos y distribucionales, hacen pen-
sar con bastante fundamento que la especie requiere más agua de lo que
habitualmente se piensa. Ello explicaría el porqué de la no renovación
natural, especialmente en la zona norte de su área de dispersión, y el
porqué la germinación de semillas logradas en forma natural en excre-
mentos de vacunos en la zona central de Chile (p. ej. Valparaíso) difícil-
mente logran implantarse en el suelo.
F. Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 137
Las probabilidades de que resto ocurra se incrementan con los años
lluviosos, especialmente si los períodos de lluvia son largos, aunque no
sean de lluvias intensas. Este mínimo hídrico debe haberlo obtenido an-
taño como componrnte de la formación Lithraeon.
Los criterios expuestos son importantes y deben ser tomados en cuen-
ta en los planes de reforestación que se emprendan en base a esta especie.
B.—Lugar de estudio.
El presente estudio se realizó en la Reserva Forestal de Peñuelas
JASONDEFMAMJ
COPIAPO SANTIAGO CONCEPCION
20
10
NOVIEMBRE DICIEMBRE
j i cterísticas de la distribu-
j 1.— a) Diagramas ombrotérmicos de tres zonas Cara ] ! stri
0 a del espino en Chile; b) Temperatura y Humedad relativa (medias diarias)
del período de estudio en Peñuelas.
138 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
(Valparaíso), gracias a las facilidades de su cercanía y a la colaboración
de CONAF-Viña del Mar, seleccionándose dos sectores representativos de:
las características extremas existentes en ella.
Para tal selección se consideraron aspectos del clima y la vegetación
concomitante, configurando el siguiente esquema general:
Sector A.— Zona plana poblada por espinos aislados, generalmente
de desarrollo arbórro, siendo la cubierta del suelo de tipo herbáceo esta-
cional, con período seco estival, formada fundamentalmente por gramí-
neas. Comparada a la otra zona es visiblemente más árida.
Sector B.— Zona en que los espinos presentan una mayor densidad,
estando mezclados con otros árboles autóctonos como: Quillaja saponarix,
Peumus boldus, Cryptocarya alba, Maitenus boaria, Muehlenbeckia sp.,
etc. La cubierta herbácea del suelo es alta, densa y casi uniforme, sin
predominio de gramíneas y presencia abundante de ortigas. La fisionomía
general es de estepa de espino mezclada con bosque esclerófilo degradado,
Microclimáticamente es más húmeda que el sector A, como lo demuestra
la presencia de líquenes en los espinos.
La Fig. 1b informa sobre las condiciones térmicas y de humedad
relativa general del período de estudio (medias diarias). Datos propor-
cionados por CONAF.
Para la captura de insectos se usaron trampas de líquido de actividad
continua y recolección periódica, de las siguientr3 dimensiones: 12 cm de
diámetro, 8 cm de profundidad. Se usó formalina al 4%, adicionada de
glicerina y detergente. y |
Con tl fin de no provocar atracción o repulsión por color se utiliza-
ron trampas amarillas, perfectamente camufladas entre las flores. Ade-
más, se ubicaron de manera que quedaran parcialment» incluidas en masas
de inflorescencia.
Dado que la floración no se da en forma simultánea y con igual
intensidad en un área, se colocaron dos trampax3 por árbol seleccionado,
tratando de cubrir las exposiciones extremas de floración (prematura y
tardía), en este caso exposiciones N y S, respectivamente.
El trabajo se programó con 10 trampas por sector, colocándose 12
para compensar posibles pérdidas.
La fecha de las recolecciones es la siguiente: 22-X; 29-X; 5-XI;
12-XI; 19-XI; 26-X1; 2-XIT; 10-XII, de 1975, abarcando todo el período
de floración.
Es trascendente destacar aquí que la floración se dio en un 100% en
una etapa previa al desarrollo foliar, antecedente importante para la in-
terpretación de la información obtenida. En el período de floración de
1976, ésta se dio después de un gran desarrollo foliar y con una intensidad
muy inferior a la de 1975.
De los órdenes considerados, Psocoptera y Neuroptera no se presen-
tan individualmente en forma gráfica, pero sí están incluidos en los cáleu-
los y gráficos referentes a los totales, debido a su escasísima importancia
como número de especies y de individuos (Tabla 1).
F. Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 139:
C.—Parámetros considerados.
Para el análisis cuantitativo del material se utilizaron los siguientes:
parámetros bajo las expresiones que se indican:
a) Densidad = N* de individuos por trampa.
b) Constancia = % (Bodenheimer 1955).
c) Dominancia = % abundancia relativa (Bodenheimer 1955).
d) Afinidad =
1) Taxonómica = índice de Jaccard (Sj) (Sokal y Sneath 1963)..
2) Biocenótica = índice de Winer (Sw) (Da Fonseca 1968).
La construcción de dendrogramas se hizo mediante “weighted pair--
group method” (Sokal y Sneath 1963) y para su interpretación se ha con-
siderado el trabajo de Sáiz y Avendaño (1976).
e) Diversidad específica = índice de Shannon, usado según la expre-
sión de Lloyd et. al. (1968).
f) Uniformidad = índice de Pielou (J) (Pielou 1969).
g) Overlap = índice de Horn (Ro) (Horn 1966).
Una lista de los nombres específicos que se ham obtenido hasta el
momento se da como Anexo.
RESULTADOS Y DISCUSION
A.—Composición específica del material colectado y características glo-
bales.
Al estudiar la entomofauna asociada a la inflorescencia de un vegetal
pueden considerarse las pcsibilidades rxtremas siguientes:
a) que ella le sea característica.
b) que corresponda fundamentalmente a fauna que llega secunda-
riamente a la inflorescencia, ya sea como fitófagos de otras partes del
vegetal, como predadores de ellos, o accidentalmente.
El análisis de las especies colectadas en la zona de inflorescencia,
considerando tanto la importancia numérica como la persistencia espacial
y temporal, debe informar sobre la respuesta correcta. Esta puede ser
una de las alternativas extremas o cualquier situación intermedia.
TABLA I
Distribución de las especies por familias y categorías de abundancias
relativas y constancias temporo-espaciales (0)
Sector A Sector B
Abund Const Abund Const
DIPTERA ABCD EFGH ABCD EFGH
Agromyzidae AL 1 AO! E ¡Lia
Asilidae PA e ade e y, A
Calliphoridae * BE CHA 61. DIS
Cecidomyiidae Si SLEEE Te a Es
Ceratopogonidae AS 2 1 AO
Chironomidae Se) ME IA A a
Chloropidae La E PARA Su. 2 TEL
140 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N+ 10, 1977
Sector A Sector B
Abund. Const. Abund. Const.
ABCD EFGH ABCD EFGH
Dolichopodidae So E : ,
Empididae RO, ia
Lauxaniidae Ll. ¡
Muscidae 61.
Mycetophilidae LE.
Nemestrinidae
Phoridar
Pipunculidae
Psychodidae
Sciaridae
Sphaeroceridae
Stratiomyiidae
Syrphidae
Tachinidae
Tephritidae
Therevidae
COLEOPTERA
Alticidae
Anobiidae
Anthicidae
Bostrichiidar
Bruchidae
Buprestidae
Cantharidae
Carabidae
Catopidae
Cerambycidae A
Chlamisidae ——
Cleridae >
Coccinellidae EJ A 4 e z >
Cryptocephalidae TE E E, UL
Cryptophagidae LA E. Be LA , .
Crioceridar
Curculionidae A ER
Dasytidae
Elateridae
Helodidae
Lampyridae
Lathridiidae
Lyctidae
Malachidae
Mordellidae
Ostomidae
Pselaphidae
Ptiliidae
Scarabaeidae
Staphylinidae
Tenebrionidae
HYMENOPTERA
Andrenidae
Anthophoridae
Apidae
fal
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JD HA A 00 AA
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pun
bs 01
Ola
F. Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 141
Sector A Sector B
Abund. Const. Abund. Const.
ABCD EFGH ABCD EFGH
Chrysidae LS ue.
Colletidae cd e
Halictidae Le
Ichneumonidae 14
Megachilidae
Mutillidae
Pompilidae
Sphecidae
Siricidae
Thynidae
Vespidae
HETEROPTERA
Corixidar _——— ————
Cydnidae 1
Mesovellidae 1
Miridae 2
1
1
al
pl
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« Hb)» -
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DA PRA A A O 0 TU
pl
Pl
| So
pl
1
N RH
pal
E
pa el wo
Nabidae
Pentatomidae
Piesmidae AT
Reduviidae ==
HOMOPTERA
Aphidiidae 2
Cicadellidae A.
Psillidae lo
1
1
Nh
- HAD
. . pd» .
- Han
pl
pl.
pl
NEUROPTERA
Chrysopidae
Coniopterigidae MA A Vi LS 3É:
Hemerobiidae —— — 3 Lt AN e E
Mantispidae ——. 1 1
PSOCOPTERA
Epipsocidae
Hemipsocidae
Lachesillidae E
Peripsocidae ——
pl pd
pl pl pul
* Bajo Calliphoridae se incluye también a Sarcophagidae.
Abundancias: A= 0-1, B= 1-2, C= 2-5, D= 5-8. (%)
Constancias: E = 0-12,5, F= 12,5-25; G= 25-50, H= 50-75. (9)
Resultados que incidirían en la primera posición extrema deben mos-
trar la existencia de núcleos definidca de especies concomitantes a todo
el período de floración y presentes en todos los lugares en que ella se ma-
mifiesta, especialmente cuando la floración es máxima.
Resultados favorables a la segunda alternativa extrema deben mos-
trar dispersión de las especies en el espacio y en el tiempo, tanto de pre-
sencia como de abundancia (densidad poblacional).
Como primera aproximación a las hipóbesis planteadas entregamos
la Tabla I, en la cual se exponen las especies colectadas, ordenadas por
familias y categorías de abundancias relativas al total muestreado y de
constancias temporo espaciales globales.
142 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Queda en evidencia una participación numérica diferencial, tanto
de las especies como de las familias y los Ordenes, aspecto más clara-
mente visualizado en la Tabla II, no estableciéndose a esta altura del
análisis ninguna diferencia neta entre sectores estudiados.
TABLA II
Participación numérica y específica de los Ordenes estudiados.
N? No Total o N?* N* Total %
Fam. Esp. Indiv. —Indiv. Fam. Esp. Indiv. Indiv.
Coleoptera 23 48 15385 37,7 29 59 1240 38,4
Diptera 22 — TF "1661. 41,1 23 62 1238 38,4
Hymenoptera 13 52 546 13,7 12 56 408 12,7
Heteroptera 5 6 65 1,4 6 11 224 6,2
Homoptera 3 9 226 5,1 8 8 87 2,8
Neuroptera 2 2 12 ; 3 3 23 0,8
Psocoptera 3 3 7 sj 1 1 3 a
DO tal 71 197 4049 100,0 71 200 3223 100,0
* Valores inferiores a 0,1.
Establecido lo anterior, cabe preguntarse si estamos frente a una
unidad biológica definida, homogénea y propia de la inflorescencia, o si,
por el contrario, está compuesta por varios subunidades y no presenta
una estructura reconocible.
Del análisis conjunto de las abundancias relativas de las especies y
de sus constancias temporo espaciales (Tabla 111) podemos concluir que
en ambos sectores hay un esquema general similar de composición de las
taxocenosis, pero estructurado en base a especies diferentes. En ambos no
se detecta una unidad biológica que pueda considerarse caracterizante del
período total de floración de Acacia caven, aunque haya especies caracte-
rizantes de los sectores.
Nos explicamos: si las especies que aparecen ubicadas en las catego-
rías de mayores valores dr dominancia-constancia no son las mismas en
ambos sectores, podemos deducir que su presencia y abundancia no es con-
secuencia directa de la floración sino de otros factores.
B.—Enfoque cronológico.
La no definición de una unidad que pueda considerarse propia de la
inflorescencia plantea la posibilidad de que ello sea resultado de una evo-
lución temporal regular de la taxocenosis, de manera tal, que estén com-
puestas, en realidad, por una secuencia de subgrupos compactos, pero dife-
rentes en el tiempo.
Los resultados indican que taxonómicamente en ninguno de los sec-
tores estudiados se presenta dicha secuencia (Fig. 2a, Sj), sino que ambos
se caracterizan por la débil similitud específica temporal secuencial, con-
secuencia directa del erzvado múmero de especies raras (Tabla 111).
F. Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 143
LA: B:L:4,. 111
Composición taxonómica de las taxocenosis según categorías de
dominancia-constancia por sectores.
Categoría Sector A Sector B Comunes
D-C
Muscidae sp. 2
Mycetophilidae sp. 1
Tachinidae sp. 3
Cryptocephalidae sp. 1 | 0
Curculionidae sp. 1
Malachiidae sp. 2 |
Pentatomidae sp. 1
Lampyridae sp. 1 E
|
a PEN
| D-Acci EA — E | 0 E
| Acce.-C | Chironomidae sp. 2 — | |
| Coccinellidae sp. 1 | 0
| Lathridiidae sp. 1 |
Ñ Acce-Acce. | 5 | 1 | 0 T
| Acce-Acci, | — Hz | 0 |
| Acci.-C | Agromyzidae sp.1 | 7 AER TE 0 ÍA
| Acci-Acce. Cae E | 12 AE
“| Acci-Acci. | 170 | 180 [88 |
D=dominante; C=constante; Acc.=accesoria; Acci, =accidental,
Ponderadas las especies de acuerdo a su porcentaje de presencia
espacial (Fig. 2b, S'w) se constata una alta asociación de los muestreos
temporales, insinuando la idea de una unidad modificada secuencial-
mente, esquema que es válido para ambos sectors. Destácase una ligera
tendencia a separar las primeras recoleccicnes (1, 2 y 3) del resto, lo que
hace pensar en una relación más directa con la intensidad de la flora-
ción que con la cronología de lc3 muestreos. '
Un tercer nivel de aproximación a la valoración de la importancia
ecológica de las especies es considerar su valor numérico en las diferentes
etapas cronológicas, efecto globalizado, en este caso, mediante Sw. Tal
análisis (Fig. 2c), informa de un comportamiento totalmunte diferente
de las taxocenosis de los sectores. Mientras en el B se mantiene el esque-
ma general dutectado en el párrafo anterior, aunque con una secuencia
cronológica algo más laxa y más indicadora de separación de núcleos, en
el sector A se da una fuerte similitud entre recolecciones iniciales e
intermedias, separando netamente las finales. 4
Por lo tanto, en sentido temporal, podemos concluir que taxonómi-
camente existe una fuerte heterogeneidad de ambas taxocenosis, la que
se reduce considerab'=mente en el sector B, por la alta constancia tempo-
ral de algunas especins, dando la idea de mayor complejidad. En cambio,
en el sector A, la idea de unidad global no se da, estableciéndose dos
10
144 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
subnúcleos bien diferenciados, siendo la presencia de Lampyridae sp. 1.
quien le da la fisionomía gruneral y le confiere el carácter de mayor sim-
plicidad.
La mayor complejidad del sector B estaría acorde con la mayor
variedad vegetacional.
Los valores de diversidad y de uniformidad según la cronología de
las recoleccionrs confirman la idea anterior (Tabla IVa).
C.—Enfoque según fenología de la floración.
En el transcurso del análisis anterior, especialmente al tratar las
similitudes por S'w, se ha insinuado la posibilidad de que aquella varíe
su composición taxonómica y su complejidad estructural en función del
1234567 1234567 1234567 1234567 1342567 1234567
E
0.0 A Sj B A Sw B A Sw B
a b c
vo acbdef acbdef abcdef abcdef
; | >
05 |
0.0 A Sj B A Sw B
d e
Figura 2.— Dendrogramas de afinidad taxonómica (Sj), biocenótica calculada con
valores de importancia según constancia espacial (S'w) y biocenótica calcu-
lada con valores de importancia según dominancia específica (Sw), por cronología
de muestras a, b, c) y de fenología de la floración (d e) para el total del material
estudiado. A= sector A, B=sector B.
F. Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 145
grado de floración alcanzado, más que de la secuencia cronológica del
mueñtreo.
Para estudiar usta relación, se reunieron los materiales aportados
por las trampas según porcentaje de floración existente en el £ca cubierta
por cada una de ellas durante cada período de funcionamiento. Así se
obtienen las siguientes categorías:
A.— 0-25% de floración B.—25-50% de floración
C.—50-75% de floración D.—75-100% de finración.
E.— 0-509% de flores secas
W.—50-1000% dr flores secas más hojas en desarrollo.
Los valores de importancia numérica fueron trabajados como pro-
medio por trampa.
TABLA IV
Diversidad y uniformidad específicas por sectores según cronología de
muestreo y fases de floración. (CV =coeficiente de variabilidad).
Diversidad (H) Uniformidad (J)
Sector A Sector B Sector A Sector B
a.—Cronología de muestreo.
si 4,28 ( 0,72 0,88
2 4,82 5,23 0,79 0,85
3 3,82 5,10 0,72 0,81
4 4,11 5,28 0,66 0.82
5 4,89 5,02 0,74 0,82
6 5,18 5,25 0,78 0,76
á 5,46 9,96 0,83 0,82
CV 0,12 0,02 0,07 0,04
—"Fases de la floración.
, sE 5,54 4,86 0,95 0,83
B 3,88 5,29 0,73 0.97
6 3,59 4,90 0,62 0,81
D 4,14 5,46 0,62 0,83
E 3,58 5,38 0.55 0,82
F 5,46 5,43 0,77 0,76
CV 0,19 0,05 0,18 0,08
Taxcnómicamente (Sj, Fig. 2d) se reafirma la heterogrneidad de la
taxocenosis, con una ligera tendencia a separar la etapa de floración
positiva (A, B, C) de la de desecación. Esquema válido para ambos sec-
tores.
Biocenóticamente (Sw, Fig. 2e) en el sector A se segregan tres
fases: una inicial corimspondiente a porcentajes de floración inferior a
50%, una intermedia, agrupando tanto las máximas intensidades de £lo-
ración como aquella en que las flores secas Son minoritarias, y una termi-
mal, propia de las flores secas y del desarrollo del follajw. A su vez, en el
sector B se confirma una unidad más compacta, diferenciándose clara-
mente la primera fase detectada en el sector A y enmascarándose las
cuatro finales.
146 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
Los diferentes grados de diversidad específica y de uniformidad
están a la base dr esta característica (Tabla IVb). :
Derivado de lo expuesto, puede considerarse a las categorías C, D y
E como el grupo potencialmente definitorio de núcleos de especirs carac-
terísticas de la inflorescencia del espino, ya que en ellas la pcsibilidad de
llegada de insectos atraídos por otras fases fenológicas del vegetal son
menores.
Siendo escazas las especies que reúnen condiciones de ser altamente
constantes en tal situación y tener densidades importantes, y no siendo
las mismas en los sectores en estudio, se concluye la no existencia de un
grupo de especies asociadas directamente a la inflorescencia, quedando
determinada su presencia por otros factores (as3teriscos en Tabla V). Di-
cha Tabla agrupa las especies que presentan más del 50% de constancia
y/o más del 2% de dominancia.
Comparado los valores promedios por trampa de dichas especies en
ese grupo con los de las otras fases di la floración (Tabla VI) se confir-
ma lo anterior.
TABLA Y
Posibles especies caracterizantes de la floración del espino (fases C, D, E)
SECTOR A SECTOR B
Especies Dominancia Constancia — Dominancia Constancia
(%) (9%) (2%) (%)
Muscidae sp. 2 dos 65,7* 2,49 42,4
Mycetophilidae 1 2,90 22,9 9,207 63,6*
Tachiniden 3 2,28 45,4 4,13 45,4
Tachinidae 6 — — 2,30 39,4
Therevidae 2 1,85 51,4 En a
Lampyridae 1 38,81* TAE aaa ae
Lathridiidae 1 1,71 48,6 5,03* 75,8%
Coccinellidae 1 — — 2,04 42,4
Cryptocephalidae 1 — — 8,68* 87,9*
Cryptophagidae 1 == == 3,58 54.5
Curculionidae 1 — = 6,95% 57,6%
Malachiidae 2 — == 7,80* 54,5%
Pentatomidae 1 — = 7,80* 60,6*
Sphecidae 1 2,71 34,3 == A
Sphecidae 6 4,80 42,8 pa da
D.—Participación de los Ordenes de insectos en los esquemas globales.
Temporalmente la composición taxonómica de los Ordenxs ratifica la
idea de alta heterogeneidad detectada en el análisis global (Fig. 3, Sj).
Ponderadas la permanencia témporo espacial de las especies y su
corinspondiente aporte numérico (Fig. 3, S'w y Sw), queda en evidencia
que los Ordenes Coleoptera y Diptera son los determinantes fundamentalos
de las características de los esquemas globales, tanto por la estructura
da dendrograma como por su mayor peso numérico en especies e indivi-
uos.
F. Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 147
G E
8
1243567
1354672
2341567
Sw
A Homoptera B
12314675
2341567
2341567
1345267
3215467
2314567
2
257
SAA]
1245367
1245367
1264537
A Heteroptera B
1254367
1234567
1234576
A Hymenoptera B
2134367
1234567
1234567
2134567
1235467
1234567
A Coleoptera B
1234567
1234576
2134567
7
1342576
1234567
1234567
A Diptera B
as
==
E
mm
3 S
1234567
1234567
1234567
3
So
7
=
=k
—
10
ha o
o 3
10
S 3 3
Figura 3.— Dendrogramas de afinidades taxonómicas (SD), bilocenótica calculada
con valores de importancia según constancia temporo espacial (S w) y biocenótica
calculada con valores de importancia según dominancia específica (Sw) de acuerdo
a la cronología de las muestras y por órdenes. A=sector A, B=sector B.
148 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
La aparente situación contraria detectada en el sector A en el análisis
en base a Sw (Fig. 3) se debe a la alta redundancia de Lampyridae sp. 1,
la cual enmascara los rfectos diferenciales de las otras especies (condición
de taxocenosis simple).
Por lo tanto, Diptera se presenta bajo todas las situaciones como taxo-
cenosis diverza, situación también válida para Coleoptera en el sector B.
La anomalía de Coleoptera en sector A se debe fundamentalmente a 1
especie.
Hymenoptera presenta esquemas intermedios entre los ya analizados
y los de Heteroptrera y Homoptera, quienes no muestran patrones claros de
relacione3, posiblemente debido a que no presentan nexos muy directos con
la floración dadas sus características biológicas.
TABLA VI
Promedio por trampa de las esprcies principales de la Tabla V comparadas
con los otros grupos de categorías de floración.
SECTOR A SECTOR B
Fases floración A-B C-D-E F A-B C-D-E F
Especies
Muscidae »p. 2 0,75 3,26 4,87 0 1,05 0,96
Mycetophilidae 1 == pere! 0,04 1,50 3,88 4,04
Lampyridae 1 1,42 200 8,04 — => ae
Lathridiidae 1 0,08 0S 1,47 1,42 2,12 1,04
Cryptocephalidae 1 0,08 — — 3,83 3,66 3,42
Curculionidae 1 — 0,82 3,04 0,58 2,93 5.67
Malachiidae 2 — — — — 3,29 4,00
Pentatomidae 1 — 0,48 0,96 0,08 3,08 2,79
Desde el ángulo de la fenología de la floración se confirma la idea
de heterogeneidad taxonómica (Fig. 4 Sj), así como todo lo expuesto
respecto a participación y características de los esquemas particulares
de los Ordenes, analizados biocenóticamente (Fig. 4, Sw).
La información deducida de las diversidades específicas (Tabla VII)
ratifica aún más dichas ideas.
TABLA VII
Diversidad específica por Ordezr3 y Sectores según cronología de las
recolecciones y fases de la floración del espino.
a) Cronología de las recolecciones.
Diptera Coleoptera Hymenoptera Heteroptera Homoptera
A B A B A B A B A B
1 4.61 3.79 1.23 3.28 2 TT 2,49 0.00 1.66 1.28 1.56
2 4.62 4.01 2.04 3,42 1.46 2,85 0.00 1.50 1.93 1.92
3 4.38 3.59 0.88 3.29 2.54 23.65 1.50 1.46 260 17
4 4.33 4.13 0.95 3.36 3.31 3.91 1.16 1.61 LIST
B 4.44 3.74 1.97 3.33 3.63 3.73 1.24 0.84 0.94 2.12
6 3.87 3.57 4.40 3.45 4.03 3.79 0:88 1.43 0.55 1.46
7 4.37 3.85 3.17 3.72 3.12 3.16 2.06 1.23 0.63 2.30
c.v. 0.05 0.05 0.59 0.04 0.28 0.15 0.71 0.21 0.50 0.18
F, Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 149
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Figura 4.— Dendrogramas de afinidad taxonómica (Sj) y biocenótica calculada según
valores e importancia de dominancia específica (Sw) por Ordenes de acuerdo a la.
fenología de la floración. A= sector A, B= sector B.
150 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
b) Fases fenológicas de la floración.
Diptera Coleoptera Hymenoptera Heteroptera Homoptera
A B A B A B A B A B
A 4.57 3.76 2.96 2.73 3.01 2.39 0.00 2.13 1.78 1.83
B 4.10 3.91 2.55 2.82 2.25 4.98 0.00 0.00 1.45 1.52
0 4.62 3.52 0.81 3.12 2.22 3.75 0.00 0.80 2.15 1.64
D 4.70 3.99 1.10 3.53 2.84 4.90 1.10 0.80 2.09 1.95
E 4.40 4.33 1.75 3.31 3.53 3.95 1.38 1.15 1.43 1.81
F 4.34 3.80 3.17 3.64 4.21 3.88 1.72 1.51 0.78 2.21
C.V. 0.04 0.06 0.44 0.11 0.23 0.22 1.05 0.62 0.32 0.12
E.—Individualidad de los sectores estudiados.
En el transcurso del análisis precedente se han ido planteando una
serie de ideas respecto a la similitud de las taxocenosis asociadas a la
inflorescencia del espino en ambos sectores.
Valorada globalmente la información anterior (Tabla VIII) se debe
concluir que dichos sectores ¡son fundamentalmente diferentes, adqui-
riendo importancia básica el tipo de vegetación concomitante.
TABLA VIII
Comparación global de los sectoras en estudio.
SECTOR A SECTOR B
5] 0,44
Sw 0,17
Ro 0,37
H 4,36 5,22
J 0,71 0,84
Esta misma conclusión aboga en el sentido de la no existencia de
una subtaxocenosis directamente asociada a la inflorescencia del espino.
CONCLUSIONES
El análisis de la taxoc>nosis constituida por Coleoptera, Diptera, Hy-
menoptera, Homoptera, Psocoptera, Heteroptera y Neuroptera, concomi-
tante a la inflorescencia del espino durante el período de floración, nos
permite concluir:
1.—No existen núcleos de especies que pudiéramcs considerar directa-
mente asociados o dependientes de la floración, por lo que no se puedr
hablar de una taxocenosis exclusiva de la inflorescencia del espino.
2.—La taxoconosis que acompaña a la inflorescencia del espino está fuer-
temente influenciada por las taxocenosis de la vegetación concomi-
tante.
3.—En estepa de Acacia caven, la taxocenosis de artrópodos asociados a
la flor es de tipo más simple, lo que abogaría en favor de consideras
a la estepa como una formación disclimácica, siendo lo natural para
el espino la formación Lithraeon.
F, Sáiz, E. Vásquez y H. Molina TAXOCENOSIS DE INSECTOS 151:
4.—Coleoptera es determinante en la configuración de las características
de la taxocenosis de la formación esteparia.
5.—Diptera y Coleoptera, en primer lvgear, e Hymenoptera, en segundo,
son los determinantes fundamentales generales de las taxocnosis estu-
diadas.
AGRADECIMIENTOS.— Los autores agradecen a los señores: Haroldo Toro,
Jorge Valencia, Jaime Solervicens, Walter Sielfeld, Gerardo Arriagada, por la deter-
minación de parte del material.
BIBLIOGRAFIA
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Bonn. Geophisches Inst. der Univsersitate.
SOKAL, R. y R. SNEATH. 1963. Principles of numerical taxonomy. Freeman and Co.
ANEXO.— Lista de especies nominadas.
COLEOPTERA
Alticidae: Galleruca decorata Blanch.
Buprestidae: Anthaxia concinna Manh.; Mastogenius sp.
Carabidae: Andrewesella fasciatus Sol.
Cerambycidae: Phymatioderus bizonatus Blanch.; Callicleriphus laectus Blanch.
Cleridae: Epiclines gayi Chervr.; Epiclines basalis Blanch.; Eurymetopum sp. 1
sp. 2.
as Adalia angulifera Muls., Adalia deficiens Muls., Scymus (Pullus)
bicolor Germ., Hyperaspis sphaeridiodes Muls.
Curculionidae: Apochnemidophorus sp.
Histeridae: Saprinus sp.
Lathridiidae: Melanophtalma sp. 1 y 2 (1).
Elateridae: Candanius grassillinus Cand.
Scarabaeidae: Athlia rustica Er.; Lichnia limbata Er.; Arctodium sp. '
Staphylinidae: Lepidophallus pseudoelongatus Coiff. y Sáiz; Cheilocolpus brevi-
pennis Germ.; Trogophloeus luteipes Sol.; Eudera angusticollis Coiff. y Sáiz;
Atheta sp. Oligota pumilio Kiesw., Holobus pygmaeus Sol.
Tenebrionidae: Archeocrypticus chilensis Kaszab.
152 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
HYMENOPTERA
Andrenidae: Acamptopoeum submetallicum (Spin.); Lipoeum trifasciatum (Spin.).
Anthophoridae: Svastrides melanura (Spin.); Alloscirtetica tristrigata (Spin.);
Alloscirtetica sp.; Tapinotaspis herbsti (Friese); Diadasia sp.
Apidae: Apis mellifera L.
Colletidae: Colletes viridans Vachal; Colletes araucariae Friese; Leioproctus mou-
rei Toro; Oediscelis sp.
Halictidae: Dialictus sp. 1 y 2; Ruizantheda mutabilis ( Spin.); Ruizantheda emar-
ginata (Spin.); Cácnohalictas sp.; Sphecodes sp.; Corynura chilensis (Spin.);
Callochlora chloris (Spin.).
Ichneumonidae: Ophion sp.
Megachilidae: Megachile saulcyi Guér.; Megachile pollinosa Spin.; Nothanthidium
steloides (Spin.).
Pompilidae: Salius reedi Herb.; Pseudogenia argentosignata Dalla Torre; Priocne-
mis dumuosus Burmeist.; Salius xanthopus Herb.
Sphecidae: Pison chilense Spin. (2); Pison areolatum Spin.; Astata dispar Reed;
Tachysphex rufitarsis Spin.; Tachysphex pisonoides Reed; Cerceris gayi Spin.
(3); Cresson parvispinosum; Clytemnestra sp.; Solierella chilensis Kohl.; Sphex
latreille Lep.; Podagritus sp.; Heliocausus larroides Spin.; Tachytes chilensis
Smith.
Thynidae: Elaphroptera sp.
Vespidae: Hypodynerus tuberculiventris Spin.; Hypodynerus sp. 1, 2, 3; Stenody-
nerus sp.; Discoelius merula Haliday.
Nota.— Las siguientes especies marcadas tienen correspondencia en el texto:
(1) Melanopthalma sp. = Lathridiidae sp. 1
(2) Pison chilense = Sphecidae sp. 1.
(3) Cerceris gayi = Sphecidae sp. 2,
Valparaíso, Chile 153
ESTUDIOS ECOLOGICOS SOBRE ARTROPODOS CONCOMITANTES
A ACACIA CAVEN. Il. EVALUACION DE LA INFESTACION POR
PSEUDOPACHY MERINA SPINIPES (Er.) *
FRANCISCO SAIZ, DUNNY CASANOVA, VILMA AVENDAÑO
y ENRIQUE VASQUEZ **
INTRODUCCION
Es de conocimiento general y tradiciunal que los frutos del espino
(Acacia caven (Mol.) Hook y Arn.) son atacados por una especie de la
familia Bruchidae, sin existir, hasta el momento, información adecuada
acerca del problema.
El desconocimiento del grado de intensidad de la acción del brúquido
en la naturaleza, la neceridad cu conocer el máximo de aspectos biológicos
de éste para una mejor comprensión de su acción en relación 2l fruto
del espino y, la posible utilización de esta especie vegetal en planes de
reforestación o de sus frutos como complemento en la alimentación del
eanado, nos han motivado a desarrollar una serie de investigaciones ten-
dientes a aportar información valedera para la comprensión de la rela-
ción entre ambas especies.
El presente trabajo tizne por objetivos concretos conocer las carac-
terísticas de la infestación de espinos por el brúquido en cuestión y esti-
mar su intensidad.
Los siguientes aspectos serán fundamentalmente considerados: fenc-
logía de la salida del brúquido adulto, efecto de la vegetación concomi-
tante en el grado de infestación e intensidad de ésta en frutos y semillas.
Observaciones preliminares realizadas sobre frutos persistentes en
los árboles a mediados de Primavera nos imforman de posibles diferen-
cias en las características de la infestación según la vegetación conco-
mitante.
MATERIAL Y METODO
1.—Diseño muestral. X
El presente estudio se realizó en la Reserva Forestal Peñuelas (Val-
paraíso). Para definir el universo se utilizaron los siguientes criterios:
árboles sanos con frutos al 30 de Noviembre de 1976, rliminándose los
enfermcs o con desarrollo arbustivo no productivo.
En esta área se consideraron dos estratos:
* Investigación cofinanciada por Conaf-Viña del Mar.
** Laboratorio de Ecología, Univ. Católica de Valparaíso, Casilla 4059, Valparaíso,
Chile.
164 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
Estrato 1. Zona norte del área, donde los espinos se encuentran en
alta demsidad y claramente asociados con árboles y arbustos, entre los
que destacan: Quillaja saponaria Mol., Peumus boldus Mol., Cryptocarya
alba Mol., Maitenus boaria Mol., Muehlenbeckia sp. Es una zona semibos-
cosa con baja intervención, cubierta en grandes sectores por un denso y
alto estrato herbáceo anual.
Estrato 2. Zona sur del área estudiada donde la demsidad de los
espinos es menor, encontrándose en general más aislados. Es zona de tipo
estepario con mayur intervención y estrato herbáceo anual de poco des-
arrollo en altura.
La selección de las muestras se hizo mediamte el método del tran-
secto, para lo cual se ubicó aproximadamente el centro de cada estrato,
lugar en que se seleccionó un transecto al azar, haciendo girar libremente
una aguja sobre un pivote central. Se fijó la línea imaginaria mediante
puntos de referencia y se estableció en torno a ella una franja de unos
10 m en la que ye seleccionaron uno de cada ocho espinos con las carac-
terísticas exigidas. El procedimiento proporcivnó una muestra de 16 ár-
boles (reducida a 14 por pérdidas) en el estrato 1 y de 7 en el Z.
En los espinos seveccionados en que la carga de frutos era escasa se
cogió la tebalidad, dividiéndcse en 2,4, u 8 partes de tamaño similar,
según abundancia de la carga. De estas subdivisiones se eligió una al azar
por árbol, colectándose allí la totalidad de los frutos.
El procedimiento descrito corresponde a un diseño muestral en dos
etapas dentro de des estratos, con un submuestreo de tamaño 1 en la
segunda etapa.
El material recolectado se numeró y colocó en bolsas dr malla col-
gándose del mismo árbol. El contrul de la salida de brúquidos se hizo
periódicamente a través de las semillas. Para ello en cada salida a terreno
se dergranaron los frutos con orificio de salida del coleóptero, se conta-
ron las semillas aparentemente sanas y aquellas que habían aportado
brúquidos, dejándose las primeras en otro depósito en el mismo árbol.
En cada recolección se controló la emergencia de adultos in amkus depó-
sitos.
El período total de observación estuvo comprendido entre el 30 de
Noviembre de 1976 y el 14 de Julio de 1977, realizándose 12 salidas a
terreno.
2.—Estimadores usados.
Estimador de proporción o de valor absoluto promedio, ya sea de cada
estrato o del universo.
F. Sáiz et al. ARTROPODOS CONCOMITANTES 155
1 n
Y = y Bi Yi donde:
nm i=1 n=N" árboles de la muestra, ya sea
(usado para promedios) en un estrato o en el universo.
n Xi, Yi= valor en árbol i
> Yi Bi= n? subdivisiones en árbol i.
i=1
P=
n
z Xi
i=1
(usado para proporciones).
3.—Observación final.
Dado que la evolución de la manifestación de la infestación en el
tiempo es visible, en frutos y semillas, por la presencia de orificios de
salida del imsecto, se usará el término “perforados” para referirse a mo-
mentos de dicha manifestación y el de “infestados” para nominar la glo-
balización final de la infrstación.
RESULTADOS Y DISCUSION
1.—Grado de infestación.
Como una primera aproximación a la valoración de la intensidad y
características de la infestación de frutos de espinos por brúquidos, ana-
lizamos los datos globales expuestos en la Tabla 1.
TABLA 1
Infestación estimada dr frutos y semillas de Acacia caven por
Pseudopachymerina spinipes (Er.)
Estrato 1 Estrato 2 Total
No de frutos 2.507 1.167 3.674
X frutos por árbol 179,1 166,7 174,9
X frutos infestados por árbol 165,8 152,9 161,4
% frutos infestados 92,5 91,7 92,3
N? de semillas 46.030 23.323 69.853
X semillas por árbol 3.2879 3.831,9 3.802,5
X semillas infestadas por árbol 667,2 626,5 646,8
0% semillas infestadas 20,3 18,8 19,6
De tllos se deduce que a pesar del alto porcentaje de frutos infes-
tados, la proporción de semilas afectadas es bastante baja (cerca del
20%), lo que nos hace pensar que si bien el brúquido ataca gran canti-
156 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
dad de frutos no estaría lesionando en forma trascendente el potencial
biótico de la población de espinos.
El grado de infestación estimado no es homogéneo en la muestra
analizada, sino que se reparte en forma variable entre los siguientes valo-
res extremos: 7,5% y 47,5%, sin que aparezcan claras relaciones con fac-
tores como el tamaño de los árboles, su estado sanitario aparente, su
carga dr frutos, su cercanía o lejanía de otras especies arbóreas, etc.
Esta situación era de esperar para una relación interespecífica de
este tipo, máxime si se considera el tamaño relativamente pequeño de la
muestra.
Influyen, a muestro entender, los posibles estados sanitarios de los
árboles y el submuestreo realizado en aquellos con gran carga de frutos,
ya que la selección al azar puede haber incidido en sectores de concen-
tración y de baja densidad de la infestación. Es un hecho que la dife-
rente intensidad de la insolación en la periferia del follaje afecta al
vegetal desfasando las fases fenológicas en diferentes sectores de éste
(Sáiz, Vásquez y Molina 1977).
Igualmente, podemos inferir, de los valores analizados, que se tra-
taría de una relación interespecífica bastante antigua, en que las pobla-
ciones involucradas habrían alcanzado un nivel de equilibrio aceptable a
ambas.
Quizás, también pudría interpretarse como correspondiente a un año
de baja incidencia de la infestación, opinión que no ncsx inclinamos a com-
partir *, por el hecho de no temer conocimiento de información alguna
referente a .-plagas de estr brúquido (indicadoras de períodos de alta
infestación), y pur ser conocida esta especie desde muy antiguo.
Mas bien pedrízmos pensar en una fluctuación de ajuste ante la
alteración de la condición fitosociológica del espino por intervención hu-
mana (Schmithuezen, 1956).
La no existencia de diferencias significativas, en los aspretos con-
siderados, entre los estratos en estudio, respaldaría nuestra primera hipó-
tes, ya que pudría interpivtarse como una baja dependencia de la rela-
ción interespecífica de factores ajenos a ella misma.
2.—Características temporales de la manifestación de la infestación.
La concordancia de los “squemas de frecuencias temporales de salida
de brúquides adultos (frutos perforados, semillas perforadas y relación
“semillas perforadas / stock de semillas del que provienen *) (Fig. la,
b, e), nous plantea la existencia de una relación directa entre la fenología
de la manifestación de la infestación en frutos y semillas.
* El alto % de frutos infestados no favorece la idea de ser un año de baja inciden-
cia de la infestación.
* Se entiende por “stock del que provienen” a las semillas desgranadas en el período.
más todas aquellas aparentemente sanas de períodos anteriores,
PF, Sáiz et al. ARTROPODOS CONCOMITANTES 157
N* FrUTOS*
NO SEMILLAS 2
Fig. 1. Manifestación de la infestación por período/árbol/día. a= x temporales de
frutos perforados; b= x temporales de semillas perforadas; c= relación temporal
de ““semillas perforadas / stock de semillas del que provienen”. E-1 y
E-2 = Estratos 1 y 2.
Ello, a su vez, hace pensar en una alta sincronización en la salida
de brúquidos de los frutos.
Comw una medida de lo anterior se calculó el % de semillas perfo-
radas obtenidas directamente de los frutos perforados en el mu»mento de
cada recolección y el obtenido posteriormente dr las semillas aparente-
mente sanas en ese instante, dando los siguientes valores: Estrato 1: 71,19%
y Estrato 2: 74,20.
A pesar del pequeño desfasamiento (atraso de uncs 20 días del
esquema del Estrato 2 respecto. al 1, podemos considerar como período
aproximado de emergencia de brúquidos adultos los meses de Diciembre,
Enero, Febrero y parte de Marzo, centrándose fundamentalmente en Enr-
ro y Febrero (Fig. la, b, c).
La conclusión anterior se ve confirmada por las curvas de valores
acumulados de semillas perforadas por árbol y por estrato (Fig. 2a) al
darse un aumento de tipo exponencial en los meses de Enero y Febrero
y establecerse una asíntota de Marzo en adelante.
Este mismo aspecto queda claramente expresado en la Fig. 2b en
168 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
N2 SEMILLAS E-1
E-2
E id
600
600
400
soo
200
100
40
ASA, E-1
” A A a
pS RA
00
20
so 28
Fig. 2. Manifestación acumulada de la infestación. a= Curva de valores acumulados
de semillas perforadas; b= evolución temporal de la relación “semillas perforadas
acumuladas / total semillas estudiadas hasta ese momento”. E-1 y E-2 =
Estratos 1 y 2.
F. Sáiz et al. ARTROPODOS CONCOMITANTES 159
que se analiza la relación “cemillas perforadas / total de semillas”, con-
sideradas en períodos acumulativos de tiempo y provenientes de frutos
perforados hasta ese momento.
Es interesantz destacar, a este nivel de análisis, que aún en los perío-
dos de máxima expresión externa de la infestación, ella no logra valores
alarmantes en cuanto al número de semillas afectadas, enfocadcs drsde el
punto de vista de una plaga.
El paralelismo de las curvas de valores correspondientes a los dus
estratos confirma la validez de la idea de un solo esquema general de
expresión de la infestación, ajeno en alta medida a la vegetación conco-
mitante.
CONCLUSIONES
1.—La infestación de Acacia caven por Pseudopachymerina spinipes
(Er.), si bien afecta un gran número de frutos nú parece tener efectos
negativos para el futuro de la población de espimos, ya que no estaría
lezionando seriamente su potencial biótico.
2.—Existiría una relación interespecífica de relativo *quilibrio entre
ambas especies, derivada probablemente de una gran antigiiedad de la
misma.
3.—La máxima manifestación externa de la imfestación (apareci-
miento de brúquidos adultos) corresponde aproximadamente a los meses
de Enero y Febrero, dentro de un rango que abarcaría desde Diciembre a
Marzo.
4.—Los mases restantes corresponderían a las fases de desarrollo
embrionario y larvario, ya que los adultos ovopositan al poco tiempo de
emergidos.
5.—Existe un alto grado de sincronización en la emergencia de los
brúquidos de cada fruto.
BIBLIOGRAFIA
SAIZ, F., E. VASQUEZ y H. MOLINA. 1977. Estudios ecológicos sobre artrópodos
concomitantes a Acacia caven. 1. Taxocenosis de insectos asociados a la in-
florescencia. An. Mus. Hist. Nat., Valpso., 10: 135.
SCHMITHUESEN, J. 1956. Die raeumliche ordnung der chilenischen vegetation.
Bonn. Geophisches Inst. der Universitate.
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Valparaíso, Chile 161
ASPECTOS ECOLOGICOS DE LOS ICHNEUMONIDOS
DEL BOSQUE DE QUINTERO
VIVIANE JEREZ *, DOLLY LANFRANCO **, BELISAEIA ANDRADE
ABSTRACT: The fauna of Ichneumonidae oí Quintero forest is investigated
through an annual cicle, four periods are recognized. A lot of 1172 Sa are
collected, 54 species and 10 subfamilly are studied.
A quantitative analysis of Ichneumonidae composition, dominance, constancy,
affinity and fenological aspects are discussed.
Finally, some ecological aspects of Hemicallidiotes 1 and Diadegma 1 are des-
crived.
El Bosque de Quintero ha suscitado la atención de diversos investi-
gadores (Looser 1944, Levi 1951, Solervicens 1967, Villagrán 1969, Ro-
mero y Peña 1972, Silva y Vivar 1973, Solervicens 1973), quienes han
realizado estudios de tipo florístico, ecológico, faunístico y climático. El
presente trabajo viene a ofivcer una contribución más al conocimiento
de este bosque, a través de la composición taxocenótica de la Ichneumono-
fauna y de sus variaciones temporales.
MATERIAL Y METODO
Se realizó un muestrev anual entre Marzo de 1972 y Febrero de 1978.
Las prespeciones se efectuaron cada quince días con un total de veinti-
cuatro recolecciones.
La colecta se llevó 4 cabo mediante redes entomológicas y paraguas
japonés en el sector ecotonal del bosque. Este al norte y al oeste se pone
en contacto con un extenso cañaveral constituido fundamentalmente por
Scirpus californicus (C. A. Mey) Steud, y Polypogon c«ustralis Brongn y
al este y por el sur con potreros de vegetación baja de gramíneas y ma-
lezas. La periferia del bosque está constituida casi exclusivamente por
Myrccugenia exsucca (D. C.) Berg y Drimys winteri Forst, entre los cua-
les aparecen algunos ejemplares de Escallonia revoluta (R. et Pav) Pers
y Aristotelia chilensis (Mol.) Stuntz.
Durante el año se vbtuvo un total de 1172 individuos. Para el análisis
cuantitativo de los datos se utilizaron los valoro de Constancia y Domi-
nancia según Bodenheimer (1955) y el Indice de Afinidad de Dice (So-
rensen), (Gounot 1969).
* Departamento de Biología, U. de Chile, Casilla 130 V, Valparaíso.
** Departamento de Recursos Naturales Terrestres. Sección Entomología. Instituto
de la Patagonia. Casilla 102-D., Punta Arenas, Chile.
Qs
o
162 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
RESULTADOS Y DISCUSION
La ichnvumonofauna del bosque está representada por 54 especies de
las aproximadamentr 170 especies descritas para Chile (Lanfranco 1977).
En el Cuadro 1 se indican las subfamilias y especies a que pertenecen
los ichneumónidos, *l número de individuos, la dominancia y constancia
específica anual.
Jerarquización taxonómica.
Tres son las subfamilias mejor representadas (Gelinae, Porizontinae
e Ichneumoninae) tanto en su abundancia relativa como en la riqueza
específica (Cuadro 1).
Con los valores de constancia más los valores de dominancia anual
(Cuadro 1) podemos definir dos grupos de ichneumónidos:
a) Especies comunes: compuestas por Coccygomimus fuscipes, Hemicalli-
diotes 1, Hyposoter 1, Diadegma 1 y Helictes sp.
b) Especies raras: el resto de las especies.
Análisis temporal.
El alto porcentaje dt especies raras plantea la hipótesis de una dis-
tribución temporal estacional. El análisis de las afinidades entre las dife-
rentes recolecciones (Fig. 1) y la caracterización de los grupos allí deter-
minados por los valores de dominancia y constancia específicos (Cuadro
2) permite distinguir los siguientes períodos:
Período I. Muestreo 1 al 5 (inicio de Marzo 1972 hasta comienzos de
Mayo 1972) se caracteriza por la presencia de dos especies comunes anua-
les, Coceygomimus fuscipes y Helictes sp. y dos especies características
Tromatobia sponsa e Hyposoter 3. Cabe mencionar que Coccygomimus
fuscipes es afín al período IV (Cuadro 3).
6 7 9 10 4 € S 2 3 9 15 16 13 146 17 18 19 20 23 21 22 9 Mm 1 iv 1111
Fig. 1. Afinidades taxonómicas entre los diferentes muestreos y afinidad por
período.
Numero de individuos
V. Jerez, D. Lanfranco y B. Andrade ECOLOGIA ECHNEUMONIDOS 163
Periodo II. Muestreo 6 al 10 (mediados de Mayo hasta fines de Julio
1972) se caracteriza por presentar sólo una especie común anual Hemica-
llidiotes 1, destacándose como propias Hemicallidiotes 2, Hemicallidiotes 4,
1-21 e 1-22 y por Anacis rubripes afín con el período 1.
Período III. Muestreo 11 al 16 (inicios de Agosto hasta fines de Oc-
tubre 1972), se caracteriza por presentar sólo dos especies comunes anua-
les, Helictes sp. y Diadegma 1, esta última afín al período IV.
Período IV. Murstreo 17 al 24 (comienzos de Noviembre 1972 hasta
fines de Febrero de 1973), se caracteriza por presentar todas las especies
comunes anuales excepto Helictes sp.
Aspectos particulares.
La densidad anual de las especies comunes se observa en la Fig. 2,
constatándose que Hemicallidiotes 1 y Diadegma 1 presentan el mayor
númer de individuos a lo largo del año.
La abundancia de estas dos especies se muestra en la Fig. 3, donde
se puede visualizar que Hemicallidiotes 1 está mejor representada en los
períodos 1 y II mientras que Diadegma 1 lo hace en los períodos III y IV.
CONCLUSIONES
a) La taxocenosis de ichneumónidos del bosque de Quintero pre-
senta un gran múmero (49) de especies raras, encontrándose sólo cinco
especies comunes anuales (Dominante-Constante).
b) Se determinaron cuatro períodos característicos, que presentan un
determinado número de especies que los caracterizan. Los períodos con-
120 :
110 — Total de individuos ) ln
100 =-— Diadegma 1 j
Hemicallidiotes 1
A Y E A E A e a
Fig. 3. Comparación del total «de individuos con las dos especies más abundantes.
164 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
COCCYGOMIMUS f,
HEMI]CALLIDIOTES 1
HYPOSOTER 1
DIADEGMA 1
HELICTES Sp.
mo A 1 M 1 Ñ ] ] 1 1 1
Fig. 2. Frecuencia de las especies constantes y dominantes anuales por
período.
V. Jerez, D. Lanfranco y B. Andrade ECOLOGIA ECHNEUMONIDOS 165
tiguos (1-11- 1-TV, y 111-IV) se relacionan a lo menos por una especie en
común. Estos períodos observados corresponden aproximadamente a las
estaciones climáticas de la zona en estudio.
c) Entre las especies comunes más abundantes Hemicallidiotes 1 se
encuentra mejor representada en Otoño-Invierno (períodos 1 y II) en
tanto que Diadegma 1 lo hace en Primavera-Verano (períodos 111 y IV).
CUADRO 1
Subfamilias, especies, número de individuos por especie (N), dominancia (D.E.A.)
y constancia específica anual (C.E.A.)
Subfamilia especie N D.E.A. C.E.A.
Ephialtinae Coccygomimus fuscipes 84 1.1 54.1
Tromatobia sponsa 14 1.1 29.1
Tryphoninae Netelia sp. 29 2.4 33.3
Labiinae Labena sp. 6 0.5 8.3
Macrogrotea gayi 2 0.1 8.3
Gelinae Anacis rubripes : 79 6.7 - 45,8
Bilira 1 2 0.1 4.1
Bilira 2 3 0.2 12.5
Bilira 3 2 0.1 8.3
Trachysphyrus nigricornis 21 1.8 . 16.6
Trachysphyrus sp. 4 4.1 - 0,1
Hemicallidiotes 1 ; 143 TI 70.8.
Hemicallidiotes 2 a 17 e 1.4 33.3
Hemicallidiotes 3- 7 0.6 16.6
Hemicallidiotes 4 20 1.7 33.3
Stiboscopus sp. : 52 O E -8.3
Dotocryptus bellicosus : 1 0.1 4.1
Mastrina 1 1 0.1 4.1
dB ichioas Deleboea. 1 5 0.4 12.5
Deleboea 2 2 0.1 8.3
¡ Deleboea 3 1 0.1 4.1
.Deleboea 4 1 Oi 4.1
Porizontinae Hyposoter 1 61 5.2 54.1
Hyposoter 2 14 1.1 50.0
Hyposoter 3 : : 28 2.4 41.6
: Campoletis sp. 21 1.8 20.8
.Diadegma 1 LE 193 16.4 83.3
Diadegma. 2 ? : 5 0.4 : 16.6
Diadegma 3 15 1.2 20.8
E -Diadegma. 4 4 : 0.3 12.5
. Diadegma. 5 1 0.1 4.1
Campoctonus sp. 0 5 0.4 16.6
Hyposoter niger 2 0.1 8.3
Ophioninae Enicospilus merdarius 9 0.7 25.0
Alophophion chilensis 1 0.8 4.1
Microleptinae Apoclima sp. 26 2.2 20.8
Helictes sp. . 81 6.9 54.1
Diplazontinae Diplazon laetatorius 31 2.6 25.0
_Homotropus chilensis 7 0.6 : 12.5
Homotropus sp. 16 1.3 20.8
166 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL
Subfamilia especie
Ichneumoninae Barichneumon sp.
I - 21
I - 22
I - 24
I - 25
1 - 27
Phaeogenes maculicoxa
Platylabus sp.
Pterocormus 1
Pterocormus 2
Thymebatis sp.
Setanta sp.
Hoplismenus 1
Hoplismenus 2
Hoplismenus 3
CUADRO 2
N* 10, 1977
Constancia específica (9%) y Dominancia específica (9%) por períodos.
Especie / Períodos
I 11
1-5 6-10
Coceygomimus fuscipes 100 —
Tromatobia sponsa 100 —
Netelia sp.
Labena sp.
Macrogrotea gayi
Anacis rubripes
Bilira 1
Bilira 2
Bilira 3
Trachysphyrus
nigricornis
Trachysphyrus sp.
Hemicallidiotes 1
Hemicallidiotes 2
Hemicalliodiotes 3
Hemicallidiotes 4
Stiboscopus sp.
Dotocryptus bellicosus
Mastrina 1
Deleboea 1
Deleboea 2
Deleboea 3
Deleboea 4
Hyposoter 1
Hyposoter 2
Hyposoter 3 1
Campoletis sp.
Diadegma 1 1
Diadegma 2
20.0 —
40.0 100
— 100
40.0 —
111
11-16
16.6
16.6
16.5
50.0
83.3
16.6
—
66.6
IV
17-24
87.5
25.0
87.5
25.0
25.0
25.5
37.5
12.5
87.5
12.5
12.5
25.0
12.5
12.5
25.0
100
50.0
50.0
62.5
100
50.0
1-5
6-10
111 IV
11-16 17-24
1.0 12.5
— 0.4
— 4.9
— 0.9
— 0.3
1.0 0.3
0.5 —
— 0.1
1.5 3.3
— 0.1
2.0 6.0
1.5 0.1
0.5 0.1
3.0 —=
— 0.1
— 0.5
0.5 0.5
— 0.5
0.5 —
2.5 37
2.0 0.9
1.5 1.6
— 3.8
12.9 29.1
V. Jerez, D. Lanfranco y B. Andrade ECOLOGIA ECHNEUMONIDOS 167
Especie / Períodos l 11 901 IV I 11 11 IV
1.5 6-10 11-16 17-24 1-5 6-10 11-16 17-24.
Diadegma 3 — — — 62.5 — — — 2.5
Diadegma 4 20.0 — — 25.0 0.5 — — 0.5
Diadegma 5 — = 16.6 — — = 0.5 =
Campoctonus sp. — — — 50.0 == == =: 0.9
Hyposoter niger 20.0 — - 16.6 — 0.5 — :0.4 —
Enicospilus merdarius 20.0 — — 62.5 0.5 = — ¿12
Alophophion chilensis — — 16.6 EZ e — -:056 —
Apoclima sp. — 40.0 50.0 E = 2.2 10.2 —
Helictes sp. 80.0 40.0 66.6 37.5 6.0 3.1 26.2 16.6
Diplazon laetatorius 20.0 20.0 — 50.0 0.5 0.4 — 4.9
Homotropus chilensis 40.0 — — 12.5 2.0 — — 1.5
Homotropus sp. . 40.0 — 16.6 25.0 5.0 — 20 0.3
Barichneumon sp. 60.0 40.0 — 25.0 3.5 1.5 — 0.5
1321 20.0 100 33.3 37.5 1.0 15.8 2.0 0.9
I - 22 40.0. 80.0 . 50.0 62.5 EDI 84 1800 0.7:
1 - 24 60.0 40.0 50.0 37.5 A O
DEA A OA 87.5 == 0 DO
I - 27 — 20.0 16.6 50.0 — 4.0 0.5 0.7
Phaeogenes maculicoxa. 40.0 20.0 — 50,0 . 3.5- 18 == : 23
Platylabus sp." 600 —.— . 250 . 16 .—- — 0.5
Pterocormus 1 — “40.0 — 125 — -0.6 =z 0.1
Pterocormus ee — — — 250 . — 2: — “.,:.0:3
Thymebatis sp. A A 37.5 an == 0 0.5
Setanta sp. — — — 12.5 — — — 0.1
Hoplismenus 1... — — 16.6 li —o. — 0 ='
Hoplismenus 2 E = — 12.5 li ¿— 0.1
Hoplismenus 3 — — — 12.5 — — — 0.3.
CUADRO 3
Dominancia y Constancia de las especies de Ichneumonidós po? períodos.*
Dominante/constante: de
Coccygomimus fuscipes-Hemicallidiotes 1. Diadegma 1: Coccygomimus fuscipes” :
" Tromatobia sponsa _Hemicallidiotes 2 Helictes sp. Hemicallidiotes. 1
"Anacis rubripes Hemicallidiotes4 .. _Hyposeter 1
Hyposoter 3 Anacis rubripes | Diadegma 1
Helictes sp... + “1-21: . Ae .
Dominante/Accesoria: '
Hemicallidiotes 1 Apoclima sp. Helictes sp.
Homotropus sp. I - 22
Accesoria/Accesoria:
Phaeogenes maculicoxa Apoclima sp. Phaeogenes maculicoxa
Homotropus chilensis Helictes sp. Hyposoter 1 Trachysphyrus nigricornis
Homotropus sp. Hemicallidiotes 1 Displazon laetatorius
Henmicallidiotes 3 Hemicallidiotes 4 1-24
I - 21
168 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
1 yy II IV
Accesoria/Constante:
Diadegma 1 Hyposoter 2 Diadegma 3
Barichneumon sp. Campoletis sp.
Netelia sp.
I - 25
* Otras:
14 especies 19 especies 15 especies 28 especies
* Se consideran “otras” a todas las especies incluidas dentro de las otras posibles
combinaciones de Dominancia y Constancia.
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Valparaíso, Chile 169
AUTOECOLOGIA DE LIOLAEMUS NIGROMACULATUS
(LACERTILIA, IGUANIDAE)
EDUARDO R. FUENTES *
ABSTRACT: Microhabitat selection patterns, food preferences, body size and
fecundity were studied in three populations of the chilean iguanid Liolaemus nigro-
maculatus. 1t was found that size of males and females, sexual size dimorphism,
fecundity, proportion of vegetation in the diet, and absolute amount of small sized
prey vary with latitud. These trends were interpreted as adaptations associated with
the north-south productivity and food supply gradients between localities.
The possible roles of predation and competition in determining «the micro-
habitats selected by L. nigromaculatus are discussed,
INTRODUCCION
Es notoria la falta.de conocimiento. que se tiene de la ecología de los
reptiles chilenos. En el caso de Liolaemus nigromaculatus la monografía
de los Reptiles de Chile de Donoso-Barros (1966) indica sólo. su distribu-
ción geográfica, su reproducción ovípara y su condición de insectívora;
de manera que el desconocimiento ecológico de esta especie es casi total.
Este trabajo pretende contribuir al conocimiento de alguncs pará-
metros básicos de la autoecología de L. nigromaculatus, a la vez que plan-
tear algunos esquemas y problemas que podrían estudiarse en el futuro.
Para estos propósitos usarzemos información colectada durante Diciembre
y Enero (1972-1973) en Zapallar y Los Molles y datos obtenidos en
Enero de 1976 en la localidad de Morrillos, 15 km al sur de Coquimbo.
La literatura es ambigua en cuanto a las subespecies de L. nigroma-
culatus rzn estas localidades. Donoso-Barros (1966) indica que L. n. kuhl-
mani y L. n. zapallarensis sobrepondrían sus distribuciones geográficas
en forma amplia en la región en que se encuentran las localidades selec-
cionadas. Nos parece que este es un problema que merece una mayor
atención que la que podríamos darle en un trabajo de este tipo y por eso
nos referiremos a L. nigromaculatus separadamente en cada una de las
tres localidades mencionadas sin intentar nombrar subespecies. Espera-
mos que en el futuro próximo se hagan las revisiones correspondientes
para aclarar las relaciones sistemáticas entre estas poblaciones.
METODOS
El uso del habitat por parte de L. nigromaculatus se estudió por ins-
pección directa en el terreno usando técnicas estándar para ello (Fuentes
1976). Muestras de los animales capturados fueron inyectadas con forma-
lina al 10% para su conservación, y posteriormente llevadas al laborato-
* Laboratorio de Ecología 1.C.B., Universidad Católica de Chile, Santiago, Chile.
170 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
rio para el examen del estado reproductivo y d+] contenido estomacal.
En el laboratorio loz ítems presa fueron medidos (en mm) y clasifi-
cados a nivel de orden. Posteriormente se obtuvo el peso seco de las com-
ponentes animal y vegetal de la dieta.
RESULTADOS
La autoecología de un organismo puede describirse desde el punto
de vista del uso del habitat, régimen de alimentación y tiempos de acti-
vidad (diario y estacional). Nuestros datos fueron obbznidos durante el
verano y por lo tanto aquí nos referiremos más ampliamente a habitat
y alimentación e incluiremos sólo algunas sugerencias acerca de las com-
ponentes temporales del nicho de L. nigromaculatus. Más aún, esta comu-
nicación se basará fundamentalmente en datos de Morrillos usando los
datos de Zapallar-Los Molles sólo como punto de comparación.
Habitat: En las zonas entre Zapallar y Los Molles Liolaemus nigro-
maculatus se encuentra distribuido en la pendientz, generalmente rocosa,
entre la zona de más altas mareas y la región donde comienza el mato-
rral costero de Baccharis concava, Lithraea caustica y Bahia ambrosioi-
des. Es notoria la ausencia de este animal en las regiones de matorral
adjunto, particularmente en circunstancias que hay otras especies de
Liolaemus que ocupan este habitat (Fuentes 1976).
En el habitat de pendiente indicado L. nigromaculatus es la única
lagartija presente, ocupando posiciones sobre y entre rocas, pero nunca
muy lejos de éstas.
Las plantas más frecuentes en el habitat de Liolaemus nigromacu-
latus en esta región son Calandrinia sp., Frankenia sp., Oxalis sp. y
Haploppapus sp.
En Morrillcs L. nigromaculatus además de encontrarse en forma soli-
taria en el habitat de pendiente rocosa mencionado, se encuentra tam-
bién en las dunas interiores. En esta zona de dunas y de muy poca vege-
tación (fundamentalmente Cristaria glacpohylla y Chorizante paniculata
éon cubiérta total de menos del 27%), L. nigromaculatus se distribuye
solamente junto a las grandes rocas y al cactus rastrero Austrocylindro-
puntia miqueliz, mientras la especie simpátrica Liolaemus platei se en-
cuentra en las dunas propiamente tales. Fuentes y Cancino (1976) discu-
ten la evidencia acerca de la dinámica potencialmente competitiva y de
predación por aves rapaces que da cuenta de esta zonación de Liolaemus
nigromaculatus y L. platei. Nos interesa aquí solamente indicar que la
microdistribución de L. nigromaculatus podría estar delimitada por com-
petencia potencial por alimento con L. platei, y predación por aves rapa-
ces, más que por la oferta de alimento o restricciones del ambiente físico.
Alimentación: En general en lagartijas el tipo de alimentos (artró-
podos o plantas) así como el tamaño de las presas, son dependientes
del tamaño del animal (Fuentes 1975, 1976; Schoener 1967).
E, Fuentes AUTOECOLOGIA LIOLAEMUS NIGROMACULATUS 171
Por lo tanto, antes de describir la alimentación de L. migromaculatus
describiremos brevemente su tamaño (Tabla I). Nos referiremos a tres
clases da edades: machos adultos (con testículos diferenciados), hembras
adultas (con huevos diferenciados) y juveniles.
Es claro de la Tabla I que los machos son más grandes que las hem-
bras. El coeficiente de dimorfismo sexual, calculado como razón de lon-
gitudes promedio de cabezas:
machos-hembras
X 100), varía entre 349% para la localidad más nor-
hembras
teña (Morrillos) hasta 14% en la localidad más sureña (Zapallar). Las
longitudes del tamaño total (cabeza-tronco) siguen patrones similares y,
por la alta correlación existente entre estas medidas (Tabla 1), en lo que
sigue nos referiremos sólo a las longitudes promedio de cabezas.
Es interesante notar que el patrón de dimorfismos sexual de L. ni-
gromaculatus se produce por un incremento latitudinal en el tamaño de
los machos y un aumento latitudinal promedio aún mayor en las hem-
bras. Roughparden y Fuentes (en prensa) han mostrado que en espe-
cies de lagartijas estos cambios de tamaño están asociados «a cambios en
la oferta ambiental de insectos. Es posible, y el aspecto de la vegetación
parecz indicarlo, que en la zona de Zapallar y Los Molles, en que hay más
humedad la productividad primaria y consecuentemente la oferta ambien-
tal de insectos sea mayor que en Morrillos, y que el tamaño promedio de
L. nigromaculatus sea un reflejo de este fenómeno.
La alimentación de L. nigromaculatus aparece en su aspecto cuanti-
tativo como constituida fundamentalmenta por material vegetal al que
se agrega una cantidad variable de insectos. Los datos obtenidos se mues-
tran en Tabla 11. Claramente L. nigromaculatus presenta una estratifica-
ción alimentaria por tamaños en que los grupos de mayor tamaño comen
más vegetación y presas más grandes que los grupos de menor tamaño..
Así los machos comen más vegetación y presas más grandes que las
hembras y los juveniles, y éstos últimos comen proporcionalmente menos
vegetación y presas más pequeñas que las hembras. Ambas tendencias
están en conformidad con los datos bibliográficos a que nos refiriéramos
anteriormente.
En Los Molles y Zapallar como conjunto se repite la diferencia entre
machos y hrumbras, pero aparece una diferencia global con respecto a
Morrillos. Los adultos (machos y hembras) en Morrillos tienden a comer
presas más grandes que en Zapallar-Los Molles Tabla 111 (x? = 27; 2 df.
p <.005). Además la proporción de vegetación comida por los adultos
en estas localidades es menos (60%) que en Morrillos. Estas diferencias
no pueden ser explicadas por el efecto de competencia interespecífica de
L. platei sobre L. nigromaculatus en Morrillos, ya que en ese lugar am-
bas especies comen presas del mismo tamaño en microhabitats diferentes
(Fuentes y Cancino, 1976). Creemos que las diferencias indicadas esta-
rían más bien relacionadas a diferencias en la oferta ambiental de in-
sectos en las zonas de Zapallar y Los Molles con respecto a Morrillos.
172 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
Schoener y Janzen (1968) reportan que en zonas secas el tamaño pro-
medio de los insectos es mayor y la abundancia menor que en zonas
húmedas. De manera que parece posible que la oferta ambiental de
insectos en Morrillos (más seco) sea menor en cantidad y mayor en el
tamaño promedio de presas ofrecidas que en Zapallar y Los Molles (más
húmedo). Consecuentemente, habiendo mayor oferta de insectos en Zapa-
llar y Los Molles, las lagartijas comerían menos vegetación y más insectos
pequeños que en Morrillos, tal como indicáramos anteriormente.
Los taxones de artrópodos consumidos son probablemente más una.
reflexión de la oferta ambiental de alimento que preferencias de los
animales (Schoener 1968). Los grupos de artrópodos más consumidos por:
L. nigromaculatus son los coleópteros (20% de los ítems) y las larvas
(diferentes grupos) (29%). En Zapallar y Los Molles hemípteros y
homópteros en conjunto constituyen un 30% de los ítems, mientras que
estos grupos tienen representación menos de 1% en la dieta de L. nigro-
maculatus en Morrillos. Otros grupos como arácnidos y ortópteros adquie-
ren más importancia en la dieta de la población de Morrillos.
CONCLUSIONES
Liolaemus nigromaculatus aparece como una especie en que hay pro-
blemas de sistemática o distribución geográfica en sus subespecies L. »n.
zapallarensis y L. n. kuhlmani. Ante esta dificultad nos hemos debido refe-
rir a las poblaciones en forma separada y señalando las localidades de
colección (Morrillos, Los Molles y Zapallar). En estos lugares hemos en-
contrado que hay una gradiente latitudinal en las características de esta
especie. Gradiente que se manifiesta en: a) el tamaño creciente con la
latitud de machos y hembras, b) en una disminución latitudinal del di-
morfismo sexual, c) en un decrecimiento latitudinal de la proporción de
vegetación comida y d) en un aumento con la latitud del consumo de:
artrópodos de pequeño tamaño. Estas características parecen estar corre-
lacionadas con el incremento latitudinal en la disponibilidad de agua, en
cobertura de la vegetación y un consecuente incremento de la oferta de
artrópodos que sirven de alimento a L. nigromaculatus.
PROBLEMAS PENDIENTES
Como enunciamos en la introducción uno de los propósitos -de esta
comunicación ha sido el discutir ideas con relación a algunos problemas
que nos parece que deberían estudiarse en el futuro próximo. Estas ideas
ham surgido de este estudio y aún cuando no tenemos datos suficientes
que ofrecer para su sustentación, nos parece valioso ofrecerlas como pro-
yecciones e incentivo a trabajos futuros.
La distribución microambiental de L. nigromaculatus parece estar
determinada por combinaciones de predación y competencia potencial.
En Zapallar y Los Molles L. nigromaculatus está restringido a las
E. Fuentes AUTOECOLOGIA LIOLAEMUS NIGROMACULATUS 173
laderas entre los arbustos dal matorral costero y la zona de las más altas
mareas, y nunca muy lejos de las rocas. En la zona más interior de ma-
torral costero la especie congénere L. chilensis, de tamaño y hábitos ali-
mentarios muy similares y también frecuentemente encontrado cerca de
rocas (Fuentes 1976), parece reemplazar ecológicamente a L. nigromacu-
latus. La evidencia aquí es circunstancial y sería de gran interés el deter-
minar si efectivamente la competencia interespecífica entre L. nigroma-
culatus y L. chilensis restringe la actividad de la primera a la zona fuera
de los arbustos. Parece significativo en este sentido que en Morrillos,
donde no existe L. chilensis, L. nigromaculatus expanda su distribución
microgeográfica hacia el interior de las rocas costeras, donde coexiste con
el congénere L. platei.
Por otro lado en Morrillos la distribución de L. nigromaculatus apa-
rece restringida a las cercanías de las grandes rocas por razones clara-
mente relacionadas a la competencia potencial con L. platei y a la preda-
ción por aves rapaces. Es posible entonces, que en Zapallar y Los Molles
L. nigromaculatus también deba restringir su actividad debido al efecto
potencial o real de las aves rapaces, lo que explicaría su 1 constante carca-
nía a rocas y lugares de refugio.
Sería importante indicar aquí que de ser esto así, los roles de pre-
dación y competencia en la estructuración de la comunidad, mo estarían
contrapuestos como han sugerido algunos autores (Paine, 1966, Rough-
garden y Feldman 1975). Más bien ambos factores estructurados se com-
plementarían debido a la existencia de refugios específicos. Así en el caso
de L. nigromaculatus en Morrillos la densidad de repaces y la consecuente:
necesidad de refugios por ser ésta la especie potencialmente más vulne-
rable, evitarían la exclusión competitiva que se produciría si no hubirsen
diferencias en el uso del habitat. Por otro lado en Zapallar y Los Molles
la supuesta competencia entre L. nigromaculatus y L. chilensis restringi-
ría los microhabitats en que se encuentran estas especies y a su vez, en'
estos microhabitats, las especies estarían distribuidas de manera de mi--
mimizar la probabilidades de ser predadas. :
Hay otra manera como se puede manifestar la predación y es en los'
parámetros de la tabla de vida de una población. Poblaciones en que la
predación es comparativamente alta frecuentemente tienen altas tasas de
crecimiento intrínseco, expresadas a través de un período pre-reproduc-
tivo corto y postura de muchos huevos (Lewontin 1965, Tinkle 1969, Tin-
kle et al. 1970).
Para L. nigromaculatus aún no tenemos una tabla de vida y de valo-
res reproductivos por edad, de manera que sólo puede hacerse una pri-
mera aproximación al problema a partir de los datos obtenidos en verano.
Siendo L. nigromaculatus una lagartija heliotérmica es probable que
su actividad esté restringida a la primavera y verano. Su temperatura
cloacal preferida probablemente no difiere mucho de los 35*C medidos
para otras especies de Liolaemus (Fuentes 1975), ya que congéneres tien-
den a tener el mismo preferendum térmico (Licht 1967). Estas tempera-
174 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10. 1977
turas se alcanzarían más fácilmente en primavera-verano, por lo que los
animales juveniles cazados por nosotros podrían tener a lo más un año
de edad. De mi experiencia previa no me parece que entre Octubre y
Diciembre los animales puedan crecer tanto como para ser de la tempo-
rada, pero en ausencia de datos de tasas de crecimiento esto queda sólo
como una hipótesis tentativa. Sin embargo, si fuese así, implicaría que
el período pre-reproductivo de L. nigromaculatus es largo comparado con
otras especies chilenas y norteamericanas que madurarían en la tempo-
rada (Tinkle 1969, Tinkle et. al 1970). Por otro lado, L. nigromaculatus
podría tener posturas con muchos huevos. No tenemos información direc-
ta del número de huevos por postura, ni del número de posturas, pero
sí datos de huevos en las hembras. En Morrillos el número de huevos
promedio fue de 8.6 (error estándar .67) mientras en Zapallar y Los
Molles como conjunto el promedio fue 6.4 (error estándar 1.3). Esto in-
dicaría que la postura podría ser menor en Zapallar y Los Molles. Es
importamte, sin embargo, notar que estos son huevos no puestos duran-
te la temporada y por lo tanto son los huevos que se pondrían durante la
temporada siguiente. No sabemos qué fracción de ellos realmente llega-
rán a ser puestos, pero creemos que la proporción debiera ser menos
variable que el número absoluto puesto, y por-lo tanto creemos que debiera
mantenerse nuestra conclusión acerca del número relativo de huevos
puestos en Morrillos y Zapallar-los Molles. :
Pareciera ser entonces, que L. EP romaculaina pone un número rela-.
tivamente. grande de huevos, pero que su período pre-reproductivo podría :
ser también largo.. De ser esto así implicaría que L. nigromaculatus sería
relativamente poco predado en comparación con otras especies, como
L. lemniscatus y L. platei, en que el período. pre-reproductivo parece ser-
bajo (a. temporada) y el número de huevos alto.
Debo señalar que esta conclusión de ser corroborada por dios!
futuros, no refutaría nuestra hipótesis que en L. nigromaculatus hay.
selección de habitats. debido ala predación, pues ésta puede ser baja en.
comparación con otras especies, pero potencialmente suficientemente alta
como para afectar los habitats en que este animal se encuentra.
- Finalmente repetiremos que este problema de ciclo vital, al igual que
los indicados anteriormente de competencias y predación potencial, mere-.
con mucho más atención que la que se les ha. prestado. Ha sido parte
importante en la motivación de esta contribución el mostrar el estado
del desconocimiento de la ecología de L. nigromaculatus e indicar algunos:
posibles problemas para investigación en el futuro.
- AGRADECIMIENTOS: Quiero agradecer a Juan. Cancino y Francisco Leiva
por su ayuda en la colección de parte de los datos y en el análisis de los mismos.
Asimismo, agradezco a Johanna Filp y al Comité Editorial de la revista por sus
comentarios, que ham contribuido a esclarecer las ideas y. resultados: presentados.
La publicación de este trabajo se logró gracias al generoso spqus de la Uni-
versidad Católica de Chile (Proyecto DIUC 113176). ; €
E. Fuentes
Medidas de L. nigromaculatus (en mm).
MORRILLOS:
Machos
n=26
Hembras
n=34
Juveniles
n=16
LOS MOLLES:
Machos
n=10
Hembras
n=6.
ZAPALLAR:
Machos
n=2
Hembras
n=2
AUTOECOLOGIA LIOLAEMUS NIGROMACULATUS
Cabeza
X = 179 X
s— que
X = 65 X
IL TE
ge g—
X= .24X
X = 13.21 X
s— s—
X = .36 XxX
X= 192 X
s— g—
X= 11 X
TA
q s—
II
X= 210 X
q s—
X= 20 X
X = 18.50 X
s— s—
X= .50X
|
TABLA II
media.
Cabeza-Tronco
76.41
2.0
60.9
1.3
57.7
1.7
84.30
5.0
75.7
3.6
101.50
7.50
90.50
4.50
ll
Ñ
Sg—
175
X es el error estandard de la
Relación Cabeza vs.
Cabeza-Tronco
16.6 +
1.54 +
1.32 +
6.34 +
1.30 +
33 €;
4.45 C;
4.27 C;
4.06 C;
4.70 €;
Coeficiente
de
Dimorfismo
be
34%
.89
88
.88
22%
.92
14%
176 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
TABLA Il
Alimentación de L. nigromaculatus en Morrillos
% Vegetación en Tamaño presas
estómago (mgrs. de peso seco) animales (mm)
MACHOS 74 X = 8.5
. E
X= ¿8
HEMBRAS 71 X= 6.9
UN
A AG
JUVENILES 60 X = 60
MAA
TABLA III:
Distribución de tamaño de presas de ze nigromaculatus en Zapallar-
Los Molles y Morrillos. Todos los ítems presa para una población se han
reunido en torno a 3 categorías de largo (Fuentes 1976): S (de lad
mm); M (de 4.1 a 9 mm); y L (mayores de 9 mm).
pa +.
S" o dé
Zapallar-Los Molles "58 70 3
Morrillos dir 60 > 81:
¿ a y
— — A ia
2. p »
a
E, Fuentes AUTOECOLOGIA LIOLAEMUS NIGROMACULATUS 177
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Valparaíso, Chile 179
LA ALIMENTACION DE SPEOTYTO CUNICULARIA (AVES:
STRIGIPHORMES) EN LA PROVINCIA DE COQUIMBO
JAIME E. PEFAUR *, FABIAN JAKSIC ** y JOSE YAÑEZ ***
ABSTRACT: The prey composition in the pellets of Speotyto cunicularia in
Coquimbo Province is compared with the potential supply of its preferred preys
(exclusively the rodents Phyllotis darwini and Akodon olivaceus), near the collection
Bite. S. cunicularia feeds preferentially on the medium-sized P. darwini, in spite of
the higher abundance of the smaller A. olivaceus. On the other hand, S. cunicularia
consumes juveniles and adults of P. darwini in the same proportion they occur in the
area. This is not true for A. olivaceus, whose juveniles seem to be “skipped” by
S. cunicularia. Based on these data it is proposed that S. cunicularia would select one
out of the two reported preys, depending on their size (the catching effort being the
same for both prey items). This degree of selectivity probably would change as
benign seasons (spring and early summer) are replaced by unfavorable ones. Thus,
1t is predicted that S. cunicularia would be more generalist in winter and fall, accept-
ing small preys (even invertebrates) as part of its diet.
INTRODUCCION
El pequén (Speotyto cunicularia) es un predador muy común en la
zona central de Chile, encontrándoselo preferencialmente en terrenos cos-
teros y en los faldeos de la precordillera. Desarrolla su actividad princi-
palmnte al atardecer y usa los postes de las cercas como estaciomes de
observación (Goodall et al. 1957). Estos autores señalan que el pequén
se alimenta “casi exclusivamente de prqueños roedores y coleópteros”,
pero no precisan la identidad ni abundancia de restos ítems en la dieta.
En este trabajo analizamos las características y el contenido de egagró-
pilas de pequén obtenidas en la Provincia de Coquimbo. Además, intenta-
mos evaluar si el pequén muestra alguna tendencia a seleccionar las pre-
sas que consume.
MATERIAL Y METODOS
En Septiembre de 1973 colectamos 36 egagrópilas enteras (frescas)
de pequén. Las obtuvimos a lo largo de 1 km de cercado paralelo a la
carretera 43, entre las ciudades de Coquimbo y Ovalle (Provincia de
Coquimbo, IV Región), al norte de la cadena montañosa “Las Cardas”.
El lugar corresponde a la región mediterránea árida de Chile (Castri
1968), que se caracteriza por una distribución rala de arbustos.
* Museum of Natural History, The University of Kansas, Lawrence, Kansas 66046,
USA.
** Instituto de Ciencias Biológicas, Universidad Católica de Chile, Casilla 114-D,
Santiago.
*** Museo Nacional de Historia Natural (Chile), Casilla 787, Santiago.
180 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10. 1977
Registramos el peso seco de estas egagrópilas (precisión 0.01 g) y
luego las remojamos en agua durante cinco días, para facilitar la sepa-
ración entre las osamentas, los pelca y los tegumentos de los roedores
contenidos. Finalizado este tratamiento, identificamos los roedores de la
muestra por mrdio de sus cráneos (Reise 1973). También estimamos su
edad basados en: a) el número de crestas en los molares (Yáñez y Jaksic
1977); b) la altura del molar desde el alvéolo hasta la corona (Pearson
1975). Estos dos parámetros nos permitieron dividir la muestra pobla-
cional presente en las egagrópilas, entre juveniles y adultos. El mismo
criterio lo aplicamos a ejemplares de ambas especies mantenidos en la
colección del M.N.H.N., en donde otros caracteres también fueron con-
siderados (longitud corporal, peso, condiciones reproductivas de machos
y hembras). En este caso, la utilización de los dos parámetros en con-
junto, separaba inequívocamente las clases de edad juveniles y adultas.
Por último, estimamos el peso promedio de los roedores presentes en la
muestra, basados en los datos de Fulk (1975). Este cálculo lo hicimos
independientemente para juveniles y adultos.
RESULTADOS Y DISCUSION
De las 36 egagrópilas, 4 no portaban cráneos, 23 contenían restos de
Phyllotis darwini, y en otras 9 había restos de Akodon olivaceus. En nin-
guna de ellas encontramos restos de coleópteros u otros invertebrados. La
mayor parte de las egagrópilas contenían restos de un solo roedor, pero
en dos de ellas encontramos dos esqueletos de A. olivaceus por unidad.
Los datos derivados de nuestro estudio se muestran en la Tabla 1.
Las egagrópilas que portan restos de P. darwin: son más pesadas
(Tabla 1: A) que aquéllas con restos de A. olivaceus (Test “t” de Studen;
P<0.02). Esto puede deberse al diferent tamaño de las especies consi-
deradas (Tabla 1: C), lo que redundaría en un mayor peso de las osa-
mentas de P. darwini al compararlas con las de A. olivaceus. Los datos
presentados en la Tabla 1 (B) son congruentes con esta proposición.
Una estimación gruesa de la cantidad de tejidos de roedor digeribles
para un pequén, la obtuvimcs de sustraer el peso seco promedio de las
egagrópilas al peso fresco promedio de los ratones adultos (C - A en Ta-
bla 1). El resultado de esta operación nos indica que un individuo inge-
rido de P. darwini proveería alrededor de 65.8 g de alimento al pequén,
en tanto que uno de A. olivaceus aportaría aproximadamente 31.8 g.
Suponiendo que el esfuerzo de captura de uno u otro ratón repre-
senta el mismo gasto de energía para el pequén, podríamos explicar el
mayor número de P. darwini encontrados en las egagrópilas (Chi-cuadra-
do; P<0.05), ya que proporcionaría más alim'nto que los A. olivaceus. Es
decir, proponemos la hipótesis que, a igualdad de esfuerzo de captura, el
pequén seleccionaría al ratón que le aporta más biomasa digerible. Sin
J. LE. Pefaur, F. Jaksic y J. Yáñez SPEOTYTO CUNICULARIA 181
embargu, el mayor número de P. darwini em las: egagrópilas también po-
dría estar refijando una mayor cantidad absoluta de este ratón en la
región. Esto no es cierto: Fulk (1975) mostró que en la localidad cercana
de Fray Jorge (Coquimbo), P. darwini se mantiene durante todo el año
en densidades poblacionales más bajas que las de A. olivaceus.'Con este
antecedente, tenemos una base más firme para proponer que el pequén
seleccionaría discriminativamente a P. darwini, pese a su menor abun-
dancia.
La composición de edades de la presa resultó ser diferente en ambas
especies. En P. darwin:, no hay diferencia entre la predación sobre ani-
males juveniles o adultos (Chi-cuadrado; P> 0.25), mientras que en
A. olivaceus el consumo es más acentuado sob1e los adultos (Chi-cuadra-
do; P<0.05). Se ha mostrado que la predación por Strigiphormes es
mayor en las presas activas que en las inactivas (Kaufman 1974). En
nuestro caso, la observación es confirmada por A. olivaceus, puesto que los
ratones adultos son más activos (Fulk 1975), pero no es aplicable a
P. darwini.
La predación diferzncial detectada en la muestra también podemos
interpretarla en base a nuestra hipótesis de selección de presas: dado
que el pequén capture una presa, la probabilidad qu:z ésta sea juvenil
dependerá de la frecuencia con que los juvrmiles estén representados en
la población, un una fecha determineda. Fulk (1975) señala que entre
Agosto y Noviembre de 1973, el número de juveniles por hembra en
Fray Jorge fue de 3.6 para P. darwini, y de 7.3 para A. olivaceus. Rea-
lizando el mismw cálculo con los datos de la Tabla 1 (D), suponirndo que
la proporción de sexos es 1 : 1, el número de juveniles por hembra es
1.83 para P. darwini y 0.44 para A. olivaceus. Nuestro estimador para
P. darwini no difiere significativamente del obtenido por Fulk (Dócima
binomial; P>0.830), pero el de A. olivaceus es marcadamente diferente
Dócima binomial; P<10-4). Esto significa que el pequén consumiría los
juveniles de P. darwini en la misma proporción en que éstcs estarían
representados en la población, pero consumiría un número significativa-
mente menor de juveniles de A. olivaceus. De acuerdo a nurnstra hipótesis,
el pequén discriminaría negativamente los juveniles de A. olivaceus por
su reducido tamaño (x=26.3 g), pero aceptaría a los de P. darwini
(x=41.0 2). Los juveniles de esta última especie serían incluso más ape-
tecibles que los adultos de A. olivaceus (x=35.5 g), lo qre también: expli-
caría el bajo consumo guneral de A. olivaceus por parte del pequén.
CONCLUSIONES
Idealmente, ningún análisis de dieta de rapaces debiera ser una mera
descripción de la frecuencia con que ciertos ítems aparecen en la mues-
182 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
tra. Sin una evaluación de la oferta real de presas en el ambiente natural
de la rapaz, es difícil determinar si élla selecciona sus presas, o las con-
sume en la misma frecuencia con que las encuentra. En el caso de
Speotyto cunicularia, hemos tenido la fortuna de contar con el extenso
estudio poblacional de Fulk (1975), realizado durante 1973 en una loca-
lidad cercana a nuestro sitio de colecta de las egagrópilas. Esta situación
favorable nos ha permitido fundamentar nuestras hipótesis con una base
confiable; sin embargo, no debe olvidarse que éllas son válidas dentro del
período restringido de tiempo que aparece representado en las egagrópi-
las. Indudablemente, Septiembre marca el comienzo de la estación con
abundancia de ratones, de manera que es probable que el pequén seleccione
sus presas maximizando el aporte nutritivo a su dieta en relación al
esfuerzo de captura. Es posible que esta maximización bioenergética esté
relacionada con los costos de las tareas reproductivas que el pequén lleva
a cabo durante esa época (Goodall et al. 1957). Posteriormente, a medida
que la estación seca progresa y los números de ratones en el norte chico
decaen (Fulk 1975), es posible que el pequén comience a incorporar nue-
vos ítems a su dieta (por ejemplo coleópteros), minimizando todo lo posi-
ble la frontera a la cual una presa es apetecible en un ambiente empobre-
cido. De esta forma, el pequén sería especialista en ciertos ítems de pre-
sa (i.e.: Phyllotis darwini) durante las épocas benignas (Primavera y
parte del Verano), pero esperaríamos que fuera generalista durante las
estaciones desfavorables.
Estudios integrales, que relacionen la composición estacional de la
dieta de las rapaces con las fluctuaciones anuales de la oferta de presas,
aún no han sido realizados. Las evidencias entregadas en este trabajo
sugieren que el campo es lo suficientemente fructífero como para em-
prenderlos.
TABLA I
Características de las egagrópilas en la Provincia de Coquimbo y de la
oferta de roedores seleccionados *. X es el promedio, EE es el error están-
dar y N es el número muestral.
Carácter P. darwini O. olivaceus
A) Prso seco de las
egagrópilas (g)
AS
XxX 4.90
3.75
EE 0,22 0.21
N 23 9
B) Peso seco del con-
tenido óseo (g)
X 1.78 1.13
EE 0.08 0.06
N 23 9
* Fulk 1975.
J. E. Pefaur, F. Jaksic y J. Yáñez SPEOTYTO CUNICULARIA 183
C) Peso fresco de los
roedores adultos (g)
Xx 70.14 35.50
EE 2.31 0.52
37 60
D) Edad relativa de los roedores
en las egagrópilas
Jóvenes (N) 11 2
Adultos (N) 12 9
E) Peso fresco de los roedores
juveniles (g)
XxX 41.00 26.32
EE 4.00 0.53
N 5 17
AGRADECIMIENTOS: Agradecemos a Carlos Saunier e Ignacio Fuenzalida
(Facultad de Ciencias, Universidad de Chile), por su ayuda en el tratamiento de las
egagrópilas; a Eduardo Fuentes (Laboratorio de Ecología, Universidad Católica),
por su ayuda en los cálculos estadísticos; a Javier González (Museo Nacional de
Historia Natural) y a Juan Carlos Torres (Facultad de Ciencias, U. de Chile), por
sus comentarios sobre el manuscrito.
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bh SA
Valparaíso, Chile
SOBRE LA PARTICION DE RECURSOS POR LAS STRIGIFORMES
DE CHILE CENTRAL
FABIAN JAKSIC *, JOSE YAÑEZ **, ROSINA PERSICO
y JUAN CARLOS TORRES ***
ABSTRACT: The analysis of the diet of three sympatric Chilean Strigiphorms
(Bubo virginianus, Tyto alba, and Speotyto cunicularia) revealed statistically signifi-
cative differences in prey size ranges. The selectivity shown by the owls seems to
be related to their different body sizes, the smaller owls eating smaller preys. Thus,
it is proposed that body size segregation by the owls would allow decreased compe-
tition among them, by decreasing the size range of preys selected. Bioenergetic cons-
traints to account for this resource-partitioning mechanism are postulated.
INTRODUCCION
A lo largo de Chile, diversas rapaces nocturnas coexisten sim-
pátricamente (Goodall et al. 1957), estructurando comunidades cuya orga-
nización hasta ahora no ha sido estudiada. Uno de los aspectca más
interesantes de esta organización está en la forma en qu: estas rapaces
se reparten el recurso presa, que consiste casi exclusivamente en roedores
(Goodall et al. 1957, Reise 1970, Capurro et al. 1971, Reise y Venegas
1974, Péfaur et al. 1977).
En una comunidad similar de predadores (i. e.: los Carnívoros nur-
teamericanos), Rosenzweig (1966) ha mostrado que la coexistencia está
basada «en la segregación de tamaños de estos predadores, la que resulta
en una selección diferencial de las presas disponibles. Es decir, los Car-
nívoros más grandrs comen presz3 más grandes que los de menor tamaño.
Este mecanismo de segregación tendería a disminuir o evitar la com-
petencia interespecífica por el recurso alimenticio, ya que cada especie de
Carnívoro consumiría un rango específico de tamaños de presa. Esta for-
ma de organización comunitaria parece ser bastante generalizada, puesto
que se ha detectado en diversos otros grupos de predador vertebrados,
e. g.: lagartijas, peces, rapaces diurnas (véase Wilson 1975).
Con estos antecedentes, parece razonable proponer la hipótesis que un
mecanismo similar de segregación de tamaños podría explicar la coexis-
tencia de las Strigiformes chilenas.
Para sustentar esta hipótesis sería necesario demostrar que se cum-
plen dos premisas:
1) que las rapaces nocturnas chilenas realizan algún tipo de selección de
SUS presas.
* Laboratorio de Ecología, U. Católica de Chile, Casilla 114-D, Santiago.
** Museo Nacional de Historia Natural (Chile), Casilla 7587, Santiago.
**x* Facultad de Ciencias, Universidad de Chile, Casilla 653, Santiago.
186 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
2) que las rapaces nocturnas de mayor tamaño consumen presas estadís-
ticamente más grandes que las rapaces de menor tamaño.
Con el objeto de comprobar la primera proposición basta con revisar
la literatura pertinente, pero para la segunda es necesario realizar un
análisis cuantitativo que requiere una cierta metodología. Por estas razo-
nes, trataremos ambas partes separadamente.
1) Selección de presas:
Sólo recientemente se ha acumulado alguna información sobre la
dieta de las Strigiformes chilenas. Péfaur et al. (1977), trabajando en Las
Cardas, mostraron que el prquén (Speotyto cunicularia) consume sólo dos
de law ocho especies de roedores presentes en esa localidad (véase Miller
y Rottmann 1976). Más aún, ellos muestran que la frecuencia observada
de Alodon olivacews juveniles (26.8 g) en las egagrópilas del pequén es
menor que la esperada en base a su densidad en el área (datos de Fulk
1975). Lo contrario vcurre con A. olivaceus adultos (35.5 g) y con juveni-
lez y adultos de Phyllotis darwini (41.0 - 70.1 g, respectivamente). Basa-
dos en estos datos, Péfaur et al. postulan que S. cunicularia selecciona
negativamente a los A. olivaceus pequeños, debido a la menor recompensa
envrgética obtenida de su captura, en comparación a las restantes clases
de tamaño. Sin embargo, otrcx roedores más grandes (i. e.: energética-
mente más ventajosos) no son predados por $. cunicularia en Las Cardas,
y ésto no es explicado por los autores mencionados.
Por otra parta, Fulk (1976), trabajando en Fray Jorge, mostró que
las egagrópilas de nuco (Asio flammeus) y lechuza blanca (Tyto alba)
contenían estos de P. darwini más frecuentemente que lo esperado en base
a su abundancia en el área, ocurriendo o opuesto con A. olivaceus. Fulk
sugirió que este fenómeno pedía estar relacionado con los hábitos de caza
de estos predadores. Es decir, que ambas rapaces podrían estar cazando
en áreas en que cirrtos roedores son localmente abundantes (i. e.: P. dar-
aint), lo cual se reflejaría en sus egagrópilas. Sin embargo, Fast y Am-
brose (1976) han mostrado que el “ajuste” de T. alba para cazar sus
presz3 tiene dos componentes distintos:
1) la setección de un habitat en el cual cazar, y 2) dado el habitat,
la selección de una presa en particular. Fulk no entrega evidencias que
sugieran selección de hábitat por las rapaces mencionadas, y vlvida con-
siderar la importancia ct la selección de presas por esos predadores,
aunque este simple componente podría explicar sus resultados.
Algo similar ocurre con los trabajos de Capurro et al. (1971, 1972)
sobre la dieta de T. alba en Illapel. Estos autores cotectaron egagrópilas
en la región, y simultáneamente trampearon roedores durante los ocho
meses que duró su estudio. A partir de sus resultados, Capurro et al.
(1972) concluyeron que T. alba. consume sus presas en la misma propor-
ción en que éllas están presentes en el área. Sin embar so, Jaksic nt al.
(enviado a publicación), realizando un análisis estadístico de estos datos,
muestran que la conclusión de Capurro et al. es errónea. Es decir, algunos:
F. Jaksic, J. Yáñez, R. Persico y J. C. Torres STRIGIFORMES 187
roedores aparecen en la misma proporción esperada (Rattus norvegicus,
208.0 g y Octodon degus, 240.3 gr), pero otros aparecen sobrerepresenta-
dos (Oryzomys longicaudatus, 35.6 g y Phyllotis darwini, 60.1 g) o sub-
representados (Mus musculus, 14.8 g y Alkodon olivaceus, 30.5 g) en rela-
ción a su abundancia en la región. En este caso, también resulta inbere-
sante notar que los roedores subrepresentados son precisamente los de
menor tamaño.
El mismo análisis estadístico (Prueba de Chi-cuadrado, considerando
las frecuencias de los distintos roedores en las egagrópilas como valores
observados, y las frecuencias en el terreno como los esperados, previa
corrección al número muestral de egagrópilas) realizado sobre los datos
de Reis y Venegas (1974), en cuanto a la dieta de Bubo virginiahus, y a
la oferta de roedores en la región de Puerto Ibáñez, también muestra que
este predador no consume sus presas en proporción a la abundancia de
ellas en el área (P<0.001). En este caso, Akodon xanthorhinus (25.0 g)
y Orysomys longicaudatus (35.3 gy) aparecen subrepresentados en las ega-
grópilas, en tanto que Akodon longipilis (39.8 g), Phyllotis micropus
(60.5 ge) y Phyllotis darwini (62.0 g), están sobre-representados. Nueva-
mente, los roedores subrepresentados tienden a. ser los de menor tamaño.
Siguiendo a Péfaur et al. (1977), todos estos -resultados pueden ser
interpretados como selección negativa de los roedores más pequeños por
parte de las rapaces nocturnas. Una consecuencia lógica de esta proposi-
ción es que podría existir un tamaño mínimo de presa aceptable por las
Strigiformes chilenas. Por ejemplo, S. cunicularia en Las Cardas tendería
a rechazar presas de tamaño igual o inferior a 26.3 g (A. olivaceus juve-
niles), T. alba tendería a rechazarlas desde los 32.5 g (A. olivaceus adul-
tos) en Illapel, y B. virginianus en Puerto Ibáñez, desde 42.3 g (O. lon-
gicaudatus).
Además, los datos analizados también insinúan la posibilidad que
exista un tamaño máximo de presa aceptable. Por ejemplo, no se ha pu-
blicado que S. cunicularia coma presas mayores que Phyllotis darwin
(Péfaur et al. 1977); tampoco se ha registrado en la literatura que
T. alba consuma presas mayores que Oryctolagus cuniculus juveniles (véan-
ne Reise 1970 y Capurro et al. 1971); en cambio, B. virginianus es capaz
de comer ro sólo conejos adultos (Goodall et al. 1957) sino también lie-
bres (Reise y Venegas 1974).
Cuán representativos sean estos datos, en relación a las preferencias
alimenticias globales de las rapaces estudiadas, es discutible, ya que la
dieta podría variar de acuerdo a la estación del año, la edad y estado
fisiológico del predador, o las variaciones de la oferta de presas. Sin
embargr, si los únicos datos disponibles en la literatura apuntan hacia
una posible selectividad de las rapaces sobre sus presas, tampoco parece
razonable negar estas evidencias.
En resumen, la información disponible sobre la dieta de algunas
Strigiformes chilenas, es consistente con la proposición que estcs preda-
dores seleccionan sus presas. Las evidencias de esta selectividad se en-
188 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
cuentran en las frecuencias más altas o más bajas con que aparecen
ciertas presas en las egagrópilas, al compararlas con las frecurncias
esperadas en base a su abundancia relativa en las áreas de colecta.
2) Segregación de tamaños:
Hasta ahora, no existen antecedentes sobre la segregación de tama-
ños en las Strigiformes chilenas, y menos aún sobre el posible rul que
esta segregación tendría en la repartición de los recursos de presa. Como
documentamos en la sección anterior, al parecer las rapaces nucturnas
discriminan positiva o negativamente algunos ítems de presa. Sin embar-
go, queda por mostrar que esta discriminación resulte en una diferencia
estadística de los tamaños de presa escogidos por cada especie de rapaz,
y que esta selección diferencial esté asociada con la segregación de tama-
ños de Strigiformes que coexisten simpátricamente.
Este es el objetivo central de nuestro trabajo, por lo que expondre-
mos separadamente los métodos utilizados. y los resultados obtenidos.
MATERIAL Y METODOS
Para esta parte de nurstro estudio, analizamos dos tipos de informa-
ción: 1) Las publicaciones disponibles sobre dieta de Strigiformes (Rei-
se 1970, Capurro et al. 1971, Reise y Venegas 1974, Fulk 1976, Péfaur et
al. 1977). De rvllas descartamos los datos de Fulk, porque mezcló las ega-
grópilas de Asio flammeus con las de Tyto alba, y lcz de Reise y Venegas
sobre Bubo virginianus, porque no hay antecedentes sobre dieta de otras
Strigiformes de la región. En consecuencia, trabajamos con las dietas de
T. alba en la zona central de Chile (1073 presas descritas por Capurro et
al. 1971, y 309 por Reise 1970), y de Speotyto cunicularia en Las Cardas
(34 presas descritas por Péfaur et al. 1977). Una descripción más deta-
llada de rste material puede encontrarse en las publicaciones originales,
por lo que no duplicaremcs esta información.
2) Treinta y nueve presas determinadas en 39 egagrópilas de B. vir-
ginianus provenientes de una colecta realizada en San Fernando durante
la Primavera de 1977. El detalle es el siguiente: 2 Rattus rattus, 16 Rattus
norvegicus, 3 Phyllotis micropus, 13 Phyllotis darwini, 5 Oryctolagus cu-
niculus.
Todas las muestras utilizadas en este trabajo furron colectadas du-
rante los meses de Primavera o Verano entre lc3 80:20” y los 34-36” Lat.
Sur, rango geográfico en que las tres rapaces (T. alba, S. cunicularia, y
B. virginianus) son ampliamenta simpátricas (véase Goodall et al. 1957).
La estimación del tamaño de las presas detectadas en las egagrópilas la
hicimos en base a la información provista por Jalvic (1977) sobre tenden-
cias latitudinales de la longitud corporal de rcrdores chilenos. La longitud
corporal de presas no-roedora3 (e. g.: conejos, liebres, marsupiales) la
obtuvimos de los registros de la Sección de Mamíferos del Museo Naciona]
de Historia Natural. Con estos datos sobre el tamaño de presas con3u-
F. Jaksic, J. Yáñez, R. Persico y J. C. Torres STRIGIFORMES 189
midas, realizamos un análisis de la varianza (ANOVA) de un criterio, y
contrastamos los promedivús (véase más abajo) mediante la prueba de
Scheffé (Snedecor y Cochram 1969). De esta manera podemos determinar
si existen diferencias significativas entre el tamaño promedio de presas
consumidas por las distintas especies de Strigiformes. La prueba de
Scheffé permite ivalizar contrastes ortogonales, pondera las diferencias
en número muestral, y es altamente conservativa, por lo que parece ser
la prueba estadística más adecuada de la hipótesis que estamos exami-
nando.
El tamaño promedio de las presas consumidas por cada especie de
rapaz lo calculamos de la siguiente manera:
En esta ecuación, TPP es el tamaño promedio de los ítems-presa con-
sumidos, fi es la frecuencia absoluta con que el ítem-presa ¿ aparece en la
dieta, wi es la longitud corporal promedio del ítem-presa ¿ en la localidad
de procedencia de las egagrópilas, y n es el total de los ítems-presa iden-
tificados en la dieta. xi vwtá basado en los datos de Jaksic (1977).
Para analizar las relaciones de tamaño entr las rapaces nimpátricas
estudiadas, revisamos la Colección Ornitológica del Museo Nacional de
Historia Natural, seleccionando los especímenes adultos (9 S. cunicularia,
5 T. alta y 7 B. virginidnus) colectados entre los límites en que obtuvimos
datos sobre su dieta (30:20” - 34:36” Lat. Sur). Más antecedentes en cuan-
to a localidades, sexo y fechas de colecta pueden ser solicitados al señor
Javier González, encargado de la Sección Ornitología del Museo Nacional
dra Historia Natural.
Puesto que la literatura no registra la longitud corporal de Strigi-
formes con parámetros estadísticos (véase Goodall et al. 1957), ni la
colección consultada tenía anotada dicha medida, fue necesario utilizar
un estimador de lla. Nuestro estimador de longitud corporal es la medida
desde el extremo distal de las caudales, dorsalmente hasta la punta del
pico (en mm). Con estos datos realizamos un ANOVA (un criterio) y
contrastamos los promedios mediante la prueba de Scheffé para determi-
nar si había diferencias significativas entre los tamaños de cada especie
de Strigiforme.
RESULTADOS
Los ANOVA de tamaño corporal de los predadores, y de tamaño
de las presa3 consumidas indican que existen diferencias significativas
(F = 329.90, P <0.01; y F = 59.86, P <0.01, respectivamente) entre
190 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
las tres especies analizadas, en cuanto a los dos parámetros considerados
(véase Tabla 1).
En la Tabla 2 aparece el resultado de los contrastes ortogonales rea-
lizados mediante la prueba de Scheffé; es notable que todas las diferencias
8
Bubo
—
m
Long. presa promedio (mm).
E 7]
o
Tyto
Speotyto
80 a ita
260 280 300" 440 460 480 500 520 540 560
: Long. corporal predador (mm).
Figura 1. Relación entre tamaño de la presa y tamaño corporal de las rapaces. La
intersección de las barras representa el promedio de las variables consideradas
para cada rapaz. La longitud de las barras representa dos errores estándar en
torno al promedio.
sean significativas. Una visión global de estos resultados se da en la Fi-
gura 1, que muestra que las especies Strigiformes más grandes consumen
en promedio presas más grandes.
C:rrtamente, estos resultados se obtuvieron en base a información
muy limitada sobre la dieta de S. cunicularia y B. virginianus; sin embar-
gy, nos da confianza el que ambas muestras hayan sido obtenidas en la
misma época: Septiembre. Además, el tamaño de presa consumido por
B. virginianus en San Fernando (Tabla 1 y Figura 1) no difivrre estadís-
ticamente (Prueba “t” de Student, P>0.20) del que se obtiene utilizando
los datos de Reise y Venegas (1974) sobre dinta de B. virginianus en
Puerto Ibáñez. Esto también le da más confiabilidad a nuestros resul-
tados.
DISCUSION Y CONCLUSIONES
Mediante dos procedimientos independientes (revisión de la literatura
y análisis cuantitativo), hemos estudiado los antecedentes disponibles so-
bre dieta de las Strigiformes chilenas. El primero de ellos nos ha permi-
F. Jaksic, J. Yáñez, R. Persico y J. C. Torres STRIGIFORMES 191
tido sustentar la premisa que las rapaces mocturnas chilenas realizan una
selección de sus presas, discriminando diferencialmente a algunas de ellas.
De este primer análisis han surgido dos resultados importantes:
1) Cuanto más grande la especie de rapaz (i. e.: S. cunicularia, T.
alba, B. virginianus, en orden creciente de tamaño), más alto el límite de
rechazo de presas: 26.3 g (A. olivaceus juveniles), 30.5 gy (4. olivaceus
adultos), y 35.3 g(0. longicaudatus), respectivamente.
2) Cuanto más grande la especie de rapaz, mayor es el tamaño de
la presa más grande que consume. Para S. cunicularia, la presa más
grande conocida es P. darwin: (70.1 g, Péfaur et al., 1977), aunque hay
datos no cuantificadcs de su consumo de O. degus infantiles (85 g, comu-
nicación personal de Roberto Schlatter). La mayor presa registrada para
T. alba es un O. cuniculus juvenil (menos de 600 g), encontrado entre
otras 1072 presas examinadas por Capurro et al. (1971). En cuanto a
B. virginianus, en nuestra muestra de San Fernando encontramos restos
de cinco O. cuniculus, de los cuales al menos dos eran adultos (1200 g).
Adimás, Reise y Venegas (1974) encontraron restos de Lepus europaeus
en tres de las 59 egagrópilas que analizaron, pero no ducumentan su
estado infantil (700 g), juvenil (2200 g), o adulto (3800 g). Los datos
de peso para conejos y liebres de distintas edades provienen de la Sec-
ción de Mamíferos del Museo Nacional de Historia Natural.
Nuestro segundo procedimiento dt análisis nos ha permitido dar apo-
yo a la premisa que la segregación de tamaños en las Strigiformes chile-
nas resulta en el consumo de diferents tamaños de presa. En el fondo,
esto no es más que una consecuencia lógica de los antecedentes que he-
mc3 presentado sobre selección de presas por las rapaces nucturnas, ya
que el umbral de rechazo de presas chicas o grandes al parecer varía de
acuerdo al tamaño de la rapaz. Por esta razón, es trivialmente esperable
que si una rapaz grande rechaza presas pequeñas y además consume
presas muy grandes, su presa promedio (en tamaño) sea mayor que el de
una rapaz más chica que acepta presas muy pequeñas y mo consume las
más grandes.
Según planteamos al principiv, el demostrar que ambas premisas se
cumplen, nos permitlr* sustentar razonablemente nuestra hipótesis que la
segregación de tamaño en las Strigiformes chilenas simpátricas es un me-
canismo que permite o facilita la coexistencia de ellas, al resultar un
selección diferencial de distintas porciones del eje de recursos de presa. Al
igual que en el caso de los Carnívoros norteamericanos (Rosenzweig 1966),
aquí también se cumple que las especies de rapaces más grandes tienden
a consumir presas estadísticamente mayores que las más pequeñas.
Sin embargo, no drbe olvidarse que la reafirmación de esta hipótesis
requiere el análisis de dietas de las restantes Strigiformes chilenas. Por
lo demás, también es posible que la coexistencia de las rapaces nocturnas
chilenas se logre nu sólo por un sobreespaciamiento en el eje “tamaño de
192 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
presa consumida”, sino por mecanismos de complementaridad entre las
dimensiones “habitat” y “alimento” del nicho de estos predadores (como
ha mostrado Fuentes 1976 en comunidades de lagartijas). Esto requiere
más estudios.
Por otra parte, en el caso que nuestra hipótesis sea la que mejor
explique la coexistencia de las Strigiformes chilenas, aún ncs queda por
resolver de qué manera la segregación de tamaño en estos predadores
actúa como factor regulador o determinante del tamaño de presa consu-
mible por ellos. Nuestra interpretación es la siguiente: Es razonable pen-
sar que una presa será incorporada a la dieta de una cierta rapaz si es
que el balance entre el aporte alimenticio y el gasto de captura es positivo.
El costo de mantención metabólica de una Strigiforme grande es mayor
que el de una pequeña (Graber 1962, Wallick y Barret 1976), por lo que
el tamaño mínimo de presa qu produc un balance positivo dependerá del
tamaño de la rapaz. De acuerdo a ésto, esperamos que las Strigiformes
consuman presas por sobre un tamaño crítico, tanto mayor cuanto más
grande sea la rapaz. Los resultados presentados en la Figura 1 y nuestra
revisión de la literatura son congruentes con esta explicación. Sin embar-
go, de nuestra revisión también se desprende que las Strigiformes peque-
ñas consumen menos presas grandes que lo esperado. Esto no es explica-
ble en términuús de economía energética, ni por la imposibilidad dir una
rapaz pequeña para dar muerte a una presa grande (observaciones con-
ductuales no publicadas de Javier González). Una explicación probable
podría estar basada en la conducta de caza de las Strigiformes, que luego
de matar a la presa la trasladan a su percha habitual para consumirla
(véanse Goodall et al. 1957, Fast y Ambrose 1976, Bondrup-Nielsen 1977,
Phelan 1977). Esta modalidad impediría que las rapaces pequeñas (como
S. cunicularia) trasladaran y consumieran presas mayores que un cierto
tamaño crítico, por falta de superficie alar para sustentar su peso. Por
esta misma razón, esperaríamos que B. virginianus pudiera trasladar (y
por lo tanto consumir) presas de mayor tamaño que las de T. alba. Esta
explicación es congruente con la correlación positiva que existe entre el
tamaño corporal y el tamaño del ala de las Strigiformes estudiadas (r =
0.95, P<0.01).
En conclusión, el tamaño de presa consumido por las Strigiformes
chilenas podría estar limitado inferiormente por problemas de retorno
energético, y superiormente por la capacidad de traslado de los diferentes
ítems alimenticios. De esta manera, la segregación de tamaños en Strigi-
formes simpátricas podría determinar tamaños óptimca de presa consu-
mible, disminuyendo la sobreposición de las dietas.
F. Jaksic, J. Yáñez, R. Persico y J. C. Torres STRIGIFORMES 193
TABLA I
Caracterización estadística del tamaño corporal y drl tamaño de la presa
- consumida por Strigiformes de Chile central. N = número muestral,
X = promedio, EE = error estándar.
A) Tamaño corporal
estimado (mm)
Bubo Tyto Speotyto
Xx 537.9 466.0 289.4
EE A 8.9 6.2
N 7 5 9
B) tamaño de presa
consumida (mm)
zo 182.8 120.9 107.8
EE 13.1 1.1 1.4
N 36 1.383 39
TABLA II
Significación estadística cr los contrastes entre tamaño corporal y entre
tamaño de presa de las Strigiformes de Chile central.
Diferencia en longitud Diferencia en longitud
corporal estimada promedio de la presa
Bubo-Tyto P<0.01 P<0.01
Bubo-Speotyto P <0.01 P<0.01
Tyto-Speotyto P<0.01 P<0.05
AGRADECIMIENTOS: Agradecemos los comentarios de Eduardo Fuentes y de
los estudiantes de su curso “Comunidades Biológicas” (1977). Javier González, Ro-
berto Schlatter y Daniel Torres nos proporcionaron importante información y valiosa
discusión sobre el tema.
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'Valparaíso, Chile e 195
ESTUDIO SOBRE LA ESTRUCTURA GENETICA
DE LA POBLACION DE LA SERENA
H. FIGUEROA L., C. CAMPUSANO M., B. LAZO L. *
ABSTRACT: In a sample of 450 students of La Serena city a genetic study was
done. The population showed a high frequency of 0 blood type and Shovel-shaped
incisors. Also had a low frequency of Carabelli's Cusp and non Tasters to PTC.
None of the individuals showed red-green color vision deficiency.
INTRODUCCION
La constitución genética de la población chilena actual es una mezcla
de amerindios y caucasoides, principalmente españoles, más un prqueño
aporte negroide (Thayer, 1919). Diversos estudios tienden a indicar que
la mixtura inter-étnica dekr haberse realizado con diferente intensidad
entre las poblacionez chilenas del pasado (Cruz-Coke, 1976; Palomino,
1976). Por otra parte, debido a, que en estos grupos étnicos ha sido posi-
ble determinar frecuencias génicas distintivas en un cierto número de
loci, cabría esperar diferencias genéticas entre poblaciones del presente
en consonancia con la mayor o mrnor miscegenación adquirida.
El propósito del presente estudio es ampliar el conocimiento de pobla-
ciones chilenas caracterizando genéticamente a la población de La Srrena
mediante el análisis de algunas variables genéticas y antropológicas.
La ciudad de La Serena está ubicada aproximadament?z a unos 470
kms al N de Santiago. La población primitiva de la zona entaba constitui-
da por indígenas diaguitas y mollenses (Mustny 1955). De algunos de
estos grupos se conocen ciertas características dentarias en estudicx rea-
lizados en cráneos de diaguitas de aproximadamente el siglo X (Campu-
sano et al. 1972).
METODOLOGIA
Los datos provienen de una encuestra 1valizada en la población estu-
diantil de La Serena, durante ls meses de Julio a Noviembre de 1967.
La muestra se obtuvo de la siguirnte manera: de la totalidad de la pobla-
ción estudiantil de ambos sexos y perteneciente a la educación básica,
técnico-profesional y secundaria, particular y fiscal, se obtuvo aproxima-
damente igual número d+ escolares de cada sexo y en forma proporcional
al número de alumnos de cada colegio.
De los diversos datos obtenidos de cada encuestado, en el presente
estudio se analizan los siguientes: Edad; sexo; grupo sanguíneo A.B.O.
* Laboratorio de Genética, Departamento de Biología, Facultad de Matemáticas y
Ciencias Naturales, Universidad de Chile, Sede Valparaíso, Casilla 130-V, Valpa-
raíso.
196 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
(determinado mediante sueros “anti”); capacidad de reconocer los colo-
res (utilizando tablas de Ishihara); gustación de la feniltiocarbamida,
(P.T.C., según la técnica de Harris y Kalmus); número de abuelos extran-
jeros; capacidad de enrollar la lengua, forma del lóbulo de la oreja y for-
ma de cruzar los brazos; ausencia de incisivos laterales superiores, diente
en pala y tubérculo de Carabelli; índice C.O.P.
Los datos contenidos en fichas codificadas fueron traspasadas a tar-
jetas 1I.B.M. El análisis de los datos de estas tarjetas se realizó en el
Laboratorio de Genética de la Universidad de Chile de Valparaíso y en el
Departamento de Genética Humana de la Universidad de Michigan, U.S.A.
ANALISIS
La tabla 1 indica el total de individuos agrupados por edad y sexo.
Las diferentes frecuencias observadas en estas variables se debe a las
ponderaciones proporcionales de ellas al obtener la muestra. Por esta ra-
zón la edad promedio de los encuestados está ligeramente desplazada hacia
las edades infrariores: 14,62 años con una desviación estándard de 1.89.
La edad media de los hombres es de 14.69 + 1.90 y la de las mujeres es
14,56 + 1,87.
Del total de 1.800 abuelos posibles, de los 450 estudiantes, hay 37
abuelos extranjeros. De éstos, el 45,94% corresponde a españoles, italia-
nos, alemanes y de otras nacionalidades europeas, que en conjunto pueden
clasificarse como caucasoides. El 18,92% son sirios, israelitas, árabes y
otros grupos afines que pueden denominarse como semíticos. El 35,13%
restante son latinoamericanos. Sin embargo, como lc latinoamericanos,
en general, son considerados como resultante de cruzamiento entre cauca-
soides y amerindios, podría estimarse con cierta libertad, que la propor-
ción de caucasoide representa más de un 50%, pero dada la pequeña can-
tidad de abuelos extranjeros, poco más de 2%, este aporbz es muy pequeño
en el total de la muestra.
La tabla 2 da la distribución numérica y porcentual de los grupos
sanguíneos del sistema A.B.O. Puede observarse que el fenotipo O tiene
una frecuencia alta con un “r” de 0,8077. Este valor es parecido al seña-
lado para indica navajos norteamericanos (Boyd 1950; Mourant 1954)
aún cuando la frecuencia de “p”, 0,1162 y de “q”, 0,0760 no coinciden, pues
hay un alto valor de “q”. Por otra parte estas frecuencias son diferentes
a las encontradas en la ciudad de Valparaíso: “r”, 0,7314; “p”, 0,2184;
“q”, 0,0428 (Pinto y Figueroa 1967) y en otras observaciones, como en
una muestra hospitalaria de Concepción: “p”, 0,1529; “q”, 0,0587; “y”,
0,7883; (Alvial y Henckel 1963).
Respecto a visión de colores, no se encontraron individuos afectados,
lo que podría deberse al azar, ya que este rasgo tiene una baja frecuencia
en poblaciones estudiadas por otros autores, y también a que la presente
muestra no *s muy amplia. En todo caso cabe destacar que Post ( 1962)
indica que la frecuencia de los afectados tiende a O entre los amerindios;
H. Figueroa, C. Campusano y B. Lazo ESTRUCTURA GENETICA 197
En relación a la feniltiocarbamida la frecuencia de los no gustadores
es 7,59%. Pons (1964) señala que los amerindios, lapones, negros, chinos
y japoneses presentan frecuencias bajas: entre 1% y 120%. En estudian-
tes universitarios y secundarios de Santiago, Saldanha y Nacrur (1961)
encontraron un 17,40% y Covarrubias (1964) un 14,90%.
La tabla 3 muestra en conjunto los datos de furma de lóbulo de la
oreja, capacidad de enrollar la lengua y forma de cruzar los brazos. Aun
cuando estos rasgos no son considerados regularmente buenus marcadores
genéticos, debido principalmentz a la fuerte componente ambiental que
deben poseer, sobre todo los dos últimos, se da su frecuencia por el alto
valor antropológico que pueden aportar.
En la distribución de la forma del lóbulo de la oreja, capacidad de
enrollar la lengua y forma de cruzar los brazos, hay diferencia entre
los datos encontrados y los citados por otros autores nacionales y extran-
jeros (Covarrubias 1965; Dutta and Ganguly 1965; Das 1967).
La tabla 4 presenta a los individuos clasificados según las siguientes
variables dentarias, de interés genético y antropológico; ausencia de inci-
sivos laterales, tubérculo de Carabelli y diente incisivo en pala.
Para el rasgo ausencia de incisivos laterales, los valores de La Sere-
ma son más bajos que los encontrados pour Witkop y Barros (1960) en
estudiantes de Santiago; y por Pinto y Figueroa (1967) en estudiantes
de Valparaíso.
El tubérculo de Carabelli presenta valores más bajos que en pobla-
ciones caracterizadas como caucasoides (Carbonell 1960; Dahlberg 1963;
Muñoz 1936). Por otra parte, los cráneos de diaguitas del Museo de La
Serena no presentan el rasgo (Campusano et al. 1972).
En cuanto a diente incisivo en pala, su alta frecuencia en La Serena
es coincidente con valores encontrados en poblaciones mongoloides (Mu-
ñoz 1936; Rotthhammer 1968; Pinto y Figueroa 1968). En cráneos dia-
guitas se encontró una frecuencia de 80,30% (Campusano et al. 1972) y
para japoneses 76,60% (Hanihara 1967).
La tabla 5 muestra el índice COP que mide el daño dental: caries,
obturados y perdidos; en la muestra este valor es de 6,99% para los hom-
bres y 7,33% para las mujeres. El hecho que este índice sea mayor en las
mujeres, concuerda con lo observado en general en otros estudios (cita-
dos por Hankin et al. 1973). En cráneos de diaguitas se encontró 1,6 para
hombres y 1,8 para mujeres (Campusano et al. 1972).
CONCLUSIONES
De lo anteriormente expuesto se puede concluir:
Que los abuelos extranjeros de los encuestados son muy pocos, sólo
37 y de ellos 45,93% son de origen *vuropeo 9 que indicaría un bajo flujo
génico caucasoide para esta muestra poblacional. ,
El alto porcentaje del grupo sanguíneo 0, del diente incisivo en
pala, ausencia de individuos ciegos para color, bajo porcentaje de no
198 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL No 10, 1977
gustadores de P T C y de Tubérculo de Carabelli, todo lo cual señalaría
una fuerte componente amerindia, mongoloide de esta muestra poblacional.
TABLA N” 1
Edad en años de los encuestados separados por sexo.
Edad Hombres Mujeres Total %
12 39 42 81 18,00
13 27 35 62 13,77
14 41 42 83 18,44
15 34 37 71 15,77
16 25 36 61 13,55
17 33 22 55 12,22
18 13 19 387 8,22
Total 217 233 450
TABLA N» 2
Número y porcentaje de individuos de acuerdo a grupo sanguíneo A B O
Grupo Sadnguíneo AB O N %
. AB UN AA 2,46
A 89 19,96
B 55 12,33
10) 291 65,24
Total 446
TABLA N 3
Número y frecuencia de la muestra de acuerdo a forma del lóbulo de la
, reja, capacidad para enrollar la lengua y modo de cruzar los brazos.
Forma del lóbulo de la oreja N %
Libre 232 51,55
Intermedio 140 : 31,11
Adherido 78 17,33
Total 450 99,99
Capacidad de enrollar la. lengua N
Si 229 51,00
No 148 32,96
Dudoso Te 16,03
Total 449 99,99
Forma de cruzar los brazos N %
Izquierdo 233 52,83
Derecho 143 32,42
Dudoso 65 14,74
Total 441 99,99
H. Figueroa, C. Campusano y B. Lazo ESTRUCTURA GENETICA 199
TABLA N»? 4
Algunos rasgos dentarios.
Ausencia incisivo lateral Diente en pala Tubérculo de
Carabelli
N % N % N %
Si 3 0,68 305 68,39 51 11,43
No 436 97,54 141 31,61 395 88,57
Micro 8 1,68
Total 447 446 446
TABLA N 5
Indice COP separado por sexo para la muestra.
COP Hombres Mujeres Total
0 4 4 8
1 2 5 7
2 18 5 23
3 14 14 28
4 28 19 47
5 19 17 36
6 18 23 41
í 18 19 37
8 23 30 53
9 23 18 41
10 12 19 31
11 9 16 25
12 10 13 23
13 4 6 10
14 9 7 16
15 3 4 7
17 — 7 7
18 2 — 2
Diomasl 216 226 442
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Valparaíso, Chile 201
CITOTAXONOMIA Y COMPORTAMIENTO MEIOTICO
EN ELASMODERUS RABIOSUS (LIEBERMANN)
N. LAFUENTE l1., H. BORJA R, y M. SANTOS A. *
ABSTRACT: In this paper we analyze the kariotype and meiotic chromosomes
of Elasmoderus rabiosus. The taxonomic possition of E. rabiosus is discussed.
The chromosome characters are: 2 n = 23 in male with 23 telocentrics and 23
as NF.
INTRODUCCION
Elasmoderus rabiosus es una especie chilena de la familia Acrididae
que ha suscitado interés entre los sistemáticos dado que-sus caracteres
fenotípicos oscilan entre Cyratacanthaecridinae y Ommexechinae, hacien-
do dudosa su ubicación definitiva.
El género fue creado por Philippiacris por Liebermann (1943),
Ronderos (1972) ha propuesto que los géneros Philippiacris y Chilarcis
de Liebermann pasen a ser sinónimos del género Elasmoderus Saussure.
Nosotros hemos analizado cariológicamente esta especie estableciendo
su cariotipo y el comportamiento cromosómico durante la meiosis, con el
objeto de ayudar a través de este estudio a dilucidar su ubicación taxo-
nómica.
MATERIAL Y METODO
La murstra fue colectada en la zona de Quilitapia, provincia de Co-
quimbo, durante la plaga que afectó al Norte Chico en Noviembre de 1971.
Se trabajó con 30 machos adultos y se analizaron 100 placas. para esta-
blecer el cariotipo. Se contabilizaron 176 Diplonemas medios y 100 meta-
fasas I para establecer. la frecuencia de quiasmas por pareja y por. núcleo
de acuerdo a lo prúpuesto por Sáez, (1956). a
La técnica usada es la descrita en los trabajos anteriores (Lafuente
1968 - 1976). ce
El cariotipo se estableció con metafases mitóticas goniales. y re
fases 11 de la meiosis. . e
* Departamento de Biología, Facultad de Matemáticas y. Ciencias panal Univer-
sidad de Chile - Sede Valparaíso, Casilla 130-V. Valparaíso.
Este trabajo es parte del proyecto N? 4462-R., financiado por el Servicio de Des-
arrollo Científico y de Creación Artística de la Universidad as Chile. y
E
Lt
202 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
RESULTADOS
a) Cariotipo.
2n = 23 (22a - X)
NF = 23
93 cr. £.: 3 t.g.; 5 tm.; 3 t.p. y el Xt.
Longitud promedio tvtal = 64.5 u.
El perfil del idiograma permite separar perfectamente los tres grupos
de telocéntricos: 3 tgr; 5 t.m. y 3 t.p.
PHILIPPIACRIS rabiosus
a
o
long promedio
NS ww Fuyo<c)o so
o >
TM AA A TABA:
N* de pares
b) Comportamiento meiótico.
El análisis de los núcleos en Diplonema Medio de los cuales se conta-
bilizaron 176 bivalentes con un número total de quiasmas de 98 de los
cuales 60 eran terminales y 38 intermedios da el siguiente resultado:
Fg Q x Bv: 0,56.
Fg Q x N: 12,25.
% Bv con 1Q: 77,26%
% Bv con 2 Q: 22,74%
o Bv con - de 2 Q: 0.00%
Coeficiente de terminalización: 0,612
Indice de recambio : 134,75
Se destaca que el número de quiasmas (Q) por biv
trados en Diplonemas medios no excedió de a CTE ii
las parejas grandes y el mínimo para la etapa fue 1 bivalente. o 5
N. Lafuente, H. Borja y M. Santos PHILLIPIACRIS RABIOSUS 203
DISCUSION
El análisis cariológico de Elasmoderus rabiosus permite establecer su
cariotipo:
2n = 23 y m NF = 23
23 ciumcsomas telocéntricos.
X - £tm.
Longitud promedio 64,5 unidades.
Perfil en 3 grupos.
Las parejas autosómicas en diplonema medio se comportan en forma
tal que el número de quiasmas (Q) por bivalente (Bv) no excede 2 Q Xx
Bv, para las 3 parejas de telocéntricos grandes, ni es menvr de 1 quias-
ma por bivalente. Siendo su frecuencia de quiazmas por múcleo (N) de
12,25 y de 0,56 por bivalente (Bv) lo que drtermina un índice de recambio
de 134,75.
Las características del cariotipo de esta especie son muy similares
en cuanto a distribución y perfil de los grupos cromcsómicos en el idiogra-
ma, con el de Schistocerca cancellata especie reprenentante de la Subfami-
lia Cyrtacanthacridinae lo que sería un dato más para considerar esta
especie en la misma Subfamilia; sin embargo, la Longitud total del idio-
gramg de E. rabiosus es de 64,5 y la de Sch. cancellata de 94,5 lo que
haa que el índice de recambio de Sch. cancellata sea mayur.
Nos parece que estos datos deberían compararse con más datos cario-
lógicos de otras especies de Ommexectinae qu:2 permitirían un mejor aná-
lisis desde ste punto de vista, lo que contribuiría dilucidar la ubicación
de E. rabiosus.
REFERENCIAS
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Valparaíso, Chile 205
CITOTAXONOMIA DE CUATRO PE
DE DICHROPLUS.
NELLY LAFUENTE 1. y ROSA GUERRA M. *
ABSTRACT: The genus Dichroplus presents many changes in the karyotypes ES
the species of the genus as described by Sáez and Mesa for atlantic forms.
In this paper we propose a new system to analyze the karyotypes in Acrido den:
The adult males preseñt: 2 n = 23 and NF = 23 in D. elongatus and D. demo-
craticus; in D. maculipennis and D. porteri we found 2 n = 22 and NF = 23.
INTRODUCCION
Es este un género que aparece en franca evolución cromosómica, lo
que hace de él un buen material para analizar las remodelaciones ocurri-
das en diferentes tespecios del mismo, tales como: fusiunes, translocacio-
ne3, inversiones, etc. (Mesa 1962 - Sáez 1967 - Lafuente 1976).
Estudios realizados especialmente por Sáez, Masa y otros revelan para
algunas especies plateres en este género modificaciones en el número y/o
forma de los cromosomas, variando así sus cariotipos del modelo ances-
tral. De nueva especies estudiadas por estas autores dos mantienen el
cariotipo ancestral descrito por White (1951) de 2 n = 23 en los machos
y siete presentan algún tipo de remodelación: 'D. obscurus 2 n = 18;
D. piscomaculatus 2 n = 22; D. bergí 2 n = 22; D. dubius 2 n = 21;
D. pratensis (Mesa 1962) 2 = 18; D. pratensis (Sárz 1967) 2 n = 18;
D. silveiraguidol 2 n = 8.
A pesar de estas variaciones numéricas del cariotipo el NF se man-
tiene en 23 en siete de vullos: D. punctulatus, D. conspersus, D. obscurus,
D. piscomaculatus, D. bergít, D. dubius y en un grupo de D. pratense
(Mesa). :
El análisis del 2 n y el NF nos o cmiil re los tipos de mecanis-
mos que están involucrados: en estas remudelaciones. :
En este trabajo analizamos D. ¿longatus, D. democraticus, D. porteri
y D. maculipennis, cuatro de las cinco especies dadas para Chile por Lie-
bermann (1944).
Por otra parte postulamos que el análisis de los cariotipos de acrí-
didos, sr realice de acuerdo a cierbas normas que permitan después com-
parar la gran cantidad de información que existe en estas especies. *
MATERIAL Y METODO
Especies colectadas en las provincias de: Aconcagua, Valparaíso, Ma-
* Departamento de Biología, Facultad de Matemticas y Ciencias Naturales, Unive.
sidad de Chile, Sede Valparaíso, Casilla 130-V, Valparaíso.
-206 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
lleco y Llanquihue. Se trabajó con 10 individuwvs machos adultos por espe-
cie, analizando 30 placas mitóticas por cada individuo.
El método fue el c:ásico de aplastado, teñido con orceína-aceto-láctica.
Fotos, Euvcumental Film, Microscopio Orthomat-Leitz.
RESULTADOS
a) D. elongatus G. Tos.
El análisis del cariotipo mos revela las características siguientes:
2n = 23 (22 a t + X).
NF = 23
23 cr.ti3tg;5tm.3 tp. =y1crXt,
Longitud total promedio — 94.2 unidades.
++ El perfil del idiograma es lineal. Idiograma A.
b) D. democraticus Blanchard.
Características del cariotipo:
= 239 (22 at + Xx)
NF = 23 | |
- ,28cr.t;3tg.;5tm.;3t.p.yelX t.
Longitud total promedio = 90 unidades.
- Perfil del idiograma lineal. Idiograma B.
ec) D. maculipenmis Blanchard.
z Características del cariotipo:
2n = 22 (20 a.t. + Neo X + Neo Y).
“ NF = 23 :
18 cr. t.; 3 t.g.; 4 tm.; 3 t.p. y 1 X met. + 1 Y. tm.
El perfil del ora cae a ve] de los telocéntricos medianos. aio
- grama C.
d) D.: porteri Liebermann.
Características del cariotipo:
2 n = 22 (20 at. + Neo X + Neo Y).
NF = 23
18 cr. t.: 3 t.g.; 4 tm.; 3 t.p. y 1X met. + Y. tm.
Longitud total promedio = 92 Hd
Perfil del idiograma cae a nivel de los civumosomas medianos. Idio-
grama D.
N. Lafuente y R. Guerra CITOTAXONOMIA DICHROPLUS 207
D. elongatus D. democraticus
15
15
15 14
El 13
12 12
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Ss 6 To
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1234567 .839100x 12.03.456.7046-.9010Mmox
N? de pares
N" de pares
y, D.maculipennis D. porteri
1 C 19 D
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A) 5 6 7 8 9 10:'n Xx Y FC 506.0706090..0201.=x Y
Ni de pares da = q a
208 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
. DISCUSION
La mayoría de los acrídicos presentan en los machos un cariotipo
constituido por 23 cromosomas te'vcéntricos que por -su tamaño pueden
ser agrupados en: 3 pares de telocéntricos grandes (3 t.g. ), 5 pares de
telocéntricos medianos (5 t.m.), 3 pares de telocéntriccs pequeños (3 t.p.)
más el X te'vcéntrico, esto es lo que White (1951) describe como “cario-
tipo ancestral”.
Al analizar los cariotipos de estas cuatro especies se observan carac-
terísticas muy similares en cuanto a longitud total promedio y distribu-
ción por tamaño, aunque no es fácil decidir los tres grupos clásicos por
cuanto hay una disminución lineal del idiograma (Fig. 1 y 2).
Al presentar las características del cariotipo en la forma propuesta
por Lafunnte 1976, es fácil de analizar cada caso y lo que es más im-
portante poder comparar lcs datos del conjunto:
2 n = (a + sexuales).
NF = N* de brazos.
N* cromosómico: distribución en EnuDOS por tamaño y forma
(Ej. 5-tm,).
Longitud total A eOEio en unidades adas 2 u..
Idivgrama.
En cuanto a la nomenclatura nos parece adecuado seguir lo propues-
to por la Conferencia de París para la especie humana en 1971 y -por
Levan para mamíferos en 1974.
Al incorporar el NF al análisis y comparario cun el 2 m rte
visualizar los reecanismos involucrados en las remodelaciones cromosómi-
cas ocurridas en estas especies (ver cuadro).
En D. maculipennis y en D. porten se ha establecido una fusión Ro-
brettsoniana entre el X y uno de los autosomas, en este caso se trata de
la pareja cuatro, lo que se deduce al estar los cromosomas ordenados en
grupos por tamaño, al okservar el perfil del idiograma se aprecia cla-
ramente que se trata del primer par de telocéntricos medianos.
Estas remodelaciones ocurridas en el género Dichroplus parecen com-
prometer de manera significativa al cromosoma X, ya que de 14 especies
estudiadas pur Sáez (1967), Mesa (1962) y Lafuente (1976), 8 presentan
fusiones céntricas del X con un autosoma; sólo en tres aparecen además
inversiones D. vittiger, D. pratensis y D. silveiraguidoi (cuadro N* 1).
Estos datos contradicen lo encontrado por Westermann (1968), en
reordenamientos cromosómicos experimentales realizados con rayos X en
Schistocerca cancellata, donde aparece el cromosoma X como un cromoso-
ma Muy estab no comprometido en las nuevas remodelaciones.
Pensamcs que esto: concuerda con lo ya postulado por Barthelness,
(1970), Vogel (1970), Lafuente et al. (1977) para mamífero, en el sen-
tido que los factores que actúan en estos mu*canismos en vivo y espontá-
meamente no siempre concuerdan con los datos obtenidos experimental-
mente con agentes mutágen»s químicos o físicos.
Familia
Acrididae
Subfamilia
Catantopinae
Género
Dichroplus
Autor:
Sáez - Lafuente
Lafuente - Mesa
Lafuente
Lafuente - Mesa
Mesa
Sáez
Sáez
Sáez - Mesa
Sáez - Mesa
Sáez - Mesa
Mesa
Mesa
Sáez
ecies
. elongatus
. democraticus
. maculipennis
. porteri
. vittiger
Es
D
D
D
D
D
D. punctulatus
D.
D
D
D
D
D
D
conspersus
. Obscurus
. piscomaculatus
. bergii
. dubius
. pratensis
. Silveiraguidoi
mt.
dy AA gl
e
Sist-Sex
X-0
X-0
Neo X - Neo Y
Neo X - Neo Y
Neo X - Neo Y
X-0
X-0
Neo X - Neo Y
Neo X - Neo Y
Neo X - Neo Y
X1 X2 - Y
X-0
Neo X - Neo Y
Remodelaciones
fusión céntrica
fusión céntrica
fusión céntrica
e inversiones
fusiones céntricas
fusión céntrica
fusión céntrica
fusiones céntricas
fusión céntrica
ancestral e inver-
siones.
Bono "y Á aUINJeT “N
SI IJOAHOIA VINONOXVLOLIO
603
210 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N+ 10, 1977
Por otra parte creerios que para vw! análisis del NF en los acrididos
debe ser considerado el X, ya que este cromosoma está comprometido en
la mayoría de las rernicdelaciomis. Este análisis será publicado en un
próximo trabajo, ya que fue expuesto en la reunión “Recent Advances in
Acridology” efectuada en Argentina 1976.
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Valparaíso, Chile 211
CITOGENETICA DEL GENERO
DICHROPLUS
(Sistema determinación del sexo)
NELLY LAFUENTE INDO *
ABSTRACT: The X chromosome has a conspicuous behavior in Acrididae. In
this genus the X has a very hight frecuency of associations with autosomes.
In this paper we describe four species of this genus, two of them have a new
mechanism for sex-determination: D. porteri and D. maculipennis; D. elongatus and
D. democraticus has the ancestral type.
INTRODUCCION
El género Dichroplus está representado en Chile por cinco especies
de amplia distribución en el país: D. elongatus, D. maculipennis, D. demo-
craticus, D. porteri y D. vittiger.
La citotaxonomía del género ha sido estudiada por Sáez, Mesa, La-
fuente, encontrándose en él, un marcado polimorfismo cromosómico, desde
el cariotipo ancestral 2 n = 23 en los machos (White, 953) hasta 2 n = 8
descrito por Sáez (1957) para D. silveiraguidot.
Se observan también remodelaciones en los sistemas cromosómicos de
determinación del sexo, desde el tipo XO, hasta X1 X2 Y para D. dubius
(Meza, 1967).
En este trabajo analizamos cuatro de las cinco especies de Dichroplus,
descritas para Chile, estas especies son separadas por los sistemáticos en
dos grupos, por sus características morfológicas, como diferencias en el
ancho del pronoto y otras (Liebermann, 1944).
MATERIAL Y METODO | ]
Los ejemplares de este género fueron culectados en las provincias de:
Aconcagua, Valparaíso, Malleco y Llanquihue.
Se emplearon testes de machos adultos que fueron tratados por el
método clásico de aplastado, usando como tinción orceína-láctica.
Se usó Documuntal film para las fotografías que se tomaron en un
microscopio Orthomat-Leitz.
* Departamento de Biología, Facultad de Matemáticas y Ciencias Naturales, Univer-
sidad de Chile - Sede Valparaíso, Casilla 130-V Valparaíso.
Este trabajo es parte del Proyecto “Asociaciones y Remodelaciones cromosómicas
en Acrídidos”, N*” 4246. R. Financiado por el Servicio de Desarrollo Científico y
Creación Artística de la Universidad de Chile, Santiago.
212 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N" 10, 1977
RESULTADOS
a) D. elongasus G. Tos.
24 mn = 23
X = 9,42% del cariotipo.
Su sistema de determinación del sexo es de tipo XO. El cromosoma X
es telocéntrico y presenta un comportamiento hrterocíclico, siendo fácil de
reconocer por su heteropicncsis positiva durante la primera profase meió-
tica del resto del comple; autosómico.
En las primeras vtapas de la profase se observa formando una vesí-
cula de forma aplanada en la periferia del núcleo.
Durante las etapas siguientes dede Paquinema a Metafase 1 se lo
observa muy picnótico migrando anticipadamente a uno de los polos
celulares en Anafase I.
b) D. democraticus Blanchard.
2 n= 23
X = 9% del cariotipo.
Su cariotipo es similar al anterior. Su cromosoma X es muy parecido
al X de D. elongatus en su comportamientao. Es fuertementz heteropic-
nótico desde los primeros estadios prufásiccs hasta Metafase I en que,
como un elemento hrteropicnótico es el primero en migrar a uno de los
polos.
c) D. maculipennis Blanchard.
2n= 22
X = 16,2% del cariotirou.
En esta especie el cariotipo ha variado del ancestral de un 2 n = 23
a2n = 22, pero conservando su NF de 23. El cromosoma X es metacén-
trico, este cromosoma se ha originado por la fusión del X ancestral telo-
céntrico, con un autosoma mediano, transformando el primitivo sistema
sexual XO en un Neo X, Neo Y.
La vesícula sexual es muy evidentb=, en Paquinema se puede observar
la asociación del Neo X, con el Neo Y, en Diplonema se observa un quias-
ma terminal. Durante la Metafase 1 se reconov2= como bivalente asimé-
trico segregando en Anafase 1. Los cromosomas sexuales se reconocen
hasta en lcs espermátidas jóvents como cromocentros muy teñidos.
d) D. porteri Liebermann.
a n= 22
X = 16,88% del cariotipo.
Acá ha ocurrido el mismo mecanismo que en D. maculipennis, sin em-
bargo, es posible distinguirlos morfológicamente por la contextura cro-
mosómica, mientras en D. maculipennis durante el Diplonema los biva-
lentes mos recuerdan los cromcsomas plumulados por sus límites difusos,
en D. porteri los límites cromosómicos son bien definidos, además la fre
N. Lafuente 1. CITOGENETICA DICHROPLUS 213
cuencia quiasmática es diferente, en D. porteri es menor que en D. macu-
lipennis (Lafuente, 1967).
En metamaze 1 la asociación terminal se observa claramente, mani-
festándose el X como un elemento heteropicnótico positivo hasta ese mo-
mento.
En esta especie se encontró en un individuo 30% de células con
nuevas asociaciones entre autosomas y l«s cromosomas sexuales presen-
tando X1 X2 Y1 Y2, lo que indica la actividad y capacidad de remodela-
ciorms presentes en el género.
DISCUSION
Tal como en las especies de la zona de El Plata analizadas por Sola-
ri (1958), Sáez (1963), Mesa (1967); las muestras presentan remodela-
ciones cromosómicas que comprometen al cromosoma X, la hetrrupicno-
sis del cromosoma sexual es característica y común en las cuatro espe-
cios estudiadas en este trabajo. Aunque varír el sistema de determinación
del sexo por asociaciones con autosomas, el X tiende a migrar antes hacia
uno de los polos en Anafase l, a veces es retrasado por el quiasma termi-
nal que se produce entre el Neo Y y el Neo X, lo que impide el rápido
desplazamiento del X hacia el polo.
La picnosis altamente positiva del X es evidente desde las primeras
etapas como una vesícula sexual hasta las espermátidas jóvenes, lo que
indica la clara diferenciación que ha logrado este cromosoma en el curso
de su evolución.
Las especies D. porteri y D. maculipenis están separadas de D. elon-
gatus y D. democraticus por los taxónvmos, en razón a diferencais morfo-
lógicas valederas y desde muestro punto de vista citogenético, también lo
está, ya que, los primeros presentan 2 n = 22 y un sistema sexual Neo X -
Neo Y en los machos, mientras los segundos presentan 2 = 23 y un sis-
tema XO, vale sí recordar que en ellos el NF no ha variado.
Por último +ste género parece estar en evolución activa en varias de
sus especies, así, aunque la fusión céntrica entre el X y el autosoma que
originó el sistema Ney X - Neo Y parece ser antiguo por el grado de pic-
nosis que ha adquirido el brazo autosómico incorporado al X, se aprecian
nueva3 remodelaciones entre el sistema sexual y otros autosomas como es
el caso de D. porteri descrito en el texto.
Todo lo anterior concuerda con el comportamiento cromosómico de
las especies atlánticas del género, las que presentan diversos mecanismus
de determinación del sexo.
El cromosoma X está comprometido =n estas remodelaciones en un
alto porcentaje, en 8 de 13 especies Sudamericanas el X se ha fusionado
a otro cromosoma.
214 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
REFERENCIAS
GUERRA, R., N. LAFULNTE. 1972: Estudio de los estados meióticos del género
Trimerotropis y discusión del cariotipo de Trimerotropis ochaceinennis. Soc.
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LAFUENTE, N., P. ESPONDA. 1967: Comportamiento del cromosoma X y su evo-
lución en algunos Acrididos chilenos. Reunión Anual Sociedad Genética de
Chile.
LAFUENTE, N., P. ESPONDA. 1967: Evolución del cromosoma X en algunos acri-
didos chilenos. Rev. Anual Soc. Genética de Chile.
LAFUENTE, N., P. ESPONDA. 1967: Cariología de Scyllina signatipennis y Seylli-
na humilis. X Congreso de Biología. Resúmenes.
LAFUENTE, N. 1971: Comportamiento del cromosoma X en la subfamilia Acridinae
y subfamilia Cyrtacanthacridinae. Soc. Genética Uruguay.
LAFUENTE, N. R., GUERRA. 1976: Remodelaciones cromosómicas y valor del NF
en Acrididos Sudamericanos. “Recent Advances and New Directions in Acri-
dology”. San Martín de los Andes, Argentina.
MESA, A., and R. S. DE MESA. 1967: Complex sex determinity mechanisms in the
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LIEBERMANN, J., 1944: Los Acrididos de Chile. Rev. Chil. Hist. Nat. 48: 161-316.
SAEZ, F. A. 1957: An extreme Karyotype in an Orthopteran Insect. The American
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SAEZ, F. A. 1963: Gradient of the heterocromatinization in the evolution of the
sexual system Neo X - Neo Y. Portugalie, Lisboa. Acta Biol. 7 (1-2): 111-138.
WHITE, M. J. D. 1953: Multiple sex chromosomee mechanisms in the grasshopper
genus Paratylotripidia. Amer. Naturalist 87: 237-244.
WHITE, M. J. D. 1965: Chiasmatic and Achiasmatic meiosis in African eumastacid
grasshoppers chromosome (Berl) 16: 271-307.
Valparaíso, Chile 215
NOTA CIENTIFICA:
GERYON AFFINIS MILNE-EDWARDS Y BOUVIER 1894
FRENTE A LAS COSTAS DE CH!LE
(Crustacea, Decapoda, Brachyura, Geryonidae)
PEDRO BAEZ R. y HECTOR ANDRADE Y. *
ABSTRACT: Geryon affinis Milne-Edwards and Bouvier 1894, is recorded from
chilean waters.
1, INTRODUCCION
Geryon affinis Milne-Edwards y Bouvier 1894 ha sido señalada para
el Océano Indico (Alcock, 1899), Atlántico Sur y Océano Indico (Doflein,
1904), Atlántico Central (Bouvier, 1922), Atlántico Norte (Rae y La-
mont, 1963; Kjennerud, 1967; Froiland, 1975; Samuelsen, 1975) y dudo-
samente para el Océano Pacífico (Dupré, 1975). La captura de un ejem-
plar frente a las costas de Zapallar asegura la piusencia de esta especie
en agues de Chile.
2. MATERIAL EXAMINADO
El ejemplar de Geryon affinis estudiado (Fig. 1), fue capturado el
3 de Junio de 1977 frente a Zapallar (33* 34'S, 712 88"W) por el buque
camaronero “Goden Wind”, entre 380 a 450 m de profundidad. El espe-
cimen (machc) ha sido depositado en el Museo Comparativo del Depar-
tamunto de Ozeanología de la Universidad de Chile, Valparaíso.
Observaciones: Poso húmedo total del ejemplar: 1579 gr. Datos
morfométricos (mm):
Caparazón:
Largo caparazón (LI a a 152.1
Ameho caparazón ACI a 174.5
Ancho diente frontal lateral (ADFL) ............... 13.7
Ancho diente frontal central (ADFC) ............... 7.2
Anehosde lacfrentes CAD eS ra e dodo 1.8
Ancho de la Ona ELO A A TAO RE EN 5.9
Quinto perviópodo:
Largo del meropodito (LM) ...... ..o.... .o.o...oos. 106.9
Largo del propodito (LP) ......... ..o.o.ooo o.oooos.. 1.0
Ancho del propodito (AP) ....ooooco cooooorrorcano.s 9.6
Largo del dactilopodito (LD) ......oo.ooocooommmo.... 8.5
Caparazón con cinco dientes anterolaterales. Dactilopodito de las
patas ambulatorias delgado, comprimido y acanalado. Mitad posterior
del caparazón (no incluyendo región cardíaca), patas ambulatorias y su-
* Departamento de Oceanología, Universidad de Chile, Sede Valparaíso, Casilla 13-D,
Viña del Mar.
216 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
perficie ventral del ejemplar de color crema; mitad anterior del capara-
zón, superficie dorsal del propodito, cartvpodito y meropodito de los
quelípodos color cremoso con sectores anaranjados.
3. DISCUSION
Se han descrito varias especies del género Geryon y su sistemática
es confusa (Scelzo y Valentini, 1974). Geryon affinis y G. quinquedens
han sido consideradas sinónimas (Barnard, 1950; Monod, 1956) y am-
bas, junto a G. tridens como varirdades de una especie cosmopolita (Do-
flein, 1904). Sin embargo, G. affinis difiere de esta última en el número
de dientes antrerolaterales del caparazón (Kjennerud, 1967), dáctilo de
patas ambulatorias (Milne-Edwards y Bouvier, 1894) y por las propor-
ciones somatométricas (Chace, 1940):
Proporciones ejemplar
somatométricas G. quinquedens G. affinis estudiado
ADFL/ADFC >2 <2 1.9
AF/AO >1 >1 1.2
LP/LD 1-11% St La
LP ¡AP 5-7 <4 4.1
LM/AC 2/3 liger. más de Y . 0.6
El presente ejemplar de Geryon affinis supera en longitud del capa-
razón al citado por Kjennerud (1967) y constituye el de mayor tamaño
para su especie e igualmente para los braquiuros registrados para Chile
(Garth 1957, Henríquez y Bahamonde 1976).
Con la presencia de Geryon affinis son cinco las especies de la fa-
milia Geryonidae citadas para Suramérica: Archeogeryon peruvianus, A.
latus y A. fuegianus fósiles del Terciariv argentino (Camacho 1966) y
e quinquedens para Uruguay y Argentina (Scelzo y Valentini,
Geryon affinis está ampliamente distribuida en aguas profundas
hasta 2000 m (Samuelsen 1975), como especie característica de la fauna
arquibéntica del Indo-Atlántico (Scelzo y Valentini, 1974) y con rango
térmico de 2% - 52 C (Doflein 1904).
P. Báez y H. Andrade GERYON AFFINIS 217
Figura 1.— Ceryon affinis, vista dorsal.
14?
-
P. Báez y H. Andrade GERYON AFFINIS 219
4, REFERENCIAS
ALCOCK, A. 1899. An account of the deep-sea Brachyura collected by the Royal
Indian Marine Survey Ship “Investigator”. Calcutta. 85 p., 4 pls.
BARNARD, K. H. 1950. Descriptive catalogue of South African decapod Crustacea.
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BOUVIER, E. L. 1922. Observations complementaires sur les Crustacés décapodes
(Abstraction faite des Caridés) provenant des Campagnes de S.A.S, Prince
de Monaco. Rés. Camp. Scient. Prince Albert I. 62: 1-103, 6 pls.
CAMACHO, H. 1966. Los invertebrados fósiles. Bs. As. Man. Eudeba. 707 pp.
CHACE, F. A. 1940. Reports on the scientific results of the Atlantis Expeditions
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Harvard University. The Drachyuran Crabs. Torreia 4: 38-40,
DOFLEIN, F. 1904. Brachyura. Wiss. Ergebn. Deutschen Tiefsee-Exped. “Valdi-
via” 6: 1-314, 6 pls.
DUPRE, E. 1975. Lista de Crustáceos Decápodos citados para el Archipiélago de
Juan Fernández. CIMAR Doc. Téc. 8: 1-45,
FROILAND, O. 1975. Nytt funn av krabben Geryon affinis fra Morekysten. Fauna
28 (1): 47-48.
GARTH, J. S. 1957. Reports of the Lund University Chile Expedition 1948-49. 29.
The Crustacea Decapoda Brachyura of Chile. Lunds Univ. Arsskr., (n. s)
(2) 53 (7): 1-130, pls. 1-4.
HENRIQUEZ, A. G. y N. BAHAMONDE, 1976. Clave de identificación y datos
biológicos de jaibas y pancoras frecuentes en las pescas comerciales de
Chile. (Crustacea, Decapoda, Brachyura). Invest. Pesquera (IFOP) N* 21.
73 pp.
KJENNERUD, J. 1967. A find of Geryon affinis Milne-Edwards € Bouvier, 1894
(Crustacea Decapoda) off the coast of Norway. Sarsia 29: 193-198, 1 fig.
MILNE-EDWARDS, A. y E. L. BOUVIER. 1894. Brachyoures et Anomoures Crus-
tacés Décapodes provenant des campagnes du Yatch “lHirondelle” (1886,
1887, 1888). I. Rés. Camp. Sci. Monaco 7: 1-112.
MONOD, T. 1956. Hippidea et Brachyura ouest africans. Mem. Inst. Fr. Afr. Noire.
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RAE, B. B. € J. M. LAMONT. 1963. Rare marine invertebrates found in the Scottish
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SAMUELSEN, T. J. 1975. The third record of Geryon affinis A. Milne-Edwards $
Bouvier (Crustacea, Decapoda) from western Norway. Sarsia 59: 47-48, 1 fig.
SCELZO, M. A. y A. VALENTINI. 1974. Presencia de Geryon quinquedens Smith
en aguas del Océano Atlántico Sudoccidental (Decapoda, Brachyura, Geryo-
nidae). Physis, Sección A. 33 (87): 557-567, 2 figs.
Valparaíso, Chile 221
NOTA CIENTIFICA:
POSIBLES EFECTOS ANTIVIRALES DE LA INCORPORACION DE
CRUSTACEOS A LA DIETA DE ANIMALES DOMESTICOS
VERMUTLICHER SCHUTZ GEGEN VIROSEN BEI VERFUETTETRUNG VON
MARINEN KREBSEN AN HAUSTIERE
HERMANN RIEGEL BRANDT
La incorporación de crustáceos a la dieta de animales domésticos tiene
aparentemente un efecto antiviral importante en aves de corral (Riegel,
1972); observaciones posteriores permiten hacer nuevos aportes que con-
ducen a conclusiones semejantes con otras especies de animales domésticos.
a) En cerdos: Se dispuso de 220 animales no vacunados contra peste
porcina y alimentados con una dieta consisiunte en:
710% de camarunes,
10% harina de maíz,
20% harina de porotos (cocida en forma de
sopa espesa),
Aserrín a discreción.
Las observaciones realizadas demostraron, que no hubo muerte de
amimales por acción de peste porcina a pesar de la frecuencia con que se
presentaba esta enfermudad en sectores vecinos. No fue posible infestar
experimentalmente un ejemplar e introducirlo entre los demás sanos,
debido al riesgo económico que ello significaba.
b) En ovejas: Dr acuerdo a lo expuesto anteriormente, la dieta rica
en crustáceos parece favorecer la desaparición de varias enfermedades
en ovejas (Riegel, 1972); nuestras obrervaciones han constatado la erra-
dicación de la virosis pulmonar y algunas helmintienis intestinales como
Trichurus trichurus y Haemonchus contortus; sin embargo, nus parece
más probable que la eliminación de los nemátodos se deba a la acción del
aserrín usado en la dieta.
De manera indirecta ce logró también erradicar Oestrus ovis; pre-
viendo un aumento de moscas por la adición de crustáceos a la dieta, se
estableció una crianza de gallinas en el mismo corral de las ovejas, ellas
actuaron como un excelente mecanismo de control sobre las moscas ata>
cándolas principalmente en el estado de larva emigrante.
c) En perros: Lo más llamativo ha sido la acción de la dieta en perros.
La adición inicial de camarones en la alimentación provoca diarrea en
los perros de tal manera, que no fueron usados en la dieta de un criadero
de perros de raza, pero sí en otros ejemplares dentro del mismo predio
222 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N” 10, 1977
(razas ovejero-alemán y dachshumd). De los 72 perros del criadero 22
murieron por acción directa de distemper o tuvieron que ser sacrificados;
los perros ajenos al criadero, que siguieron recibiendo camarones en su
alimentación, no contrajeron la enfermedad.
Las observaciones expuestas sugieren una clara acción antiviral, en
animales domésticos, de una dieta rica en camarones; esta acción podría
deberse a la gran cantidad de carotina aportada, a la cal o a otro factor
que mo podemuws precisar; tampoco hemos podido interpretar el posible
mecanismo de acción de alguno de estos factores.
La importancia, cada vez mayor, que está tomando el krill en la
alimentación humana, podría tener un efecto antiviral de gran trascen-
dencia; como la composición química de los crustáceos parzce ser básica-
mente semejante, sería necesario incorporar en la alimentación la cu-
bierta quitino-calcárea finamente molida, deshidratada o congelada, para
lograr efectos “emejantes a los descritos.
Las observaciones planteadas tienen evidentemente carácter de pre-
liminares y aconsejan la necesidad de hacer un estudio riguroso en todos
sus aspectos.
LITERATURA CITADA
RIEGEL, H., 1972: Observaciones acerca de la incorporación de crustáceos a la dieta
de animales domésticos, An. Museo Hist. Nat. Valparaíso 5: 203-206.
Valparaíso, Chile 225
NOTA CIENTIFICA:
NUEVA LOCALIDAD PARA MARMOSA ELEGANS
COQUIMBENSIS, TATE 1931
(MAMMALIA MARSUPIALIA DIDELPHIDAE)
SERGIO ZUNINO TAPIA
Entre los marsupiales chilenos la especie Marmosa elegans Water-
house presenta la mayor variación geográfica (1846), poseyendu tres
subespecies: Marmosa e. soricina Philippi 1894, que se encuentra desde
Concepción al sur; Marmosa e. elegans Waterhouse 1839 que se extiende
desde Coquimbo a Concepción y Marmosa e. coquimbensis Tate ne en
la provincia de Coquimbo, (Cabrera 1957).
Esta última subespecie ha sido señalada, en forma válida, sólo para
la localidad de Paiguano, terra typica, a 1.100 mt. de altitud. Aunque
Waterhouse (1846) citó un ejemplar para Cobija, provincia de Antofa-
gasta, el cual es referido a esta subespecie. Osgood, (1943) indicó que el
área de dispersión se extendería hasta el sur del Prrú. Esto se confirma-
ría con el hallazgo de restos de un marsupial enccntrado en deyecciones
dt culpeo en Miñimiñi, provincia de Tarapacá, 1.a Región, atribuidos por
Mann (1945) a Marmosa elegcans coquiambensis.
Si se descarta el hallazgo de la localidad de Miñimiñi a causa de su
incerteza. Entre los puntos de Cobija y Paiguano queda un hiato de 840
Km, el cual se llenaría parcialm:snte con el especimen desecado de Mar-
mosa elegans coquimbensis, que se encontró el 24 de Febrero de 1977, en
el sector denominado “Agua dr la Capilla” (25* 01” S; 707 28” W) a 5 Km
al Norte de Paposo, provincia de Antofagasta 2* Región.
Dicho lugar se encuentra próximo al mar, en un sector donde emerge
agua dulce que forma una ¡rqueña poza. Esto permite la presencia de
una vegetación higrófila, como son Cotula sp., y Cyperus mucronatus que
adquiere el aspecto de una alfombra; la vegetación propia del sector se
distribuye en pruqueños manchones esparcidos, caracterizado por Nolana
albescens y Calandrinia, aff. bicolor.
La razón de atribuir el especimen de Paposo a la subespecie coquim-
bensis, se debe al colorido del prlaje: café pálido en el dorso; amarillento
parduzco en los flancos y el vientre blanco parduzco. Lus pelos del dorso
son grises en sus 3/4 de longitud y los extremos libres café. Concordando
con la descripción general del holotipo.
Las medidas, en milímetros, del especimen son las que siguen, 1as
* Laboratorio de Ecología y Vertebrados, Departamento de Biología, Universidad de Chile,
Casilla 130 V, Valparaíso.
224 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N+ 10, 1977
cantidades entre paréntesis corresponden al holotipo: largo total: 183,2
(198); largo cabeza tronco 82 (92); largw cola 101,2 (106); largo para
posterior 11,2 (14); longitud basal del cráneo 29,1 (24,3); ancho zigo-
mático 14,3 (14,6); longitud serie molar 5.9 (5.0); largo palatal 15,7;
ancho post-orbitario 6,5.
El cráneo como la piel se encuentran depositados en la colección de
mamíferos del Laboratorio de Vertebrados con los númelvs 026 y 027,
respectivamente.
REFERENCIAS
CABRERA, A. 1957: Catálogo de los mamíferos de América del Sur. Mus. Arg. Cs. Nat. “Ber-
nardino Rivadavia” 1: 307.
MANN, F. J. 1945: Mamíferos de Tarapacá. Biología Fac. 11: 23-134.
OSGOOD, ... H. 1943: The mammals of Chile. Field. Mus. Nat. Hist. 30: 268.
TATE, G. H. H. 1931: Brief diagnoses of twenty-six apparently new forms of Marmosa (Mar-
supialia) from South American. An. Mus. Novitates N* 493: 1-14,
WATERHOUSE, G. R. 1846: A. Natural history of the mammalia I: 553, 22 plates.
Valparaíso, Chile 225
NOTA CIENTIFICA:
EFECTO DEL CALOR EN LA COLORACION DE LOS CARABIDAE
DEL GENERO CEROGLOSSUS
L. E. PEÑA G. *
Con el afán de incrementar nuestra culección de Ceroglossus y así -
poder estudiar la distribución de las formas que se han descrito en cada
una de las especies conocidas, se 1iecolectaron numerosos ejemplares de
Ceroglossus chilensis Esch. en las provincias de Arauco y Malleco.
En el lote integrado a las colecciones aparecieron individuos con
coloraciones cormmspondientes a C. chilensis latemarginatus Kr. K., C.
chilensis splendidus Breu. y , posiblemente, también, a una subespecie
cercana a C. chilensis temucencis, por el color rojo de su cuerpo.
La subespecie latemerginatus, tan rara en las colecciones, difiere de
splendidus Breu. por sus élitivs azul obscuro, mientras que en splendidus
son de color verde esmeralda.
El material estaba muy fresco y lo colocamos bajo una lámpara de
secamiento dr luz infrarroja de 500 watts.
Al regresar a observar el material nos encontramos, cun sorpresa,
que había desaparecido lo que en principio habíamos designado como
temucensis, habiéndese transformado todos un splendidus; entre los splen-
didus notamos que varios ejemplares se habían obscurecido acercándose a
latemarginatus. Retiramos la lámpara y al cabo de unos .20 minutos la
gran mayoría de los ejemplares tomaron el color primitivo.
Realizamos algunca3 experimentos sometiendo a algunos ejemplares
a luz muy intensa, de baja intensidad calórica de calor, sin que obtuvié-
seamos variación en la coloración; sin embargo, los cambios se pruducían
con facilidad cuando ellos eran sometidos al calor de una plancha eléc-
trica.
El efecto de la temperatura sobre la coloración fue probado también
en ejemplares de Ceroglossus secos (almacenados por muchos años), otros
Carabidae y Buprestidae y se observó cambios de coluración de los
Ceroglossus, pero no en los demás ejemplares.
Una vez que un ejemplar primitivamente rojo, se expone por bas-
tante rato al calor, se mantiene también por largo tivmpu, y aún por
días, con su coloración verde esmeralda, pero basta que se pase un pincel
* Casilla 2974, Santiago, Chile.
226 ANALES DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL N* 10, 1977
húmedo por parte de los élitros para que de inmudiato retorne a su color
primitivo.
Nuestro parecer es que muchas de las subespecies descritas en base
a la coloración de los ejemplares estudiadcs no son en realidad sino que
variaciones ya sea ocasionales o que aparecen probablemente en años en
que la humedad ha sido menor vw mayor en el mismo sitio.
Pensamos que esta observación preliminar pueda ayudar a aclarar
problemas taxonómiccs de este grupo e interesar a otras personas a
estudiar con profundidad este fenómeno.
Deseamos canje con publicaciones similares.
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On prie de bien vouloir établir l'échange.
Wir bitten um Austausch mit ehnlichen Fachzeitschriften.
Dirigirse: Museo de Historia Natural - Casilla 925 - Viña del Mar - CHILE